Escena 3:-
Ares: ??? ~ Bosque de el Árbol Milenario. ~

No estaba tan lejos de la fogata, así que recogí la mayor cantidad posible de madera y regresar, seguramente la fogata se apagaría y pasaríamos frío lo que restaba de la oscuridad. La cosa blanca de el cielo no iluminaba lo suficiente el lugar y era fácil perderse. Además, si me perdía, dejaría a Temis sola deambulando en este bosque sin nadie quien la guíe por allí, estaría indefensa y los monstruos la atacarían sin dudarlo ni un solo instante.

Debía estar preparado para esos ataques, debo buscar rápido las ramas antes de que sea demasiado tarde o nos ataquen. Había suficientes ramas en el piso, así que las fui tomando una por una, sin dejar una sola por el camino. Ruidos de criaturas desconocidas llegaban a mis oídos junto a pisadas, encontré una con ramas sobre su cabeza seguidos de dos, pero la segunda era más pequeña, los tres se perdieron en la oscuridad de el bosque sin girarse. Más adelante había criaturas que se alejaban volando por los cielos, lucian adorables mientras pasaban por la cosa blanca de el cielo. Unas criaturas peludas me veían, olfateaban y se alejaban de nueva cuenta, varias criaturas se acercaban a mi a olfatearme.

Había tantas cosas que yo desconocía y deseaba poder conocerlas todas.

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No sé cuánto tiempo llevo caminando, pero de algo estoy muy seguro, me e terminado por perder y me aleje de dónde está Temis. Seguramente va a despertar muy asustada y no verá a nadie acompañándola.

Solo si me acordará cuál era el camino correcto llegaría a dónde estamos. Pero todo estaba oscuro y la cosa blanca de el cielo no alcanza a iluminar correctamente. Estoy empezando a tener miedo, escucho voces y pasos acercarse a dónde estoy, los reconocía, en aquel lugar siempre había pasos y era cuando hacíamos algo mal y nos iban a buscar a darnos un castigo. Empecé a correr, no debía voltear hacia atrás o ellos se darían cuenta, solo debía de correr más rápido para así dejarlos atrás, que no se den cuenta, necesito ser silencioso en mis pisadas, pero las cosas que caen de estos árboles son demasiado ruidosas que delatan mis pasos.

«Se fue por aquí...»eran voces de adultos, eran hombres, no, eran horribles monstruos que buscaban hacerme daño, querían hacerme daño para matarme y venderme en pedazos a esos huéspedes. Debo, debo ser más rápido, debí escapar. Aunque los arbustos golpeen mi rostro y las raíces me hagan tropezar, no debo dejar que me atrapen esos monstruos. Aunque sus garras estuvieron por atraparme, me logré liberar continuando mi huida, no debía dejar que me tomarán, no sabía a dónde me.llevariam mis pies, debía ser más rápido y lograr sobrevivir a ellos.

Pero llegué a un lugar extraño, los árboles formaban un círculo y en su centro, había un árbol, el más grande que jamás haya conocido hasta ahora. Los pocos árboles que e visto eran los cultivos de Trauben en aquel lugar, pero este, alcanzaba el color negro de arriba con sus enormes ramas, tapaba la cosa brillante y se veía demasiado viejo ya. Al querer acercarme, unas garras me habían atrapado y me taparon la boca.

Unas manos oscuras y sucias que me tocaba por todo mi cuerpo. Chille, di patadas y trate de quitarme los de encima, pero nada funcionó, solo tocaban más y más mi cuerpo, poco importandoles mi resistencia a sus caricias en mi cuerpo. Tengo ganas de vomitar y llorar, más llorar, no quiero que me toquen, que alguien venga a salvarme.

Uno empezó a meter su mano bajo mi camisa, mientras el otro me quitaba mis botas, tomando el botón de mi pantalón empezando a bajarlo.

¿Pero que pasa? ¿Que es esa luz?¿Porque me llega olor a quemado a mi nariz?.

