Nuestras manos entrelazadas al igual que nuestros cuerpos volviéndose uno al ritmo provocado por el vaivén de mis caderas. Nos hacía enloquecer y perdernos en nuestras miradas que, gritan cuánto nos queremos.

Mis oídos se deleitan al escuchar los obscenos gemidos, que el amor de mi vida, intentaba retener en su garganta, porque la vergüenza lo invadía. Es la melodía mas hermosa que he escuchado y seguiré escuchando por mucho tiempo, cada vez que nos entreguemos en cuerpo y alma.

Y mis ojos quedarán hipnotizados por esa hermosa expresión en su maravilloso rostro, la forma en que sus ojos morados se pierden en la euforia, es majestuoso.

Quiero seguír escuchado más de sus gemidos y la manera en la grita mi nombre, mientras su mano libre araña cada parte de mi cuerpo, y la otra aprieta con fuerza mi mano. Haciéndome saber, cuánto lo está disfrutando. Disfrutado de mis caricias y roces de mis labios sobre sus pezones rojos e hinchados por tanto jugar con ellos.

Me encanta, me encanta como su cuerpo se adapta a mí, sentir como su hermoso lugar privado, me succiona con ferocidad y deseo de ser embestido con más fuerza.

Me estoy volviendo adicto, no, desde hace mucho tiempo soy adicto a su mirada morada. Mirada que me ve con reproche y lujuria.

Ese precioso color morado se encuentra perdido en un placer, placer que incrementa con el más mínimo roce de mis labios sobre su piel.

Las llamas del incendio en nosotros dos, se apodera y los enloquece todavía más. Mis embestidas en vez de apagar el fuego, las enciende más. Nos quemamos y nos prendemos en esas llamas ardientes.

Nos vemos fijamente, se sonroja tímidamente, eso lo hace ver tan adorable, ¿Cómo un hombre adulto puede ser tan adorable? Quiero morder sus mejillas, en este momento se ven como dos deliciosos duraznos.

También logró escuchar los frenéticos latidos de su precioso corazón, latidos que son causados por mi, yo vuelvo loco a mi Chris. No es narcisismo, solo digo la verdad, su corazón está latiendo solo por mi.

—Me me encantas—Jadeo al movimiento de sus caderas—Me encantas tanto, cariño—Vuelve embestir al alfa bajo su cuerpo.

—¡Uhg!

Con cada embestida se va adentrado más profundo en mi interior, rozado cada parte de mí, con esa bestia enfurecida, palpitante y caliente.

No voy a negar que Seth, este alfa de loco de hermosos ojos heterocromía, me vuelve un completo desastre hasta el punto en que no puedo reconocerme a mi mismo.

Cuando estoy con él, solo quiero seguir perdido en sus ojos y en el movimiento de sus filosas caderas destrozado mi interior.

Perdí por completo, ya no hay vuelta atrás para todo esto que me hace sentir. No me arrepiento, no me arrepiento ser sometido bajo sus brazos. Verlo desde aquí, es una vista que no quiero perderme jamás.

Ver eos ojos heterocromía fijos en mí, hace arde mi cuerpo y enfurecer con muchas emociones mi inquieto corazón. Esos bellos colores de sus ojos se empañan en la lascivida que me hace saber con todo el descaro del mundo.

Puedo ver tantas expresiones calientes como sexis en su atractivo rostro, sudoroso por el gran trabajo que está haciendo. Ya perdí la cuenta de cuántas veces lo hemos hecho, quizás unas diez veces y seguimos sin a pagar el incendio forestal en nuestro ser.

—Mi Chris—Muerde el muslo del alfa mayor—Mio—Lame ese lugar donde mordió.—Dime que solo eres mío, cariño—Esa mirada penetrate y oscura estremecio al alfa mayor, esa manera de verlo y lamerse los labios era demasiado caliente e excitante.

Una de las sexis y esbeltas piernas de Christian, se encuentra posicionada arriba del hombro izquierdo de Seth.

—Responde, mi amor—Detuvo sus movimientos.

—¡¿Seth?!—Lo ve con molestias, el estába por correrse—Muevete—Ordena.

—Dime que eres solamente mío—Sonríe pícaramente.

—S-Soy...¡SOY TUYO, MALDITA SEA!—Grito con su rostro enrojecido—Todo de mi te pertenece....¡Aaagh!

Sentí como esa embestia llegó todavía más profundo, podía jurar que esa gran cosa estába por perforar algún órgano, es terrador.

