Dedicado a DevoraLibros14--

Antes de leer, en este fanfic, el parto será natural, osea no habrá cesárea y en vez de eso, TaeHyung dará a luz de la forma tradicional. Si es que no te gusta la idea, puedes simplemente ir hasta el final.

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[Dos meses después]

TaeHyung

— ¿No estás viendo, cierto? — la voz de JiWoo me guiaba apenas, pues además de tener los ojos cerrados, también los tenía vendados.

— No, además no creo que pueda con esta bufanda. — hice un puchero y seguí siendo llevado por mi cuñada, quién tomaba mi mano con algo de fuerza.

— Siempre tenemos que asegurarnos. — dijo ella, para luego reír y soltar mi mano. Traté de buscarla, pues no era nada bueno estar vendado y embarazado. Podía caerme y hacerle daño a mi bebé.

Comencé a escuchar murmullos y pronto sentí dos grandes manos en mi cintura. Estuve a punto de gritar, pero antes de eso, escuché muchas voces y posteriormente un fuerte: ¡Felicidades!

Aquellas manos que estaban en mi cintura pasaron a desatar la venda y entonces pude ver la fiesta sorpresa que le habían hecho a mi pequeño.

Todos estaban ahí, mi hermano y su nuevo, mis padres, los padres de HoSeok, JiWoo, JiMin y hasta incluso YoonGi.

— Felicidades, mi amor. — susurró HoSeok, sujetándome nuevamente por la cintura y acariciando levemente mi vientre.

Ahora tenía ocho meses y por tanto, me encontraba demasiado cerca del parto y de conocer a mi bebé. HoSeok estaba igual de emocionado que yo y al parecer todos nuestros familiares por igual.

Me guiaron hasta una silla en el centro de la sala de estar y el primero en acercarse con un regalo en manos fue JiMin, mientras mi madre se marchaba del salón junto a la madre de HoSeok, pues ambas tenían que regresar con los bocadillos que habían preparado para hoy.

— Espero que le guste al pequeño. — JiMin acarició mi vientre ligeramente y dejó el regalo en mi regazo.

Detrás de JiMin se encontraba SeokJin, quién me entregó un regalo envuelto con un lindo papel rosa pastel y una cinta plateada.

— Estoy seguro de que será niña y todo lo que viene dentro de este pequeño obsequio ha sido especialmente escogido para mi sobrina. — el pequeño obsequio de SeokJin era un regalo mediano y muy pesado, por lo que tuve que dejarlo a un lado, junto al regalo de JiMin.

Después de SeokJin se encontraba YoonGi, quien venía con un oso que tenía en su cuello un lazo.

— No te conozco, niño, pero te traje esto y vine por los bocadillos, y por él. — susurró lo último. Rápidamente miré a quien señalaba y me sorprendí al ver a JiMin sentado y hablando con SeokJin.

Abrí mis ojos en par, pues jamás pensé que YoonGi estuviera interesado en JiMin, pero al parecer nadie sabe lo de nadie.

Posteriormente YoonGi se alejó y fue el turno de mi hermano, NamJoon, quién rápidamente me sonrió y se arrodilló al frente de mí, acariciando mi vientre apenas y entregándome un pequeño, muy pequeño, pero significativo obsequio.

— Es algo muy especial para mí, TaeTae, así que espero que al pequeño bebé le guste.

NamJoon se había comportado como un completo idiota al inicio de mi embarazo, pero ahora era el tío perfecto para mi hijo o hija. Nam era una buena persona.

— Gracias Nam... — le agradecí desde lo más profundo de mi corazón, pero antes de que él contestara fue empujado por JiWoo, quién le advirtió que se estaba demorando demasiado.

— Después de ver mis obsequios estoy segura de que el regalo de Nam quedará como un trapo viejo. — JiWoo no conocía del todo a NamJoon, pero habían entablado una bonita amistad hace un tiempo atrás y ahora eran buenos amigos y tenían la confianza de empuajrse y sacarse la lengua. — Mi regalo es un vestido y un trajecito, por si es niño, pero lo especial es que ambas prendas fueron nuestras, osea el traje era de HoSeok cuando bebé y el vestido era mío.

