Aún con nuestras ropas puestas podía sentir esa fricción febril cada vez que su cuerpo se tocaba con el mío, al mismo tiempo que nuestros labios recrean ruidos obscenos al momento en que su lengua se escabulle explorando el interior de mi boca.

Mis labios se siente adormecidos, pero ni así dejo de aferrarme a los de Seth, queriendo devorarlo por completo, absorbe ese olor y sabor a nicotina proveniente de sus deliciosos labios.

-Mi Chris-Desliza su mano desde la espalda hasta hundirse en los cabellos blancos-No iré a nigún lado-Sonríe juguetón al ver la impaciencia del alfa mayor, esas ganas de volver a unir sus labios con los del menor.

La hermosa y penetrate mirada morado te estremece hasta el alma así sea solo la veas por un segundo, te pierdes en su radiante belleza.

Ese color morado se vio empañado por algo más que solo la lujuria y el deseo desbordante que quema cada molécula de su cuerpo.

Intenta con todo su ser el no dejarse dominar por su lado animal, no obstante le es complicado el no querer destrozar con su deseó a Seth, quién se encuentra perdido mejor dicho, embobado viendo hasta la expresión más simple en el rostro de Christian.

Él menor tenía un pequeño cosquilleo en sus manos, ganas de arañar, morder los lugares que jamás podrán ser visibles aún, cuando Christian estuviera desnudo.

A Seth no le importaba si Christian llegase a poseer su cuerpo de mil maneras, él seguirá encantado de pertenecerse uno al otro, eso es lo único que importaba, entregarse y demostrarse cuánto se quieren a pesar que el rut, lo esté dominado.

-Seth-Susurra al mismo tiempo que rompe la camisa del alfa de ojos heterocromía.

No podía pensar en nada más que entregarme por completo a Seth, perderme en algo más que solo su penetrante mirada. Mirada que me desnuda una y otra vez de una forma que me hace enloquecer todavía más de lo que ya estoy.

-¿Si, mi Chris?

Mi cuerpo se estremecía cuál gelatina al sentir su mirada profunda sobre mí, esa mirada me gritaba cuantas cosas me quería hacerme. Si antes sus feromonas era fuertes, en este instante lo son mucho más, hasta el punto en que me estoy intoxicado de la manera más espléndida posible.

Me encanta como ese color violeta de se sus feromonas envuelven por completo todo de mí, asfixiado mi garganta hermosamente.

-Seth-Vuelve a nombrarlo pero en esta ocasión con una voz caliente y muy jadeante.

Cada segundo mi respiración y deseó se vuelve más fuerte, hay lugares que se encuentra descontrolados, ansiosos por ser acariciados.

-Está bien.

Se despojó de toda su ropa, la tiró al suelo. Lo mismo hizo con la ropa de Christian, quedado absorto en esa bella desnudes, endurecido cual roca su muy despierto miembro.

-Estoy bien con lo que estás pensando hacerme-Sonríe tontamente enamorado.

Seth sin nigún problema sería el pasivo, ya este arriba o bajo, sabía que lo disfrutaría de la misma manera. Mientras sea con Christian, todo es y será subliminal.

Christian pasó sus dedos por los labios semi-abiertos de Seth, este lascivamente saco su lengua y lamió e envolvió esos grandes y largos dedos.

Mi mente es más que solo un caos, pienso en demasiadas cosas a la vez. Todos esos pensamientos están relacionados con ese hombre de ojos heterocromía, que me mirá con ese amor desbordante, esa mirada me abruma de una forma dulce.

Mi corazón tembló emocionado al escucharlo decir que puede ser el de abajo sin siquiera pensarlo, con esa gran sinceridad. Me hace enloquecer y querer tener más de él, más de lo que ya tengo.

Querido hacerlo llora mientras me mira con esa destructiva mirada lasciva y me súplica por más al mismo tiempo que me dice cuánto me quiere. Sería una vista espectacular e inolvidable.

Hoy es mi oportunidad de ser quien domine y lo someta bajo mi cuerpo, embestir su interior sin dejar ni un lugar intacto, tocarlo todo por completo.

-Follame-Demande.

