Haber apoyado a Off durante la carrera me llenaba de orgullo. Tardé en llegar, no pude acompañarlo desde el inicio pero me consolaba saber que llegué a tiempo. Su rostro lucía sombrío, y parecía que iba perdiendo fuerza en las piernas cuando más cerca de lograr su objetivo estaba. Al parecer los fantasmas del pasado eran los que lo frenaban y por eso le costaba tanto continuar y terminaba rindiéndose.

Cuando capté su atención y empezó a liderar el camino, me alegré mucho. Ese era el Off que conocía, el que no se rendía. El brillo y determinación en sus ojos incluso me contagiaron, yo estaba entusiasmado y no podía dejar de sonreírle, dándole ánimos.

Corrí con todas mis fuerzas, hasta que me abandonaron, me hubiera gustado continuar corriendo a su lado, pero no importaba, incluso a la distancia celebré su triunfo.

Cuando todos se marcharon al lugar donde se reunirían para celebrar su triunfo, yo, me marché también, pero de vuelta a mi dormitorio en la universidad.

Tenía un fuerte ardor en el pecho, y justo cuando estaba intentando aliviarlo, la puerta se abrió de improviso. —Tenía la camiseta levantada, estaba con los pezones expuestos porque estaba cubriéndolos con ungüento para las rozaduras—. De pronto, me sorprendió ver a Off, parado frente a mí.

—Gun... —dijo, mirándome fijamente y yo cubrí mi cuerpo con los brazos.

No me dio tiempo de hacer nada más, cuando ya lo tenía sobre mí.

—¿Qué estás haciendo? —Dije asustado, cuando Off me sujetó de las manos y me empujó de espaldas contra la cama.

El dolor seguía punzando en mi pecho, pero también mi corazón se sentía acelerado en ese momento, cuando su cuerpo cubrió el mío y nuestras miradas se encontraron... demasiado cerca y luminosas.

Tragué saliva al ser consciente de su cercanía y Off también lo hizo, pero no se movía ni un poco. Fui yo quien tomando todo el valor que había en mí, lo empujé con fuerza, liberándome de su agarre.

Off cayó sentado junto a mí en la cama, y mientras él desviaba la mirada, avergonzado, yo me puse la camiseta.

Off se aclaró la garganta y empezó a hablar.

—Lo sabía. ¡¿No sabes nada sobre maratones?! —estaba gritándome o preguntándome. Rayos, su cara estaba roja en ese momento ¿Por qué se enoja de inmediato cada vez que estamos juntos?— Tu pezón sangró porque tu camiseta estuvo frotándote todo el tiempo. ¡Así que siempre que corras debes aplicarte vaselina o poner un parche para protegerlo! —Continuó, mientras miraba mi pecho.

—¿Viniste hasta aquí para regañarme? ¡Pssh! Si quieres darme las gracias, hazlo y retírate...

—Agrade- ¿Quién quiere agradecerte? Yo vine aquí a criticarte.

—¿Qué...?

—Sí, hay muchas cosas que criticar...

—Ok. Ok. Por favor continúa —dije resignado.

Off se quedó callado un instante, como si no supiera que decir...

—Primero... podría haber corrido mejor pero no pude hacerlo debido a ti... —lo miré indignado— ¿qué llevabas puesto? Estabas todo deslumbrante y me dolían los ojos, no tenía mis lentes de sol, así que tienes que tomar responsabilidad por eso ¿Lo harás?

—Lo siento, oh su real majestad. Me disculpo atentamente —dije sarcástico y me giré evitando su mirada, pero claro, él no había terminado de hablar...

—Segundo... ¡No pude enfocarme mientras corría, porque me estabas molestando gritando mi nombre todo el tiempo! —Este mal agradecido... ¿darle ánimos era un problema?

—¿Qué dices? —Desafié su mirada— ¿Qué hice qué? Explícame por favor de manera que pueda entenderte.

Off me miró un instante y luego desvió la mirada.

—Eh,

—Aja, si...

—Es que...

—Estoy esperando.

—Lo que quiero decir, es... es que... ¿Cómo es que tu cuarto tiene el mismo código en la puerta, que el mío? —Dios, sus labios se mueven, y sus ojos me miran pero no puedo enfocarme en ellos, mis ojos se desvían a su boca, mi corazón late tan rápido cuando estoy junto a él...— 633586765, no puede ser una coincidencia, son nueve números, como es que los conoces ¿Eh?

—Tú mismo me los dijiste... 

𝕰𝖛𝖎𝖎𝕭𝖑𝖚𝖊 ʚĭɞ