A mí, lo que soy, seré y fui.

A Amelia, por permitirme terminarme de conocer.

A Tomás, por enamorarme otra vez.

A ustedes, por aún estar.

A él, por mi mano jamás soltar.

A ellos, porque no me pudieron matar y, para peor, me enterraron mal.

A mi muerte, que me permite escribir y ser inmortal.

Advertencia:

Al momento de poner este libro en tus manos es mi obligación ética advertirte sobre su contenido. No tomes esto como un posible spoiler, yo escribo intentando emular a la realidad. Mis letras suelen estar cargadas de verismos, que, con su crudeza, demuestran que mis protagonistas no son monocromáticos; aquí encontrarás gris en todo su matiz.

Primeramente, es posible que te topes con afirmaciones o situaciones que no entiendes o que simplemente no estás de acuerdo. Las mismas no reflejan mis ideales ni los de mis lectores. Este es un libro contradictorio y contestario, redactado con la finalidad de impactar y causar emociones, ya sean positivas o negativas, la autenticidad de sus personajes se cimienta en sus errores.

Quiero mencionarte que aquí encontrarás:

·Contenido sexual explícito.

·Diferencia de edades.

· Violencia sexual.

·Violencia física, incluyendo asesinato.

·Suicidio y autolesión.

·Consumo de estupefacientes.

· Discriminación, racismo y machismo.

·Contenido relacionado con la salud mental, principalmente depresión y crisis existenciales.

·Trastorno alimenticio.

·Muerte y duelo.

Este libro no tiene la intención de ser un manual o un ejemplo de vida. Nació simplemente con el fin de entretener.

Aclaración:

Reescribo este libro porque se lo merece. Lo escribió una tal Ann, allá por el 2.017, ahora lo redacto siendo Ann Stein, alguien que ha aprendido bastante en el camino. Me he enamorado y pateado una que otra piedra en el sendero, pero decido una vez más recorrerlo. Esta vez con la dedicación y el esmero que la historia amerita. 

Cuando volvía a PP, una sensación agridulce me invadía. Por un lado, el amor puro hacia mi primera historia. Por el otro, el amargo recuerdo de que quisieron estafarme usándola como rehén. 

Raudo me acordé de algo: ESTE ES MI LIBRO. Y puedo hacer con él lo que quiera. Le quito la tristeza, lo despojo del dolor que otros le pusieron y lo escribo de nuevo. 

Es mío y eso jamás cambiará.

¡Gracias por estar aquí una vez más!

Ann

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