—¿De que te estás riendo?—Suelta un par de golpes en el pecho de Seth.

—Solo estoy feliz—Sonríe ampliamente—Me tomo tanto tiempo el poder estar así, contigo—Besa la frente de Christian—Encontrar la manera de poder viajar y llegar s este mundo de mierda—Sus ojos se escurecen—Me enojaba que mi alfa respirara el mismo aire que estos seres insignificantes.

Habla como si las personas no valieran nada y que hasta las hormigas eran más valiosas que los humanos de este mundo. Cuando habla de esa manera puedo ver un aura dominate e imponente jamás vista.

Es como estar enfrente de un ser poderoso e inalcanzable, digno e orgulloso, arrogante, frío. Eso me hace sentir un sentimiento amargo, una sensación de no poder estar a su altura.

—¿De dónde eres?—Pregunte inconcientemente—¿Que eres?—Acaricia el rostro de Seth.

Seth se tesón y Christian lo noto al instante, como notó su asustada expresión. Seth le dejaba ver el miedo de que el alfa mayor, no lo logré entender.

—No voy a dejarte—Se miran uno al otro—Eres mío, así seas un extraterrestre, seguirás siendo mío. Mi extraterrestre—Su tono era dominate e imponente, le estaba advierto sutilmente que ni piensen huir de el.

—Te lo explicaré todo, y no. No soy un terrestre—Besa la mano de Christian—Primero te llevaré al cielo, cariño—Expreso seductoramente.

—¡Aaahh!~....Seth—Jadea—Umgh~—¿Cuán más profundo piensa llegar? Esa cosa monstruosa está golpeando más allá de lo imaginable.

Los dedos de sus pies se encorvan, mientras sus manos se aferran de la cabezera de la cama. Los movimientos de Seth, se han vuelto más rápido y destructores al momento de golpear su próstata. Christian solo puede derretirse y gemir eufórico.

—¡Aaaahg!

¿Que fue eso? mi interior se va contrayendosé poco a poco, calentándose y lo peor o mejor es que se siente tan bien.

—¡E-Espera!—Jadeo—Seth...Unhg—Algo saldrá y no creó que sea del todo semen..

—Solo déjelo salir, cariño—Nalgueo el trasero de su alfa de ojos morados.

—¡Aaah!

Christian se asustó un poco al sentir como su cuerpo se retuerce en espamos, placer, apretado con fuerza el miembro del alfa menor con bellos ojos heterocromía.

Su interior me está apretado demasiado fuerte, hasta el punto en que mi miembro se va a romper, pero la sensación ardiente de su interior, es sensacional.

Me hace ver hermosas estrellas donde no las hay, o tal vez sí. Mi Chris es la estrella más brillante de mi único e inaguantable universo.

—¡Maldición! se siente tan bien—Muerde seductoramente su labio inferior—Las suaves paredes de tu apretado interior me están succionado, cariño—Jadeo—Me estás volviendo loco—Sonrío un tanto malvado.

Christian está muy avergonzado por escuchar las palabras un tanto obscenas, salientes de los juguetones labios del alfa menor.

—Seth.. se siente raro—Comenta confundido y a la vez tembloroso.—¡Seth!—Deja de aferrarse de la cabezera de la cama, para sostenerse de los hombros de su alfa—Algo extraño saldrá de ahí.—¡Umgh~!—Los hilos de plata salen de sus hinchados labios cada vez que gime de placer.

Seth gimió de dolor o placer, no se sabe. Pero la manera en que las uñas de Christian, se incrustan en su espalda, le hacía sentir algo.

—No tengas miedo—Susurra dulcemente—No te sientes avergonzado, di mi nombre más fuerte. Me encanta escucharte—Besa el cuello de Christian—Todo lo que venga o salga de ti, es y será simplemente hermoso—Besa los labios del alfa mayor.

Mi cuerpo no responde a ninguna de mis órdenes, no tengo fuerza. Mi mente no puede pensar en nada más que no sea esa expresión sexy en el rostro de mi Seth. Mi alfa, solamente mío.

Me encanta, me encanta tanto en la forma que muerde su labio y ese brillo en sus ojos que me hace sentir como si estuviese flotado entre el placer y flores que te embriagan dulcemente.

