OCTAVIA

Un día. Sólo ha pasado un día y la foto ya está en internet.

Yo que siempre soy tan precavida en estos asuntos, se me pasó por alto que alguien nos podría ver y ya es tarde.

Lo más probable es que todos ya todos la hayan visto.

Quisiera darme de cabezazos contra una pared por lo tonta que fui.

– ¿Es que no puedes hacer nada bien? –me pregunto frustrada frente al espejo del baño del hospital. Pues está claro que la respuesta a eso es no.

Aunque si me pongo a pensar en el lado positivo... No hay ningún lado positivo. En las fotografías se distinguen muy bien nuestros rostros y para rematar después hay fotos de Jesse bajándose de mi auto. No hay dudas de que es él.

Claro, también se supo que mi hermano tuvo un accidente y por eso estábamos ahí.

Dios, ni siquiera me quiero imaginar todo lo que tienen que estar inventando. Si tal vez las fotografías no fueran tan claras podría inventar alguna excusa que resulte creíble. 

Sí, en definitiva soy estúpida. No había ninguna necesidad de besarnos a plena luz del día en un lugar público, pero tratando de ser un poco más positiva, hoy vuelve Gabe a casa. Y eso me tiene demasiado emocionada, puesto que me da algo de desconfianza que siga más días aquí.

Al menos nadie me ha enviado más fotografías amenazándolo o algo por el estilo, pero yo no me fío ni un poco de Caden y lo que pueda llegar a hacer, aun no tengo pruebas confiables de que haya sido él, pero mi instinto me lo dice. 

Me mojo un poco la cara para refrescarme y mi mente vuelve a esas dichosas fotografías y a lo que significan para mí.  

Me dañarán la imagen y estaré en la ruina en cuestión de minutos. Las personas me odiarán.

Y todo porque me besé con el ex novio de una de mis amigas.

Maldita sea Octavia, no haces nada bien.

La noticia me la dio Gabe hace unos minutos y desde entonces no he querido revisar mi celular, incluso decidí apagarlo. Si hay alguna emergencia, encontrarán otra manera de contactar conmigo, pero yo no quiero revisar mis redes. Seguro está lleno de insultos o cosas por el estilo.

Y todo por mi culpa y la estúpida idea de querer besar a Jesse por última vez. Ahora hay pruebas de ello y mi reputación está por los suelos.

Si antes ya había gente que me odiaba por no tener el suficiente talento y haber quedado clasificada para estar en la banda, ahora les acabo de dar más material para que lo hagan.

Debería de empezar a pensar en las consecuencias de mis actos, seguro que eso me haría bien.

Decido salir del baño porque no me puedo esconder por siempre de mis padres y de mi hermano y he decidido decirles una verdad a medias.

Porque no hay manera en el mundo en el que les confiese sobre el acuerdo que teníamos y todo lo que eso implicaba. Sigue siendo mi intimidad y así debe permanecer.

Reviso mi celular que sigue apagado y salgo del baño para encontrarme con mis padres y Gabe.

(...)

Cuando llego a la sala en donde Gabe sigue recostado en la camilla, veo que mis padres ya están ahí. Esperando a que diga algo, supongo.

–Yo sólo diré que ya lo sabía y no necesitaba de ninguna fotografía para comprobarlo –dice Gabe con una sonrisa de satisfacción – ¿Ves que no mentía papi?

Mi padre me observa en silencio y no sé qué reacción esperar de él. Nunca ha sido de los típicos padres sobreprotectores que muestran en las series y películas y jamás hemos tenido discusiones o malos entendidos tan graves. Siempre ha sido permisivo conmigo y sé que quiere lo mejor para mí. Aunque también es cierto que la única relación formal que he tenido fue con Jason y él ha visto cómo su muerte me ha afectado. También sé que quería a Jason como a un hijo más.

–No tienes que darnos ninguna explicación, cariño –dice mamá

– ¿Ah, no? –pregunta Gabe luciendo decepcionado

–No, no tiene que darnos explicaciones si no lo quiere. Esas fotografías se han filtrado y si ella no nos quiere hablar de eso, no la obligaremos.