- ¿Que es eso que tiene en tu brazo?-con mi visión borrosa a causa de las lágrimas, ví algo azul en el brazo de quien tenía su mano debajo de mi camisa, era una llama, pero su color era azul turquesa.

Dándole palmadas para apagarla, está se extendió más y más por todo el brazo, hasta que lo cubrieron a él por completo, quien me estaba quitando mis pantalones trato de ayudarlo, pero unas raíces lo sujetaron con fuerza contra la tierra, mientras unas me alejaban de ellos para mantenerme a salvó.

Tome una de las ramas que se me habían caído asustado, sujetándola firmemente esperando que ellos se fueran. Seguían luchando por librarse, uno de las raíces y otro por apagar el fuego, hasta que algo hizo que la sangre cayera al piso. Sus cuerpos tenían quemaduras y parte de las raíces, que volvían a la tierra, además de eso, mostraban que algo más los atacó, eran heridas extraña y abiertas, dejando ver parte de sus cuellos y lo que tenían dentro, ellos tampoco se esperaban que lo que los atacó fuese dirigidos a ellos, había cuchillas en el piso que fueron lanzados por alguien más, alguien que sabía cómo usar el arma

A pesar que mis piernas casi no respondían, logré ponerme de pie sin soltar la rama, hasta que una sombra oscura cayo sobre mi, pero no me hizo nada.

- ¿Niño, estás bien?

Alto, con una cabellera hasta la mitad de la espalda, piel clara e iluminado por la cosa blanca de el cielo, se hayaba un chico de aproximadamente unos dieciocho años de edad, vistiendo una camisa roja, con unos pantalones y abrigo negro, alrededor de su cuello se hayaba una bufanda. Su expresión era sería y no daba miedo, es como si, algo en mi se sintiera seguro a su lado.

¿Porque me salvó de estos hombres? ¿Fue el quién causó el fuego azul e hizo que las raíces se activarán para atacar a estos hombres?

El no respondió, no, el estaba esperando mi respuesta. Yo seguía temblando sujetando la rama, hasta que mi voz por fin salió. Una leve ráfaga de aire movió mi cabello, mientras seguía viendo al chico.

- S-si...

- ¿Tu los quemaste acaso?

Así que no fue el, eso resuelve mi duda. Negué ante su pregunta, mientras el me extendió su mano, de el susto, retrocedi, mientras me mantenía siempre en alerta, viendolo.

- Me llamo Jack... Jack Addams... ¿Cuál es tu nombre?

Lo mire con calma, mientras extendía mi brazo titubeando a causa de el frío y el cansancio.

- A-Ares Moonlit...-me presente estrechando su mano con la mía.

Tenía una sensación muy cálida, era un agradable calor. Claro, el es un ser humano, no una máquina de matar como las que había en aquella fábrica de el terror. El era un ser humano que no se veía capaz de matar a nadie.

Ah, creo que quiere que lo siga, pero antes de siquiera reaccionar, algo me daba golpecitos. Busque hasta ver un pequeño pulpo asomarse de mi abrigo, señalando el bosque repetidas veces.

- ¡Temis, oh no, iba a seguirlo y a ella la iba a olvidar! ¡Temis!-corri hacia el bosque, siendo seguido por el chico, mientras corría buscando a mi nueva amiga, la única que no me traicionó.

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Conocía el camino, así que no fue tan difícil perderme en este bosque, seguí la leve luz de la fogata, seguido por Jack, quien no se separaba de mi. Levantaba mi suéter que era bastante largo, para que no se atorara en las espinas que había cerca. Por fin llegué, Temis seguia dormida cerca de el fuego, que poco a poco se iba apagando. Me agache para despertarla, pero se negaba en hacerlo, ella quería seguir durmiendo.

Busque debajo de mi abrigo hasta encontrar mi frasco y sacar de allí a Kekram, acercándolo a Temis, como sabiendo que deseaba, hecho un chorro de agua sobre el rostro de la pelirroja, quien despertó asustada dándome un puñetazo en mi nariz.

