En otro lado antes de que Bill, Dipper y sus acompañantes entrarán al portal en Hierápolis una pequeña fantasma se iba alejando del lugar donde se abriría el portal para evitar ser absorbida por este, y a la vez se dirigía a un lugar algo alejado de la mansión ocultándose en una zona donde había algunos árboles.

Desde aquel escondite pudo sentir el cambio de energía que se presentaba en el lugar, y a la vez observar cómo está se llegó a canalizar en el teatro notando cada sombra y rayos de luz de diferentes colores, para después percatarse de cómo está desapareció de un momento a otro.

Casi como si fuese una señal, un par de minutos después ella observa el cielo percatándose de cómo un pequeño brillo de luz aparecía en este, lo que le saco una sonrisa sabiendo a qué pertenencia aquel brillo.

—Ja, llegaron justo a tiempo — expresó el espectro. Para así iniciar a preparar sus cosas y mandar el mensaje donde indicaría la zona de aterrizaje, junto a un pequeño aviso de lo que ocurría allá abajo sabiendo que se tardarían en aterrizar.

Mientras se podía divisas en el cielo una clase de nave espacial de forma ovalada color platino con detalles blancos y celestes, siendo estos los que cubrían las cinco ventanas polarizadas de azul marino donde cuatro se encontraban en los lados más largos de la nave con un espacio de dos metros entre cada una formando una línea en aquella nave que parecía separarla en dos mitades, mientras que la ventana más grande era un semicírculo que daba vista a la cabina. Justamente en aquella nave se encontraba un grupo de individuos con un solo objetivo, recuperar los objetos en los que fueron transformados los del Zodiaco y al chico que se encontraba en el poder de Bill Cipher, aquel demonio que tenía control sobre toda aquella dimensión.

—Pit activa todos los sistemas de camuflaje, hay que evitar llamar la atención y ser detectados en el proceso — ordenó Zen al momento en que se incorporaba de su asiento para poder tener una mayor vista del panorama.

—A sus órdenes comandante — ante aquella orden el "conejo" se dedicó a activar lo anteriormente ordenado por su superior, presionando botones en aquella barra de control de la que se encontraba a cargo.

—Ya era hora — expresar el moreno al momento en que se empezaba a estirar y se hacía tronar sus huesos — un poco más y me duermo.

—No me sorprendería, estuviste descansando la mayor parte del trayecto Deilon — refunfuña Pit al momento de presionar el último botón y girar su asiento al chico del sombrero.

—¡¿En serio ustedes no pueden estar sin pelear?! — réplica Vlinder ya algo cascada de todas las discusiones de ese par.

Ambos se miraron por un segundo y responder al mismo tiempo un "No", lo que ocasionó que la albina se desubicará un momento al no entender cómo es que ambos estuvieron de acuerdo en una cosa, haciéndola dudar si es que en realidad se peleaban por llevarse mal o por qué ya estaban acostumbrados ello y ya se comprendían.

—Prepárense, muy pronto vamos a aterrizar y en ese momento la misión comenzará — habla el Comandante.

—Dos horas para el aterrizaje — avisó Asmael.

Por otro lado, en otro panel de control Vlinder se estaba encargando de las comunicaciones para ver si Tinua lograba contactar con ellos, que sus ojos mostraron un brillo al notar la señal mandada por su amiga. Rápidamente empezó a leer todo, para después mandar una contestación indicando el tiempo en que les tomaría aterrizar para no ser detectados, al terminar de enviarlo la florinia se levante de su asiento para ir con Zen e informarle todo.

—Comandante, ya revise la información de Tinua, quien ya nos dio las coordenadas ya exactas de su ubicación, más que nos informa que Bill Cipher junto un buen grupo de sus criaturas ingresaron hace poco al inframundo entre ellos Dipper Pines, por lo que la mansión se encuentra desprotegida en su mayor parte.

—Eso puede estar mucho a nuestro favor, menos enemigos a combatir, solo tenemos el inconveniente de que ahora tendremos que esperar a que el símbolo de Pino regrese de aquel viaje — expresa serio y captando la mirada de su tripulación — aun así, no podemos desviarnos demasiado del plan, recuperaremos primero los símbolos dentro de la mansión y veremos después cómo recuperar el último símbolo, de acuerdo.

—¡SÍ COMANDANTE! — gritaron a coro los presentes.

