capitulo 15

Debería de estar observando su comida, no mi rostro. Desde que llegamos y pedimos una sala lo suficientemente amplia con musica de piano en el restaurante, que no está tan elegante. Pero es lo suficiente agradable para disfrutar una rica cena. Seth, no a dejado de mirarme ¿Mi manera de comer es rara? ¿Tengo comida en la cara? ¿Qué es?...¿ahora por qué suspira?

Christian se sentía muy incómodo, pero no de una manera desagradable, es más bien una incomodidad extraña. Era timidez por la descarada mirada de Seth, pero el alfa mayor, prefiere nombrarlo incomodidad, en vez de vergonzosa o timidez.

Nadie se atrevido a verlo con tanto descaro como lo hace Seth. Seth desafía a Christian, algo que es nuevo para el alfa mayor. Christian es quién desafía siempre ya sea en los negocios, familia, padre. Pero cuando esta con Seth, este es quien desafía y eso lo hace enojar.

—Dejá de suspirar y come sin mirarme ¡Es muy desagradable!—Corta con odio el pobre filete.

[¡¿Fui tan obvio?!] <Demasiado obvio, diría yo> [Que vergüenza, pero no es mi culpa. Quién lo manda hacer una invaluable e exquisita obra de arte. Hasta su forma de comer es maravillosa]

—Me disculpo, solo que—Mira firmemente esos ojos morados, sonríe coqueto—No puedo evitar mirarte, me gustas tanto, que todo de ti me parece extraordinario—Seth, le dio un gran sorbo a su copa de vino blanco.

Intento de todo para no verlo y poner mi atención en la cena, pero no lo logro. Su pronunciado pecho me grita que lo siga viendo así como esos gruesos brazos o ese resplandeciente rostro.

Christian parpadeo dos veces seguidas, por unos segundos creyó a ver visto mal, pero no fue así. Esos ojos morados habían visto un leve sonrojo en las mejillas de Seth, no solo eso. Christian es la primera persona en ver ese hermoso y sexi hoyuelo en la mejilla derecha del alfa de ojos heterocromía.

¿Cómo un hombre adulto puede decir eso sin sentir vergüenza? Más cuando es un alfa. Los alfas no deben mostrar sus emociones por más que te guste alguien. Es inaudito.

El alfa mayor pensaba eso, pero sus orejas están un poco rojas, tienes que fijarte bien para poder notar esa pequeño sonrojo.

—¿Quieres que vomite por tus cursilerías?

<No se sienta mal> Miel temía que su maestro se sintiera herido. <Hay una pequeña agitación en sus signos vitales relacionado con las emociones. Sin ofender, pero creó que el joven Christian, es lo que llaman Tsundere.>

Por lo poco que conozco de él y como reacciona con respeto a lo que hace mi maestro, me hizo llegar a esa conclusión. Dice y hace lo contrario a lo que en realidad quiere hacer o decir.

[Lo que lo hace aún más adorable, primero se enoja y después explica las cosas. Muy pero muy adorable]

—No. No quiero que recordemos este dia, como el día en que Christian Rexon, vomito en nuestra primera cita, aunque no me importa—Sería una anécdota muy divertida para nuestros futuros hijos.

Sí, tal vez aquí no podremos tener hijos, pero en el imperio eso es lo más normal al igual que podemos crear una réplica exacta de uno mismo, la cual enviamos a explorar diferentes lugar o a reuniones en otros mundos, es una forma de protegernos de nuestros enemigos.

Pienso llevarme a Christian al imperio, es por eso que no estoy vinculado al sistema. Miel es quien se vinculara con Christian, llevará su alma a otro cuerpo, justo como yo, en estos momentos. No vine a este mundo solo a perseguirlo, enamorarnos y luego verlo morir, no. Si él lo quiere, vendrá conmigo.

Estoy haciendo planes que jamás podrían suceder, pero prefiero estar siempre preparado para lo que sea. Uno nunca sabe.

—Estamos cenando—Frunció el ceño.

—Tú empezaste primero.

Seth se inclina hacia adelante, Christian se estremeció al tener sin previo aviso el hermoso rostro del menor, frente a él.

