Extra 2
☘️Mi novia;
por Jung Hoseok.
El tiempo iba pasando, y mis sentimientos por Haru aumentando.
No podía creer que existiera una persona que me acompañara en todo momento, y no solo en los buenos y divertidos. Haru había estado para mí en el momento más difícil de mi vida, incluso más que esa mierda de hace años.
La muerte de mi padre había llegado de imprevisto, dejando un enorme hueco en mi corazón que jamás se llenaría con nada ni con nadie, pero era algo superable, y Haru me había ayudado bastante con eso, a toda la familia en realidad.
Escuché mi teléfono, pero tenía las manos ocupadas preparando algo de cenar para mis amigos, quienes vivían de comida rápida los 365 días del año.
—¿Me puedes pasar el teléfono? —le pregunté a Yoongi, quien parecía bastante entretenido mirándome cocinar.
—No puedes responder, harás que mi comida se queme.
—Agradece que te estoy alimentando, imbécil —alegué girando los ojos. —Ahora pásame el teléfono, podría ser Haru —añadí. Ella había cancelado nuestras clases, y supuse que tal vez iba a salir con mi hermana o algo así.
—"Bebé" —lo oí y me di vuelta rápidamente.
—¡No revises mi teléfono!
—Te hemos perdido —exageró, y le quité el teléfono de sus manos. —Cuidado con mi comida, o no te daré propina.
—Ja ja.
Sonreí al ver su mensaje, le había preguntado a qué hora llegaría para escabullirme en su habitación o algo así, y su respuesta me había dejado en las nubes.
Bebé:
Iré yo a la tuya, tranquilo.
Estaba completamente loco por ella, definitivamente. Los últimos días sentía que estaba sobre ella todo el tiempo, por lo mismo había optado por darle el espacio suficiente para que no se hartara de mí.
—Oye, estás babeando —molestó Yoongi.
—Ah, cállate —dije, pero ¡maldición!, no podía olvidar la respuesta de Haru y por más que intentara no sonreír, lo hacía de todas formas.
—Lástima que Kyo está arreglando tu auto, pero tendremos la charla ahora.
—¿De qué hablas?
—De esa charla.
—¿Sexo y anticonceptivos? Llegaste un par de años tarde para eso —reí mientras ponía la comida en el plato.
—No esa charla, sino esa charla —especificó, pero seguía sin entenderlo. —Es sobre Haru.
—¿Qué tiene Haru?
—¿Qué tienes tú con Haru?
¿Qué teníamos? no tenía ni puta idea, pero sea lo que sea, me fascinaba. Besos, coqueteo, esa sensación de calidez en mi estómago... oh, ya entendía cuál era la charla.
—Ella me... ¿gusta?
—Sí, ahora dilo sin que suene como una pregunta, es bastante obvio que te gusta —dijo y rodé los ojos. —Es por esa misma razón, que debes decidirte rápido sobre ella.
—Pero si te acabo de decir que me gusta.
—¡Pero no es oficial, Hoseok!
—¿Y hay que hacerlo oficial?
—¡Eres un burro! Te voy a decir las cosas bien claras porque eres mi amigo y te veo feliz —dijo empujándome para que me sentara en la silla. —No sé qué clase de trauma te haya dejado Miyeon, pero no puedes vivir toda la vida intentando no liarte emocionalmente con alguien solo por eso, y mucho menos ilusionar a alguien, tú no eres así.
—Con Haru solo es algo distinto.
—Distinto —repitió. —Tu reputación es un asco, hace unos meses te acostabas con cualquier chica que se te pasara por delante, es obvio que Haru podría creer que solo estás jugando con ella.
—No estoy jugando con ella, pero estoy... asustado —confesé. — Es la mejor amiga de mi hermana, y es lo mismo que pasó con Miyeon.
—¿Y sientes lo mismo por Haru que por Miyeon? —preguntó Yoongi, pero no pude responder. —Te lo pondré más fácil, ¿Has intentado acostarte con alguien desde que iniciaste con Haru?
—¿Por qué lo intentaría si la tengo a ella?
—Sí, ahí está tu respuesta. La tienes a ella, así que piensa mejor en si la quieres por un rato, o para siempre —declaró, y tenía razón. —Llamaré a Kyo, para decirle que venga a comer.