De mi boca salieron palabras completamente diferentes, a lo que quería decir. No sé porque pero solo salieron. Quizás mi mente quería una cosa, sin embargo salió ganado fue mi corazón.

Qué importa quien domina a quien, eso sale sobrando cuando el placer y él amor es algo que nos envuelve por completo y nos hace enloquecer de pasión.

Tendré otra oportunidad como está, lo sé. Solo esperaré, tiempo es el que nos va a sobrar cuando nos larguemos de aquí.

-Quiero esa cosa aquí.

Abrí mis piernas sin pudor alguno, estoy tan perdido en el deseó que al parecer la vergüenza se queda en el segundo plano.

Mi cuerpo se vuelve extrañó ya sea por la mirada o las caricias de Seth. Dónde el toca queda un pequeño cosquilleo que solo se esfuma luego de que vuelve acariciar esos lugares.

-Mi alfa-Conscientemente me lamí los labios, ver ese pasaje rosa contraerse y deseo por mí, me dejó completamente sin habla.

Mi boca se sintió reseca al mismo instante en qué mis ojos, vieron ese lindo lugar palpitar con anhelo de que entre en el.

Lo que me vuelve más loco es su expresión, es entré caliente y a la vez tímida por ese sonrojo que adorna sus bonitas mejillas.

-¿Seguro?-Toma el pie de Christian, lo jala suavemente hacía el-¿No quieres poseer mi cuerpo?-Lame los muslos del mayor.

-Si quiero-Los lugares que toca o lamen se vuelven más calientes-Pero quiero tenerte cuando el rut, no esté de por medio...Amg~

Él lo sabía, comprendía que en sus estado animal no iba a darle el placer que Seth, se merecía, que ambos merecían. Puesto que Christian quería prepararlo con paciencia y mucha ternura.

Tatuarse en su mente todos eso lugares que explotaría, Hacerle saber con cada toque cuan precioso es Seth, para él.

Quería que su prima vez dominando y poseyendo a Seth, sea algo que ninguno de los dos puedan borrar, algo inolvidable como el momento en que confesaron sus sentimientos, o ese instante en qué hicieron el amor por primera vez.

Esa primera vez ha quedado tatuada en el alma de Christian, es una sensación que jamás podrá olvidar e incluso después de que muera. Seth aun su estado animal le hizo saber con acciones, toques, cuán importante y valioso es él para él más joven.

Esa es la misma sensación e emociones que Christian, quiere provocar y hacerle saber a Seth, en ese instante. Hacerlo sentir como si fuera una vez más su primera vez que sus cuerpos se tocan y se vuelven uno. Christian es muy romántico cuando se lo propone, a su manera pero lo es.

-Mi Chris-Lo ve fijamente con ternura y locura-Siempre te he pertenecido, seas rudo o tierno yo seguiré disfrutando. Porqué contigo y por ti estoy dispuesto a todo-Besa la mano de Christian.

-Cuando sea tu Emperatriz-Sonríe pícaramente-Entonces, permite poseerte arriba o sobre del tronó.

Seth enloqueció por tal sugerencia, esa mirada y sonrisa en su rostro es la de una persona que desea que ese día llegué lo más rápido posible.

-Donde quieras hacerlo, yo estaré encantado.

Su lengua sigue lamiendo mi muslo, erizado mi piel cada vez que su respiración golpea y seca el rastro de saliva dejado sobre mi piel.

-¿Lo harás o no?-Se empezó a irritar por la impaciencia de no obtener lo que quiere.

-Bien.-Sonríe, ya no lo haría esperar-Te daré lo que pides, cariño.

Christian se retuerce de placer al sentir los sedosos y húmedos labios de Seth, humedeciendo su cuello, provocado escalofríos por la sensibilidad al sentir sus caricias.

Besando con lentitud y ternura, Seth va creado un camino desde desde ese bonito cuello enrojecido hasta la pelvis del mayor, ahí fue creado un incendio al sentir la respiración caliente, jadeante, de Seth.

-¡Amgn~!

Christian enloqueció al quemarse con la boca caliente y la suave cavidad bucal del más joven. Esa lengua presionado la punta hasta el punto de creer que entraría como aguja en su glade y luego bajando hasta el tronco de su miembro, era un placer completamente diferente.