Quiero ir a dónde sea que vaya, no puedo vivir sin este hombre loco, si está muy loco. ¿Quién en su sano juicio vendría a un lugar desconocido sin la seguridad de que podrás ganar el corazón de esa persona? Solo mi Seth es el único loco.

¿Yo también haría algo como eso? Si. Si lo haría si esa persona fuera Seth, es imposible no deslumbrante con esa mirada, esos bonitos colores. Me encanta las dos versiones de sus ojos.

¿Cómo será la verdadera aparecía de Seth? No importa, me enamorado de su interior, cual sea su aparecía lo seguiré queriendo tanto.

—Mi alfa...¡Aaah!—Seth se había emocionado todavía más al escuchar ser llamado de esa manera.—Mi alfa. Eres mío, mi amor.

Ese "mi amor" enloqueció a Seth, lo hizo actuar como si estuviese en su rut, todo se empezó a mover, si. No era solo la habitación, toda la propiedad se movía cada vez que las caderas de Seth, embestia a Christian.

Lucio se cayó de la cama por el susto, creyó que era un terremoto por lo que salió corriendo a la habitación de George, “supuestamente” para salvarlo. Más no esperaba que George estaba sumamente tranquilo, durmiendo.

Cuando Lucio intentó cargarlo para no despertarlo, George le metió un puñetazo por verlo despertado. Luego lo hecho de su habitación y se volvió a dormir.

Era como si George ya tuviera la sospecha de que su maestro, no es una persona normal. Que esos pequeños temblores eran provocados por Seth, pero de igual manera para el. Seth sigue siendo Seth, su maestro.

La abejita no podía estár solo rodado por el lugar por lo que se quedó en la habitación de George. Pasando el rato, mientras busca que aromático usará en el momento que prepare la ducha de sus maestros.

Un maestro que está causado estragos sin darse cuenta por su pasión desbordante hacia su amado alfa, su amado Chis.

Baje su hermosa pierna de mi hombro, lo subí a mi regazo sin dejar de mover mis caderas. Mi Chris gimió dulcemente al sentir que en esa posición, mi miembro se hundió más profundo.

Su deslumbrante rostro se tiño de rojo al ver que me estaba montando, quería bajar de mi regazo, pero no lo permití. Me movía más rápido a la vez que mis manos aprietan y frotan sus pezones, como lo esta haciendo mi miembro con su próstata.

No puedo ver qué tipo de expresión tengo en mi rostro, pero esto seguro que he detener una expresión entre lujuriosa y a la vez loca porque no puedo controlar mi sonrisa.

Me enloquece cómo ese tembloroso y bonito miembro de mi Chris, está soltado todo sobre mi pecho. Se había corrido por ambos lados, pude sentirlo y es maravilloso.

Adorable, lindo, ese avergonzado rostro es adorable. No pudo con la vergüenza y escondió su rostro en mi cuello. Mi amado Chris había tenido un excitante Squirt.

Es la segunda vez que provocó algo así en su sexy cuerpo, pudo sentir como ese lugar me aprieta fuertemente sin la intención de soltarme. Eso me enciende todavía más, hasta el punto que parezco una bestia hambrienta de devorar todo de mí amado alfa.

Su cuerpo no deja de temblar y estoy seguro que su bella mirada se encuentra perdida, mientras intenta normalizar su jadeante respiración.

—Mi Chris, mi deslumbrante Chris.

Seth hunde sus dedos en el cabello húmedo, blanco, del alfa. Alfa que se estremece al sentir la respiración caliente de Seth, sobre su piel que se encuentra sensible en todas partes.

—Seth...espera. ¡Aah!

Christian se encuentra muy sensible ahí abajo, por lo que repentino movimiento de Seth, lo está enloqueciendo y logrado que su miembro se vuelva a poner erecto.

—No...no te muevas—Jadea.—Si te mueves te mató—Advierte con una mirada asesina.

Si sigue moviendo sus caderas algo más extraño volverá a salir de mí. Se siente muy raro, todo dentro de mí se siente tan caliente. Esa cosa feroz de Seth, se encuentra todavía más caliente, palpitante.

—Me encantas.—Sonríe perverso—Y está bien, mátame. Pero mátame con tu sexi trasero.

Antes de apodera de los labios de su gruñón y amado alfa. Seth había palmeado con dulzuras las caderas de Christian, tiñendo su rostro de rojo por la vergüenza e indignación.

Christian quería decirle algo, pero Seth se tragaba esas palabras y los gemidos que intentaban salir de esos hermosos labios.