Me pareció demasiado tierno la acción de JiWoo y quise demasiado abrazarla. Sin embargo, HoSeok la empujó y también le dijo que se estaba tardando, así que lo único que hizo mi cuñada fue sacarle la lengua.

— Mi regalo es el más bonito, bebé. — HoSeok se arrodilló por igual y colocó su mano sobre mi vientre, de inmediato el bebé comenzó a patear y aunque me doliera un poco, sabía que estaba alegre de sentir el tacto de su otro padre.

Mi madre y la madre de HoSok llegaron poco después con unas bandejas llenas de bocadillos y el señor Jung ayudó en todo lo posible, al igual que mi padre, quien estaba riendo junto al padre de mi novio de quién sabe qué.

Los bocadillos estaban muy deliciosos, cogí por lo menos tres bocadillos de cada bandeja que había en la mesa y luego de ver el pequeño pastel que habían comprado me dieron unas grandes ganas de dejar todo de lado y darle una probadita. Los antojos seguían atacándome, a pesar de que ya había pasado esa etapa.

La hora de abrir los regalos llegó, todos se sentaron alrededor de mí, observando con cuidado como escogía entre todos los regalos, pues mis padres y los señores Jung también habían comprado regalos a parte.

Decidí que el primer regalo que abriría sería el de HoSeok quién al parecer se había esforzado demasiado en conseguir el regalo perfecto para nosotros.

Cogí la caja mediana y la abrí, encontrándome con tres collares bañados en oro. Me sorprendí demasiado, en especial cuando ambos se abrían.

— Podemos tomarnos una foto familiar cuando el bebé nazca y luego colocarla aquí. — HoSeok me señaló en lugar vacío y no pude sonreír más en grande.

Lo abracé con mucha fuerza y dejé besos en todo su rostro, hasta acabar en sus labios. Él me correspondió el beso, pero el carraspeo de ciertas personas nos interrumpieron y también una pequeña incomodidad que provenía de mi vientre bajo. Maldije por lo bajo al sentir un dolor que iba aumentando y por el cual tuve que sujetarme a los brazos de mi novio. HoSeok me miró algo extrañado y mis familiares por igual, incluso YoonGi y JiMin, quienes estaban demasiado ensimismados en su conversación, me prestaron atención.

— ¿Estás bien? — preguntó mi novio. Traté de asentir al ver que el dolor iba desapareciendo, pero luego volvió con más fuerza y ahí sí solté un gritó.

Mis padres se me acercaron y en cuanto mamá me vio, supo que ya estaba pasando.

— Está dando a luz. — dijo en un susurro, que fue oído por todos, pues había un silencio sepulcral muy sorprendente.

— ¿Qué? Pero falta un mes todavía y si... — HoSeok se volvió un niño asustado, que quería alejarse de mí. — tal vez solo es una de esas falsas alarmas.

Me coloqué de pie como pude al ver que HoSeok tenía intenciones de salir huyendo, pero apenas me coloqué de pie, sentir algo frío bajar por mis piernas y todo el salón se quedó en silencio para cuando rompí fuente.

— E-esto no es un maldito simulacro, HoSeok, estoy dando a luz ahora mismo. — mi padre me ayudó a avanzar y HoSeok, al darse cuenta de lo idiota que se veía, corrió escaleras arriba para traer la mochila que habíamos preparado.

Papá me ayudó a subir a su auto y posteriormente pasó a subirse él, siendo seguido por mamá y HoSeok, quién se subió a mi lado y sujetó mi mano, dejando el maletín del bebé en el suelo del auto.

— Estamos juntos en esto, Tae. — susurró, sonriéndome al final. — Vamos a ser padres. — dice con orgullo, a lo que termino sonriendo.

— Estamos juntos en esto, hermanito. — la voz de NamJoon se me hace extraña, al igual que su presencia en el auto. Se ha colado en el maldito auto.

Veo a lo lejos a JiWoo subir en su auto, siendo seguido por JiMin, YoonGi y SeokJin. Los padres de HoSeok trajeron auto, por lo que también se subieron al suyo.