-Seth~-Gime ruidosamente.

El alfa mayor hunde sus manos y se aferra de esos sedosos cabello azul negro, empujándolo hacía adelante y hacía atrás.

Su bonito miembro tiene un color lindo. También tiene un sabor, olor extraño y penetrate, sin embargo me encanta. Me vuelve loco como esos olores y sabores se mezcla con su olor corporal y feromonas...estoy perdidamente enamorado de cada parte de su escultura cuerpo.

Puedo sentir como palpita en mi cavidad bucal, cada vez que mi lengua presiona la punta de su miembro tiembla ansiosa, deseado por más.

Es mi primera vez habiendo una felación y no es arrogancia pero sé que mi alfa lo está disfrutando, lo sé por como embiste mi boca.

-Aahmg~...Seth...Justo ahí-Declaró entre jadeos pesados e emocionados. Los espamos se apoderan de su interior, contrayendosé cada vez, pidiendo que esa gran cosa de Seth, se deslice por ese pequeño espacio.

Seth muy juicioso enreda su lengua en el miembro emocionado del mayor, al mismo instante en que uno de sus dedos se deslizan suavemente en ese pequeño lugar y con su mano libre acaricia las dos bolas duras, llenas e ansiosas por dejar salir todo lo que estaba reteniendo.

Christian se aferró con fuerza del cabello de Seth, ya no podía seguir resistiendo, algo estába amezando con salir de ese duro miembro. Hasta los dedos de sus pies se encorvan por ese placer recorrido sus venas.

-¡Seth!-Quiso alejar al menor, pero este con su mano libre se sostuvo de las caderas de Christian, tragado todo lo que había dejado salir en el interior de su boca.

No le encuentro sabor alguno, creí que sería algo raro. Solo que su semen era demasiado espeso. "Sonríe" Muero por ver su expresión avergonzada al recodar lo sucedió, que disfruto y pidió por más mientras le hacía esa felación.

-Ponerlo-Demandó con su mirada perdida en lujuria.

-Falta dilatación....¡¿Ugh!

Seth se estremeció al momento en que Christian, lo empujó a la cama y subió arriba de él. Devorado suavemente esa dura y super erecta bara de carne.

Me quema, su interior se encuentra tan caliente que creó que en cualquier segundo seré consumido hasta el punto en que no quedará nada de mí, me disolverá en una epifanía de inexplicables y descontrolado placer.

Soy yo quién está gimiendo y jadeando cómo animal en celo, perdido en la intoxicación de la única maravilla que se encuentra arriba de mí, intentado con todas sus fuerzas tomar por completo mi miembro.

Es tan sublime el escucharlo gimiendo con vergüenza, que su inmaculada piel se torne rojiza, que de sus labios se escapen hielos de plata, y sus uñas arañado mi pecho es la cereza del pastel. Me encanta cuando se pone posesivo y deja todo tipo de marca en mi cuerpo, es su forma de decir que soy suyo.

Sin embargo, no hay nada más maravilloso que su mirada, perderme en ella es lo que más disfruto. Ese color morado teñido por la euforia es una cosa de otro mundo. Simplemente hermoso.

-Te ayudaré-Baje mis manos hasta sus caderas, agarrado fuertemente esos blandos y lindos glúteos-Eres tan precioso, más deslumbrante que un diamante o cualquier gema brillante-Embiste.

-¡Aaahh!-Si antes estaba perdido en diferentes emociones, el tener por completo su miembro en mi interior, me hizo volver a estar un poco lúcido.

Había invadido mi interior a una profundidad e imaginable. Podía sentir como se retorcía emocionado golpeado mis suaves paredes.

-¡Uugh~!

Las caderas de Christian se movían por si solas, aferrándose de ese miembro que se encuentra ultrajado su punto sensible.

-Mi Chris~-Lo nombro con ternura, muy diferente a lo que dejaba ver su brillante y oscura mirada enloquecida por la sobredosis de placer.

-Mi alfa-Declaró-Eres solo mío, Seth-Se mueve más rápido.