- ¿Que paso?

- Me rompiste mi nariz...-me queje sujetándola, Jack se arrodilló frente a ella, extendiendo su mano, asi como lo hizo el conmigo.

- Me llamo Jack Addams, ¿Cuál es tu nombre?

- Temis Lang, soy Jakokuense ~♪

- No luces como una...

- Tenemos familia Beelzeniana en nuestra sangre...-explico tranquila, mientras se levantaba, tomando mi mano.

Ambos decidimos seguir a Jack, quien nos tomo de la mano sin importarle quienes somos.

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Escena 4:-

Behemo: ??? ~ En algún Lugar. ~

El recuerdo tiene un corte aquí.

Así que Ares, después de haber escapado de aquel lugar, casi ser violado por dos locos salidos de un manicomio, protegido por llamas plateadas y raíces de árboles, fue rescatado por este chico, Jack Addams, quien fue el que le dió el golpe de gracia a esos hombres.

Estoy seguro que Nemesis ya debió de verlo y está empezando a sacar conclusiones, yo no podía decir nada, no soy psicólogo, solo podía dar mi opinión cuando vea todos los recuerdos. Tome el hilo en mis manos, volví a nadar en el mar buscando el siguiente recuerdo, hasta hayarlo. Este era igual al anterior, salvó que allí ya pasó el tiempo, puede que días, puede que meses, puede que años.

Pero Ares en este recuerdo ya tenía diez años cuando conoció a alguien que... Oh Dios... ¡¿Cómo es posible que el la haya conocido?! ¡¿Que acaso es su...?!

Me tuve que dar una bofetada antes de sacar conclusiones demasiado rápido.

«Bha...» seguramente es una mujer idéntica a ella respecto al físico, solo eso, si, eso debe ser, una mujer idéntica a ella, debería ver este recuerdo antes de continuar el resto. Debo ver toda la infancia de Ares antes de avanzar a su adolescencia hormonal, tengo sospechas de que su relación con William se verá aquí más pronto de lo que pensaba.

Antes de darme cuenta, alguien ya me llamaba, de nuevo volví a ser Ares.

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Escena 5:-
Ares: Levianta~ Alicegrad. ~

- Ares~, despierta~, ya salió el sol~

- ¿Y que quieres que haga? ¿Fotosíntesis?

Si, en los dos años que llevo viviendo con Jack y su madre, la señora Clarissa Addams, descubrí varias cosas que antes no sabía. En respecto que la cosa blanca de el cielo se llama luna, que la oscuridad que reinaba se llamaba noche y la cosa brillante que había en el cielo se llamaba sol y al iluminar todo a su paso se llama día. Un enorme mundo por explorar, un mundo que estoy dispuesto a descubrir muy pronto y nada ni nadie me va a detener.

Me levanté viendo somnoliento al piso, allí estaba un libro de física, un trabajo de la escuela, me desvele parte de la noche en terminar de estudiar, mire a mi lado encontrando mi cuaderno, el cuál cerré mientras lo guardaba en el bolso de mi mochila. Me levanté colocándome mis botas, tomé el libro y lo guarde, tome el lápiz y la pluma que había en la mesa. Dando un salto, baje de la cama medio dormido, chocando contra la puerta a causa de la fatiga de el sueño, la abrí y entre a lavarme la cara, no soy mucho de querer bañarme, más porque ahorro el agua y mi cabello se le forman rizos al estar húmedo.

Seque mi rostro y me ví en el espejo, era el vivo reflejo de mi madre, una mujer Elphe de un cabello verde intenso como el mío, aunque, no sé quién sea mi padre, seguro es un extranjero que viajaba mucho, madre siempre sale por muchos días a buscarlo, le e pedido que me lleve, pero no lo hace. Ella me dejó en casa, pero seguro me debe estar buscando luego de que esos tipos me llevarán a aquel lugar, de el cual no deseo volver a saber nada. Un día apareceré frente a nuestra casa, cuando sea más sabio y poderoso, así ella ya no tendrá que salir a buscar a papá.

