Perdoname

(N/A: si no quieres leer esta parte y solo quedarte con la primera no hay problema. Besos ❤️)


El viento frio soplaba fuertemente azotando las ventanas abiertas de aquella habitación, silencio y oscuridad reinaban en aquella habitación.

Observó la pequeña mesita, sobre ella yasian los frascos de perfume, cremas, cepillos y demás maquillaje. Por un momento imaginó verla sentada molesta por que su delineado no queda perfecto.

Pero solo era eso, una alucinación.

Hacía ya dos días de su muerte y todo era un caos. No asistió al funeral No porqué no haya querido sino porque le fue negada la entrada.

Después de recibir la noticia de la muerte de su esposa y su no nato hijo la prensa hizo publico su Error. Salió a la luz la infidelidad de Leonardo Hamato.

El repudió hacía él era más que evidente, no por la infidelidad sino por la trágica y desdichada muerte de Karai Hamato.

Abril O'Neal entregó a la prensa pruebas de la traición de Leonardo a su esposa, acto que le trajo severas consecuencias.

Casey Jones fue condenado a veinte años de prisión por homicidio.

Oroku Saki y Oroku Rafael - padre y hermano - fueron quienes reclamaron el cuerpo de su hija y hermana,  Negaron la entrada a Leonardo quien trato hasta lo imposible de despedirse por última vez de su esposa.

Tarde se dio cuenta de su error.

Su família había querido ayudarlo, sin embargo él se negaba.

Parecía un niño llorando desconsolado, en sus manos tenía una prenda con aroma a flores silvestres perteneciente a su difunta esposa.

Dolía, valla que lo hacía.  tenía hematomas en el rostro y sangre seca en la nariz y parte del labio inferior, consecuencia de la paliza dada por su cuñado.

- si vuelves a venir te matare desgraciado - recordó - mi hermana no se merecía a un bastardo como tu, ¡tu merecías morir! -

- ¡eres un bastardo! -

- Leo te amo, como no tienes idea ¿me amas? - recordó las últimas palabras de ella

- Si, te amo - dijo como si pudiera escucharlo. se arrepentía inmensamente de no contestarle en ese momento.

Tirado en el suelo golpeaba una y otra vez el suelo tratando que su dolor físico reemplazara el interno, pero todo resulto imposible.

Se puso de pie y a tropezones salio de casa y subió a su auto, este parecía no querer encender, unos intentos más y al fin el auto sedio.

Condujo sin rumbo fijo e imagino su vida a lado de su amada e hijo.

su mente creo el escenario donde ella se enteraba de su embarazo, un milagro obviamente. La imagino llorando de alegría y tocándose una y otra vez el plano vientre.

Luego otra más donde la ayudaba a cambiarle el pañal a su pequeño o pequeña. Y así una a una, creándose una ilusión, hasta casi perder la cabeza. Piso el acelerador a todo lo que daba pasándose mil y una señal.

Soltó un gritó tan fuerte y vio unas luces acercándose muy rápido, luego un fuerte golpe y por fin....







.

.


.


.


.

Despertó.







.





.











- ¡Señor Leonardo! - exclamó horrorizada la azafata

Leonardo despertó de golpe soltando un jadeo fuerte, estaba sudado, agitado pero sobre todo asustado.

- ¡oh por Dios, que susto! - gritó dramática la chica.

Leonardo observó a todos confundido, al parecer estaba en el avión.

- señor Hamato hemos llamado a una ambulancia y a su esposa - dijo el piloto

- ¿esposa? ¿K-karai? ¿que ha pasado? -

Lo último que recordaba era estar en el auto y las luces acercarse a él de forma brusca y rapida, ¿fue un sueño? ¿karai vivía? 

- ¿fue un sueño? - preguntó a lo que sus acompañantes fruncieron el entrecejo - ¿que paso? ¡hablen!

Ambos individuos se vieron obligados a hablar.

- señor, nos llamó para que fuéramos a recogerlo y luego se quedo dormido y parecía estar soñando porque gritaba el nombre de su esposa y... ¡trate de despertarlo pero era imposible! Nos asustamos y la hemos llamado.....-

Leonardo sonrió, ella no estaba muerta.

((Haz las cosas bien y no lo arruines)) dijo su conciencia, una segunda oportunidad se le presentaba, confesara absolutamente todo a Karai. Mas relajado bajo del avión con un solo objetivo en mente.

