HoSeok

La sonrisa plasmada en mi rostro era grande y según algunas de mis compañeras, radiante, al igual que el brillo en mis ojos. No era de compartir información personal con todos mis compañeros, pero cuando comenzaron a preguntar la razón de mi felicidad, no me pude contener y les conté que ya me había convertido en padre. Claro que no todas estaban enteradas de que tenía un novio embarazado, por lo que claramente noté el desagrado en sus rostros y poco después algo parecido a hipocresía, pues me felicitaron y comenzaron a hacer preguntas innecesarias. Tuve que simplemente decirle que tenía una niña y que estaba feliz por eso, algunas de las compañeras que sí estaban al tanto de mi situación me felicitaron de corazón y prometieron comprarle un regalo a mi hija, aunque les dije que no era necesario.

— ¿Todo está bien por allá? — pregunté por quinta vez, mientras sujetaba mi celular. — Sí, cariño, sé que te lo pregunté hace como dos minutos atrás, pero quiero saber si es que tienes algún percance con SeolHyun. — escuché a TaeHyung bufar por lo bajo y al final negarlo y decirme que alimentaría a la bebé, por lo que tenía que colgar. Sabía que lo había hostigado, por lo que simplemente acepté y colgué, no sin antes despedirme de él y mi hija.

— Eres todo un papá orgulloso. — dijo JiMin, golpeando mi espalda, para luego sentarse a mi lado, en el banco.

— No sabes lo feliz que estoy, JiMin. — dije con total emoción. — jamás le vi algo de interesante a este trabajo, pero creo que encontré mi vocación.

— Pensé que tu vocación era bailar. — dijo un tanto confundido. Reí y negué.

— Yo también lo pensé, pero mi verdadera vocación, desde que vi a SeolHyun, es ser papá y la segunda es ser bailarín.

JiMin me sonrió y asintió, comenzando a jugar con sus manos. Sabía que quería decirme algo.

— Ya sueltalo, Park. — dije sin pensarlo dos veces. JiMin me miró y asintió.

— Llevo saliendo con alguien desde hace un tiempo y ahora que me ha pedido ser novios oficialmente no sé qué decirle. — me dijo tan rápido que por un momento pensé que no entendería nada, pero lo hice, milagrosamente lo hice.

— Déjame adivinar, ese alguien es YoonGi. — él asintió sin dudarlo en ningún segundo.

— Ayúdame, HoSeok, siento que estoy haciendo mal, que hice mal al aceptar salir con él en primer lugar y... y...

— y se debe a JungKook, ¿Cierto? — JiMin asintió. Realmente me sentí un poco mal por mi amigo, pues había pasado tanto tiempo con JungKook que sin este parecía estar perdido y eso era lo más lamentable, pues ahí cualquiera se da cuenta que su relación no llegó a ser tan buena como parecía.

— Ya no amo a JungKook, pero todavía le tengo algo de aprecio y yo no soy igual que él, a mí no se me va el amor de la noche a la mañana, pero YoonGi ha demostrado ser diferente y es muy paciente conmigo. No sé qué hacer. — JiMin se veía algo desesperado.

— JiMin, si aceptaste salir con YoonGi, en primer lugar, fue por algo, no dudo de los pocos sentimientos que tienes por JungKook, pero tampoco dudo de los sentimientos que están naciendo por YoonGi. Ha pasado un tiempo desde que terminaste con JungKook, creo que es hora de que intentes ser feliz con alguien más. No pretendas guardarle luto por siempre, ya que lo único que vas a ganar es arrepentirte al ver que perdiste algo que pudo ser muy lindo.

JiMin me escuchó atentamente y al final me sonrió.

— ¿Sabes qué es lo mejor? — me dijo. — que a pesar de que JungKook es tu mejor amigo, me diste un buen consejo, en vez de gritarme o decirme algo feo por tratar de iniciar una relación con alguien más.

— Jamás haría algo así, JiMin, tú también mereces ser feliz y nadie puede impedirlo, ni siquiera yo. 

