01.0
No soy muy bueno dibujando, es por eso que la clase de Artes de éste día, no era mi favorita.
-Hoy trabajarán juntos en equipos de dos... - Dijo la maestra sin mucha emoción, sacando su cajetilla de cigarros y un encendedor mientras bostezaba.
Que por cierto, está prohibido fumar en las instalaciones de la escuela.
Mientras la maestra encendía su cigarro, se sentó en su escritorio y cerró los ojos. La clase entera se quedó en silencio por un rato, observando como la maestra se quedaba dormida al poco tiempo de encender su cigarro sin haber terminado de explicar la clase de hoy.
Nada nuevo en la clase de Artes.
-Ah... - Una chica de la clase elevó su mano, mirando con duda a la maestra que comenzaba a roncar y el cigarro se resbalaba de sus dedos. - ¡Maestra B! - Gritó cuando moscas comenzaba a rodear a la mujer de aspecto hippie/vagabundo.
-¡Tengo derecho a un abogado! - Chilló la maestra al despertar bruscamente por el grito, tomando con fuerza el cigarro y poniéndose de pie asustada.
-¿Abogado? - Preguntó la misma chica, viéndola confundida.
La maestra B entrecerró los ojos y miró a toda la clase lentamente. Bien, parecía que comenzaba a darse cuenta de donde se encontraba, eso es un avance. Llevó el cigarro a sus labios, inhalando el humo para después soltarle con fuerza, asintiendo con la cabeza y sonriendo de lado.
-Cierto, estoy en clase, no en la comisaría. - Murmuró risueña, como si aquello le divirtiera.
-¿Qué? - La alumna estaba más confundida que antes.
-Si me interrumpes de nuevo te quito 5 puntos, mocosa - Advirtió, volviéndose a sentar pero esta vez sin dormirse. Tan sólo subió los pies sobre el escritorio y sacó un libro algo grueso de uno de los cajones del escritorio. -. Ahora, hagan el trabajo.
-¿Qué trabajo?
-El que les dí.
-No nos dijo nada.
-Uh - Hizo una pausa, pensando. -. Si, es posible que eso me suceda - Simplemente lo aceptó. -. Bien como sea. Harán equipos de dos, ¿trajeron los cuadernos de dibujo que les pedí y el lápiz... ese lápiz especial? Si, ajá, pues entre los dos se dibujaran entre ustedes, retrataran a su amigo. No hay ninguna razón en especial para que lo hagan, no se me ocurrió nada para la clase de hoy, así que sólo hagan eso y les daré un caramelo al final de la clase.
-Me parece un precio razonable el caramelo. - Dijo en voz baja un chico a mi lado, rápido poniéndose de pie para buscar compañero.
No me gusta dibujar, no soy bueno en eso, y tampoco me gusta mucho trabajar en equipo, no puedo comunicarme con los otros con facilidad. Pero dijo equipos de dos, lo que quiere decir que puedo juntarme con la única persona de la clase con la que puedo comunicarme abiertamente con la seguridad de saber que puedo estar con alguien que me entiende. Kim Hyojong. El bobo de cabello azul y que grita hasta romper las copas si se aburre.
Me puse de pie de inmediato al ver todo el caos que comenzaba a formarse en el aula, las personas estaban de pie, caminando de un lado a otro para llegar con algún amigo y así hacer el trabajo. El alboroto en la clase usualmente no me era ningún problema, Hyojong siempre estaba a mi lado por lo que hacer equipo era rápido para nosotros, pero ya que ese día en la mañana se nos ocurrió saludar a la maestra B cuando la vimos salir del baño con expresión de zombie en el rostro, la tomó en contra nuestra y nos gritó que en su clase de hoy no nos quería ver juntos.
Nos asustó tanto que nos sentamos demasiado lejos uno del otro.
Miré a Hyojong buscar algo en su mochila con una expresión de pánico en el rostro. Se le debió olvidar algo, estoy seguro, conozco a ese chico. Sonreí divertido por el rostro de Hyojong, él nunca me fallaba cuando de burlarme de él se trataba, excelente servicio el suyo. Caminé hacia él, elevando la mano un poco para llamar su atención, pero cuando estuve apunto de llegar a él, alguien me tomó del brazo desde atrás y me dio media vuelta.
