1| La complicada vida de un famoso
|Capítulo 1: La complicada vida de un famoso|
Helena
- ¡ALEX DETENTE! - grito mientras no paro de reír, y segundos después la cocina esta hecha un desastre. A mi rostro llegan un par de gotas de chocolate y bueno... Alex por poco y no se baña en el.
- Esto no salio conforme el plan - admite Alex y pasa un dedo por su rostro. Al ver el chocolate se lo mete a la boca y exclama:- Bueno el sabor no esta nada mal.
- Lastima que no podemos meterte al horno - suelto y voy por un balde de agua y un trapo.
En el comino me topo con Diego, en estos dos meses el y Alex se han vuelto inseparables. Son de los más tiernos juntos, así que ella sin dudar mucho le pregunto si se quería ir a vivir con ella... Así que bueno, el ahora vive aquí.
- ¿Alex en la cocina, otra vez? - pregunta intentando no reirse de la mancha enorme de chocolate en mi ropa.
- ¿Que más podría ser? Voy a limpiarme, asegúrate de que no toque nada - le pido con una sonrisa y sigo mi camino hasta la lavandería. Agarro el balde y busco el trapeador. Antes de que haga algo más, una mano tapa mi boca y no puedo gritar.
- Te atrape, princesa - su voz hace que mi corazón lata aún más rápido debido a la sorpresa y emoción. Me volteo y lo observo de pies a cabeza sin creerme que esta aquí... En frente de mi.
- Pense que volvías la semana que viene - murmuró. Nisiquiera me dio tiempo a envolver su regalo de bienvenida...
- Bueno, quería ver a mi linda novia... Pero no espere encontrarla bañada en chocolate - se ríe y me agarra de las mejillas -. ¿Me extrañaste? - pregunta a centímetros de mis labios. Tenerlo así era pura tentación para mi pobre ser... Joder, no me tendría que sorprender el efecto que causa Jayden en mi.
- Ni tanto... ¿Y tú?
- Como loco - me responde al oído y dios... Creo que acabo de mojar algo.
¡Control, Helena, plis!
- ¿En serio? Pues que puedo decir... Soy una persona impactante, una vez que me conoces no puedes alejarte - digo con tono de diva.
- Y no sabes cuanto - se acerca aún más y creo que sino fuera que el me sostiene, me iría de cara al suelo.
Sonrío e intento acortar la distancia, pero el no me deja poniendo su dedo pulgar en medio de mis labios a modo de barrera.
- Claro que no, si quieres mis besos... Debes aceptar que me extrañaste - sonríe de lado. Gruño ante su pedido, cosa que logra que el sonría aún más.
- Eh bueno... Yo te extrañe un poquito - admito con dificultad. El se muerde el labio para no reír y tan solo ese gesto basta para que quiera acortar con urgencia la distancia entre los dos.
- ¿Solo un poco? - se acerca más y eso hace que pierda sentido de la vida. ¿Que me pasa? Jesús, me doy vergüenza.
- Un poco... Mucho.
- Ajá.
- ¡Maldición, Jayden! - gruño enojada -. Si te extrañe, idiota... Ahora quiero mi beso - pido con seriedad.
- Un trato es un trato - dice y después de una larga espera, según yo, me besa con fuerza.
Pero vamos, soy Helena... Quiero más que un beso de mi novio.
Mis manos van a su duro y ejercitado abdomen, lo acaricio sin importarme que estemos en la lavandería y Alex o Diego puedan vernos. Jayden me levanta del suelo y me posiciona encima del lavarropa, es justo ahí cuando mis besos se vuelven más urgentes.
Para mi desgracia, la puerta es tocada y eso hace que me baje de las nubes. Mi cabeza vuelve a su funcionamiento normal y sonrió tontamente con Jayden.
- ¿Ya acabaron? Tengo ropa que lavar - dice la voz de Alex.
- Nisiquiera había empezado, mujer - me quejo al abrir la puerta. Alex se parte de risa al verme molesta... Con esta mujer tengo una seria relación de amor-odio, lo juro.
- Tu amiga me quería estafar... Le prometí un beso y quería más. ¿Que le diste de comer? Era una leona - escucho decir a Jayden y me volteo para sacarle el dedo medio.
- ¡No es cierto! - exclamó indignada.
- Chicos, no quiero saber lo que estaban a punto de hacer... Aunque tengo una idea. Vayan a pedir algo de comer - nos dice y entra a la lavandería -. A menos que quieran que yo cocine y en ese caso, no me haría responsable de la intoxicación que les dara a todos - sonríe malvada.
- ¿Pizza, esta bien? Claro que sí - me digo y voy a por el número del local de pizzas.
- ¿Ya acabaron? Amigo no te tenía de los tipos que terminan rápido - le molesta Diego.
- Ahora entiendo porque Alex y tu están juntos... Piensan igual. Y te dire lo mismo que le dije a ella, no nos dejaron ni comenzar - dicho eso, comienzo a marcar el número de la pizzería.
- Lo sé, somos perfectos - le escucho responder.
(...)
- ¿Segura que es seguro salir...? Y no lo digo por mi, sino por nuestro amigo famoso en común - expresa Alex.