Salí de el baño, en dónde Temis ya me esperaba arreglada. Solo llevaba su kimono con estampado de flores de siempre y sus sandalias, se había recogido su cabello en dos coletas y el resto lo dejó caer, era una especie de color rosa con rojo fusionados, era lindo a mi punto de vista.

- ¡El último que baje, va a comer su desayuno frío!

Y ese era el grito de Jack, tome mi bolso rapidamente y baje a desayunar.

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En la cocina se encontraba el, preparando el delicioso desayuno. Sentada en una silla de ruedas, estaba Clarissa, quien escuchaba las noticias de la televisión, una caja de madera con una pantalla que mostraba imágenes a color y en vivo, con personitas que se movían mostrando las noticias que pasaban por el mundo y botones que servían para cambiar los canales. Tenía un control a distancia que de ves en cuando funcionaba.

Jack se acercó a servirnos nuestro desayuno, ¡Genial!, Son hotcakes con tocino, me encantan, más con le coloco la miel encima junto a la mantequilla, también con mermelada, me empecé servir el jugo de naranja que había preparado Clarissa, todo, todo era delicioso. Temis ya se me había adelantado en comenzar a desayunar. Jack se sentó al último, comenzando igual a comer y escuchando las noticias, haciéndonos callar y subiendo el volúmen para escuchar mejor.

«En otras noticias, Jason Voorhees será liberado, ya que se a dejado en claro que el chico solo fue una víctima más de uno de los dos asesinos más buscados por todo Evillious, Jack The Ripper y El Carnicero de Levianta... En otras noticias, se a descubierto el cuerpo de otra mujer Beelzeniana, que muestra claras señales de abuso sexual y que le fueron arrancados los ojos...», el hombre continuo hablando, mientras continuamos el desayuno.

Fue todo más silencioso, lo que Jack quería escuchar fue la liberación de Jason Voorhees, un viejo amigo suyo que conoció desde hace mucho tiempo, pero que capturaron al verlo en la escena de un crimen, dónde habían masacrado a una familia completa, no había quedado nadie vivo. Ya que ese asesino tenía un extraño afán de cortar cabezas a sus víctimas. Al no encontrar más pruebas, lo inculparan por el crimen, fue puesto bajo vigilancia para asegurarse que no causará mal, cumpliendo el tiempo dicho, salio está misma mañana.

Jack The Ripper, un asesino desalmado que solo ataca a las mujeres Beelzenianas, hay muchos hombres llamados Jack, así que les va a ser muy difícil llegar a capturarlo, es como un perro que se ve inofensivo sin ser capaz de dañar a nadie. Lo único que ha visto una testigo de el hace mucho tiempo, es que ese asesino tenía el cabello negro y vestía completo de negro, incluidas las botas que siempre llevaba.

Ninguno de esos asesinos fue capturado, siguen prófugos de la justicia, ya que, si los llegaban a capturar, serían ejecutados públicamente frente a toda la ciudad.

No podía decir nada, ya que esos tontos, sin saberlo, habían capturado a uno de ellos, pero que logro fingir ser una víctima más de el Carnicero de Levianta.

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El desayuno continuo tranquilo mientras seguíamos viendo las noticias. Ahora pasaban de otros temas menos importantes para nosotros, a los cuales casi no les preste atención en nada, solo a mi delicioso desayuno.

Temis iba por otra rebanada de pan embarrada de queso de cabra Maistiana, que aún mantiene su independencia y empezó a exportar sus productos por todo Evillious, ganando fama gracias al queso de sus cabras. Enormes animales con cuernos curvos hacia atrás, creo que lo de los cuernos son los machos, las hembras son las únicas sin ellos. Se podían sacar muchos productos de ellas, leche, quesos, cremas, carne e incluso usan sus pieles para ropas o accesorios caros para la gente de clase alta.

