Declaimer: Los personajes de Naruto NO son míos, pertenecen a Kshimoto, yo solo los uso para crear esta historia, sin fines de lucro, con el único objetivo de hacer pasar un buen momento al lector.

—¿Entonces?

—No he sabido nada de ella, además se llevó a Hanako-chan, siempre la busco en casa de Shisui pero él no me permite verla, me miente diciendo que no está o simplemente me dice que Hinata no quiere verme.

—¿Y Hanako?— Kakashi lo miro con algo de lastima.

—Sabes, teníamos muchos planes para cuando ella cumpliera un año, ahora que lo cumplió todo eso quedó en el olvido, me dejo verla por unas horas pero ella decidió celebrar con Shisui e Itachi, quería que su cumpleaños fuera en familia, a lado de sus padres pero lo arruine todo.

—Lo siento mucho Obito, fue mi culpa no debí hacer eso.

—No Rin, yo también tengo la culpa, no te detuve.

—¿Cuánto tiempo llevan así?— le pregunto el peliplata.

—Tres meses.

Minato los miró triste, pero sonrió para mejorar el ambiente— El Hokage tiene una nueva misión para ustedes, pero como a mí me mandaran a otra misión, les van a incluir un nuevo integrante, Kakashi será el líder.

—¿Sabe con quién nos va a tocar?— hablo Rin.

—Es Hinata— Obito miró a su maestro más atento— Está puede ser tu oportunidad para hablar con ella Obito.

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Itachi sostenía las manos de Hanako para que pudiera caminar, cuando estuvo cerca de Hinata y creyó que la pequeña estaba lista la soltó.

Hanako dió sus primeros pasos animada por su madre y su amigo, Hinata la atrapó antes de que cayera al suelo— Obito debería ver esto.

La ojiperla bajo la mirada y la sonrisa se borró de su rostro por las palabras de Itachi— Aún no quiero verlo.

—¿Por qué?, No has dejado que hable contigo y te explique, creo que mínimo merece ser escuchado.

—Él está enamorado de Rin, yo solo llegué a confundirlo, ahora probablemente tenga una oportunidad— Hinata jugó con las manos de su hija— Me debo hacer a un lado para que él pueda ser feliz.

—Es Obito quien debe decidir eso.

—Ya tome mi decisión Itachi.

—Hinata, Obito te está buscando en la puerta— Shisui llegó al cuarto y los observo con una ceja alzada— ¿Qué hacían ustedes dos?

—Le ayudamos a Hanako-chan con sus primeros pasos— Itachi le pidió a la niña, Hinata se la entrego sin decir una palabra.

—¿Y me lo perdí?, Siempre hacen las cosas importantes cuando no estoy.

—Lo siento Shisui, la próxima vez estarás con nosotros— el Uchiha le devolvió la sonrisa a Hinata.

—En un momento volvemos.

Obito esperaba en el patio, miraba las ventanas en busca de Hinata, pero no había rastro de ella. Itachi salió con su hija en los brazos y supo que sería otro día sin ser perdonado.

—Lo siento Obito, Hinata-san no quiere verte— el pelinegro cargo a Hanako y se esforzó por sonreír.

—Lo supuse.

—Hanako debe estar en casa antes de las nueve— Shisui le hablo de manera fría desde la puerta.

—Minato-sensei me encargo que le avisará a Hinata-chan sobre la misión que tiene mañana.

—Cuando regreses me lo dices, ahora quiero que te vayas, no soporto las ganas de darte un buen golpe.

—Shisui no empieces— le advirtió Itachi.

—Hinata— Obito le grito con todas sus fuerzas— Se que me estás escuchando, tenemos que hablar, no te puedes ocultar de mi todo el tiempo, déjame darte una explicación.

—Ya vete Obito, si no te corro a golpes es porque estás cargando a Hanako— Shisui lo desafío con la mirada.

Obito activo su Sharingan al igual que Shisui, Itachi hizo lo mismo y se acercó al mayor— Obito por favor vete junto con Hanako-chan, dale más tiempo a Hinata-san.

Él les dió la espalda y comenzó a caminar, lo que menos quería es iniciar una pelea enfrente de su hija.

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—¿Extrañaste a tu papá Hanako-chan?— la niña se reía e intentaba quitarle la comida de las manos— Yo si las extraño.

Hanako comenzó a balbucear, Obito se esforzaba por entender algo de lo que decía pero la pequeña hablaba muy rápido.

—Hanako-chan no te entiendo nada, habla más despacio.

Obito se acercó más a ella, la niña volvió a reír y estiró su cabello— No estires tan fuerte Hanako-chan, ¿Por qué mejor no dices papá?

El Uchiha le dió otra cucharada de su papilla, cuando terminó de comer limpio la boca de su hija y la cargo por toda la casa.

Ella lo miraba atenta y sonreía de vez en cuando. Le contó todo lo que hizo en el día y jugó un rato con su pequeña.

Antes de las nueve la fue a dejar a casa de Shisui. Itachi la recibió y también prometió darle los detalles de la misión a Hinata. El Uchiha menor se fue a su casa después de hacer lo que le había prometido a Obito.

