Dieciocho años habría cumplido ese día, pero no hubo pastel ni celebración, en cambio reunidas las familias, esperaban noticias o algún tipo de información.

Muchos habían muerto, cuando fueron enviados a aquel destacamento. Ni siquiera sabía que los alumnos pudieran hacerlo. Pero cierto era, estaba sucediendo.

Su chico de cabellera negra, el amigo de detrás de la cerca, no volvió más. No encontraron su cuerpo, pero un año después, ya lo daban por muerto.

La puerta sonó y a todos sobresaltó.

La sombra tras el cristal, el corazón les paralizó.

No era más que un capitán, llevando sus prendas a entregar.

—Y esto es para ti, sé que te lo quería dar.

El corazón volvió a quebrársele cuando el primer papel desdobló y su letra pudo reconocer.

Llantos desgarradores inundaron todo el lugar. No cesaron. No podía parar.

𝕰𝖛𝖎𝖎 𝕭𝖑𝖚𝖊 ʚĭɞ