01.2
Estaba llegando tarde, lo cual no es usual en mi, por lo que me encontraba desesperado por llegar a tiempo a mi primera clase del día.
Tenía un despertador, o bueno, creía tenerlo, pues esa mañana no sonó, siendo mi madre la que me despertara esa mañana cuando vio que no salía de mi habitación a desayunar -ella también salía temprano pero se hacía tiempo para preparar algo de comida-. Recordar el desayuno hizo que mi estómago gruñera, síntoma de no haber comido nada esa mañana más que un vaso de agua porque dice mi hermana que el agua es importante y pues lo que ella dice es ley según ella.
Volviendo a que me desperté tarde, mi mañana había sido una caca aparte de el no haber comido... bueno, el no comer es bastante triste para empezar, pero también está el hecho de que tampoco me pude bañar y que he estado corriendo todo el camino de mi casa a la escuela porque... bueno, no sé, pude tomar el autobús pero no pasaba cuando fui a la parada y me desespere, por lo cual pensé que correr sería más rápido.
Lo divertido aquí es que en todo el rato que he estado corriendo han pasado como dos autobuses camino a mi escuela.
¿Ya les había dicho que diosito me odia?
Yo ni siquiera era bueno en los deportes. Rayos, siento mis piernas como gelatina y el sudor pegado a mi camiseta. Es una sensación incómoda, pero me niego a llegar tarde a la escuela, así que seguiré corriendo.
Había estado esquivando a varias personas en todo el camino. A niños yendo a la escuela al igual que yo, adultos camino al trabajo, una anciana vestida como ladybug, y salté sobre un perro que se estaba lamiendo el escroto en media acera. Me dí cuenta que estaba cerca de la escuela cuando comencé a ver a chicos y chicas usando el uniforme de ésta, notando también que que yo era el único corriendo para llegar a tiempo, siendo que la mayoría tan sólo caminaba de forma apresurada y uno de ellos caminaba con una terrible lentitud frente a mi, con los otros pasando a nuestro alrededor, estorbando el camino para poder pasar del chico lento.
Ni siquiera lo pensé o miré al chico, traté de esquivarle de la forma más sutil para continuar corriendo pero, cuando pasé por su lado, no medí bien el espacio, por lo que terminé golpeándole un poco... o mucho. Sí, mucho, le pegué fuerte.
Pero fue sin querer queriendo así que no cuenta.
El desconocido se tropezó y por ende yo también, deteniendo así mi corrida y haciendo que jadeara cuando estuve quieto.
-Eres un jodido imbécil. - Escuché que decía, a lo que casi sonreí en respuesta. Así me decía mi hermana cuando rompía su récord en algún juego suyo.
Limpiando el sudor de mi cara voltee a ver a la persona con la que tropecé, pensando en disculparme de inmediato, pero deteniendome al ver quién era la persona en cuestión. Rápidamente hice una mueca, pensando en que mi vida era demasiado cliché para mi gusto al verme involucrado en un montón de incidentes donde me termino topando con la persona más "inesperada" del mundo.
Señoras y señores, la persona con la que me tropecé: Kim Taehyung.
El rubio tocaba su hombro con una mirada furiosa hacia mí, o eso al principio, porque cuando pareció reconocerme, su postura se relajó visiblemente, viéndome ahora tan sólo con algo de molestia.
-Ah, eres tú, el bicho raro.
Gracias, crack, me encanta que me llamen así, en especial tú.
-¿Haz estado corriendo? - Preguntó al ver mi aspecto. Respiración agitada, ropa arrugada y sudor, increíble yo siempre.
Me veo patético.
Lo de siempre.
Asentí con mi cabeza en respuesta, limpiando una vez más el sudor de mi rostro con la manga de mi camiseta.
-¿Por qué corres? - Volteó hacia atrás curioso. - ¿Alguien te persigue o algo así?
Cuando Taehyung volvió a mirarme, negué en respuesta, para ese momento relajandome un poco más. Yo de verdad necesitaba tomar un descanso.
-Si nadie te persigue ¿por qué corres como el diablo?
Tiro al blanco.
Perdón, banda, es que no tengo amigos. Y Hyojong no cuenta porque él es como mi primo el tonto sin futuro pero buena onda.
En explicación, saqué mi celular de mi pantalón, presionando un botón y mostrando la hora para así hacerle saber que ya era tarde. Taehyung entrecerró sus ojos viendo la pantalla, para luego verme a mi de la misma forma, a lo que yo aparte la mirada y me dediqué a guardar mi celular.
Mira que es la persona con la que menos me quiero cruzar pero aquí está él. La vida me odia.
-Faltan tres minutos para que toque la campana, idiota. Relájate un poco. - Hizo una mueca, retomando su caminar entonces pero de la misma forma que antes, lento y sin problemas.
Resople cuando lo vi adelantarse sólo un poco. Él iba a llegar tarde, y sí, me preocupaba un poco porque sabía que los maestros no le tenían mucha estima que digamos y que le quieran perdonar que no llegué a tiempo a las clases es imposible para él, pero una parte de mí simplemente ya no quería pensar más en Taehyung.
Verle me dolía de cierta forma, el enamoramiento estúpido que formé por él era demasiado para mi bien. No lo conocía y yo le quería como si lo conociera; absurdo. Tiene pareja, lo descubrí hace poco, y al unir los puntos, me dí cuenta de que es alguien con quien ha estado hace ya un tiempo, un par de meses tal vez. Taehyung siempre está en su celular, mandando mensajes, apuesto a que son mensajes para su novio. Pensar en eso me hacía hacer pucheros. Era inevitable sentirme de esta manera, pero aún así no quería aceptar este sentimiento de corazón roto. Es la peor sensación de todas, y yo ni siquiera entregué mi corazón de forma formal como para que me encontrara así de deprimido.