–Su madre tiene razón, no la obligaremos. Además no sé si quiero saber lo que ocurre entre ella y ese chico. Creo que aún no estoy preparado para eso. Esas fotografías hablaron por sí solas. Me dieron hasta escalofríos... Sólo espero que te cuides, hija

–Papá, por favor... No quiero hablar del tema

–Pero yo sí quiero saber que pasa –dice Gabe sonando como un niño pequeño, sino estuviera tan nerviosa tal vez me habría reído por su expresión

–Gabe, por favor. Ya eres grande –dice mamá observándolo –mejor dime que comida quieres que te prepare cuando volvamos a casa

Agradezco ese cambio de tema y casi voy a abrazarla porque entonces cada uno propone su plato favorito y ese es el nuevo tema de conversación.

Bendita seas mamá.

(...)

Una vez que le dan el alta a Gabe, yo hago hasta lo imposible por que use muletas para caminar. Él dice que no es necesario y que puede caminar perfectamente, pero yo me doy cuenta de que se quejó en cuanto puso un pie en el piso.

Ayer lo vinieron a ver Tessa y Barbara un momento. Y más tarde vino Lindsay. Tuve que inventar una excusa por la cual no vino Blair.

Todas lucían como siempre y se comportaron como si nada hubiera pasado, pero sé que aún recuerdan lo que le dije a Blair. Y por supuesto ella no respondió a mi mensaje y ahora que está reciente lo de la foto y apagué el móvil mucho menos me he comunicado con ellas.

Pobre Bash, seguro el pobre ya está pensando en una manera de solucionar el daño causado por esas fotos. Porque todos sabemos que en estos casos la mayor parte del odio lo recibiré yo.

Yo fui la que se besó con el ex novio de una amiga y seré vista como una especie de villana y ya estoy más o menos mentalizada para el tipo de comentario que tendré que recibir. Supongo que perra o zorra será de los comentarios más suaves que leeré.

Aunque a Lindsay no le afecte en lo más mínimo todo esto, porque ella jamás sintió algo por Jesse, pero eso los demás no lo saben.

Enserio había personas a quienes les gustaba la pareja de Jesse y Lindsay. No duraron mucho, pero salieron de forma oficial y se tomaron una que otra foto en donde se veían muy bien juntos.

Y ahora de la nada salen estas imágenes. Yo no hice las cosas de manera correcta. Me merezco todo lo que me pase.

Enciendo mi celular, sólo porque quiero hablar con alguien.

Entonces veo todos los mensajes que tengo sin leer de las chicas y decido llamar a Tessa, porque sé que sin importar que pase, ella estará de mi lado.

Me contesta al primer tono, como siempre.

–Vaya, ¿así que ahora no me ignoras? ¿Sabes cuantos mensajes te envié? Pues te diré que muchos, porque ya perdí la cuenta. Pensé que te había pasado algo, pero luego Gabe me dijo que decidiste apagar tu celular y me tranquilice un poco... Así es, tuve que recurrir a tu hermano menor para saber de ti...

–Lo siento, ¿sí? Apagué mi celular un momento y de repente me aparecen todas esas notificaciones de golpe. No sabía que me extrañabas tanto Tess, nos vimos ayer –respondo intentando sonar divertida y relajada, pero sé lo que dirá a continuación

–Vi las fotos Octavia, de hecho las vimos. Todos. ¿Qué tienes que decir al respecto?

– ¿Fotos? Bueno, hay muchas fotos mías por internet. ¿Cuál es la diferencia ahora?

–Sabes a lo que me refiero, tontita. Una fotos tuyas con Jesse, besándose afuera del hospital. No te hagas la tonta, sabes a lo que me refiero

Yo decido sentarme en mi cama y tomarme el tiempo para pensar en mi respuesta. Porque claramente no sé cómo abordar el tema.

–Oh... así que te refieres a esas fotos...

–Cuando quieres eres muy desesperante, por supuesto que me refiero a esas fotos. Dime algo, ¿están saliendo? ¿Lo llevaste a conocer a tus padres? ¿Estás locamente enamorada de él y ahora salen de manera oficial?

No puedo evitar sonreír al escucharla hablar tan rápido y se nota que sigue siendo una romántica empedernida, lamento ser yo la que mate sus esperanzas.

–Ninguna de las anteriores, de hecho sólo fue un beso. No tuvo gran importancia y no estamos saliendo, de hecho ya no hablamos.