Como fue de esperarse, a las dos horas acordadas llegaron aterrizar en la zona marcada por la fantasma que apenas empezaba a restablecer su energía para volver ser visible y detectable, lo suficiente para sus compañeros. Los cuales al aterrizar ya venían preparados para la misión, aun así, aquello no les impidió a las dos pequeñas darse un abrazo por volver a verse en persona después de hace mucho tiempo de estar separadas.

—Te extrañe mucho — comenta la hada mariposa aun abrazando a la espectro.

—Yo igual Vlinder — menciona de forma suave, para separarse y dar una pequeña sonrisa que apenas se notaba, no porque fuera muy discreta sino por qué apenas se lograba ver su figura original.

Los presentes veían aquello con mucha ternura a pesar de no demostrarlo por completo, el albino tomo el hombro de la florinia como señal de que debían continuar con lo planeado. Así la fantasma los guio al lugar donde se encontraba la mansión, que a cierta distancia se detuvieron para el siguiente paso.

—Pit y Deilon ya saben qué hacer, ustedes se deben en encargar del escudo que cubre la mansión, si bien recordamos después del primer atentado contra la estructura Cipher lo volvió más fuerte, aun así, Tinua nos explicó de los puntos débiles de esta, por lo que ambos podrán deshabilitar en menos tiempo que la primera vez a pesar de su dureza.

—Así es Comandante — afirmó el de azul.

—Déjenos a nosotros — reafirmó el moreno.

Ambos rápidamente se escabulleron hasta llegar a la base de aquel escudo que cubría la Mansión del demonio, Pit se encargó de instalar una maquinaria la cual era a base de pliegues que al desdoblarse formaba un gran anillo de metal, que al hacer contacto con la barrera lanza un pulso electromagnético dejando ver una capa de energía en el centro de este, para después liberar unos pequeños compartimentos a los cuales el "conejos" les inserta unos pequeños frascos con un contenido púrpura adentro. Después de eso Deilon se posiciona enfrente del anillo de metal, haciendo aparecer un báculo el cual clavó en el suelo mientras lo sostenía con ambas manos, debido a que para lo que necesitaba hacer necesitaba de un conducto para canalizar su energía, cerró sus ojos logrando concentrarse e iniciar a susurrar entre dientes, solo fue cuestión de un par de minutos para que abriera de golpe sus ojos los cuales resplandecían de un color plata en toda la superficie de estos incluso desbordando algo de energía fuera de estos dando una clase de ilusión de llamaradas leves.

Todo eso sucedía mientras el del sombrero no dejaba de susurrar más de un millón de encantamientos entre dientes, que cuando abrió los ojos la misma energía que se mostró en sus ojos fue conducida a su báculo, el cual lanzó un rayo de luz justo al centro de la máquina, la que sirvió para dispersar aquella energía en toda su superficie de forma equitativa. Tal vez pasaron diez, quince o máximo treinta segundos de que el moreno lanzará aquella energía siendo que ya no se encontrarse en el rayo y fuertes absorbida por completo de la máquina, con aquello hecho este pudo volver a la normalidad recuperando el color de sus ojos, pero casi desplomándose, suerte para él que Pit lo atrapó a tiempo.

—Lo hiciste bien — expresa el de azul.

—Sí que me lucí — contesta de una forma algo burlona e irónica, ocasionando que el "conejo" rodará los ojos y negará con la cabeza.

—Y sigues siendo el mismo — refunfuña.

Ambos regresan con el grupo, los cuales solo veían todo lo sucedido pero no decían nada al respeto, aquel par les explicó cómo funcionaba aquello, siendo que la máquina ayudaría a centrar la energía de la barrera y romperla en aquella parte, utilizando la misma fórmula que la destruyó por primera vez en mayor cantidades, más que los hechizos lanzados tendrían el mismo efecto y permitiendo intensificar el daño de forma más rápida, potenciar la fórmula y reducir el tiempo, aunque comentaron que no sabían con exactitud cuánto tardaría en destruirla, el máximo tiempo que tenían calculado que se tardaría en destruirse era la mitad del tiempo tardado en la primera vez que se destruyó.

La espera fue lo más lago en su vida, siendo algo que los atormentaba e impacientaba a cada segundo que pasaba, para su suerte sus relojes no emitían ningún ruido sino estarían enloqueciendo por el tic tac que estos llegan a emitir y se escuchan más en los momentos de silencio. Fueron un total de unas cuatro horas y medias donde el solo ya se había ocultado por completo, que pudieron notar los destellos que salían de la máquina y como se mostraba como se cuarteaba aquella parte del escudo cubierta y se rompía cual cristal.