—Me encanta ver esa mirada morada sin importar que sea tan fría—Besa la esquina de los labios del alfa mayor.—Delicioso—Sonrió.

Por unos segundos hubo un pequeño pero muy leve aleteo en el corazón de Christian. Sentir los finos labios del menor, sobre su piel fue una sensación un tanto extraña pero agradable.

—No me culpes si llegan a faltarte unos dientes...

Seth había vuelto a besar la otra esquina de los labios del alfa mayor. Sin ningún miedo a esas amenazantes palabras dichas por Christian.

—Eres tan adorable todo funfuruñado—Sonrío dulcemente—Somos novios, si quiero besarte solo te besaré. No tengo por que pedir permiso ¿Oh sí? Pero, quiero que nuestro primer beso en los labios, sea especial, que tú también lo quieras tanto como yo.

Demasiado cursi para mí gusto, ¿No le incomoda decirle esas palabras a otro alfa? Intentó buscar mentiras en sus ojos, pero no hay nada de eso. Solo puedo ver una profunda e inexplicable verdad. Eso me hace sentir raro, es algo que no puedo controlar y me enoja no poder controlar está situación.

—Tienes mucha confianza en poder lograrlo, ¿No eras tú quién dijo que cuando se trata de mí, toda esa confianza se esfuma?—Arquea una ceje.

—Si, lo sé. Yo dije eso—Toma con elegancia la copa en su mano—Pero cuando me propongo algo, también lo consigo. Y llegará ese día.

—¿Que día?—Preguntó confundió.

—El día en que tú—Seth deja caer su mano izquierda sobre la mano izquierda de Christian—Me beses, no seré yo, quién lo haga—Entrelazan sus manos—Seras tú quién se vuelva loco por hacerlo—De manera sexi pasa su lengua sobre sus labios, su mirada estuvo todo el tiempo en el alfa mayor.

Seth siento el pequeño estremecimiento a la perfección atraves del tacto al sostener la mano del alfa mayor. Su sonrisa se volvió más grande e hermosa. Tenía esa mirada pícara.

Christian no podía dejar de verlo, esa picardía y manera juguetona de actuar hace que el alfa mayor quiera seguir viendo al menor. Ansioso por ver una nueva faceta de ese joven alfa, descarado. Sí, para Christian. Seth es un tanto descarado e atrevido pero muy atrevido.

—Me haces sentir un poco de lastima por ti—Se suelta del agarré de Seth, este sintió como su mano se volvía fría por la falta de calor.—Porque eso nunca sucederá.

—Ay, mi Chris—Sonríe como un loquito—Los para siempres algunas veces terminan y los nuncas tardan pero llegan—Su mirada se volvió desafiante—¿Apostamos?

—No quiero—No iba a darle gusto ha Seth.

—Si ganas, te diré todo lo que quieras saber de mí o esa maldit...mi familia. Pero si yo gano, quiero que me cumplas un deseo.

—¿Todo lo que quiera?

—Sí, todo lo que quieras.

<Es una propuesta arriesgada> [Voy a ganar] <¿Por qué tan seguro? Y ¿Si pierde?> [Da igual si gano o pierdo, pero en definitiva voy a lograr que Christian me bese primero]

—Bien—Sere el ganador, estoy cien por ciento seguro.

—Recuerda, no se vale hacer trampa.

—No tengo por que hacer eso—Lo vio con molestia—Tu recuerda lo siguente; Eres tu quien está tratado de hacerme interesar en ti.—Le dio un último sorbo a su copa con vino.

—Jamas lo olvido, ni por un momento.—Y estoy emocionado de ver qué lo estoy logrando. Un poco, pero peor es nada.

Creó que se terminará rindiendo a la mitad del camino, cuando no vea los resultados que está esperando ver o sentir, en ese entonces, quedarán al descubierta sus intenciones y podré ver su verdadero rostro.

Christian podría estar más equivocado que nunca, Seth no es de las personas que se rinden a mitad del camino. Al darle a él, la oportunidad de cotejarlo. Seth encontrará la manera de no solo meterse en su corazón, si no qué, hasta lo más profundo de su cerebro y alma. Aveces se sentirá desanimado, pero por eso esta Miel. Miel se encarga de animarlo.

