Esta es la segunda parte del epílogo. Desde la perspectiva de Armin. Espero que les guste.

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Es increíble cómo Sophie logro que cambiara mi perspectiva, que mirara todo a mi alrededor de una forma diferente. Aun mas increíble fue que no deseara cambiarme, que simplemente aprendiera a amar lo que soy.  Mirarla leyendo las partituras frunciendo el entrecejo, es realmente un deleite. Aunque no tan grande como verla ponerse esas gafas, eso es otro nivel de placer. En fin, no existe día en que no me sienta afortunado de haber "ganado" el corazón de Sophie. 

Después de que ella y Lysandro hablaron, jamas volvió a tocar el tema. No se como se sintió al respecto; ni que hablaron en realidad. Aunque acepto que en ocasiones aun me gana la sensación de inseguridad por ello, intento sobrellevarlo con calma, después de todo, ya tenemos casi tres años saliendo. Debo darle crédito a Sophie, se ha esforzado mucho por darme una relación "Carpe Diem" (N/A: Tópico literario en el que se anima a aprovechar el momento presente sin esperar el futuro),  cuando ella normalmente planeaba todo en su vida.

— ¿Armin? —  La voz de Sophie resuena, parece que esta molesta y tenia un largo rato hablándome —  ¿Me estas escuchando? —  Pregunto sonriendo con total tranquilidad y paciencia. En realidad no se que ha dicho, pero asentí. Estoy distraído,  estoy planeando algo importante y eso ocupa mi mente constantemente. — ¿y que dije? — pregunta con gracia, estoy atrapado. Me descubrirá.

—  ehhh... —  Atine a balbucear algunas cosas y después sonreí al sentirme atrapado.

— Lo sabia, no estas escuchando... —  Suspira y se acerca a peinar mi cabello con sus dedos. Adoro que haga eso, me hace sentir muy mimado.  — ¿estas bien? has estado muy distraído últimamente... ¿Sucede algo? —  He sentido como beso mi cabello y se agacho un poco mas para abrazarme. Convenientemente su pecho quedo cerca de mi cara. Espero que no se de cuenta mientras paso mis manos por su cintura.

 —  Estaba pensando, que ya que son vacaciones de verano y en algunos días es mi cumpleaños... podríamos aprovechar... —  empece a explicar la primera parte de mi plan.

—  ¿podríamos? —  murmuro y se separo del abrazo —  ¿que quieres hacer por tu cumpleaños? —  

— En Disney hay un show de Star Wars... —  

—  ah! —  dio un par de pasos hacia atrás y se quedo pensando —  me parece bien —  sonrió y yo moví mis manos invitándola a volver a mi brazos.

—Eres la chica perfecta, te lo prometo —  La he visto sonrojarse un poco y después reír nerviosa.

— No soy perfecta... —  murmuro después de un rato y logre sentarla sobre mis piernas.  

Ahora que he logrado que ella accediera a ir al show, que por cierto estoy emocionado de ver, solo debo pedirle a Alexy que me ayude con algunas cosas mas. Seguro no tendrá problemas con ello, después de todo el aprecia mucho a Sophie.

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Después de muchas suplicas a Alexy, se apiado de mi y me ayudo a elegir cual anillo de compromiso comprarle a Sophie. Fue el peor sacrificio que he hecho en mi vida, pasar el día entero paseando por el centro comercial en compañía de Alexy y Rosalya. Espero que todo valga la pena y que Sophie me diga que si. No tengo idea de que le diré, o como lo diré. Alexy dijo que no era mi estilo planear las cosas, que solo debía dejar que saliera todo de forma espontanea. Aunque por primera vez, quisiera poder planear todo para que saliera perfecto.

Por la expresión tranquila de Sophie, es obvio que no tiene idea de lo que pasara después de que empecemos a recorrer las atracciones adentro del parque. Va con la vista perdida en los juegos mecánicos, se mira adorable con ese sombrero con orejas y me encanta ver que se puso la camiseta de star wars que compre para que usara este día.

— Después ¿podemos ir a las demás atracciones? —  pregunto mirando el castillo que se miraba al fondo.

asentí —  si, solo... déjame ver esta parte del parque y después haremos lo que tu quieras el resto de nuestras vidas —  No puedo ignorar su expresión de burla por mi respuesta y como negó con la cabeza mientras reía bajo.  

Las atracciones han sido increíbles y me alegra que le estén gustando mucho a Sophie, puedo saberlo con ver su expresión de niña emocionada.  Después de ver el famoso show que use de excusa ella a comenzado a caminar en dirección al área donde están las princesas.

— Creí que no te gustaban... —  digo con esperanza de hacerle molestar y que no vayamos allí, después de todo, hace un día muy soleado y empiezo a arrepentirme de estar aquí.

 Ella saca una sombrilla y la extiende para ponerme debajo de ella —  No te preocupes, con esto el sol no debería molestarte tanto —  su sonrisa siguió intacta.

Ya estoy cansado, he hecho mas lineas de fila para subir a las atracciones que las filas de cuando compro un nuevo videojuego. Quisiera irme, pero ya falta poco para el momento que espere todo el día. Los fuegos artificiales. He buscado un lugar donde se alcanzaran a apreciar bien y Sophie se ha abrazado a mi de forma espontanea mientras suspiraba.

  —  Te amo... —  sus palabras me hacen sentir valiente inmediatamente y justo a tiempo. Los fuegos artificiales han empezado, es media noche. Me acerco a sus labios, sujeto sus mejillas y la beso.

—Te amo — susurro, rompiendo poco a poco el beso. Aún ahuecando sus mejillas, bajó la cabeza y apoyó mi frente contra la de ella— Te juro que quiero romper las reglas contigo. Besarte apasionadamente cada día. Hacerte sonreír cuando estás a punto de llorar. No quiero arrepentimientos entre nosotros. Quiero que nos riamos juntos hasta que no podamos respirar y que nos duela. Ningún hombre jamás te amará de la forma en que voy a amarte, Sophie. Tú eres mi second player. Mi princesa en el castillo al final de la partida. Mí por siempre.—

Ella me ha mirado con una mezcla de sorpresa, emoción y alegría, sus ojos están llenos de lagrimas y ha empezado a temblar, o quizá soy yo el que esta temblando. Jamas había considerado esta posibilidad, pero estoy aquí parado delante de ella a punto a preguntarlo. 

 — ¿Quieres casarte conmigo, Sophie Warren? — siento que mi voz suena ajena a mi y oficialmente estoy temblando mientras busco y le muestro el anillo.

Ella rió alegremente y limpio sus mejillas mientras asentía frenéticamente — ¡Sí! Aunque todo el mundo dirá que estamos locos. —  respondió con cierta gracia.

Me he permitido sonreír abiertamente después de suspirar aliviado poniendo el anillo en su dedo y la he besado de nuevo.  —Prefiero estar loco contigo que cuerdo sin ti —

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:) Después de este epilogo planeo poner uno mas, pero no lo haré hasta que lleguemos a las 5k lecturas.

Los amo~!