Las palabras de Yoongi me había hecho pensar, incluso mientras conducía a la fiesta donde competiría. Si tenía sexo, y debía confesarlo, en parte era para intentar volver a sentir lo que alguna vez sentí por alguien, pero jamás lo conseguí hasta que conocí a Haru. Ella me hacía sentir el doble con solo mirarme e incluso sin tener sexo.
Definitivamente la quería para siempre, y esperaba que fuera recíproco.
—Oye, ¿esa no es Soo? —preguntó Kyo apuntando a una chica que estaba tirada en el piso.
—Es Soo —respondí, y me apuré en ir hasta ella.
—¡Hoseokki! —chilló, al menos me reconocía. —¿Qué haces aquí?
—¿Qué estuviste haciendo?
—Es una fiesta, ¿Qué se hace en las fiestas?
—Estás drogada —le dijo Yoongi, y Soo le guiñó un ojo.
—Alguien me dijo que probara una pastilla, era roja, mi color favorito.
—¿Crees que tenga que ir al hospital? —le pregunté a Yoongi, pero él negó.
—Conozco esas pastillas rojas de las que habla, el efecto es momentáneo y dijo que solo probó una —dijo Kyo.
—Intenté tomar un taxi, pero...
—Estás loca si crees que te dejaré subir a cualquier auto estando así —sentencié, y Soo torció su boca en una sonrisa.
—¿Vienes a buscar a una chica para la noche? Puedo hacerte propaganda, tienes un muy buen...
Soo se dio meda vuelta y vomitó todo. Rápidamente la sostuve y recogí su cabello. Era una escena bastante asquerosa, pero no podía dejarla sola.
—Vomitó al pensar en tu pene —dijo Yoongi, y Kyo estalló en risas.
—Voy a llevarla al baño —respondí ignorando lo anterior, aunque en el fondo estaba riendo junto con ellos.
Soo era un dolor de cabeza enorme. A veces parecía estar lúcida, pero de un momento a otro sacaba muchísima energía y se perdía entre la multitud.
La competencia de baile comenzaría en cualquier momento, pero mis ojos estaban pendientes de que Soo no fuera a hacer alguna tontería.
La distracción no fue lo suficiente como para hacerme perder, pero estaba seguro de que me iría para llevar a mi amiga hasta su casa, o lo estuve hasta que vi a Haru conversando con Kyo unos metros más allá.
Me fui acercando lentamente, con una sonrisa en mis labios. No sé quién se encargaba del destino, pero le agradecía por haberme permitido encontrármela.
— Con razón hoy tuve tanta suerte — susurré sosteniéndola por la cintura.
— Creo que no fui muy necesaria — respondió, y supe que algo andaba mal.
Bueno, las cosas andaban más que mal. Ella había venido con Woon, y estaba molesta conmigo, ¡Ni siquiera sabía por qué! y tampoco podía reclamar porque no había nada oficial entre nosotros.
Woon era su amigo, me lo había dejado claro muchas veces, y sabía que Haru no jugaría conmigo. Solo esperaba que ella supiera que yo tampoco jugaría con ella.
Recordé la conversación con Yoongi, y me decidí. Se lo iba a pedir, si la quería para siempre conmigo esta era la forma correcta.
—Hay algo de lo que te quería hablar —me atreví a decir.
—Te escucho, Jung —dijo esperándome para que hablara, pero me había quedado pegado en sus labios cuando dijo "Jung".
—Es que no... — A lo lejos pude ver cómo Soo se abalanzaba sobre un chico y este metía la mano bajo su vestido —¡Mierda, Soo! ¿Puedes esperarme un segundo? —pregunté, pero no esperé una respuesta. —Luego hablamos.
Dos o tres minutos después, Byun había llegado y se llevó a Soo a su casa, pero no me iba a ir así como así, no sin saber por qué Haru estaba molesta conmigo.
—Ya me aburrí —dijo Yoongi sacando otro cigarrillo.
—Solo espérate un poco más —insistí mirando directo a la puerta.
—¿Por qué quieres esperar?
—Kyo aún no tiene el dinero —respondí.
