— Si quiere cocinar correctamente un pollo BBQ tiene que considerar los siguientes paso...

Minho suspiró, cansado, viendo todo los ingredientes en su mesa. La puerta fue abierta, llamando la atención del alfa, quien al ver a su terrible mejor amigo rodeó los ojos.

— ¿Cómo sigues sacando una llave si ya te las quite? — preguntó retomando su labor.

— Ah... ¿Por que sigues dejando una llave debajo del matero? — comentó gracioso, dejo su bolso a un lado y se acercó al peliazul. — ¿Por qué cocinas? Nunca lo haces...

— Es para Jisung — informó sin verlo.

— Ya veo... — el pelimorado de acercó a ver, probando la salsa sin que el contrario se de cuenta. Alzó las cejas al recibir un buen sabor en sus labios. — ¡Está bueno!

Minho lo vio y le empujó suave a un lado, quitando cerca de la comida. Hwang río un poco y caminó por el lugar, casi dando un grito asustado al ver otro chico entrar por el pasillo.

— ¡Mierda!, ¿Qué demonios hace este aquí? — preguntó exaltado el mayor, Minho vio y escondió sus labios al notar a su amigo tan asustado.

— Vino a ayudarme.

— ¿Pero no lo odiabas?

— ¿Me odiabas? — preguntó Sim confundido, volteando a ver al peliazul, quien negó suave. Tomando por loco al alfa asustadizo.

El australiano camino a su lado, viendo lo que comenzó. No iba a negar que no creyó ayudar al chico en la cena de su cita. Pero quería a Jisung y sabía que esto le haría feliz.

Tampoco iba a negar que al principio fue incómodo, el pelinegro solo se preguntaba de donde saco su número pero cuando llego aquí, sintió el olor de su lindo amigo ligado a él, lo supo.

No iban a ser mejores amigos ahora, pero quisieron unirse por un bien común: hacer feliz al pecas.

Hwang los veía confundido, como si estuviera en un sueño. Hace una semana vio a Minho llorar por que Jisung tenía de amigo a este chico, luego escucharlos a ambos dándose y no consejos. Para pasar a ver la razón y el problema hablando sobre la sazón de la crema.

— No entiendo — continuo el pobre.

— No hay mucho que explicar, Hwang. — habló Lee dándole una cucharada a Jake para que la pruebe. — Ya hicimos las pases.

Jake probó y asintió — Te quedo bien. Me impresionas para casi quemar la primera muestra — comentó sarcástico. Haciendo reír un poco al peliazul.

Definitivamente para Hyunjin esto será difícil de creer.

***

Finalmente habían acabado, justo a tiempo para Minho. Quien acompaño a Jake a la puerta, entregándole una taza llena de comida en forma de agradecimiento.

Jake las vio y tomó, — Gracias hyung.

— A ti, de hecho lamento si te trate mal en el campamento, no era yo completamente. Solo actuaba por instinto.

— No te preocupes... — vio la taza en sus manos, soltando un suave suspiro. — ¿Te puedo pedir un favor?

— Dime. — Lee se recostó a un lado de la puerta, atento al pelinegro.

— No le hagas daño a Hannie. — le vio a los ojos — A él le gustas demasiado y es un corazón de pollo, sufre muy rápido. Conozco muy bien sus mañas y por lo que pasó... Minho, confío en ti, ¿vale?

— Lo menos que quiero es eso, Jake. Tu tranquilo — Minho comprendía al chico y el sabía por que lo decía.

Estaba entregado a su pequeño omega en él. Jake estaba dejando ir a Jisung.

Finalmente el pelinegro se fue, sintiendo su lobo algo triste, sentía su corazón romperse un poco pero sabía que estará tranquilo en el futuro. Sus sentimientos jamás serían correspondidos por el pequeño y ahora lo sabía.

Y si, a pesar de ayudar al peliazul y estar allá, sintiendo el olor de ambos, no rompió en llanto hasta ahora, permitiendole a su lobo sentir como debía.

Por otro lado, Minho no solo lo invito para ser ayudado. También para que viera que él y Jisung ya habían formalizado en cuanto a su naturaleza.

No lo juzguen, solo quería marcar un poco de territorio en cuenta al alfa presente.