A M A R


Era verano, un pelirrojo se encontraba cocinando seriamente y una castaña lo miraba desde el desayunador.

—No te vayas por favor — la ojimiel se levantó de su asiento y fue a él.

—Herms tengo que irme a trabajar. Las cosas no van bien

—¿pero tan lejos? ¿ Y cuando nazca el bebé?—ella lo miraba con sus ojos directamente

—intentare estar a tiempo... — los dos se unieron en un beso cálido y tierno —eres mía y lo sabes —ella asintió con la cabeza y siguieron con su beso.

...


Draco Malfoy se encontraba hablando con su amiga y compañera de trabajo, Astoria Granger.
De repente un sonido de llamada entrante del celular de Astoria

—Permiteme Draco.— el chico se quedó callado y miro a la mujer — no se de quién sea, es desconocido.— el asintió con la cabeza.

—¿Hermione? Estás en la ciudad, claro veré qué puedo hacer por ti.

Al finalizar la llamada la mujer lo vio y el veía atento.

—Era una prima, hace años que no sabíamos de ella..

— Oh qué bueno que ya lo sepan

—Draco, ella me preguntaba si podía bueno si podías entrevistarla para algún trabajo del que sea — dijo sería y formal como siempre lo era

—Claro sabes que eres mi mejor amiga y confío en ti y puede venir mañana temprano y la entrevistó —le sonrió a la castaña y se sonrieron .

Había amanecido con rapidez, Hermione se encontraba en aquella gran empresa. Acomodaba su camiseta de botones y veía en un espejo que estuviera impecable.

—¡Herms!—saludo Astoria con la mano acercándose a ella — cuánto tiempo querida — ambas se abrazaron

—Tori, lo mismo digo, te vez hermosa.

—Yo siempre —ambas rieron —Vamos te espera Draco.

Ella entro a la oficina lujosa del rubio acomodo nuevamente su falda color azul marino.

—Hola mucho gusto — se presentó la castaña y el rubio la miro con una gran sonrisa —Hermione Granger.

—El gusto es mío Draco Malfoy—saludo estrechando sus manos con una enorme sonrisa

—Bueno quería solicitar un empleo de lo que fuese, claro que sea honrado. Termine mis estudios en bachillerato, trabaje en varios restaurantes de los mejores en Londres y soy mamá soltera de un niño de 6 años —dijo segura de si misma.

—Ok —hizo una mueca y la miro nuevamente con una ceja levantada le agradaba aquella chica, era sería sabía lo que quería y muy sincera. — ¿Cuál es el nombre de tu hijo?

— Scorpius

—¿Scorpius? —ella asintió— Bien dile a Scorpius que su mamá tiene un empleo de recepcionista —le sonrió nuevamente y la ojimiel miraba sorprendida —¡muchísimas gracias! De verdad necesitaba mucho el empleó.

—No tienes nada que agradecer Hermione.

Ellos se miraron nuevamente, sus ojos se encontraban aquellos ojos grises y ojos miel.

—Te espero aquí mañana entonces.

La castaña salió de la oficina y se encontró con su prima

—¿Que pasó?

—Me dieron el empleó—hablo emocionada— Muchas gracias Tori de verdad no sé cómo agradecerte este favor

—No es nada Herm.

—tengo que irme, mañana empiezo a trabajar y tengo que alistar todo para venir

—Me parece bien. Nos vemos—ella se despidió y salió del lugar.

. . .

—¿Draco de verdad le diste el trabajo?—pregunto sería Astoria sentándose frente a el

—Claro que si Astoria ¿Por qué?

—P-pues e-es que ella —balbuseo — ella quizás no sea responsable, es una muchachita ...y además de que hace años que no sabíamos de ella. Se fue hace seis años con el novio tu crees que se tome enserio esto?

—Por eso mismo a lo mejor ella al ser mamá reflexionó. Además me parece una gran persona y aprende rápido y quiere seguir aprendiendo eso es lo importante— dijo con el celo fruncido era raro de Astoria que se expresa así de su familia.

Ella solo negó con la cabeza y soltó un gran suspiro espeso.

. . .