—No seas mentiroso —dijo Kyo riendo. —Es porque Haru está aquí.
—¿Haru está aquí? —preguntó Yoongi animado. No sabía que tan bueno podía ser que la chica que me gustaba les cayera bien a mis amigos, porque la mayoría del tiempo se ponían de su parte. —¿Y por qué no vamos con ella? Tu chica es divertida.
—Está molesta.
—¿Qué le hiciste? —preguntó Kyo, y le envié una mirada de odio.
—Obviamente tiene que estar molesta si te vio con Soo entrando a una fiesta —dijo Yoongi, y tanto Kyo como yo quedamos desconciertos. —Te has acostado con Soo, y no una, ni dos veces.
—¿Y qué con eso?
—¿Por qué son tan estúpidos? Hablé contigo sobre esto, Hoseok. Haru puede pensar que solo estás jugando con ella —me reprendió. — Tengo experiencia en esto con mis cuatro hermanas mayores —añadió.
—Pero ella vino con Woon —añadió Kyo.
—Solo son amigos — me apuré en decir.
—A él le debe gustar —dijo Yoongi. —Me pidió su número hace un tiempo.
—¿Y por qué no me lo dijiste?
—¿Qué acaso soy tu mensajero?
—Iré a buscar el dinero— dijo Kyo escabulléndose entre nosotros.
Miraba los segundos pasar en mi reloj, y cada uno de estos era tortuosamente largo. Haru no salí y parecía ignorarme cuando estaba a su alrededor.
Pero todo lo relacionado con Haru pasó a segundo plano cuando Kyo volvió con una carta.
—¿De dónde sacaste esto? —pregunté conteniendo la respiración.
Sabía de qué trataba, era el mismo sobre, tinta y caligrafía que desde hace años me perseguía.
—Estaba junto con el dinero, dijeron que era para ti —respondió Kyo encogiéndose de hombros.
—¿Recuerdas quién estaba?
—Había poca luz, no me fijé, lo siento.
—¿Sucede algo? —preguntó Yoongi al ver mi expresión, pero negué. No iba a meter a mis mejores amigos en esto.
¿Cómo me había encontrado? ¿Cómo sabía exactamente el lugar en el que estaba? Pasaban los años, y aunque yo no tenía respuestas, quién sea que fuera sabía todo sobre mí.
A lo lejos divisé a Haru salir junto a Woon. Podía sonar estúpido, pero con solo verla me pude relajar.
Me acerqué a ella, y luego de varios intentos, pude hacer que se quedara conmigo, pero eso no quería decir que no estuviera molesta.
—¿Me esperas un poco? —pregunté, pero si cara lo decía todo. —Debo hacer algo antes de irnos.
—¡Me duelen las piernas y tengo frío! —se quejó. Haru estaba ebria, lo cual era bastante divertido para mí.
Aproveché el momento para verla de pies a cabeza. Llevaba una falda ajustada que dejaba ver sus perfectas y largas piernas, y juro por dios que quería empujarla contra la pared y besarla.
—Usa esto mientras — dije quitándome la chaqueta para dársela, y aproveché el momento para robarle un beso. —Después tendremos que hablar. Mientras quédate con Yoongi y Kyo.
—¡Agh, vete ya! — me gritó.
Entré nuevamente al lugar, y quedaba poca gente. No sabía si tendría suerte esta vez.
Solo quería saber quién era, y disculparme. Sabía todo lo que había causado, y gran parte de la muerte de Miyeon había sido mi culpa.
—Oye, ¿Quién te pasó esa carta? —le pregunté a uno de los hombres que estaban ahí.
—¿De qué hablas, J-hope?
—La carta que venía con el dinero que le pasaste a Kyo.
—Kyowoon contestó una llamada y dejó el dinero en la mesa, yo me fui después de eso.
Estaba claro que este tampoco sería mi día de suerte, y quién sea que fuera, se ocultaba bastante bien.
Salí sintiéndome derrotado, y en parte asustado. Con cada año que pasaba me aterraba pensar en que las personas cercanas a mí pudieran salir heridas.
Nuevamente vi a Haru, estaba junto a los chicos y en sus manos... ¿Eso era un cigarrillo?