-Has equipo conmigo. - Demandó el rubio con una llamativa mariposa tatuada en el cuello, viéndome desde arriba con seriedad.
No me moví por un momento, no entendía la nueva situación en la que me encontraba y mi pobre cerebro estaba tratando de asimilad todo. ¿Ese era Kim Taehyung? ¿el chico por el que estoy enamorado como tonto? ¿el chico que últimamente me ha estado mirando feo?
¿No será que el humo del cigarro de la maestra B me afectó?
-¡Vamos! - Gritó la maestra con cierta irritación. - No tengo todo el día, el director dijo que si vuelve a recibir quejas de los alumnos porque no les doy ningún trabajo y me duermo en clase, ahora si me va a despedir - De pronto, un aura demoníaca le rodeó. -. Así que muevan su estúpido trasero y comiencen.
-Esa maldita bruja, debieron despedirla hace meses. - Murmuró Taehyung, aún agarrado de mi brazo y jalandome hacia una mesa para los dos.
-¡Te escuché, Kim! - Gritó la maestra B desde atrás.
-¡Esa era la idea!
-Te voy a quitar 5 puntos.
-¿Cuáles puntos? Ya me los quitó todos.
-Ah... rayos.
Taehyung sonrió con superioridad, y al ver esa característica sonrisa suya, sentí el calor subir a mis mejillas. El lugar donde Taehyung me tenía agarrado también se sentía caliente, mis manos comenzaban a temblar y mi corazón no parecía quererse calmar. No me gustaba sentirme de esa manera, me hace sentir muy vulnerable, pero había algo diferente en este sentimiento de vulnerabilidad, algo que Taehyung me hacía sentir con su sola presencia.
Extrañamente me gustaba.
Pronto llegamos a un lugar para los dos, Taehyung se sentó frente a mi, dejando su cuaderno y lápiz en la mesa y después mirándome con esos pesados ojos suyos mientras se cruzaba de brazos. No pude evitarlo, el calor subió a mis orejas. Sin poder verle a los ojos correctamente, coloqué mis cosas sobre la mesa de igual forma y cerré mis ojos con fuerza, tomando una fuerte respiración que me llegó a producir un poco de náuseas por el humo del cigarro de la maestra y porque quería vomitar.
No creo que vomitar frente a la persona que te gusta sea bueno.
-Bien, ya todos están en equipos - Dijo la maestra B, tomando su teléfono. -. Pondré un cronómetro, cada uno tendrá 20 minutos para retratar al otro. Los que lo vayan a hacer primero que sea ya porque desde que encendí el cigarro puse el tiempo a correr.
Esta mujer...
-Yo iré primero. - Avisó Taehyung, tomando el lápiz y fijando sus ojos en mi.
Dios no me preparó ésta mañana para esto.
Sinceramente no sé qué esperar de la situación, Taehyung está serio mientras pasa el lápiz por la hoja del cuaderno, no habla y tampoco mostraba una expresión que me dijera algo. No puedo mantener mis ojos sobre los suyos por más de dos segundos, me encuentro rígido en mi lugar, con las manos sobre mis rodillas, los hombros tensos y mi boca no dejaba de hacer muecas. No creo sobrevivir.
¿Qué quería él con ser mi compañero, de todas formas? Es decir, Taehyung no suele trabajar en equipo, él odia eso, no se quiere juntar con los plebeyos -así lo veo yo-, por lo que usualmente sólo espera a que alguien se quede sin equipo al final y él se junta con esa persona muy a fuerzas. Y ahora viene conmigo diciendo que quiere trabajar conmigo y ni siquiera me permite responder antes de llevarme con él.
Yo podría estar ahora muy tranquilamente con Hyojong haciendo muecas estúpidas mientras tratamos de dibujar al otro.
Hyojong...
Abrí mis ojos como búho cuando le recordé. ¿Dónde está ese tonto?
Giré mi cabeza en busca de una cabeza azul. Debía ser fácil de encontrar, esa cabeza resalta y además el chico no se puede quedar quieto, no puede ser difícil. En menos de lo esperado, lo encontré, encontré un Hyojong completamente quieto en su sitio con la cabeza agachada y un fuerte sonrojo en su rostro sentado a unos metros de mi. Entrecerré mis ojos a su dirección.