Habían pasado rápido las semanas, Hermione le iba muy bien en su trabajo se había desenvuelto en todo. Draco no podía negar estaba fascinado con ella, su forma de actuar, de pensar las ganas de aprender ...quizás era unos años mayor que ella pero la admiraba totalmente.

—Hijo te vez muy bien hoy. —hablo una mujer mayor de edad muy sofisticada de cabello rubio y ojos azules, miraba a su hijo encantada hace tiempo que no lo veía tan feliz...desde aquella desgracia.

—Gracias mamá. Pero voy igual que siempre.

—Claro que no,te vez más feliz últimamente, ¿quién es la fortunada?

—Nadie mamá—negaba con la cabeza con esa gran sonrisa

Al llegar a la oficina se encontraba como siempre con la puntual castaña detrás de aquel escritorio y sus rizos caían por sus hombros.

—Buenos días señor Malfoy. —saludo.

—Buenos días Hermione —le sonreía bobamente— antes de que se me olvide será que ...bueno quieres acompañarme hoy a una reunión

—C-claro —dijo tímidamente

—Bien nos vemos en la tarde.

....

La horas pasaron y ambos se encontraban en un bar restaurant. Había finalizado la reunión con otros bancarios quedándose ambos

—¿y bien háblame de ti?— pregunto el rubio

—Bien pues fui mamá joven de un hermoso niño, es mi sol , mi alegría — contaba con una enorme sonrisa al recordar a su pequeño

—Yo siempre quise ser padre... siempre ha sido mi deseo ser papá de un niño o niña claro...— tomo de su bebida

— Es muy hermoso ser padre bueno mi caso que me tocó ser ambos —Draco la miraba atenta y emocionado a la vez al ver cómo ella contaba todo.

Las horas pasaron con rapidez y ellos se entendían perfectame, toda la tarde la habían pasado riendo y platicando.

La castaña había vuelto a casa más feliz que nunca.

—¿y esa sonrisa?—pregunto la señora Granger

—Nada mamá , llegué tarde por qué me quedé un rato más hablando con Draco

—¿Draco?¿Tu jefe?—ella asintio— Hermione no seas tonta como tu prima... Con el tendrías un futuro prometedor sin complicaciones.

—Mamá, yo todavía espero a Ron...

—Hija no sea tonta, él no volverá.  Te dejo cuando más lo necesitabas más de 6 años que no sabes de él ni te pregunta ni nada.

La castaña se quedó callada en parte tenía razón hace tanto que Ron se fue para jamás volver... Tenía que empezar su vida sin él.

. . .

—¿Entonces fuiste con Hermione?— pregunto extrañada Astoria mirando a su mejor amigo, el asintio— vaya...

—Hermione es estupenda ...maravillosa —decia con emoción le brillaban los ojos tan solo de pensar en ella.

—Aja. Tengo que irme Draco hay trabajo.

Sin dejar que terminara de hablar salió de la oficina dejando desconrsetado al rubio

—¡Hermione!— hablo en tono alto Astoria acercándose al escritorio de está

—¿Que pasó?— dijo sin entender.

—Prima, sabes que te quiero mucho y bueno solo quiero que te alejes de Draco, él es un mujeriego y no me gustaría que volviaras a pasar lo mismo que con Ron—ella la miraba con el ceño fruncido — él solo quiere un acostó y ya Hermione te quiero y por eso te pongo sobre alerta

—Gracias Astoria pero entre Draco y yo no hay nada.

—Igual recuérdalo.

Sin más la ojiverde se alejo dejando a Hermione con un mal sabor de boca ¿Sería cierto eso?

...

  Los días pasaron tan rápido como el agua entre sus dedos. Hermione y Draco se entendían a la perfección ambos compartían   varios juntos e ideas. Era sábado y Hermione como siempre llevaba a su pequeño hijo al parque cercano de su casa.

—¿Draco?—pregunto extrañada caminando hacia el rubio quién llevaba un hermoso ramo de rosas blancas —¿Que haces aquí?

—Vine a verte y bueno te traje estás flores —le sonrió y estiró su mano con las flores ella alegre las tomo y un niño se les unió

—Nunca me había regalado flores...— suspiro oliendo aquellas— Hijo él es Draco, Draco Malfoy mi jefe —miro al niño y luego a Draco.

