Sintió la suavidad de una almohada bajo su cabeza y las tibias, pero refrescantes, sabanas de una cama que estaba seguro de que no conocía, o eso creía, lo cierto, es que no estaba al tanto de dónde estaba, lo último que recordaba era caer rendido en un incómodo sillón.

Fue entonces que Erik escuchó un ruido en el baño, que sonaba como si alguien se estuviera muriendo ahí dentro, o solo eran esas arcadas que escuchaba que parecían salidas de la maldición de Hill House.

Se levantó sin dudarlo, y entonces caminó hasta la puerta del baño que estaba cerrada, la tocó un par de veces.

-¿Hola? Disculpa tengo un teléfono a mano ¿Necesitas que llame a un exorcista o algo? - preguntó divertido

-Cierra la boca-se escuchó la voz irritada de Janet quien abrió la puerta, dudando un segundo, no recordaba que ese hombre fuera tan atractivo- ¿Cual es tu problema? ¿Nunca amaneciste con resaca?

- ¿Resaca? Parecía que estabas invocando a Satanás- soltó con sorna apoyando su espalda en la pared al lado del baño- y respondiendo a tu pregunta, no, tengo demasiado buena resistencia para amanecer como los simple mortales

Solo había olvidado varias cosas, pero bueno, detalles.

Janet rodó los ojos con irritación, observando pecho desnudo de Erik, recordando que había amanecido en ropa interior antes de correr a vestirse y luego correr al baño a vomitar todo lo que comió la noche anterior, o tomó, parecía que solo tomó. No le cabía duda absoluta de lo que había hecho con Erik, aun tenía sus manos marcadas en su cintura.

- ¿Recuerdas algo de lo que ocurrió ayer? - preguntó ella mirándolo con una mueca

- ¿No es evidente? - cuestionó abarcando el cuarto con sus brazos

-Quiero decir, obviamente aparte del sexo ¿Recuerdas algo más? Como... no lo sé ¿Donde están nuestros amigos? O ¿Que hicimos antes de llegar a esta habitación?

Erik la observó de arriba abajo, luego se volteó y se sentó en la cama, colocándose nuevamente sus jeans, y su camiseta. Mientras hacía memoria, lo cierto era que no había olvidado todo lo que ocurrió anoche anterior ya que él no bebió tanto como los demás, pero si estuvo extrañamente mareado.

Aun que sí recordaba unas cosas más que otras, y una de las que más recordaba eran unas manos pequeñas y suaves, y una pequeña cintura.

-Erik

Y también recordaba la oscuridad, y una silueta medio dormida, un cabello con olor a shampoo de granada, y por último unos labios, unos labios suaves que sabían a gloria.

- ¡Erik!

-No- respondió mirando hacia otro lado con indiferencia- no recuerdo más ¿que quieres que te diga?

Los niños se habían ido a dormir a una habitación de la mansión Stark, ya que Tony no quería que estuvieran afuera vagando y decidió llevarlos a su casa. Jarvis se encargó de ellos y luego se fue a dormir, lo cual fue difícil porque Harry no dejaba de repetir que quería ir con Tony. Y cuando al fin consiguieron ir a dormirlos los otros fueron al comedor a tomar un poco más, y habían tomado bastante mientras jugaban poker (y Tony ganó casi todas las partidas), hasta que notaron que se quedaron sin alcohol.

En ese momento Tony observaba la puerta recostado con la espalda contra la pared del armario, comenzando a quedarse dormido sobre esta, su cabeza boteaba cada vez que comenzaba a cerrar los ojos, estaba demasiado cansado como para levantarse y pedirle a alguien que la abriera por afuera, tenía frío y no recordaba donde estaba la botella de licor más costosa que su padre tenía escondida solo para sus invitados especiales. A lo mejor la botella estaba guardada en esa caja de madera en lo más alto del armario, pero no llegaba, era demasiado pequeño para alcanzarlo. Ese lugar le recordaba cada vez que se enfurecía con su padre y sus excusas para no asistir a sus premiaciones o ferias de ciencias y se escondía ahí, y lloraba. Llevó sus rodillas hacia su pecho y las abrazó, el alcohol estaba haciendo que se pusiera sensible de nuevo, y lo odiaba.