¿Quién es ese? Yo no conozco a un Hyojong tan dominado, ¿qué es esa cosa?
-Si los miro bien, tú y él se parecen bastante. - Dijo Taehyung, haciendo que volteara a verlo, sólo para encontrarle mirando a mi amigo.
Cuando Taehyung volvió a posar su mirada sobre mi, desvíe la mía.
-Aunque puedo entender por qué tu amigo se comporta de esa forma tan dócil ahora. Está haciendo equipo con Hyuna, la chica más linda de nuestro grado, o bueno, linda para algunos, ella no es realmente mi tipo. - Siguió hablando, sin recibir una respuesta de mi parte.
Fruncí el ceño y volví mi mirada a donde Hyojong, confirmando lo que Taehyung me había dicho. Una chica delgada y bonita, de cabello rojizo dibujaba frente a Hyojong, sonriéndole al chico de tanto en tanto y el peliazul poniéndose rojo cada vez más.
Ah, mi camarada y yo estamos en las mismas. F.
-A tu amigo lo puedo entender - Taehyung continúo, interpretando mi silencio como le diese su gana. Llevé mi mirada al frente, donde él estaba, aprovechando que no me estaba viendo mucho en ese momento, sólo cortos vistazos donde volvía sus ojos al cuaderno de inmediato a continuar el dibujo. -, pero a quien no entiendo, es a ti.
¿Y ahora qué hice o qué?
-Siendo sincero, hasta hace poco no sabía de tu existencia - Gracias, eso me motiva mucho a seguir con vida. -, creo que fue una día que me estaban regañando en clase cuando te miré por primera vez. Hiciste mucho ruido en ese momento, así que terminé por voltear a mirarte, tenías la frente roja, así que supuse que ese ruido fue porque te golpeaste contra el pupitre.
Alce mis cejas sorprendido, por fin conociendo la razón por la cual me miró ese día. Quise reírme ahí mismo, recuerdo haber estado alterado ese día pensando en una buena razón para de pronto tener su atencion, y resultó ser algo tan insignificante. Debe ser una cruel broma.
-Entonces tú te pusiste rojito cuando te miré y eso me dio risa - Taehyung sonrió, claramente burlándose de mi. -. Fue divertido.
Bueno, no era necesario saber eso.
-Llamaste mi atención, Min - Mi corazón latió aún más rápido, ¿qué era toda esa conversación? -. Por un tiempo creí que eras un alumno nuevo, pero por cosas que escuché por ahí, supe que has estado aquí desde primer año.
De alguna manera, eso me emociona y me duele al mismo tiempo.
-Cuando supe de ti, noté un par de cosas sobre ti también - La sonrisa desapareció y detuvo sus movimientos con el lápiz, sin levantar la mirada hacia mi. Estaba serio, posiblemente pensando en lo que diría. -. A veces podía sentir una mirada sobre mi aquí en la escuela, y cuando buscaba a la persona que podría estar jodiendome, me topaba contigo mirando hacia otro lado con el rostro completamente sonrojado. Eso puede que sea una coincidencia, claro, pero después de que me percatara de que siempre estabas ahí cuando sentía esa mirada, me di cuenta por fin que eras tú quien me estaba miraba.
Oh dioses, oh dioses, oh dioses, oh dioses, oh dioses, oh dioses.
-Pero nunca te has acercado a hablarme, siempre estas con el tipo que se compra un elote afuera de la escuela, y no recuerdo haberte escuchado emitir un sonido desde entonces.
¿Cuántos huesos me romperé si salto por la ventana justo ahora?
-Tengo curiosidad, Min - Esta vez, Taehyung elevó su mirada, dejando el lápiz sobre la mesa. No pude apartar mis ojos de los suyos, fue algo completamente diferente a cuando hacia el dibujo, la mirada de ahora era más penetrante y por lo mismo no pude moverme ni un sólo centímetro. -. No trates de fingir que no es verdad lo que te dije, porque no lo habría dicho si no estuviera seguro, así que, te preguntaré algo y espero una respuesta honesta.
Quiero irme a casa.
-¿Qué es--
-¡El tiempo se acabó! - Gritó la maestra B, y por primera vez en mi vida de estudiante de esa escuela, sentí amor por esa malvada mujer.