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—Es una misión de reconocimiento, se han dado reportes de secuestros de personas cerca de esta zona, vamos a investigar un poco y regresamos— explicó Kakashi, Rin, Obito y Hinata asintieron y lo siguieron.

Después de unas horas Hinata activo su Byakugan— Kakashi.

—¿Ya te diste cuenta Hinata?— Kakashi giro a verla.

—Son dos, es lo único que puedo decir.

—Tal vez sean Chūnin— el peliplata analizó de forma rápida la situación— Obito quédate a terminar con las personas que nos están siguiendo, nosotros seguiremos por el camino que les mostré en el mapa así que será fácil para ti encontrarnos de nuevo.

—Si, grabé el mapa con mi Sharingan— el alzó su dedo pulgar y asintió confiado.

Rin lo miro con preocupación— ¿Seguro qué puedes tú solo?

—Claro— Obito sonrió, se acercó a Hinata y tomo su mano— Cuídate mucho Hinata-chan, por favor.

La Hyūga se soltó de su agarre con brusquedad, le dió la espalda y camino hasta quedar a lado de Kakashi.

Obito bajo la mirada al suelo— Entiendo.

Kakashi suspiro cansado— Tranquilo Obito, yo me encargo de protegerlas.

—Gracias.

—Nos vemos— el Uchiha los miró partir y se preparó para la llegada de los ninjas que lo seguían.

En el camino algunos ninjas intentaron secuestrar a Rin, Hinata y Kakashi lograron impedirlo. 

Cuándo llegaron al lugar en donde pensaban pasar la noche, los ninjas de Kirigakure les tendieron una emboscada, su objetivo era Rin, Kakashi y Hinata la cubrieron en todo momento para que no le hicieran daño.

—Kakashi son demasiados, no podremos solos— le dijo Rin sin dejar de atacar a sus enemigos.

—Obito debe estar por llegar, solo hay que soportar un poco más, cuando llegue tendremos más oportunidad de huir— Rin asintió sin decir más.

Hinata usaba sus palmas para atacar a todos los que podía— Kakashi algo anda mal, tres sujetos más se acercan a nosotros, pero no parecen ninjas de Kirigakure.

—Hinata encárgate de ellos, Rin y yo terminamos con los de Kirigakure, tengo un mal presentimiento, parece como si ellos también vinieran por Rin.

Los sujetos hicieron su aparición, Hinata los miró sorprendida, eran Zetsu blancos, quiso ir con ellos pero primero tenía que acabar con el ninja al que estaba enfrentando.

Rin se dió cuenta de que el arma con la que iban atacar a Hinata estaba envenenada— Hinata— la Hyūga alcanzó a escuchar su grito, logro desviar el Kunai para que no diera en un punto importante, pero logró cortar un poco su brazo.

La Hyūga termino con ellos y miró su brazo, Rin se acercó a ella preocupada— Deja que te revise.

—No podemos dejar a Kakashi solo.

—Rin toma el arma que tiene el veneno y prepara un antídoto, yo te cubro— ella obedeció las ordenes de Kakashi— Hinata encárgate de los que acaban de llegar antes de que empiecen los efectos del veneno.

La ojiperla corrió hasta estar frente a los Zetzu, logro vencer a dos, pero el veneno comenzaba hacer efecto en ella. Su respiración era más lenta al igual que sus latidos, sus movimientos cada vez eran menos efectivos, no lograba pensar con claridad.

Obito corría lo más que podía, miro a una gran cantidad de ninjas de Kirigakure atacando a sus amigos, Rin estaba hincada en el suelo preparando algo, Kakashi la protegía. Busco a Hinata y quedó paralizado, un sujeto extraño golpeó su abdomen, ella escupió algo de sangre y cayó al suelo.

Su Sharingan cambio, miró la escena totalmente molesto.

—Rin date prisa, Hinata acaba de caer— Kakashi siguió atacando a algunos de los ninjas.

—Kakashi lo hago lo más rápido que puedo, debo tener cuidado, una dosis mal y lo voy arruinar— Rin siguió con su trabajo— Ve por Hinata, necesito saber si aún tiene pulso.

El grito de Obito puso en alerta a Kakashi, miró como su compañero mataba a cualquiera que se pusiera en su camino, lo que más le sorprendía es que cuando alguien quería hacerle daño, los ataques parecían traspasar su cuerpo. El peliplata corrió por el cuerpo de Hinata y lo llevo con Rin.

—Ella no tiene pulso— Rin mordió sus labios frustrada.

—Necesito que le hagas RCP.

—Esta bien, pero date prisa, Obito está como loco jamás lo había visto así.

—Esta acabando con todos, me preocupa.

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—Madara-sama, no logramos raptar a la chica, pero el niño que escogió acaba de despertar el Mangekyou.

—No te preocupes, encontré el remplazo perfecto.

Madara miró con una ligera sonrisa los ojos rojos que brillaban en la oscuridad.

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