No levantó la cabeza al instante al escuchar la puerta abrirse hasta que se encontró cerrada y tenía demasiado sueño para decirle al que acababa de entrar que no la cerrara.

- ¿T'Challa? - preguntó con un hilo de voz, esperando que estuviese ahí, porque era la única persona en ese momento que quería que lo abrazara

Entonces esa persona lo abrazó, por su cintura pegándolo a un pecho firme en el que hundió su cabeza, y unos brazos fuertes lo sostenían.

-T'Cha...- comenzó a decir, pero un dedo se colocó sobre sus labios

-Shhh...- lo silenció, justo antes de apartar su dedo de ahí, y sustituirlo por unos labios, besándolo, sintiendo como el otro no dudaba ni un segundo antes de corresponder

Erik sabía que no debía de aprovecharse del aturdimiento de Tony, y de la oscuridad y su poca capacidad para poder reconocerlo. Y no sabía porqué en ese momento, tenía que estarlo besando, lo único que Erik si comprendía era que quería hacerlo, que era lo único que deseaba en ese momento, al menos por esa vez. Y sentir esos labios suaves corresponderle era lo mejor que podía haber sentido. Dejó que sus manos apretaran más el pequeño cuerpo del menor para profundizar el beso.

-T'Challa- susurró jadeante Tony a la vez que se separaba del beso- Hazme el amor

Erik soltó una risita, desearía poder ver en la oscuridad para observar esos ojos grandes e inocentes pidiéndole algo tan desvergonzado. O justo como había hecho en la pista de baile en el club "The Fog" y en la limusina donde había movido sus caderas con torpeza intentando parecer sexy para T'Challa, siempre para T'Challa, pensó antes de poner más distancia entre ambos o iba perder la noción de lo que estaba sucediendo y luego sería incapaz de alejarse. Sacó un marcador permanente del bolsillo y tomó la mano de Tony, escribirndo su numero de teléfono que esperara fuera legible. Luego guardó el marcador y lo atrajo nuevamente a su pecho

-Shh- susurró balanceándose de un lado a otro

Sintió como poco a poco la respiración de Tony se iba alentando y como su cabeza caía sobre su hombro, y sin dudarlo le tomó en sus brazos con uno de estos tras sus rodillas y otro tras su espalda. Despues de unos minutos más lo sintió quedarse completamente dormido. Pensó en como iba salir de ahí pero entonces la puerta del armario se abrió y se dio cuenta que era Janet quien acababa de abrir y ahora lo miraba con una sonrisita algo ida.

-Hola, guapo- saludó la chica apoyandose en la pared, mordiéndose el labio- Estaba pensando que podríamor ir a divertirnos a solas... ¡Oh!- se sorprendió al ver a Tony y luego expresó con burla- Deberias llevarlo con su novio y a dormir, es muy tarde para que siga despierto- comentó moviendo los cabellos de la frente de Tony con ternura

-Hola, Janet- dijo un poco irritado pasando por el lado de ella, caminando directamente por el pasillo con el castaño aun en brazos, y entonces vio a T'Challa caminando por el pasillo buscando en las habitaciones y Erik sabía a quien buscaba

-Hey primo- le llamó y este en cuanto vio a Tony en sus brazos corrió hacia donde estaban o lo mejor que su mareo le permitía sin caerse- Ten- dijo depositando a Tony en sus brazos de una forma no tan tosca como solía ser él

-¿Qué hacias tu con él?- cuestionó, pero fue ignorado

- Solo no lo pierdas de vista, no es hora para que los niños anden despiertos

Y eso fue todo lo que dijo Erik antes de tomar la mano de Janet y guiarla hasta la salida de la mansion Stark.

-Nos vemos, primo, Janet y yo iremos a divertirnos un poco a solas

(...)

