Kord: Eli, se que te agrada y todo, pero creo que esto ya llego demasiado lejos. —exclamo dejando de lado el mantenimiento de su meca para dirigirse al peliazul:— que tengas una amistad con el, eso lo entiendo..pero esto.

Eli: lo se, la verdad es que no se que hacer.

Kord: esto no me esta gustando, tengo un mal presentimiento. —al decir esto Eli se puso triste, desde lo de Twist no había escuchado al troll decir sobre sus males augurios, desde ese día prometió que le haría caso al troll sobre ello:— creo que ya es tiempo de que cortes comunicación con ese guardia. —la simple idea lo hizo estremecer, respondiendo rápido ante la petición del mas grande.

Eli: ¡no puedo Kord!, le prometí que lo ayudaría siempre que lo necesite...además que su información es clara y precisa, muchas de nuestras misiones contra Blakk son gracias a el, y lo sabes. 

El troll observo el suelo analizando lo dicho por el Shane, después de unos momentos de silencio el mas grande dejo salir un suspiro cansado.

Kord: bien, seguiremos tomando la información de este guardia, ¡PERO!. —apuntando al peliazul en reprimenda:— vas a mantener distancia con ese tipo..y se lo dirás a los demás, ¡hoy!.

Eli no tuvo problema con ello, es mas, ya estaba planeando decirles al grupo sobre su informante. El único que sabría sobre la interacción demasiado cercana será el troll, es que no tuvo a quien mas acudir sobre el tema, aunque el troll no es muy experto en temas de este tipo que digamos.

Aun se siente extraño después de lo del beso, es decir, si se sintió bien a pesar de su situación, no se lo diría al troll porque seria tomado de los cabellos, pero jura que el beso fue de verdad; fue tierno, suave, fue un beso con sentimiento, al recordar lo sucedido esa noche inevitablemente sonrió como bobo.

Kord: ¡¡NO PIENSES EN ESO ELI!!.

Eli: ¡¿eh?!. —saliendo de aquel recuerdo a la realidad, el troll lo miro severo.

Kord: no me lo puede creer Eli, ¿te enamoraste de ese guardia?. —aquella pregunta lo hizo retroceder un paso con vergüenza.

Eli: ¡¿q-que?!, yo no.

Kord: ay no. —se quejo negando con la cabeza:— ni siquiera sabes quien es en verdad...no sabes cual es su rostro. 

El peliazul se mantuvo en silencio, mirando al suelo nervioso, de seguro estaba rojo como nunca. Después de otro momento de silencio el troll soltó otro suspiro cansado, dándole la espalda se concentro nuevamente en su meca.

Kord: solo ten cuidado con el Eli. —fue lo único que dijo antes de volver a trabajar.

Eli asintió, salió del garaje para entrar al refugio, en estos momentos los demás estaban en caverna comercial buscando refacciones y demás cosas. Se recostó en el sofá para tratar de relajarse, sus babosas salieron de sus municiones para rodear a su lanzador, mas sobre todo Berpy que gruño un tanto molesta en su hombro.

Eli: lo se lo se...tendré mas cuidado la próxima vez. —al ver los ánimos de su lanzador la infierno dejo sus quejas, la verdad es que desde siempre la babosa no confía para nada en el guardia, a veces llega a morder a Eli cuando este se acercaba demasiado a Guardian.

Para Berpy es el mismo escenario que con Twist, primero se gano la confianza de Eli, después se hizo su amigo, luego fue mas cercano y al final la traición; Aun le es amargo recordar aquella noche después de la emboscada, Eli se puso tan triste que no pudo dormir. No hay a quienes mas deteste que las personas que lastiman a su lanzador, mas sobre todo Twist, por suerte el daño que causo no rompió la fuerza de voluntad del peliazul.

Además que a notado que siempre carga consigo una babosa granada, Eli tal vez no lo noto puesto que aunque a veces se coloca en el hombro del guardia es muy tranquila, al principio le dio confianza, pensó que el sujeto no le gustaban las malvadas, trato de acercarse a la dichosa granada pero cuando lo tenia cerca esta se metió en el cartucho de munición, evitando a toda costa a la infierno; esto solo le recordó aquellas veces que Locke evito a Doc.

Estaba demasiado metido en sus coincidencias, igual Eli estaba distraído recordando lo sucedido esa noche, notándose su sonrojo por aquel momento; no se percataron que Trixie y Pronto llegaron hasta ya después de que estos comenzaran a realizar sus tareas de siempre.