Aunque me llegó ayer por la noche un mensaje por su parte en el que me pide que sea cuidadosa con Caden y que no sea tan imprudente. También me decía que podía escribirle si necesitaba a alguien con quien hablar.

Un bonito detalle por su parte, así que mi respuesta fue corta y sencilla: Gracias, lo tendré en cuenta. Tal vez pude haberle escrito más, pero no tengo intenciones en escribirme con él.

He decidido emplear las mismas reglas que con cualquier otro chico con el que me haya acostado. Fingir que no ocurrió nada, es muy poco probable que nos volvamos a encontrar y fuimos claros desde el inicio. No necesito nada más de él y mientras menos piense en él, mejor. 

–Muy bien, te aviso en caso de que no hayas visto nuestro grupo de WhatsApp que mañana tenemos una reunión para ver nuestro calendario en los próximos meses. Sabemos que hoy Gabe llega a casa, así que por eso será mañana. Ni te imaginas lo sorprendido que estaba Bash cuando vio las fotos. Fue tan cómico que Barbie le tomó una foto. Te la envío ahora...

–Deberíamos de llevarlo a un día de spa. Siempre está tan tenso y no lo entiendo. Nosotras nos portamos bien dentro de todo. No es como si tuviera que irnos a buscar a alguna fiesta ebrias o algo así. Somos tranquilitas 

Tessa ríe al otro lado de la línea telefónica y me tranquilizo cuando cambia el tema de conversación. Me habla de su nueva amiga Brooke y para cuando finaliza nuestra llamada me encuentro más relajada y tranquila.

Me alivia saber que cuento con su apoyo. Reviso un poco por encima algunos mensajes que me han llegado y les respondo a las chicas por el grupo de WhatsApp y también a Elijah. Quien también tenía curiosidad por los fotos con Jesse.

Me tiendo por completo en mi cama, cierro los ojos y lo imagino a él.

A Jason.

¿Qué pensaría él de todo el tema de las fotos?

Una pregunta que sigue rondando por mi mente es, si él aun siguiera vivo, ¿aun estaríamos juntos o habríamos terminado y habríamos quedado sólo como amigos?

Tengo muchos recuerdos que lo incluyen a él y por supuesto que lo quiero y siempre lo haré, pero a veces me encuentro a mí misma haciéndome este tipo de preguntas y luego me siento culpable.

–Dios, Octavia. Por supuesto que habrían seguidos juntos. Nadie te querrá tanto como él –me regaño a mí misma.

Y luego me doy cuenta de algo que me pone aún más nerviosa que las críticas que puedan hacerme desconocidos.

¿Qué pensarán los padres de Jason de todo esto?

(...)

Y cómo si los hubiera invocado con el pensamiento, los padres de Jason están invitados a la cena de bienvenida de Gabe. Seguro mis padres pensaron que sería una increíble idea invitarlos justo ahora.

Los oí en cuanto llegaron y aun no me atrevo a bajar, tengo un poco de temor sobre que puedan cambiar su opinión sobre mí, aunque mamá me llamó y no me queda de otra que salir de mi escondite.

–Hola Octavia, ¿cómo estás? –pregunta la señora Nadia quien se levanta a abrazarme

–Hola, yo estoy muy bien... ¿y usted?

–Magnífico, querida. Estuve todo el día con mis hijos. Matt está algo cansado y no pudo venir, pero te envía muchos saludos.

–Muchas gracias, espero que esté bien... Hola, señor Steven –digo saludando ahora al padre de Jason, quien de igual manera se levanta para saludarme

–Octavia, me alegra ver que estés tan bien...

Luego llega mamá y dice que podemos ir al comedor, al menos nadie ha mencionado la dichosa fotografía por ahora y puedo comer tranquila.

Hasta que de repente, en la televisión en donde estaban dando noticias pasan a la sección de famosos y mencionan mi nombre, entonces casi todos en la mesa voltean en dirección a la pantalla y veo el título que ponen:

Octavia Morgan y su nuevo novio.

Bueno, al menos el titular no es tan malo. Además llama al chisme porque obviamente no dicen enseguida el nombre de con quién estoy. No miento cuando digo que todos en la mesa guardan silencio para escuchar lo que dice esa nota de las noticias.

¿Por qué tienen que hablar de mí en un noticiero?

Prácticamente hacen un resumen de mi nula vida amorosa, dicen que salí con Jason hasta que él falleció y luego que se ha rumorado que salí con Elijah Lawrence para llegar a la actualidad que sería Jesse.