T'Challa encontró una habitación que tenía en la puerta un letrero colgado con el nombre de Anthony. Estuvo como diez minutos dando vueltas en la casa buscando cual sería la habitsción de su pequeño esposo a quien llevaba ahora en sus brazos. Abrió con cierta dificultad la puerta y entró. Sin prestar mucha atención al rededor, pero agradecido a su visión superdesarrollada que le permitía ver mejor que los humanos normales en la oscuridad. Dio unos pasos hasta la cama y depositó con cariño a Tony en ella. Besando su mejilla.

Fue entonces que escuchó que tocaban la puerta y levantándose con resignación caminó hasta esta y la abrió, encontrandose con un niño de cinco años.

-¿Que sucede, Harry?- dijo un tanto irritado, pasando su mano por su cabello

-No puedo dormir- indicó este observando adentro de la habitación

-¿Porqué no?

-No me gusta estar solo

-Peter esta contigo, no estas solo

-Pero quiero estar con Tony ¿Puedo dormir con ustede...-antes de terminar la puerta fue cerrada en sus narices. Y Harry suspiró alzandose de hombros- Al menos lo intenté- dijo para si mismo antes de volver a la habitación que comprtía con Peter

(...)

-¿T'Challa?- cuestionó Tony moviéndose medio adormilado sobre su cama, buscándolo

-Aquí estoy- dijo el mayor acercandose a él y abrazandolo por la espalda- descansa

-¿Vamos a hacerlo?

-¿Hacer que?- preguntó confundido paseando una de sus manos por los suaves rizos castaños

-El amor, te dije que quiero que me hagas el amor... - dijo el menor bostezando y cerrando los ojos por un segundo, hablando con una voz apenas audible- en el armario cuando tu y yo....

El  corazón de T'Challa palpitó fuerte al pensar en hacerlo, él quería, en especial ahora que estaba un poco caliente por los efectos del alcohol, pero su corazón le decía que aun no era momento.

-No, bebé- respondió besandolo- no vamos a hacerlo, aun no, vamos a dormir- dijo, pero entonces su atención se centró en la mano de Tony, la tomó y se dio cuenta que llevaba el nombre de Erik escrito y abajo de este su numero de teléfono

Frunció el ceño ¿Cuando Erik había escrito eso? Tony estuvo toda la noche a su lado. Excepto cuando fue a buscar esa botella, o al baño, pero dudaba que fuera lo segundo. En cambio, cuando fue a buscar la botella de alcohol Erik tambien despareció, y entonces le llama con Tony en brazos, entregandoselo. Un inexplicable sentimiento de celos se instaló en su pecho.

-T'Chal...- antes de poder continuar el nombrado le interrumpió besándole con fiereza, tomando su cintura y pegando su cuerpo al de él

Tony se apartó sintiéndose un poco más despierto, distinguendo la silueta de T'Challa por la luz de la luna. Se quitó su camiseta por sobre su cabeza con cierta dificultad al estar recostado. Y sintió como el mayor se inclinaba para besar su cuello, e ir bajando despacio por su pecho, acariciando desde sus caderas hasta su cintura. El wakandiano se acomodó entre sus piernas frotando cierta parte de su cuerpo que estaba comenzando a despertar contra su ahora pequeño esposo. Pero ante ese pensamiento se detuvo, por muy posesivo que se sintiera en ese momento, por mucho que Tony fuese su esposo, o por mucho que lo amara y ambos quisieran hacer el amor en ese momento Tony aun era pequeño, seguía teniendo catorce, seguía siendo ese pequeño inocente al que vio por primera vez siendo molestado por el idiota de Thompson.

E hizo una promesa, a Rhodey y a si mismo. No podía. Mas bien podía, pero no debería.

Se detuvo y apoyó su frente contra el hombro de Tony, sintiendo que este aun movía sus caderas, incitándolo a seguir.