- Pues... Nadie sabe que el esta aquí, eso reduce los riesgos y esta usando peluca. Nada de que preocuparse - intento brindarle calma. Ella hace una mueca antes de que los cuatro demos pasos firmes hasta la entrada del cine... Hasta ahora nadie se había percatado de que el gran hijo de la leyenda Jones, estaba a pocos metros y eso era bueno.
- ¡Paparazzis! - exclama con terror Alex cuando unas camionetas se acercan al lugar. Puedo sentir como Jayden se tensa y Alex se pone alerta, ambos no tenían buenas experiencias con esos hombres con cámaras.
- ¿Pero como supieron que estabas aquí? - pregunto en voz alta. Hasta que me doy cuenta de algo, Jayden y yo vamos de las manos y hace unos días ambos habíamos confirmado nuestra relación ante las redes.
Y como yo voy normal y sin nada que me tape el rostro, es fácil reconocerme y después todo se trata de unir cabos. ¿Me ven con alguien de la mano después de que haya confirmado mi relación con Jayden? Pues eso deja muchas cosas claras y el porque nos encontraron.
Fue mi culpa.
- Sólo sonreían... Tomaran las fotos y se irán - recomienda Alex.
- ¿Y si corremos? - pregunto al ver como la ola de viejos con cámara se acercaban a nosotros.
- Estoy con Lena... Ustedes pueden estar acostumbrados a la fama, pero no yo - nos recuerda Diego.
- ¡Entonces corre! - exclamó y agarro más fuerte la mano de Jayden.
Mire cada tanto hacia atrás, pero veía pocos hombres que después de diez minutos no se habían rendido y seguían atrás de nosotros.
- ¡Se me rompió el tacón! - gruñe Alex, me detengo cuando ella se retrasa. Uno de sus tacones se había atorado en un agujero y cuando tiro con fuerza, el tacón se rompió.
- Usa a Diego de caballo y vamos - le pido cuando veo que los hombres nos alcanzan. Ella me hace caso y se sube a la espalda de Diego.
Llegamos al final de una calle y es ahí cuando a todos nos da un infarto... Había mucha gente acumulada y estos nos miraban a nosotros.
Tengo miedo... Por Jayden, después de todo es quien tiene la fama de aquí. Y bueno, Alex y yo solo un poco.
- ¡JAYDEN! - gritan todas las chicas y yo me tenso al ver que se acercan a nosotros.
- Nos van a violar... - suelta Alex al ver que no había escapatoria.
- ¡Alto todas! - grito llamando la atención de todas las chicas -. ¿Quieren una foto con Jayden, no? - pregunto aún sabiendo la respuesta, todas asienten -. Pues entonces deben impedir que esos tipos con cámara se acerquen a nosotros - explicó con una sonrisa. Todas gritan y corren hacia los tipos con cámara atrás de nosotros, estos al ver la multitud de chicas yendo en su dirección, salen corriendo.
- Buena idea... Por un momento pense que tendría que explicarle a mi madre porque la hija de una famosa diseñadora andaba sin tacones en la calle - suspira aliviada.
- ¡Jayden es todo suyo, chicas! - exclama Diego. La multitud ahora viene a nosotros.
- Iré comprando las entradas al cine... ¡Que sea rápido, chicas! - les pido y Alex, Diego y yo nos vamos dejando a Jayden con sus fans.
- La complicada vida de un famoso... - dice Diego al ver como las chicas gritan cuando Jayden hace algo tan simple como sonreír.
¿Pero como no entenderlas? Yo era igual cuando estaba cerca de él.
- Vamos por esas entradas antes de que se den cuenta quien soy - pide Alex con urgencia.
- ¡Helena Clark! - grita una voz masculina. Me detengo y doy media vuelta para ver quien me llama -. Hola... ¿Te molestaría tomarte una foto conmigo? - me pregunta, era un chico de dieciséis años aproximadamente.
- Eh... Claro, no hay problema - digo un tanto incómoda. Yo no era la estrella del grupo, ese era Jayden, así que no estaba muy acostumbrada a que gente se me acercara a pedirme fotos.
Me acerco al chico y sin saber que hacer, me coloco a su lado y lo abrazo por hombros. Alex me mira con ternura y yo la miro mal... Sonrió ante la cámara del chico y cuando toma la foto me separo.
- ¡Gracias, Helena! - exclama y se va corriendo en dirección de Jayden.
- Ese niño era una ternura - admite Alex.
- Si... Lo era - digo mientras le veo sonreir al lado de Jayden y tomar una foto.
₪₪₪₪₪₪₪
· Nota de Autora: ¡Amores, primer capitulo del último libro de la trilogía perfectos! Estoy que muero de la emoción.
Espero que les haya gustado el capítulo y esperen con ansias el otro.
Aún no tengo los días exactos para publicar. Pero por ahora no publicaré nada... Al menos hasta que tenga unos cuentos capítulos listos. Yo les avisaré de todos modos, no se preocupen.
Mientras tanto denle amor al capítulo y de esa forma actualizaré más rápido.
Posdata: Ese niño es importante, no se olviden de él.
Besos y abrazos.
- RadianteUnicornio.
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top