Dicen que él era novio de Lindsay y que su relación duró unas semanas antes de que rompieran definitivamente.

No dejan de enseñar esas malditas imágenes y de decir que se nos ve muy cariñosos en esas fotos. Yo quería tener recuerdos de ese beso y ahora prácticamente todos lo tendrán.

Gabe es el que se levanta y cambia el canal a uno que está dando una de las tantas películas de Chucky, el muñeco poseído.

Cualquier cosa es mejor que seguir observando esa nota que hablaba de mí. Incluso si ahora miramos una película sobre un muñeco que anda persiguiendo a las personas con un cuchillo. 

Por favor, ¿enserio se supone que eso da miedo? 

– ¿Así que ese chico que estaba en el hospital era tu nuevo novio? ¿No era un amigo de Gabe? –pregunta la señora Nadia observándome y yo hago mi mayor esfuerzo por no pensar en él en este momento. Ni en todo lo que hemos hecho.

Mi mente pasa de estar pensando en Chucky a pensar en Jesse. Seguro la comparación lo ofendería. 

Cuento hasta diez en silencio y recién luego de un momento me siento lista para responder

–No somos novios. Está claro que lo están malinterpretando...

–Pero esas fotos de ustedes... se están besando. Eso se puede ver claramente. ¿Tan rápido te olvidaste de mi Jason? –responde ella sonando dolida y decepcionada y eso no me gusta

–Yo no me he olvidado de Jason –respondo a la defensiva y un poco molesta –usted sabe que parte de mi vida es pública y no tengo la manera de controlar lo que hablan de mí...

–Tiene razón, cariño. Octavia no controla eso –interviene su esposo tomando la mano de su esposa para tranquilizarla

–Además Jesse sí es mi amigo –objeta Gabe desde su puesto

Yo dudo mucho que lo sean, pero suena convencido.

–Me molestan ese tipo de notas, Jason no debería de ser mencionado por gente que ni siquiera lo conoce. Me parece ridículo que quieran emparejar a Octavia con alguien más teniendo en cuenta su historia con mi hijo. Nadie estará a su altura jamás... Jason no puede ser reemplazado...

–En eso tiene toda la razón, Jason jamás será reemplazado. Nunca he pensado en hacer algo así –respondo yo y en ese momento ella me mira y parece un poco más tranquila

Si hay algo que me molesta más que esas notas de prensa, es que la madre de Jason se crea con el derecho de opinar sobre cómo continúo con mi vida, pero no me voy a poner a discutir con ella.

Y cómo no es la primera vez que deja caer comentarios así, ya sé de qué forma tranquilizarla. Siguiéndole la corriente. Aunque en este caso, no mentí. Sé que Jason no es reemplazable y nunca he creído eso.

Simplemente me apetece de vez en cuando tener sexo y pasármela bien un rato. Jamás he tenido problemas con eso y no pienso dejar que esas fotos lo arruinen.

De igual forma lo que tenía con Jesse ya se acabó.

Mis padres empiezan a conversar sobre lo rápido que ha pasado el año y luego el tema de mi supuesta nueva relación queda en el olvido.

Lo cual agradezco, porque así puedo comer en paz y luego ir a mi habitación en donde podré estar sola y en silencio.

Me despido de la señora Nadia y el señor Steven y me dirijo enseguida a mi habitación. Mi único lugar seguro en este mundo.

Bien, exagero. No es mi único lugar seguro, pero me encanta estar aquí.

Tiene una ventana que da a la calle y una cama de dos plazas que ocupa casi toda la habitación. Enciendo la televisión y recuerdo que no me he metido a la aplicación por la que hablo con James.

James.

Seguro ahora mismo puedo ponerme un poco al día con él. Lo que se traduce a unas cuantas mentiras piadosas por mi parte, porque sigue sin saber quién soy realmente, pero a pesar de eso consigue hacerme sentir comprendida y a gusto. Aunque sólo sea a través de una pantalla. 

Abro la aplicación y en cuanto veo que ya tengo varios mensajes suyos, sonrío.

Qué bien me siento de tenerlo a él, creo que ni siquiera se imagina de cuan agradecida estoy con él y de esta aplicación. 

Cada vez estoy más segura de que en algún momento nos conoceremos.