-Pequeño

-Más- jadeó este en un susurró

-Deberíamos dormir- sonrió tranquilizador antes de besar su mejilla, hablando en un tono tan bajo que adormecía el cuerpo de Tony y sintió como este detenía sus movimientos de a poco, y su cuerpo perdía fuerzas- Estas exhausto- continuó diciendo, arrullandolo- descansa, mañana podremos seguir besándonos

Tony cerró los ojos, y su respiración se fue tranquilizando.

-Okey...- fue todo lo que dijo antes de caer dormido

T'Challa se levantó de encima de él y se sacó la camiseta sobre su cabeza, arrojándola a algún punto de la habitación, justo antes de volver a recostarse abrazando al menor contra su pecho observando el techo y durmiéndose cinco minutos despues, sin percatarse en que momento de la noche Carol y Rhodey entraron en la habitación con unos sacos de dormir.

-Deberíamos volver a la universidad ahora

Escuchó la voz de Janet sacándolo de sus pensamientos. Erik pudo notar que la voz de la chica sonaba algo fría, lo cual era muy extraño en su personalidad espontánea, alegre y amable la mayoría de las veces. Pero no le prestó demasiada atención, simplemente levantó su ropa que estaba regada por toda la habitación, y se vistió en silencio.

-Tienes razón- dijo a la vez que dejaba caer la camiseta por su torso- deberíamos volver

(...)

Tony estaba comiendo una tostada con mantequilla de maní, cómodamente sentado en el regazo de su novio. No podía decir que estaba decepcionado al enterarse que ahora estaba casado con T'Challa, porque no lo estaba para nada.

Carol estaba tomando un vaso con agua y Rhodey solo seguía mirando a la nada intentando recordar algo más. Jarvis estaba ahí de pie leyendo el periódico y preguntándose a él y a ellos, como demonios las fotos de filtraron de ellos en esa boda. Janet no pudo haberlo hecho, ya que ella aparecía en estas. Maldita prensa que siempre estaban metiendo sus narices en todos lados.

Tomo su jugo de naranja y le dio un profundo sorbo, tenía demasiada sed, el alcohol le había deshidratado.

Fue en ese momento en que la puerta se abrió precipitadamente y entró una mujer con un elegante vestido de color azabache y ajustado, su cabello castaño perfectamente ordenado en unos rizos que caían sobre sus hombros.

Tony literalmente escupió su jugo al verla, y rapidamente se limpió con una servilleta.

-¿Tia Peggy?

La mujer llevaba una mirada tan severa que podría hacer que el mismo presidente obedeciera sus ordenes. Ella al girar sus ojos y clavarlos en los de Tony estos se suavizaron al instante, pero sin perder la firmeza.

-Anthony- caminó hasta la mesa y el nombrado saltó de las piernas de T'Challa parándose rigido ahí como si fuera un pequeño soldado y es que su tía Peggy tenía esa aura de "un movimiento erróneo y saco mi arma", Peggy ignorando a Jarvis y a todos los presentes y apoyó sus manos en la superficie, solo entonces Tony notó que llevaba un periodico en la mano, y sacó su teléfono del bolsillo-¿Qué significa este mensaje que me mandaste anoche? "Tía Peggy, me casé con un príncipe, te quiere Tony"- lo citó- En ese momento pensé que estabas bromeando, pero entonces ví el periódico esta mañana- le enseñó el mismo periódico que él vio temprano ese día

Peggy hizo una pausa, pasando su mirada de Tony a T'Challa, y luego a Carol y Rhodey como si recién notase que se encontraban ahí desayunando, luego cuando volvió a observar al wakandiano su mirada se tornó gelida, demasiado, como si tuviese rayos laser en sus ojos y quisiera perforarle el rostro.

-Yo...- comenzó a decir Tony

Antes de poder continuar otra person entró tras ella, luciendo lo más tranquilo posible pero aun así con el ceño fruncido de forma tan marcada que debía dolerle. T'Challa le observó sorprendido, era Howard Stark, por bastante tiempo había escuchado cosas sobre ese hombre, que se había apropiado de vibranium que no le correspondía. Traicionando a su padre, para colmo, era el idiota que hacía que los ojos de su pequeño Tony derramaran lagrimas. Nunca había querído golpear a alguien que recién acababa de conocer, hasta ahora.