El chofer se encargo de guardar su maleta en el auto, Leonardo tomo su móvil y marco su número

Uno.....dos......tres timbres y sintió el alma volver a él

- ¿Leo? - soltó el aire al escuchar su melodíosa   y preocupada voz de su esposa - ¿estas bien? Voy saliendo de casa

- ¡No! Estoy bien, fue solo una confusión amor estoy yendo a casa - trato de tranquilizarse -  

- esta bien, Leo - llamo

- ¿si? - pregunto en un susurro - tengo que hablar contigo -

Sin mas corto la llamada, Un tanto desconcertado espero a que su chofer lo llevara a casa no sin antes pasar por un obsequio para Karai.

Karai respiro tranquila al haber terminado la llamada, saber que el llegaría pronto  le dio valor para prepararse por lo que venia. Observo el test de embarazo con dos rayitas en el, estaba segura que había tomado la decisión correcta para los tres.

La noche había caído, Leonardo bajo del auto con un enorme ramo de flores en sus manos, sonrió al imaginarla sentada en el sofá frente a la chimenea leyendo un libro romántico o de suspenso.

No habían empleados  mas que el ama de llaves y el chofer, entro a su hogar dejando sus pertenencias  a un lado, solo quería verla a ella

- ¡Amor! - grito eufórico - ¡estoy en casa! -

- Hola Leo  - saludo ella  saliendo del comedor -

Sin poder evitarlo mas, Leo se acerco a ella llenandola de besos en toda su cara, la abrazo fuertemente temiendo que sea un sueño.

Karai un tanto extrañada por la actitud de su esposo se separó de el y lo miro con los ojos entre cerrados 

- No sabes cuanto te amo - dijo dándole un beso en la frente - toma - regreso por el ramo a la puerta y se  lo entrego - son tan bellas como tu -

Karai agradeció y sonrió triste  

- Leo, me alegra que estés bien - Karai lo tomo del brazo llevándolo  al comedor

- ¿celebramos algo? - pregunto al ver la mesa servida adornada con velas y rosas -

Ambos sentados frente al otro, Leo la observo a detalle y noto que no tenia ese brillo en la mirada, su sonrisa de borro de a poco

- Tenemos que hablar - dijeron al unísono-

Leo carraspeo -  Tu primero - alentó, Karai bajo la mirada y el corazón de Leonardo comenzó a latir mas rápido, un mal presentimiento lo invadió

- Leo, lo se todo - soltó -

Leo se puso palido

- Se que me engañas con tu secretaria - El quedo mudo -

¿Que?, ¿como?

- ¿de que habla...-

- Por favor, no trates de  verme la cara  - pidió

- Puedo explicarte - trato de tomar su mano sobre la mesa pero ella la alejo -

Su cuerpo comenzaba a temblar, el miedo a perderla lo invadió

- Bien, explicate - A el le sorprendía lo tranquila que estaba -

- Y-Yo No se, te lo juro, fue un momento de debilidad  y estaba molesto por los resultados yo solo creí que....Perdóname -  rompió a llorar - Se que no es una excusa y actúe por impulso, no sabes lo que daría por regresar el tiempo - la miro a los ojos, esos ojos ambarinos  no reflejaban mas que dolor -

- Pero no puedes, no se puede Leo. Debiste hablar conmigo, puedo entender que te dolio, créeme porque yo sufrí lo mismo que tu. Pero no por eso te trate mal ni me fui a revolcar con cualquiera  - trato de calmarse -

- Lo lamento en verdad, ¿como lo supiste?  - pregunto -

- Los vi en tu oficina, y si te estas preguntando porque me quedé callada, la respuesta es, creí que vendrías a casa arrepentido a confesarlo, pero no fue así - sus ojos se llenaron de lagrimas - fui una tonta al creer eso - Leo negó

- No lo eres. Cielo perdoname - suplico poniéndose de pie, se acercó a ella poniéndose de rodillas - Te lo suplico iba a contarte lo todo lo juro. Te amo te lo pido por favor no me dejes - comenzó a derramar lágrimas Karai también lo hacía lo amaba incluso había perdonado Ya su traición pero había perdido la confianza en él.