—Vamos—Lo tomo de la mano, Christian quería soltarse. Pero Seth lo sujeta con más fuerza.—La cena va por mi cuenta—No quería perder su tiempo en recepción, eso era trabajo de George.

—Cubrirte—Sube la mascarilla de Seth.

Habían muchos olores en ese restaurante que podían irritar la nariz del menor. Lo hizo de manera inconciente. Cuando se dió cuenta de lo que hizo, se desentendió rápidamente.

—No te emociones—Suelta la mano de Seth—solo no quería que te reconozca y salgamos en primera plana—Su cuello tiene un leve color rojo.—Aunque fue algo inútil, con solo verte a los ojos, te reconocerían. Esos ojos son demasiado llamativos.

—¿Te desagradan?—Pregunte.

—No—Responde al instante.

—¿Te gustan?

—Sí...digo no...

Los ojos de Seth, están sonreído de una manera brillantemente. No creía lo del no, esa negación no valía. Solo ese "sí" era verdadero.

—Esta cita se da por terminada—Sube al auto.

—¡Hey!—Se inclina en la ventanilla del asiento del pasajero—¿Por qué?—Baja su mascarilla, sigue sonriendo—¿Estás huyendo?

Christian se molestó aún más al escuchar esa sonrisa descarada de Seth. Para él, se escuchaba como un "te atrapé."

—Sigue riendo más—Frunce el ceño.—Y no estoy huyendo, no recuerdo a ver accedido convivir toda la noche contigo, tengo que dormir—Se excusó—Yo si trabajó.

[¿Hora?] <Veinte para las diez y media de la noche> [aún es luego pero si llego más tarde a la mansión Allen, el asqueroso de Héctor puede que me ponga niñera, la cual le informé todo lo que haga] <Puede que lo haga, me sorprenden que aún no lo ha hecho> [Está espero que me confíe, por eso]

—Yo también lo haré apartir de mañana—Su expresión es molesta—Solo por está vez, te dejaré huir—Sube su mascarilla—No abra una próxima.

Repentinamente sostiene en sus manos, el majestuoso rostro de un sorprendido Christian. Seth se inclinó más al frente, la tela de la mascarilla hizo contacto con los labios del alfa mayor.

—Enviarme un mensaje cuando llegues a casa—Se alejó de la ventanilla antes de que Christian estrellara su cabeza contra la ventana—Maneja con cuidado.

—Si, por supuesto—Sonrío fríamente—Quedate esperando—Salio disparo en su auto deportivo.

<Está sonriendo muy feo, si no llevara esa mascarilla puesta las personas lo verían con temor. Lo confundirian con algún sádico asesino serial.> [¡Miel, no digas cosas tan feas! Es como estar escuchando a mis hermanos] <Entonces no sonría así, aveces me asustan cada una de sus sonrisas> [Exageras]

La primera vez que mi flota me vio sonreír fríamente, fue ese día mientras me deshacía de unas cuantas especies carnívoras. Ellos quedaron en shock y creyeron que estaba dándole eso cadáveres cómo ofrenda a, algún demonio u algo parecido, pero no me reía por asesinar esas cosas.

Sonreía porque en ese preciso momento leí, como Christian era lastimado por Albert, el hermano de Gregori. Era una sonrisa de rabia e enojó por como el autor, hacia sufrir a Christian en la historia.

—¿Nos vamos?—George se de tuvo enfrete de Seth.

—Si—Sube al auto—Vamonos—Abrocha su cinturón, retira su mascarilla. Saca un cigarrillo.

No hay nada mejor que fumar un cigarro para dar por concluída una maravillosa noche. Aunque al principio hubo un desagradable insistente, eso no logró arruinar su cita con Christian.

—¿Feliz?

—Sí, muy feliz.

No lo había visto sonreír de esa manera desde que tenía 8 años, él era un niño muy sonriente. Eso cambió cuando cumplió los nueve. Fue en ese momento cuando el maestro Allen, empezó a querer convertirlo en un hombre, a mí joven maestro.

Mi joven maestro siempre encontraba la manera de huir de esas "clases" odiaba ver a dos personas teniendo relaciones sexuales, más cuando esa persona era su padre, abusado a chicos unos años más mayores que él, eso le hacía vomitar. Mi joven maestro ha sido inteligente desde pequeño, por eso, a sus ojos. Su padre era un asqueroso abusador de menores.