Y para lo peor era que llevaba el mismo periodico que le mostró Jarvis, Peggy y ahora este idiota.

-¿Qué mierda significa esto, Anthony?

-Howard- le regañó Peggy

-Ve a tu habitación- dijo en un susurro tan furioso a su hijo que este se estremeció reprimiendo el impulso de sentarse en las piernas de su novio y que este le rodeara con sus fuertes brazos para protegerlo

T'Challa se levantó tomando la mano de Tony.

-No fue culpa de Tony- dijo enojado- no tiene derecho...

-Tu eres el que no tiene derecho- le interrumpió poniendose frente a él- fuera de mi casa, necesito hablar con mi hijo a solas

-No pienso...

-T'Challa- habló Rhodey en voz seria, levantandose de su silla- vamos

Él sabía que si comenzaban a pelear ahora, el único que acabaría destrozado sería Tony, era mejor evitar todo aquello.

-¿Qué?-preguntó incrédulo el wakandiano

-Esta bien- dijo Tony esta vez, mirandolo con sus ojos enormes y suplicantes- deberías irte

T'Challa asintió despues de un intercambio de miradas con Tony, este lucíq suplicante, y comenzó a caminar hacia la salida, seguido de Rhodey y Carol quien se mantenía callada hasta que salieron de la mansion Stark.

-James...

-Estrá bien- habló este volteandose a ver a sus amigos, viendo sus rostros confundidos- Peggy está con él, creeme si Howard fuese a hacerle daño esa mujer es capaz de asesinarlo

Algo le decía a T'Challa que esas palabras no iban solo dirigidas a Howard, sino que para él mismo, si algun dia llegaba a dañar a Tony.

(...)

-¿Entonces que deberíamos hacer?- inquirió Carter mirándolo con una ceja alzada, mientras Jarvis prefería mantenerse un poco alejado de la discusión atento al joven Anthony quien tomaba su café con leche, ahora estaban el la habitación del menor y este estaba sentado en la cama mirando el suelo para no tener que enfrentar a su padre, quería preguntar donde estaba su mamá pero a lo mejor Howard volvió antes de lo esperado para gritarle sin que su madre se interpusiera, suerte que estaba su tía Peggy en ese momento

-Primero buscamos un abogado para que nos ayude con el divorcio, y luego firmamos y, bueno, lamentablemente tendremos que llamar al hijo de T'Chaka, y a este mismo para que firmen también, un matrimonio es entre dos y necesitamos a ambos para el divorcio- habló firme- no puedo creer que el mocoso me haya engañado para firmarle un permiso- decía paseandose por la habitación como un león enjaulado

Mientras ambos discutían Tony estaba sentado en la cama sintiendo un nudo formándosele en la garganta, mordiéndose el labio y apretando los puños, sus ojos se aguaban cada vez más, con cada palabra que soltaba su padre, como si estuviese haciendo todo lo posible por no romper a llorar frente a él.

-¿Tony?- preguntó Peggy al ver el estado del menor, sentándose a los pies de la cama, acunó el rostro de su niño en sus manos, lo que hizo que Howard se cuestionara como es que esa mujer podía lucir como una asesina en serie cada vez que hablaba con una persona pero se convertía en la persona más dulce cuando se trataba de Tony, siempre, besaba sus mejillas, solía cambiar sus pañales, lo hacía reír, era todo lo que el no podía ser para Tony

-Me... me quieren separar de T'Challa- susurró sorbiendo su nariz mientras una lagrima se deslizaba por su mejilla y se la secaba al instante- Me quieren separar de mi esposo, lo amo y a ustedes no les importa- dijo secándose las lagrimas que parecían no parar de caer por su rostro

-Por favor- dijo Howard rodando los ojos ante el berrinche de Tony- eres un mocoso Anthony, no sabes nada sobre el amor, tienes trece y te comportas como si tuvieras seis

Jarvis le miró indignado entonces le dio una taza caliente sonriendo cuando Howard se quemó lanzando una maldición, Jarvis respondió alzándose de hombros, como si no le importara en lo más mínimo, y Howard ignoró el hecho de que su hijo luciera devastado y aterrado ante la idea de perder a su príncipe.