—Mucho gusto señor Malfoy—saludo con su pequeña mano.

Scorpius era un niño de 6 años cabello lacio castaña, con ojos azules y algunas pecas en la punta de su nariz era idéntico a su mamá pero los ojos a los de su padre

—Dime Draco, Scorpius tú mamá me habla mucho de ti

—Si—sonrio—¿Draco quieres jugar conmigo?

—Hijo Draco no creo que quiera jugar —hablo Hermione algo sonrojada.

—Hermione estaría encantado no te preocupes —la miro y luego volvió a su vista al pequeño—Claro que estaría encantado de Jugar contigo vamos?—el niño asintió y ambos corrieron hasta unas canchas de fútbol Hermione los veía desde el otro extremo con una enorme sonrisa. Su hijo muchas veces preguntaba ¿que era un papá? ¿Que hacían los padres e hijos?  Siempre observaba a sus amigos con sus padres deseando alguna veces compartir algo así
Hermione estaba sorprendida de ver cómo los dos se entendían y llevaban muy bien, reían jugaban y eso le enamoraba aún más a ella... Claro aún que todavía no se daba la oportunidad y cuidaba de no volver a pasar por lo mismo.

...

—Narcisa yo quiero mucho a Draco y estoy preocupada por él— hablaba una mujer mientras tomaba de su café

—¿pero que pasa Astoria?

—Pues ¡Ay! No se como empezar querida.—suspiro— ¿Recuerda a mi prima Hermione?—la mujer asintió con la cabeza — Bueno es que ella está enamorando a Draco solo por su dinero

—Pero si tú fuiste la que la recomendó.—jablo confundida la mujer rubia.

—Pues si pero creí que había cambiado, pero ella es igual que su madre una interesada y yo no sé cómo hacerle con Draco que no salga herido— dijo la castaña soltando todo el veneno acumulado.

—Hablare con él cuando vuelva querida —suspiro y negó con la cabeza— pensé que esa muchacha era distinta nada que ver a lo que me dices. Tienes razón no quiero que mi hijo...vuelva a pasar lo mismo

—asi es ella Narcisa da una cara pero es otra.—la mujer miro el reloj de su muñeca era tarde y tenía que volver al trabajo—Cisy tengo que irme espero que hables con Draco sobre la situación

—Claro que si Astoria gracias por decírmelo.

Sin más la castaña salió de aquella casa cuando estaba apunto de llegar al jardín se encontró con cierto rubio.

—Hola Astoria —saludo con un beso en la mejilla.

—Hola Draco—dijo nerviosa.

—¿y que haces por acá?

—Pues vine a saludar a Narcisa

—Que bueno, gracias —le sonrió. Ella asintió y cuando iba a seguir su camino —Tori quiero hablar contigo y bueno como te quiero y eres una persona importante para mí —la castaña lo veía ilusionada era verdad lo que pensaba que le iba a decir

—S-si d..dime —sonreia como nunca

—quiero que sea la primera en saberlo ... Estoy enamorado de Hermione.—solto así nomás con una gran sonrisa en sus labios .

—¿he?—dijo desconcertada y confundida mirándolo

—Eso quiero casarme con ella y ser el padre de su hijo ...

—Draco debo irme. Nos vemos luego —solto así nomás dejando al ojigris confundido

«No no no esa maldita  no se saldría con la suya» pensaba Astoria dirigiendose a su auto con lágrimas en los ojos

. . .

  —Hermione te vez más tan radiante.—dijo su madre mirándola

—y así es mamá —termino de colocar su labial—creo que estoy enamorada de Draco.

—Ya era hora hija, ambas sabemos con Ron se fue para quitarse la responsabilidad míralo ni siquiera viene a dar la cara en cambio Draco es un partidazo y ama a tu hijo y a ti...

—lo se mamá

. . .

—Hermione te amo y quiero pasar mi vida a tu lado y con Scorpius me preguntaba si te quieres casar conmigo?

Ella con lágrimas en los ojos sin más se lanzó a sus brazos era Feliz

—Si si quiero casarme contigo.

Ambos se fundieron en un beso tierno con mucho amor algo que esperaban desde hace tiempo

. . .