Ni lentos ni perezosos se adentraron a la mansión siendo guiados por la fantasma, quien les fue indicado donde se encontraban los objetos, Candy y Grenda casi lloraban al ver los primeros artículos de sus amigos, recordando aquel momento en que fueron transformados y Bill Cipher fue liberado en aquella dimensión, se mantenían ocultos entre las sombras, más que Deilon quien ya se encontraba en su mayor parte recuperado. se encargaba de crear unas ilusiones de aquellos objetos, las cuales durarían un aproximado de un día terrestre para que no nota en su ausencia a tiempo.

Todo iba tranquilo hasta que llegaron el lugar donde se encontraban los cuadros de Wenndy y Robin, pues al momento de ser retirados y reemplazados, unos 5 demonios se encontraban pasando por ahí, no fue necesario decir nada para que Asmael actuará rápido y apenas notándose cuando esté los derivó con un par de golpes en puntos estratégicos, en los cuales insertaba pulso de energía benigna lo que los debilitó de forma rápida y siendo derrotados en cuestión de segundos, las humanas se habían encargado de amarrar fuertemente a los demonios con sogas de pelo de unicornio y ocultarlos detrás de un sillón de considerable tamaño que se encontraba en aquella sala.

Siguieron con su recorrido por toda la mansión, como fue el caso de los cuadros de Wendy y Robin, llegaron a toparse con otros monstruos y demonios con los cuales llegaron a tener uno que otro combate unos más largos que otros, siendo ellos ganadores y neutralizándolos de la misma forma que los primeros cinco. Ya una vez llegando a la torre donde Dipper y Bill se quedaban juntos Tunia decidió frenar al momento de llegar a la puerta que les daría paso a esa habitación que daba entrada a las tres puertas.

—A partir de aquí ya no podía entrar por así decirlo — inicia a explicar la fantasma — si lograba entrar a lo que era la área principal e incluso las habitaciones de ambos, pero lo que era la oficina de Bill Cipher, esta estaba bloqueada con alguna clase de encantamiento, que no me permitía ingresar en esta, como se lo llegue a comentar en uno de mis informes, y como en otro aquí creo que se encuentra los objetos de estrella fugaz, el fez y la mano de seis dedos, siendo que no se encontraban en ningún otro lado.

—Tranquila Tinua, entendemos — reconfortó el de ojos rojos, quien dio un paso para abrir la puerta y entrar aquella habitación, de forma inmediata divisó la puerta negra.

Todos veían como este entraba en el cuarto y se dirigía directamente a aquella puerta de color negro que se encontraba en el centro de las otras dos, la que parecía haberse vuelto invisibles para los ojos de Zen, quien al momento de hacer caer su mano derecha al pomo, en esta se dibujó el símbolo del zodiaco de Bill que le permitió abrirla sin ningún problema sorprendiendo a la gran mayoría que no entendía cómo fue que logró abrir aquella puerta, a excepción de Asmael quien era el único que conocía el secreto de su comandante.

Zen dio una mirada rápida a la habitación notando el escritorio de caoba negra con toques dorados en la que se encontraba la lámpara y el porta lapiceros, se dirigió de forma automática aquel mueble, notando que aún costado se encontraba el bastón, por alguna razón decidió levantar la mirada, mostrando una mueca de espanto al ver la pared frente suyo.

—Estas mal Bill — mencionaba Zen al ver aquella pared llena de fotos del castaño — él no debería estar a tu lado.

Con eso último dicho tomo los tres objetos y guardarlos en su capa, para salir de aquella habitación que le dio tan mal espina en el momento en que entró, cerrando la puerta casi de golpe. De forma automática camina con su equipo dándoles una señal para decirles que ya se podían retirar, sin alegar nada lo siguieron, sabiendo de que si había conseguido los objetos buscados.

Por otro lado, en el inframundo rubio y castaño dormían plácidamente, sin notar como de forma leve el brazo del humano brillo muy leve por un breve momento en donde se encontraba la marca del zodiaco, que no pudo llegar a ser percatado a tiempo por el demonio.

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Y aquí se acaba el especial de disculpas y aún pido perdón por el haitus, pero descuiden no tengo planeado abandonar esta historia, ¿Así que qué opinan? ¿Les gustó? ¿Qué teorías se traen ahora? ¿Qué creen que pase después? ¿Cuáles es el secreto de Zen?

Pues gracias por leer, Con esto me despido.

Adiós XD