-¿No vienes, bicho raro? - Fue ahí que salí de mis pensamientos, Taehyung estando ya en la puerta de la entrada de la escuela viéndome desde ahí sin emoción alguna, esperando.
¿Me está esperando?
No dije nada, corrí hacia él y cuando llegué a su lado, comencé a caminar a la par de él como si hubiésemos venido todo el camino juntos. Le miré de reojo mientras caminaba a su lado, Taehyung en ningún momento pareció verme, pero tampoco sentía como que me ignoraba, estábamos caminando al mismo ritmo y no nos encontrábamos muy distanciados uno del otro. Al estarle dando vueltas a todo eso, olvidé levemente el que Taehyung tuviese novio y el que faltaba poco para que tocase la campana, encontrándome a mi mismo solo disfrutando en silencio la compañía de Taehyung y apreciar el corto momento juntos.
La campana sonó justo cuando subíamos las escaleras hacia el segundo piso, sin darme cuenta acelere un poco ante eso, a lo que Taehyung respondió acelerando igual.
-¿Tenemos la misma clase? - Preguntó cuando llegamos al segundo piso, a lo que dije que sí con la cabeza. - Genial.
Ya sé, es maravilloso poder verte desde tan temprano.
-¡Min Yoongi estúpido cara de cucaracha! - Y entonces salí de mi cuento de hadas. - ¡¿Quién te dio permiso de llegar tarde?!
Desde lejos y fuera del salón -el cual estaba con la puerta cerrada-, un enojado/indignado Hyojong me esperaba de brazos cruzados y con la mochila aún colgada en sus hombros. Dí pequeños saltitos para llegar hacia él, dejando de lado a Taehyung entonces, ya que como llegamos al salón de clases, ya no había necesidad de seguir juntos.
Pensando en que Taehyung entró al salón cuando yo me puse frente a Hyojong -o sea de espaldas a la puerta-, le cuestione el que no haya entrado al salón todavía.
❝ ¿Qué haces aún afuera? ❞ Pregunté con el ceño fruncido.
-Te estoy esperando. - Respondió de forma obvia, viéndome aún enojado.
❝ ¿No me puedes esperar adentro? ❞
-¿Quieres que entre a ese lugar yo solo? Estás pendejo, necesito a mi camarada conmigo. - Exagerando todo como siempre. Nada me sorprende de este hombre.
-¿Te da miedo la gente, niño? - Y como si del diablo de tratara, la voz de Taehyung se escuchó detrás de mi, sabiendo entonces que el rubio jamás entró al salón y había estado detrás de mi todo este tiempo.
¿Qué yo no tengo sensibilidad en la espalda o algo? ¿Cómo es que no lo sentí? Estoy defectuoso, supongo.
-Cierra la boca, Kim, nadie está hablando contigo. - Le contestó Hyojong, mostrando su completo disgusto hacia él. Sabía que a Hyojong no le agradaba Taehyung, pero al menos esperaba que supiera disimular un poco.
-Tú estás hablando conmigo. - Estaba seguro de que Taehyung le sonreía con burla, puedo apostar a que lo hace.
-No es cierto.
-Si es cierto.
-No es cierto.
-Si es cierto.
-¡No es cierto y si me respondes se te van a caer las cejas! - Chilló desesperado, tomando mi mano y haciendo que de media vuelta cuando me pegó a él, quedando ahora de frente con el rubio el cual le miraba con la burla que había predicho.
Por eso Taehyung tampoco tiene amigos. No es amigable el chico.
-Vente, Yoongi bebé, no te juntes con esta chusma. - Dijo haciendo a Taehyung a un lado, yendo hacia la puerta del salón cerrado, tocando esta en la espera de que el maestro les abriera.
-Sí sabes que tenemos la misma clase, ¿no? - Continuó Taehyung, encantado con hacer enojar a Hyojong.
Bueno, no lo culpo, es gracioso para mi también.
-Si no te veo no existes para mí.
-Me voy a sentar en frente de ti entonces.
-¡Eres tan odioso!
Sonreí sin siquiera saberlo, divertido por la interacción de ambos, ignorando por completo el que Taehyung me veía con más curiosidad que la habitual y que el maestro nos pondría un reporte en el expediente por haber llegado tarde.
Efe.
🌌🌌🌌
Eu raza, tomen awa si todavía no lo han echo. Ese pedo es bien importante, eh.
¿CÓMO ESTÁN? ¿CÓMO LES FUE EN NAVIDAD? ¿QUÉ LES TRAJO SANTA? ¡PUTAZO AL QUE ME DIGA QUE SANTA NO EXISTE! ABR CUÉNTEME LA CHISMA, VAMOOOOOOOOO'.
A mi me regalaron ropa y un celular nuevo, porque llevaba con el mismo celular desde los 16 años (tengo 20 actualmente) y pues yo ya quería otro. Honestamente no me esperaba el celular, onda de que no sé, no siento que lo merezco, ¿saben? Es que... ay no sé, banda, me enfermé bien feo y tengo voz de vato ahorita 😢.
Les dejaré un beso 💋 porque en el siguiente capítulo van a querer linchar a mi bb TaeTae uwu.
Que me surgió ésta duda ahorita que escribí esto =
Qué prefieren en las fics taegi-yoontae: ¿Estereotipos donde yoons sea el mamon y tae el chico feliz o donde jueguen con sus personalidades y les pongan una diferente a la normal?
Con esa pregunta me despido.
Bais, escoria, feliz navidad atrasada.
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top