Pero entonces el maestro Allen, se molestó por el comportamiento desobediente. Para hacer que lo obedeciera, comenzó a castigarme. Yo le hacía saber que estaría bien, no quería que se preocupará por mí. Pero el no podía soportar que me castigarán por su culpa.

Le tocó asistir a esas “clases” en medio de la sala. Él no tenía relaciones con nadie, solo era obligado a ver. En cambio Alexa era diferente, ella era cogida y cogía. Desde ese día el joven maestro dejo de sonreír. Estoy seguro que deseaba ser ciego para no ver esa barbaridad.

—Me da mucho gusto saber eso—Me alegró que sea feliz.

—Gracias, George—Inhala del cigarrillo luego suelta una bocarada de humo—Te aprecio mucho, más que mi guardaespaldas eres mi amigo.—Es lo que hubiese querido decir el dueño de este cuerpo.—Apartir de mañana eres mi asistente-guardaespaldas, también aumentare tu salario.

—Entiendo—Estacionó el auto—Que descanse.

—Tu también—Sale del auto.

Seth ni bien había llegado a la puerta cuando el mayordomo, Amílcar. Abrió la puerta y lo recibió con una sonrisa, sonrisa que fue muy desagradable de ver.

—Bienvenido, joven maestro.

<¿Quiere que deshabilite su visión? No le gustará ver lo que sucede en la sala> [Sí, házlo] Hasta aquí puedo escuchar sus repugnantes gemidos.

—¿Dónde estabas?

Héctor solo lleva puesta una bata gris, la cual está abierta por completo. En medio de sus piernas se encuentra un joven de cabellos negros. Al estar arrodillado, ese lugar privado queda a la vista de todos los empleados que pasan por el lugar. Que son tan repugnantes cómo su jefe.

—Solo fui al restaurante pimientas y rosas—Le dije a Miel, que borrará los rastro de Christian, que indicaban que estuvo ahí.—Pero tuve un pequeño percance con un tipo...

—¿Quién?—Sus ojos se tornaron oscuros—¿Quién se atrevió a meterse contigo?

—No lo sé, solo alardeaba que era familia de los London. Que podía hacer lo que quisiera e incluso acostarse con cualquier persona que entrá por la puerta, y en ese momento iba entrado. Es por eso que lo golpeé

Mintió con una expresión sería y sin vacilar. Espera que hayan conflictos entre amabas familias. Que se maten entre ellos.

—Hiciste lo correcto.....No te de tengas—Empuja su miembro más profundo en la garganta de ese joven, con una expresión llorosa.

—Si eso es todo, ¿Puedo retirarme? Tengo sueño.

—Adelante. Recuerda que mañana debes de ir a trabajar.

—Lo sé—Sube las escaleras, solo para encontrarse a, Alexa.

—Padre, ¿Lo dejaras irse así, sin más?—Ella también andaba solo en bata.—¿permitirás que duerma sin recibir su clase?

—Dejarlo, mañana las recibirá—Jadea.

—¡Pero, padre!

—¡Solo callarte!—Su expresión se volvió negra—Ya me hicistes perder el interés—Empuja de una patada al beta, que hace un momento le estaba haciendo una felación.—Termina lo que yo estába haciendo.

—La próxima quedarte en silencio—Susurró Seth, al mismo tiempo que pasa junto a ella.

¿Por qué siempre es así? Desde niño solo deja que vea. Pero nunca le permitió participar en los actos ¿Por qué? ¿Por qué? ¿Que tiene de especial Seth? ¿Solo por ser hijo de ese omega? Mi madre me comentó que en algún momento, mi padre estuvo muy obsesionado con Aiden, pero eso se esfumó cuando vio por primera vez a Seth.

Seth era un varón y un alfa de un sorprendete calibre, quería hacerlo a su semejante. Es por eso que lo alejó de su madre, a los tres años para pulirlo.

Yo también soy alfa, ¿Entonces por qué no me trata igual? ¿Es solo porque soy mujer en vez de hombre? Tendré que ir dónde mi madre. Quiero un par de consejos.

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