O13 | Maybe she's right... Maybe
- No quiero caminar más, hyuuuuung~... - Jimin se queja cesando sus pasos.
Habían caminado sólo un par de cuadras y el menor ya estaba comportándose como un niño chiquito.
Evidentemente, el alcohol tenía ese efecto en Park.
- Jimin, no te comportes como un niño... - dice Yoongi, cansado. - Sólo camina y llegaremos más rápido.
- Pero hyuuuung~ - protesta. - Me duelen los pies. - Min no contesta y Jimin tiene una idea. - ¡Ya sé! - Yoongi se acerca a él para escuchar su propuesta, cuando siente un nuevo peso sobre su cuerpo.
El menor había saltado sobre Yoongi, aferrando sus brazos a su cuello y enroscando sus piernas tras la espalda del mayor. Jimin pudo sentir el susto que le dió a su hyung por los latidos desbocados que sintió contra su pecho.
- Yah, ¿en serio? - pregunta Yoongi, recuperándose del susto y sosteniendo al menor de forma más cómoda.
- Hmm. - dice Jimin. - Ahora sí podemos seguir... - el otro rueda los ojos y, muy a su pesar, sigue caminando con Jimin abrazado a su cuerpo como una garrapata.
Si le hubiesen dicho que - a ese día - se encontraría en esa situación, no lo creería.
Largas cuadras después - similares a kilómetros para los pies de Yoongi - llegaron a la casa de Jimin.
- Eh... - Yoongi golpea levemente su cabeza para llamar su atención. - Llegamos a tu casa.
- Oh, claro... - Jimin por fin toca el suelo, aliviando a su hyung del peso adicional e innecesario que cargó por varios minutos. Se da vuelta y abre la puerta de la casa con la llave en su bolsillo. - Gracias por traerme, hyung lindo... - se pone de puntitas y besa la punta de la nariz de Yoongi.
Claramente, todo el alcohol en su cuerpo no se había desvanecido durante la caminata.
- N-no hay p-problema, Jimin-ah... - contesta sonrojado para, cuando su menor ya estaba dentro de su casa, huir despavorido y avergonzado de la escena.
- Definitivamente voy a matar a Hope, Taehyung y Jungkook... - dice ya en soledad sin nombrar al cumpleañero. - Namjoon se salva sólo por ser su cumpleaños.
Sin percatarse, Yoongi no dejaba de tocar la zona que su dongsaeng había besado.
Después de todo eso no se sintió con ánimos de volver a la fiesta, por lo que se dirigió rumbo a su hogar. Luego, al día siguiente, lidiaría con sus amigos enojados por su desaparición.
Le haría bien tomar un poco de aire fresco, pensar un poco y estar a solas consigo mismo. Eran muchas las cosas que estaban cambiando en su vida y en su persona - las cuales no vio venir.
Tuvo que resignarse a trabajar con otras personas, con ese niño que había aprendido a apreciar de alguna manera y que estaba ayudándolo a descubrir otras partes de su música que sólo no podría haber descubierto.
Sin quererlo, aprendió a pensar en Jimin y valorar y solicitar sus opiniones e ideas. Amaba trabajar sólo pero esos últimos días encontraba cierto tipo de belleza en trabajar con Jimin.
El talentosísimo bailarín había descolocado las bases de todo lo que Yoongi creía y afirmaba. Todo lo que Yoongi hizo y pensaba hacer.
¿Qué significaba aquello? ¿Tendría su abuela razón al decir que le gustaba su dongsaeng? ¿Eso que sintió hace unos días atrás, eso que creyó una conexión, tendría algo que ver con su confusión ahora? ¿O esa conexión es sólo una consecuencia de la gestación de nuevos sentimientos en los corazones de ambos jóvenes?
- Min... - dijo si abuela - Y ese chico te gusta, ahorrate problemas y hacele caso a tu abuela.
En el fondo, querría poder negarles a su hermano y a su abuela sus afirmaciones.
Antes de dormir, se propone llamar a Jimin al día siguiente: tenía algo importante que preguntarle.
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top