Esos animales se han sacado de Maistia y distribuido en parte de el continente, en Marlon y Jakoku aún se tiene serios problemas en criarlas, ya que estás ni se acostumbran al clima o a la alimentación. En Beelzenia se logró acostumbrarás y se a fabricado el mismo sabor de queso, condimentado con bayas igneas -una especie de vayas que dan un sabor picoso a la comida-, con un buen vino, se les acompaña. En Elphegort se logró que su leche tuviera un sabor muy agradable al paladar, ya que era de un sabor muy fuerte en un comienzo. En Asmodean y Lucifenia crearon una crema ácida a base de la leche, es usada principalmente en la repostería.

Pero en Levianta se a logrado crear un dulce de leche que es originario de la misma leche de las cabras Maistianas.

Maistia logro que Evillious no sufriera la hambruna que nos asta desde hace años. También se logró crear más técnicas de la agricultura.

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El desayuno fue interrumpido por una ventana ser rota, mientras un brazo entraba empezando a buscar la cerradura.

Jack se puso de pie y comenzó a avanzar, se quitó el zapato que tenía, ocultándose detrás de la puerta, hasta que entró alguien de cabello rubio y una extraña máscara en su rostro, ya que una mitad se mantenía triste y la otra mitad estaba sonriente.

- Bue-.... ¡Auch!-llevo sus manos vendas a su cabeza, ya que recibió el golpe de el zapato de Jack, quien se le veía molesto.

- ¡La puerta estaba sin bloqueo, no debiste romper la ventana!-le grito colocándose su zapato de vuelta, mientras finalizaba mi desayuno. Temis extendió su mano a punto de agarrar un pan, cuando ví el reloj.

- Temis, es hora de irnos, o llegaremos de nuevo tarde...-lendije, mientras le levantaba a lavarme los dientes.

- ¡Pero aún no termino de desayunar~!-se quejo viéndome, a lo que Jack tuvo que intervenir, saliendo de la cocina, ignorando a Jason que comía, temiendo que el mañana no existiera.

Saliendo rápido de la cocina con dos cajitas, envueltas en paños y nos las extendió, las tomamos con cierta calma, tomando nuestras cosas, mientras yo luchaba en calmar mi rebelde cabello.

Empiezo a sospechar que mi cabello está vivo o algo por el estilo.

- No olviden sus almuerzos y Temis, llévate lo que puedas para que aún comas en el camino

Solo desapareció volviendo a la cocina, a terminar de preparar su desayuno junto al de su madre.

- Vayan con cuidado niños, y no tarden mucho si no quieren que Jack los vaya a buscar o arme todo un escándalo...-nos aconsejo Clarissa, tiendo ligeramente recordando la última vez que llegamos tarde.

- Gracias...-agradecio tomando su cajita, guardandola en su bolso con cierto cuidado. Igual tomé el mío, mientras me acercaba a la pecera de Kekram, mi pulpo mascota, quien rápidamente se subió a mi cabeza y se acomodo allí.

- Regresaremos saliendo de el colegio, nos vemos señora Clarissa, nos vemos Jason...

- Adiosh enanosh...-se despidió hablando con la boca llena, recibiendo un golpe en la cabeza por parte de Jack.

- No hables con la boca llena Jason-le regaño sentadose a terminar de comer-Con cuidado, no hablen con gente rara y si alguien extraño se les acerca ¿Que les he dicho que deben de hacer?

- ¡Darles una patada y correr!-yo solo asenti mientras Kekram se metía a una pecera más pequeña que le conseguimos, aún era pequeño, así que entraría a la perfección en ella hasta que se volviera más grande o regrese de la escuela.

- Bien dicho, estoy orgulloso, ahora vayan a labrarse un buen futuro.-nos señalo la puerta con tranquilidad, mientras salíamos corriendo a la parada de el autobús.

Fuera en el jardín de la casa, había un gran estanque de agua salada, nadie la podía beber, así que siempre colocaba aquí a Kekram para que estirará sus tentáculos de ves en cuando.