- No puedo Leo. Te amo pero Ya no confío en ti - declaró llorosa

Ya no confío en ti - se repitió en su mente

- por favor párate. Tengo algo más que decirte - pidió tratando de ponerlo de pie

Él se puso de pie ella lo convenció de sentarse nuenamente, cuando ambos estaban más calmados Karai procedío a entregarle una caja rectangular. Estando confundido la tomo, saco el contenido y quedó paralizado

Una prueba de embarazo positiva

- ¿Qué es esto....? - pregunto sin salir de su asombro observándola sonreír triste -

- Un milagro - declaró y sus ojos volvieron a llenarse de lágrimas

Estaba esperando un bebé el cual había resultado ser verdaderamente un milagro, ella no lo sabía, se había hecho la idea de no ser madre nunca pero su bebé llegó como un verdadero milagro.

- Al principio creí que era mi imaginación pero hace dos días lo confirmo el médico y ahora debo cuidarme muchísimo más - Leo la abrazo y beso su cabeza, penso que a lo mejor el bebé lo ayudaría a no separarse de él.  Ahora entendía el porqué de su tranquilidad. Estaba protegiendo a su hijo

- Mi amor tendremos una familia - Karai tocó su mano pero imágenes desagradables de él siendo le infiel con la pelirroja y lo apartó nuevamente. -

- Sobre eso - karai se puso de pie se acercó a  uno de los cajones en el almacén y saco un sobre, se detuvo a tomar aire y se giro a él - Por favor no compliques más las cosas

Pidió Leo saco los papeles del sobre, dolor culpa arrepentimiento eran de los pocos sentimientos que lo derrumbaban.

Disolución de matrimonio

La había perdido, a ella la madre de su futuro hijo, la mujer que amaba

- Mi firma Ya está ahí - hablo ella - si quieres puedes leerlos y luego........ - termino por ponerse de pie y marcharse a su habitación Leonardo mantenía la cabeza gacha sintiendo un dolor y un vacío  inmenso

Minutos después la vio arrastrar sus maletas, ella se hiria

- N-no tienes que irte. Esta es tu casa me iré yo - trataba de entablar conversación de nuevo con ella tal vez ganar un poco de tiempo y pensar en algo para hacerla quedarse - Te amo, no quiero perderte

- Me iré a casa de mi padre te estaré avisando de las visitas médicas para que, si quieres puedas acompañarme - dijo ignorando su último comentario - adiós Leo

No pudo hacer nada, no iba a armar un escándalo por la salud de ella, no quería alterarla de ninguna manera, solo se quedo viendo en la puerta como subía a su auto y se alejaban.


.







.





- No eres bienvenido a esta casa - le recordó por milecima vez Rafale a su ex-cuñado  -

- Rafael para Ya - ordenó Karai, salió de la casa lo más calmada posible iba a ser internada para poder practicarle la cesárea  -

Leo la observó y saludo con una sonrisa, había pasado tanto en los últimos meses, claro que los medios se enteraron de su aventura y fue víctima de acoso durante mucho, pero nada le importaba había acompañado a Karai a todas las citas medicas, le llevaba regalos al bebé que aún mantenía su género en secreto.

Su relación era buena, él le había pedido mil veces una última oportunidad pero ella se la negaba.

Después de quedarse esa noche solo lloro como un niño y luego de lamentarse mil veces más decidió no darse por vencido, Más sin embargo no había firmado. Seguían casados.

Dos días después tenía en brazos a sus pequeños gemelos, habían sido dos bebés.

Vaya sorpresa que se llevaron pero los amaban.

- Como los llamaremos? - pregunto todo en la cesárea había salido de maravilla -

Karai sonreía al verlos, sus hijos eran preciosos.
Ella por su parte había ido sanando de a poco. Le había demostrado haber cambiado pero aún no estaba segura de darle o no otra oportunidad.

- Me gustaría Daniel y Aiden - Leo sonrió

- Me encantan, Daniel y Aiden Hamato, mis dos milagros -

Al llegar la noche decidió quedarse a cuidar de sus pequeños y de ella.

- Son tan bellos - dijo contemplandolos - al igual que su madre, prometo que haré lo posible por recuperar su confianza y volver a ser una familia. Una real. - dejo un beso en la cabecita de cada uno de ellos -

Tal vez algún día volverían a estar juntos, de eso se encargaría aunque se le vaya la vida en ello. Es una promesa que les hizo a sus hijos y la cumpliría.


.




Holaaa.

Escribi esto hace más de dos meses creo si no es que más.

Decidi hacer esta continuación porque llamo mi atención hacerlo y pues aquí está. Cómo dije al principio no es necesario leerla.

Así que se las dejo para que no piensen que soy malvada al matar a Karai 😂😂😂

Na, repito no es necesario leerla si les gusto solo la primera parte adelante. Si no son bienvenidos besos.






Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top