Había llegado el día más esperaron para ambos chicos.

Hermione llevaba un hermoso vestido suelto  color blanco y largo, su pelo estaba lacio y suelto atado por la parte de atrás solo dos mechones por enfrente.

Draco la espada con un elegante trage color negro y la corbata bien colocada. Y su cabello hacia atrás.

La boda fue maravillosa para ambos, sus mirada estaban llenas de esperanzas y futuro prometedor. Se amaban no era duda.

. . .

—Herm, querida tengo algo que contarte...—llegaba una Astoria aquella gran mansión.

—¿Ahora que pasó Tori?—rodo los ojos en blanco y la miro sería.— si vas a decir que Draco hizo o—la interrumpió

—Nada de eso, y esto es verdad Draco estuvo casado hasta con un hijo que no se hizo responsable, ahora mismo me he citado con su ex mujer

—Astoria de verdad no empieces con tus inventos

—No lo es, es más puedes acompañarme y verlo. Cuando Draco me pidió unos papeles de su computadora vi en una de sus carpetas y estaba un acta de matrimonio y una de divorcio. — la castaña la miraba con cierta desconfianza, Draco nunca le había hablado de su pasado.

— está bien vamos Astoria.—suspiro y tomo su bolso para salir con la otra castaña.

Había llegado al lugar de la cita,estaba una mujer de cabello negro y ojos verdes. Se veía muy refinada.

—Hola, eres Pansy?¿Cierto?—pregunto Astoria tomando asiento junto con Hermione

—Si lo soy. Tu eres la esposa de Draco verdad?—ella asintió mirándola fijamente— si supe que caso de nuevo por amigos en común lo supe. Yo estuve casa con Draco.

La castaña abrió los ojos como platos, no quería saber o desilusionarse de él. Lo amaba pero no conocía mucho de su pasado.

—Bueno como entenderás yo lo conocí muy poco y el nunca me había comentado de su matrimonio..—hizo una mueca aplanando sus labios miro su café y suspiro nuevamente— quisiera saber que pasó...

—Bueno Draco y yo éramos muy jóvenes cuando nos casamos.

. . .

—Draco...—susurro Pansy mirando a su recién llegado esposo. Cómo le daría la noticia el no lo merecía.

—¿Que pasó amor?—pregunto preocupado tomando su mano y dando un ligero beso.

—Yo...—dio un largo suspiro y le miro— tuve un aborto

—¿Qué? ¿Cómo paso? Si estás en perfectas condiciones todo iba bien y estás joven ¿Que pasó?— decía con desesperación mirándole fijamente no entendía que había pasado como fue tan rápido, ella jamás estuvo enferma de nada iba bien el embarazo.

—Por eso mismo Draco ... Soy muy joven para ser mamá—solto sin más secando sus lágrimas. Ella no pidió ser mamá no quería arruinar sus sueños y demás.

—¿Estás loca?—pregunto ahora en un tono molesto secando bruscamente sus lágrimas de sus mejillas.

—Si Draco dime cómo quieras, pero no quiero ser madre y creo que fue una mala idea el habernos casado tan jóvenes. Y quiero el divorcio.— ella habla segura y sin miedo, sabía que eso destrozaría al rubio pero que más daba era primero ella y solo ella

—Muy bien eso quieres —aclaro su garganta y se puso derecho de pie— pero lárgate ahora mismo de mi casa no quiero volver a saber nada de ti.

Sin más se fue el rubio con paso apresurado subiendo las escaleras, dejando una pelinegra alterada pero no haría cambiar su desición.

. . .

—Ahora entiendo por qué Draco no me mencionaba nada de esto y el por qué quiere tanto a Scorpius—miro a la mujer —Mi hijo.

—Me alegra mucho que Draco sea feliz contigo. Él es un buen hombre y hazle feliz el lo merece.

—Gracias de verdad.

. . .

Al llegar a su hogar y ver a su marido recuerdo todo lo que le había dicho aquella mujer. Sin duda Draco fue lo mejor que le ocurrió en su vida a ella y a su hijo.

Fue y le beso como si no hubiera un mañana, un beso lleno de amor, sinceridad y emoción. Lo amaba y eso no lo dudaba. Eran felices.

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top