Aprovechando la interrupción y el que Taehyung comenzó a hacerle señas obscenas a la maestra B -con la mujer adulta devolviendo cada una de las señas mientras amenazaba con quemarle con su cigarro-, comencé el dibujo y así fingí estar concentrado en algo para no tener que volver a esa conversación.
Soy un genio, lo sé.
-Esa maldita vieja bruja - Maldijo Taehyung casi gruñendo. -, estoy a nada de quejarme con el director de que la bastarda aún fuma en clase después de que le advirtiera como tres veces que no lo hiciera.
No soy bueno dibujando, y justo ahora al tener manos temblorosas, hacia que todo apestara aún más. Intenté dibujar un círculo para la cabeza, tratando de recordar aquel capítulo de Bob Esponja donde Bob entra a clases de arte impartidas por Calamardo. Realmente no hay mucho que pueda obtener de ese capítulo, pero al menos estoy motivado.
Me concentre demasiado, creo que Taehyung habló de vez en cuando, pero yo estaba lo suficientemente ocupado retratando su belleza como para prestar atención a los insultos que le daba a la maestra B. Creo que incluso llegó a dibujar algo feo sobre ella, no estoy muy seguro, pero se veía bastante orgulloso cuando terminó su nuevo dibujo.
Algo que traté de hacer lo mejor posible, fueron sus tatuajes. Tiene muchas mariposas en el cuerpo, un par te flores, pero yo sólo estaba retratando de sus hombros hacia arriba, así que el único tatuaje visible ahí es la mariposa en su cuello. Recordé el tatuaje como pude en mi memoria, jamás había estado lo suficientemente cerca de Taehyung como para poder apreciar el tatuaje a detalle, pero lo había visto tantas veces que estaba grabado en mi memoria. Me gustaba mucho esa mariposa.
¿Qué significan todas esas mariposas? Rayos... realmente quiero saber todo sobre él.
-¡Se acabó el tiempo, abortos fallidos! - La maestra B hizo que nos detuvieramos. Mi dibujo no estaba del todo terminado, me concentre demasiado en la mariposa, así que estaba comenzando a entrar en pánico. No lo terminé a tiempo. - Ahora, denle su dibujo al otro y larguense de mi propiedad.
¿Qué?
¿Qué le dé mi dibujo a Taehyung?
¿Taehyung tiene que ver mi dibujo?
Abrí mis ojos como búho, nervioso y sin saber qué hacer. Eso era obligatorio, ¿cierto? Tenía que darle mi dibujo sobre él a Taehyung, ¿no es así? Quiero decir, no soy bueno dibujando, lo que hice es terrible, de verdad apesta, lo único de lo que me siento medianamente seguro es el tatuaje de la mariposa, pero todo lo demás está para llorar.
¿Taehyung se reirá de mi si me pongo a llorar?
El rubio se puso de pie, con el dibujo ya en su mano y se colocó a mi lado, viéndome de nuevo desde arriba. -El dibujo, rarito, anda.
Sip, él definitivamente se reirá si me pongo llorar.
Arranque la hoja de mi cuaderno e, indeciso, terminé por ceder y le dí el dibujo, tomando el suyo con mi otra mano y mirando con suma atención su dibujo sobre mi. De acuerdo, desde mi parte donde yo le tengo que dar el dibujo que hice está del asco, pero desde su parte donde él me tiene que dar el dibujo que hizo sobre mi está cool.
Después de unos segundo de analizar el dibujo, fruncí el ceño, confundido.
¿Eso de ahí era un humano... eso de ahí era yo...?
-Mierda, Min, ¿qué es esto? Parece que lo dibujó un niño de preescolar. - Y no tardó nada en burlarse de mi.
En algún otro momento le habría dejado reírse, ya saben, no me molesta si él lo hace, pero...
¿Cómo se atreve a reírse de mi si el suyo es incluso peor? ¿Eso de ahí se supone que es mi cabello? Parece el estropajo que usa mamá para limpiar la estufa ¿y que hay de esa sonrisa de psicópata en el rostro? Él se está burlando de mi, ¿esos dos agujeros negros son mis ojos? Él definitivamente se burla de mi.