— Ni se te ocurra, Haruka — dije quitándole el cigarro de sus manos, lo que ocasionó una guerra entre ella y yo.
No sabía lo que pasaba por su cabeza, pero me gustaba molestarla, incluso con los más de siete mil químicos que contenía un cigarrillo.
Soo. Ese era su motivo, ella estaba celosa y no me disgustaba del todo que lo estuviera. Tal como lo había dicho Yoongi, Haru temía que estuviera jugando con ella.
Tomé a Haru en brazos y la puse sobre el capó de mi auto. Se veía preciosa, igual que la primera vez que la había visto en este mismo lugar.
Me metí entre sus piernas, y mierda, iba a morir teniéndola así. Mis manos descendieron desde su cintura hasta sus muslos y ella no se apartó.
Su teléfono comenzó a sonar, y al sacarlo de su bolso una hilera de condones cayeron. Ella lucía casi igual de sorprendida que yo, y antes de que me lo aclarara, ya sabía de quién se trataba.
—Fue tu hermana, no me mires así —dijo antes de responder. —¿Woon? —preguntó al contestar y rodé los ojos.
Haru estaba reservada para mí, y por supuesto que una posible amenaza me mantenía alerta. Pero conocía a mi chica, así que Woon tenía un pase directo a la friendzone, solo esperaba que yo no.
Comencé a besar sus clavículas, las que quedaban expuestas con el top que llevaba puesta, hasta llegar a su cuello. Me entretenía escuchar los suspiros que se escapaban de los labios de Haru, y cuando succioné la zona, dio un pequeño salto en su lugar.
—¡Hoseok! —chilló al teléfono, y yo solo reí. Segundos más tarde, cortó la llamada. — ¿Por qué hiciste eso?
— ¿Y por qué no? — pregunté fingiendo inocencia.
—Idiota. Debe ser tarde ya.
—Aún tenemos mucho tiempo, son recién las una con treinta.
—¡Es tu cumpleaños! Y no tengo un regalo para ti.
Uhm, si supiera que tenerla así ya era suficiente regalo para mí.
—Puedes compensarme con un beso — dije aprovechando la situación. Entrecerré los ojos, y la oí reír.
—Feliz cumpleaños, Hoseok —dijo poniendo sus labios sobre los míos.
Ese exquisito frenesí que no quería detener. Sus labios encajaban perfecto con los míos, y era tan excitante. La mente se me nublaba, y sólo estaba atento de su boca chocando con la mía y mis manos tocando su piel.
Sí, no quería detener esto ni ahora, ni jamás.
— Creo que se me ocurrió un buen regalo de cumpleaños —dije cuando nos detuvimos.
—¿Otro más?
— El otro era solo una compensación —bromeé, y Haru río.
— Bien, dime que se te ocurrió.
— Primero prométeme que dirás que sí —sentencié. Era una buena idea para no ser rechazado.
— No tendré sexo contigo.
— Esto será mejor que el sexo, te lo prometo —aseguré.
— Okey, entonces digo anticipadamente que sí.
— Haru, ¿Quieres ser mi novia? —pregunté, y por unos segundos reinó el silencio absoluto.
—No bromees conmigo.
—No estoy bromeando esta vez. Me gustas, Haruka.
—Me gustabas, Hoseok.
—¿Q-qué? —pregunté aturdido.
Era mi fin, ¡Y era culpa de Yoongi! Él tenía que haberme dado la charla antes, porque ahora era demasiado tarde.
—Me gustabas hasta que me llamaste Haruka.
—Mierda, Haru —dije soltando todo el aire que había acumulado. —¿Entonces?
—Quiero ser tu novia, Jung —respondió inclinándose para besarme, pero de detuvo a escasos centímetros. —Pero terminaré contigo si me llamas Haruka otra vez, así que no lo hagas más.
—No prometo nada —dije antes de atacar los labios de mi ahora novia.
〰️
Supongo que se acuerdan de este capítulo uwu
Para quienes llegaron hasta acá abajo, les quería preguntar si prefieren que actualice sábado y domingo, o solo los domingos y así alargamos el tiempo.
Dependiendo lo que me digan, les voy a avisar por mi perfil para que estén atentassssss.
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