-Sí, cariño-Lame el cuello se Christian, erizado su piel-¿Puedo?-Susurró entre súplicas sobre el oído del mayor, electrocutado el alma de ese hermoso ser de ojos morados.

-Muerde-Pidio sonriente-No lo pido a causa de mi rut.-Besa y muerde esos rojos labios del más joven-Aunque no lo diga, he querido llevar tu mordida sin importar que se borre.-Descubre todavía más su cuello.

-Podra borrarse cuantas veces quiera, yo seguiré mordiendo cuantas veces sea necesarias hasta que se vuelva permanente.

-Mngh~

Sus colmillos rompió con suavidad la piel erizada del mayor, provocado que se tensara y de esa manera apresar con fuerza ese miembro endurecido dentro de él.

Fue por un segundo pero tengo la seguridad que logré sentir todo atraves de su mordida y las espesas feromonas al ser inyectadas en mi cuello.

No podía encontrar las palabras exactas para explicar ese vórtice de tantos sentimientos sinceros, porque simplemente no las hay. Ninguna palabra puede lograr expresar lo que Seth, siente por mí....es una completa locura...

-¡¿Chris?!-Me asusté-¿Te lastime algún lugar?-Me dejé llevar-¿Por qué lloras?

No sabía que hacer, odió y me duele el verlo derramar esas preciosas lágrimas que para mí, son más valiosas que el oro.

-Solo estoy feliz-Sonríe brillantemente-Feliz de conocerte y de amarte tanto como tú me me amas-Sus feromonas se volvieron locas por las diferentes emociones-Te amo-Esa sonrisa cegó al joven alfa que se encuentra hipnotizado-Te amo Seth...mi alma gemela.

El joven alfa tuvo la ligereza de salir del interior de Christian, puesto que su miembro estuvo a punto de anudar al mayor. Ese "te amo" golpeó con fuerza todo su ser.

Seth había dejado de respirar y con ello su autocontrol se perdió. Cada rincón de este mundo comenzó a moverse cual silla mecedora.

El joven alfa solo podía ver como su cuerpo flotaba y se eleva por los aires por la repentina y muy sincera declaración de ese alfa de ojos morados. Quién lo agarro con la guardia bien baja.

<¡Reaccione, por favor!> Tuve que esconderme de la mirada de mi señor Christian, para poder golpear con todo a mi maestro. Él estaba a segundos de causar una colisión que terminaría con la existencia de este mundo.

-¡Dilo de nuevo, por favor!-Suplico.

Reacciono luego de que la pequeña abejita, por poco y pierde su manita ya que el cráneo de Seth, es más fuerte que una piedra. Ella se había asustado mucho al ver que los signos vitales de Seth, enloquecieron.

[Gracias, ya puedes irte] Le pongo las cosas muy difíciles a mi lindo sistema. <No me asusté de esa manera, que no ocurra una próxima vez> Desapareció, en ningún momento vió o escucho a sus maestros.

Ella había anulado la función de ver y escuchar a excepción cuando Seth hablaba, solo podía escucharlo a él.

-No es mi probable sin no escuchaste-Se encuentra molesto-Sal de aquí antes de que quiera golpearte.

-¿Dónde vas?-Lo empuja a la cama.-¿Estás enojado por qué lo saqué?-Sube la pierna sobré su hombro-Me emocione demasiado hasta el punto en que podía llegar a nudarte.

-Ya no quiero hacerlo con....

-Te amo-Sonrío.

Mi corazón retumbó y retumba cómo el tictac de un reloj contado los minutos de la bomba que está por explotar y acabar con todo lo que este cerca a más de tre kilómetros. Una vez más me volví a enamorar del vicealmirante Seth. De esos hermosos ojos cubiertos de solo sinceridad y amor.

-Tal vez no seamos destinados o estemos ligados a ese tipo de destino que tienen el privilegio o maldición los alfas y omegas. Sin embargo, la fuerza que nos une es algo más poderoso que el propio destino, y esa fuerza fue creada por mi, por mi desbordante amor y anhelo de poder hacerte el hombre más feliz de universo. Te amo Christian.

Dulcemente se volvieron a entregar a la pasión que exudan los poros de sus cuerpos, embriadandose. Diciéndose cuánto se aman con el roce de su piel con piel.