— Eres un gran amigo, HoSeok. — fue lo último que me dijo antes de retirarse, pues había recordado que tenía que hacer un trabajo grupal con unos chicos. Reí y asentí.

La mañana pasó muy rápido y para cuándo me di cuenta ya me encontraba saliendo de mi aula en dirección a mi trabajo, y contando las horas para ver a SeolHyun y a TaeHyung. Quería esforzarme en lo máximo, pues a pesar de que TaeHyung y yo hubiéramos acordado que viviríamos en nuestras respectivas casas, yo me había prometido que compraría algún departamento para empezar nuestra vida familiar. Sé que no ganaba mucho dinero con mi trabajo de medio tiempo y que todo iría directamente para SeolHyun, pero aún tenía las esperanzas de ahorrar un poco.

Iba ir directamente hacia la parada de autobuses, cuando una silueta muy conocida para mí me detuvo. JungKook me sonreía, mientras cargaba una bolsa de regalo.

— ¡Felicidades papá primerizo! — JungKook me abrazó, le traté de corresponder, pero realmente estaba apresurado. — Ya me enteré que nació tu hija. Ya te veo comprando una escopeta para cuando ella cumpla quince años y quiera presentarte a sus novios.

Rodeé los ojos y al final reí. Realmente no tenía tiempo, pero había extrañado a JungKook, especialmente porque la última vez que nos vimos lo único que hicimos fue discutir.

— Esto es para mi sobrina. — me entregó la bolsa y no pude hacer nada más que sonreír y agradecerle.

— Gracias, JungKook, pensé que estaríamos toda la vida enojados con-

— Eso jamás pasará... — me interrumpió.— prometimos ser mejores amigos por siempre y no cambiará... ¿JiMin?

Voltee hacia donde se hallaba mirando JungKook y efectivamente ahí estaba JiMin, venía saliendo junto con JongIn, quien parecía más bien seguirlo.

— ¿Cómo va él? — preguntó mi mejor amigo, viéndolo caminar hacia nosotros o mejor dicho, hacia la salida de la universidad.

— Bien, lo está sobrellevando mejor de lo que pensé.

JungKook asintió, mientras mantenía su mirada en nuestro amigo bajito, quien al parecer no se percató de nosotros por culpa de JongIn, quien venía molestándolo e insistiéndole para tener una cita.

— ¿Y tú? ¿Cómo te va con ella?

JungKook se alzó de hombros, restándole importancia.

— No lo sé, terminé con ella hace poco.

Y ya sabía la principal razón por la que se encontraba aquí, lo más probable es que quisiera hablar con JiMin para conquistarlo de nuevo y el cuento ya se lo saben.

— Lo siento, JungKook, pero JiMin ya está sa-

Y me vi interrumpido cuando JiMin llegó gritándole a JongIn que ya estaba saliendo con alguien más. JungKook me miró de inmediato, como pidiéndome una explicación, pero no había mucho que yo pudiera decir.

JiMin se percató de nuestra presencia solo cuando JongIn le dijo que su ex "muñeco de torta", es decir JungKook, se encontraba aquí. Mi amigo bajito se sorprendió, pero al final dio media vuelta y se encaminó hacia la parada de autobuses.

— ¿Está saliendo con alguien?

Asentí. — lo siento JungKook, pero JiMin...

— Lo sé, lo sé y la verdad me alegra. — por primera vez mi amigo sonó sincero y aunque me diera pena, sentía que ellos necesitaban pasar por esto para salir adelante.

Jungkook me acompañó hacia la parada de autobuses y me deseó suerte en la nueva etapa que estaba afrontando. Yo también le deseé suerte, pues sabía que a pesar de que él se negara y le deseara lo mejor a JiMin, seguía enamorado de este.

Pobre JungKook, ya perdió su oportunidad [...] No me maten por lo que va a pasar más adelante please, porque ya se viene el drama ;-;