Eli suspiro cansado, es el momento de decirles la verdad...casi toda la verdad.

Tal vez no fue buena idea trabajar doble turno en la fortaleza, pero es que era lo único que lo alejaba de aquella estupidez que cometió. Se a limitado a información que pueda enviar por la tableta, evitando las reuniones con Eli en el bosque, no podía volver a verlo a la cara después de haberle hecho eso. Bien hecho Twist, no solo le volviste a dar la idea de una amistad, si no que encima lo enamoras y tu por igual. 

Se froto el rostro con ambas manos, estaba tan cansado de todo esto. Esta mañana estuvo buscando alguna información mas valiosa, al enterarse de que el Dr. Blakk envió a Diablos Nachos a Colina Topo no dudo en enviarle la información a Eli, solo espera que el peliazul logre alcanzar a Nachos a pesar de no saber para nada para que Blakk envió a ese demonio a ese lugar.

A estas alturas ya no se molesta o busca recordarle al mayor que es su aprendiz, es mas, esta completamente seguro que este olvido que tenia un aprendiz, esta tan metido en su trabajo que apenas se puede decir que tiene tiempo para si mismo; admite que la voluntad de este hombre es increíble, a pesar de todo lo malo que puede causar y lo fácil que se le puede odiar, se admite que en una pequeña parte de su ser lo respeta, mas sobre todo por como creció y lo que llego hacer por su cuenta.

Otra verdad es que ya no le importa mucho su seguridad, y es que no importa el grado de la información si es importante la envía al Shane, las cosas han estado muy agitadas en la fortaleza pero de no ser así de igual forma estaría mandando información sin medir las consecuencias de ello; lo importante es que Eli tenga dicha información, y que además no sepa quien es el que le a estado dando dicha información.

Dejo salir un bostezo largo y cansado, no a dormido bien desde lo de aquella noche, de todas formas se concentro en su trabajo al recontar los contenedores de agua oscura en el almacén mas profundo de Blakk, al terminar estiro los brazos antes de salir del lugar y viajar hasta la oficina del mayor.

Al entrar Maurice estaba revisando junto con el mayor un formulario, seguramente de lo mismo, el Dr. Blakk ahora quiere la mayor cantidad de agua oscura en la fortaleza.

Blakk: ¿Cuántos tenemos almacenado aquí?. —mirando al pelirrojo.

Maurice: 375.

Blakk: ¿Cuántos son los traídos a la fortaleza?. —volteando a mirar la rubio, con pesadez y forzando un poco la vista para definir el numero exacto.

Twist: 425.

Blakk: 800 contenedores en total, es mas que suficiente para comenzar. —con una sonrisa miro al pelirrojo, no entendió nada de lo que estaba planeando el hombre, de todas formas no le va a preguntar, no quiere lidiar con sus cambios de humor.

Complacido por la cantidad de agua oscura en sus manos, el Dr. Blakk se marcho, dejándolo con el pelirrojo, viendo que estaba fuera de peligro coloco su mano sobre su nuca en un intento de soltar la tensión.

Maurice: deberías ir a descansar, tienes 3 días metido en la fortaleza. —alzo la vista para mirar con incredulidad al pelirrojo, claro, como si se creería su típico estado de preocupación por los empleados:— tomate un descanso.

Twist: ¿y tu que?, ¿desde cuando te interesa lo que le pase a los demás?. —irritado, dejo salir un gruñido fastidiado, no niega que al principio no le causaba molestias la presencia del pelirrojo, apenas se hace notar a pesar de su tamaño; pero después de lo sucedido con aquellas familias y la clara indiferencia de este le a estado molestando que incluso le dirija la palabra:— ¿al menos me puedes decir de que estaba hablando el Dr. Blakk con eso de "comenzar"?. —recibió su respuesta cuando el mas grande miro al suelo en silencio, es obvio que no se lo dirá aunque eso dependa de su vida; ya empezando a dolerle la cabeza dio media vuelta con la intensión de salir de la dichosa oficina y seguir trabajando. 

Antes de acercarse a la puerta automática el pelirrojo lo atrapo colocando una mano sobre su boca para que no grite y con la otra lo rodeo completamente de su tórax para inmovilizarlo, al ser mas fuerte no tuvo problemas arrastrándolo hasta el laboratorio del mayor, soltándolo para colocarle el seguro a la puerta, de inmediato le señalo molesto.

Maurice: me interesa desde que robaste el oro del jefe.

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