-¡Tengo catorce! ¡Y que tu no tengas corazón no significa que yo tampoco tenga! - gritó Tony levantándose de la cama para correr al baño y cerrar la puerta de un portazo

Y entonces Peggy le dio un golpe a Howard en el brazo- el cual probablemente al día siguiente se convertiría en un enorme moretón-mientras sacaba su teléfono del bolsillo y observaba a los otros.

-Necesitaremos hablar de todas formas con T'Chaka, no creo que la familia de T'Challa se tome demasiado bien esto.

Unos largos minutos despues cuando Peggy consiguió que Tony saliera del baño donde se había encerrado lo sentó en la cama y comenzó a secarle las lágrimas con dulzura hasta que Howard volvió a hablar.

-Ahora dejenme hablar con Anthony

-Howard- comenzó a decir Peggy

-Es mi hijo, Margaret- le cortó lanzandole una mirada molesta- Y quiero hablar con él

Tony se secó las lagrimas observando como Peggy y Jarvis salían de la habitación. Y Howard se acercó a él.

-Vas a terminar esta tontería- dijo en un tono de voz tan tranquilo que hizo que su pecho le doliera

-No, no voy a terminar con nada, yo lo amo

-Solo estas pensando con tu hormonada mente de niño inmaduro que lo único que quiere es... ¿Qué? ¿Amor? ¿Tan necesitado estas, Anthony?

Tony abrió la boca para replicar pero Howard continuó.

-Si no lo terminas ahora, no voy a heredarte nada y te lo digo muy enserio, todo el dinero será donado a caridad. E industrias Stark será para Obadiah

-No me importa tu tonta empresa

Howard agarró la camiseta de Anthony y le miró fijamente a los ojos, perdiendo la paciencia.

-Eres un mocoso de catorce años, si quiero te puedo sacar de tu universidad, y no tendrás nada. Tu principe no estará para ti, porque no volverás a saber de él ¿Sabes por qué? ¿Quieres que te lo diga?

Tony negó, no sabia y no quería saber.

-Porque estará en prisión, por una violación a un niño de catorce, y eso no será culpa de nadie más que tuya

-¡No puedes! ¡No tienes pruebas!- gritó sintiendo que sus lagrimas comenzaban a firmarse de nuevo y a deslizarse por sus mejillas

-Oh, pero si puedo, y si tengo bastantes pruebas, te drogó, tu estabas vulnerable con esa droga o lo que hayas tomado anoche y él se aprovechó. Las marcas en tu cuello lo dicen

-¡No lo hicimos!- gritó desesperado -¡No puedes acusarlo de algo que no hizo!

-Puedo y lo haré, y con antecedentes así, no podrá ser príncipe, ni rey... Eso me lleva a preguntarte por ultima vez- dijo soltando su camiseta-¿Estas dispuesto a arruinar tu vida y la suya solo por el egoísmo de tenerlo a tu lado?

Y Howard con una sonrisa satisfecha vio como Anthony bajaba sus brazos, eso solo era una señal de que acababa de darse por vencido.

-Este matrimonio terminará y luego no volverás a verlo, ni una sola salida. Nada. Ya cuando seas mayor en unos años podrás, pero ahora... ahora esto termina

Y fue todo lo que dijo antes de salir cerrando la puerta tras de si.

N/A: Tercer cap de la semana! Y bueno esta es mi recompensa por haber tardado! Muchas gracias a los que aun me leen y comentan, muchas gracias por su apoyo, significa muchoooo! Amo leerlos a ustedes 💖💖

Se esta armando la grande con Howard pero bueno, pueden odiarlo y a mi.  Este Erik es un pillo. En fin muchas gracias por el apoyo. Los quierooo! Que tengan un feliz año!