Perdon

Siempre me pintaron a la tristeza como algo monetario, algo tan insignificante del cual podías sacar provecho cuando era ajeno a tuyo.
Por eso el concepto de la depresión fue un golpe muy jodido para mí.

No sean jotos, admitan como los machos que deben de ser. La depresión está demasiado endulzada en la literatura moderna. Ya no hay gente ,como mi buen Juan Rulfo o Gabriel García Marquez ,ellos no iban con mamadas.

Porque la depresión no te hace solamente ver tristón con una cara de soledad intensa. Tampoco te hace de repente decir como todos te odian y que el mundo es una mierda.
Perdonen lo que les voy a decir pero no chinguen, eso es pura plática de mierda.

La depresión es silenciosa, demasiado. Hay un momento en donde simplemente te dejas arrastrar, donde simplemente llegas a anhelar sentir algo más que las voces de tu cabeza.

Otra cosa, esa mamada de las voces es verdad pero no como la pintan. Sabes perfectamente en momentos como esas voces son solo tú, lo sabes tan jodidamente bien que duele, duele saber que tu mismísimo te estas chingando de esa manera pero aún a pesar de eso lo sigues haciendo, porque no tienes suficiente con tu dolor necesitar siempre explicarlo, necesitas demostrarlo, necesitas callarlo, necesitas existir.

Perdona jefa, siempre te escuchaba decir el como las personas que decidían suicidarse eran estupidas y, sinceramente, sería mejor para mi alma escucharte negar mi maldita existencia que verte llorar.
Se que no llorarías en público, puede que ni siquiera en privado. Pero prefiero que me maldigas a que te ahogues con el dolor de saber que la débil siempre fui yo.

Perdóname padre por echar a perder tus últimas esperanzas de tener a alguien exitoso en la familia. Lo siento por nunca haber podido ser mejor, por ser tan estúpidamente flojo y aburrido, por no poder hablar con las personas sin sentir como el mundo da vueltas. Tú no llorarás cuando me vaya. Lo sé perfectamente, pero está bien, no deseo que llores de todos modos.

Se que soy egoísta siempre lo he sido, pero una parte de mi desea, anhela, saber si llorarían. Llorarían por mi muerte? Llorarían por todo lo que perdieron para criar a un cadaver?

Lo siento familia. Lo siento por nunca saber como parar sus discusiones. Lamento nunca haber sido bueno para la interacción ni la intervención. Seguramente la mayoría de ustedes piensan que estoy demente, me han visto hablar sola demasiadas veces, pero la verdad... simplemente quería sentir algo, que alguien hablaba sin necesidad de gritar. Sin necesidad de tener que decir lo que pensaba por que todos piensan igual.

Hermanos. No pediré perdón a ustedes. Ni siquiera leerán esta carta por más que padre les ruegue porque ustedes son orgullosos y hacen orgulloso a padre. Esta bien.
Prefiero eso a ser peso muerto en esta familia.

No me gusta estar en el silencio, el silencio me hace sentir sola, el eco me hace sentir demente. Pero detesto también estar en un lugar grande. Los ruidos, las miradas, detesto tanto no saber que dicen o a quien se lo dicen.

Lamento por dar tan mala imagen a nuestra familia, perdón por nunca poder hacer lo que querían. Soy estupido, soy ignorante y arrogante. Lo se y por eso quiero que no lloren, no lo merezco.

Supongo que cuando llegas al punto donde hasta tu misma te rendiste de tu persona es el momento donde deberías pedir ayuda, pero para que? No es como si nada fuera a cambiar, solamente te enseñan a ignorar el dolor que sientes y a drogarte con la felicidad e ignorancia que puedas lograr.

Perdona por siempre decir cosas innecesarias. Se que siempre me dicen que detestan como hablo de mas pero es algo que simplemente no puedo parar.

Perdona por nunca haber podido corresponder sus maneras de demostrarme afecto por palabras.

Perdon por no saber quien soy.

Perdón por hacerles perder tanto, como si fuera la única danzante de este baile que llamamos vida.

Pero hay un punto donde todos quieren desaparecer. Hay un momento en tu tristeza donde simplemente quieres rogarle a cualquier dios, no que te haga feliz de nuevo, si no que ya acabe todo lo que sientes, que ya no quieres seguir intentando luchar por algo como la vida de mierda que llevas.

Porque la vida no tiene medida, eso es lo que la gente olvida. Nadie mide su dolor de la misma manera, ni se ahoga igual.

Lo siento por tenerles que dejar mi inútil cuerpo a que se deshagan de el. Seguramente servicios sociales e investigaciones privadas les molestarían mas que decir que termine muerta de manera accidental.

Si por alguna razón si leíste esto, perdón. No se si eres mi madre o mi padre. A lo mejor en realidad esto nunca llego ni llegará a ellos. Aún así perdon por tenerte aquí leyendo vacías palabras que mi siquiera yo se si siento.
Hace tiempo que no entiendo siquiera como es que las demás personas saben que sientes.

Gracias por leer mi dolor, pero desearía que no lo hubieras hecho. Después de todo cuando lo hayas leído por completo las pastillas ya habrán hecho efecto.

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