Todos estábamos listos para irnos y yo no dejaba de gritar y llorar mientras apresaba la mano de mi novio y la de mi hermano. ¡Diablos! Realmente no me volvería a embarazar, no podría soportar esto de nuevo o nunca.

Grité durante todo el camino y solté alguna que otra lisura mientras respiraba hondo. Al llegar, me entregaron una silla de ruedas y en recepción explicaron que aún no podían atenderme, pues mi parto estaba programado para dentro de un mes.

— ¡Pero está dando a luz ahora mismo, incluso se le ha roto la maldita fuente! — gritó mi hermano, mientras HoSeok se encontraba arrodillado a mi lado, tratando de tranquilizarme con sus estúpidas palabras.

Todo esto era culpa de HoSeok, el maldito idiota había roto el maldito condón y ahora estaba muriéndome del maldito dolor. Sé que estaba maldiciendo demasiadas veces, pero en verdad me dolía, sentía que ese bebé deseaba romper mi piel o en todo caso, todos mis órganos.

No sé qué habrá ocurrido, pero mi hermano y padre lograron que me atendieran y llevaran directamente hacia la sala del parto, pues ya había entrado en labor de parto y cuando el doctor, que había llevado todo mi embarazo, indicó que mi dilatación estaba al máximo y por tanto, ya podía comenzar a pujar, tuve demasiado miedo.

¡Yo quería la maldita epidural! Pero cuando lo mencioné/grité, el doctor me indicó que ya era demasiado tarde para eso y que tenía que hacerlo de la manera tradicional.

HoSeok se quedó a mi lado en todo momento, a excepción del momento en el que tuvo que irse a cambiar para así entrar al lugar. Él sujetó mi mano en todo momento, incluso cuando el doctor me dijo que pujara con todas mis fuerzas. Claro que lo hice, pero el dolor aumentaba cada vez más y HoSeok lo único que hacía era ver sobre la gran manta que habían colocado encima de mis piernas abiertas.

— ¡TaeHyung, tú puedes! — me alentó el doctor, pero yo ya no podía, había pujado cinco veces con todas mis fuerzas, pero nada ayudaba, pues no sentía que el bebé saliera y al parecer el doctor tampoco lo veía. — ¡Una vez más o tendremos que preparar el quirófano!

Aquello me asustó, pues al parecer el bebé no salía o no quería salir, no sabía con exactitud. Sin embargo, me obligué a gastar todas mis energías y pujar.

Observé el rostro, algo sonriente, del doctor y entonces me incitó a volver a pujar, cosa que hice, sintiéndome cada vez más cansado y sin energías.

— ¡Solo dos veces más, TaeHyung, ya está aquí, el bebé ya está aquí!

HoSeok me sonrió y en su curiosidad, quiso ver por encima de la manta, pero no fue una buena idea, pues el desgraciado se desmayó. Las enfermas fueron a auxiliarlo y lo único que me quedó fue pujar dos veces más con todas mis fuerzas y posteriormente escuchar a el llanto de mi...

— ¡Es una niña! ¡Una niña! — gritó el doctor y entonces pude descansar, dejarme caer hacia atrás y cerrar levemente los ojos, mientras trataba de recuperar el aire.

Miré de reojo a un HoSeok desmayado y sonreí, pues aunque hace un rato estaba maldiciéndolo por haber roto el condón, ahora mismo lo agradecía, pues la niña que me colocaron en el pecho era totalmente preciosa, tenía los ojos cerrados, estaba manchada de sangre y lloraba a todo su esplendor, y aún así seguía siendo bella.

Solo una de ustedes acertó, la chica a la que va dedicado este capítulo.

Antes de que digan algo, el sexo del bebé y el nombre de la nena ya estaba planeado desde la temporada anterior, incluso toda esta temporada ya tiene un final un desarrollo y posiblemente hasta otra temporada. Idk.

Espero no haberlas traumado. Me disculpó ante todo ♥

Cualquier error ortográfico será arreglado al final.