¿Él siquiera lo intentó? Lo vi tan seguro de sí mismo cuando hacia el trabajo, ¿y esto fue lo que consiguió?
¿Soy un chiste para ti?
Sin pensarlo más, señale su dibujo y luego el mío, viéndole con claro enfado y hasta cierto punto ofendido.
-¿Qué? - Preguntó Taehyung, haciéndose a un lado cuando me levanté de mi lugar. - ¿piensas que tu dibujo es mejor que el mío?
Asentí sin más. Yo no estaba para bromas.
-¿Estás pendejo? - Me miró ahora el ofendido... pero cómo se atreve... - Es obvio que mi dibujo es mejor.
Señalé la nariz de mi retrato. Parece un pie de elefante.
-¡Esa nariz es perfecta! - Objetó.
Le miré con una expresión que decía "por favor, Kim, no digas estupideces que se te va a fundir el cerebro".
-En todo caso, ¡mira, mira! - Él señaló los labios de su retrato. - ¿por qué tengo labios de prostituto?
Ay qué cosas.
Desvíe mi mirada, no tenía por qué responder a eso.
-No te hagas el que no sabe, Min, estos labios son de prostituto.
Una vez más, lo ignoré.
-Si no dices nada lo tomaré como una victoria de mi parte.
De inmediato fui a señalar la mariposa en su cuello, para después señalar la misma en el retrato, dando a entender mi punto. Taehyung abrió su boca, listo para objetar, pero cuando se dio cuenta de la gran similitud entre ambas mariposas, tan sólo hizo una mueca de berrinche y chistó la lengua, enojado. Yo sonreí, se sentía bien ganar de vez en cuando, más cuando se trata de Taehyung como mi oponente.
Espera.
¿Justo ahora acabo de pelear contra Taehyung? Y aún más ¿le gané?
-Ah, mierda, que pesado eres. - Se quejó, viéndome feo para después dar media vuelta. Él estaba por irse a la próxima clase.
Me quedé ahí pie, sin mucho que hacer. Es que era simplemente algo imposible para mi, había estado tan cerca de él, e incluso al final pareció que tuve una conversación con Taehyung. Tan genial, tan increíble, Taehyung huele muy bien de cercas. Pero la realidad estaba volviendo, él mismo lo dijo, tan sólo tenía curiosidad por mi por mis hábitos de acosador -no me gustaría denominarme de esa manera, pero el verlo fijamente cada que está cerca de mi no es muy sano, ¿cierto?- y quería saber algo, no es como que él deseara ser mi amigo o tener alguna relación conmigo, sólo quería hacerme una pregunta y ya.
Aunque ahora que lo pienso, se olvidó de hacerme la pregunta luego de que la maestra B nos interrumpiera.
-¡Nos vemos en la siguiente clase, Min! - De pronto gritó, aún caminando de frente y tan sólo agitando levemente su mano a mi dirección. Taehyung salió del salón, y yo me tuve que sentar de nuevo en el pupitre.
¿Él dijo "nos vemos"?
¿Algo así como que... él espera verme una vez más porque aún quiere preguntarme algo o es un "nos vemos" porque tenemos el mismo horario y claramente tenemos que vernos?
-Yoo... Yoongi, amor mío...
Saliendo de mis pensamiento, giré mi cabeza en dirección a Hyojong, reconociendo su voz de inmediato cuando pronunció mi nombre. El peliazul se encontraba de pie a mi lado, su rostro aún estaba rojo y sus piernas le temblaban.
-Yoongi... - Susurró, su mirada nublada y su voz ronca. - Yo... me he convertido en un hombre hoy.
❝ No digas ridiculeces ❞
-¡Eres un envidioso! Seguro es porque tengo más pelo en pecho que tú, ¿no?
❝ Me largo ❞
-¡Espera! ¡Amor mío, llévame contigo!
🌌🌌🌌
Esto lo escribí porque ayer no tenía internet, si no fuera por eso ustedes no tendrían actualización, escoria.
Ahora me voy porque mi perro quiere jugar y soy buena madre, verán. Le voy a dar de comer takis fuego con salsa valentina asies.
Les dejaré un beso 💋 porque de aquí en adelante estos dos jotos van a estar teniendo varios encuentros y su jotería aumentará a niveles jamás antes vistos.
Bais, escoria.
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top