18. sometimes walking out is the one thing
ੈ ‧ chapter eighteen ; sometimes walking out is the one thing
El tiempo parecía correr más rápido de lo usual durante aquellas fechas, así que en un abrir y cerrar de ojos, Genevieve ya se encontraba tratando de seguir una receta de cocina de Euphemia para preparar el pavo para la cena de Navidad. James y Genevieve tendrían visitas durante aquella noche, ya que sus amigos más cercanos pasarían las fiestas con ellos, no sería nada demasiado grande, por el momento, era mejor así.
Genevieve metió el pavo al horno, orgullosa por lo bien que iba todo, apenas llevaba algunos meses cocinando y ya se consideraba bastante buena, era increíble que tuviera tantas habilidades que apenas estaba descubriendo.
La rubia se sorprendió cuando sintió unas manos conocidas abrazándola por la espalda y se dio la vuelta para encontrarse con los ojos amables de James, quien besó la punta de su nariz, haciéndola sonreír.
— ¿Y eso?, ¿Por qué huele tan bien aquí?
Genny señaló el horno — Es mi intento de pavo, pídele a Merlín que salga bien.
— Solo estás siendo modesta, amor, los dos sabemos perfectamente que eso va a salir de maravilla.
— ¿Cuándo llegaste? — Preguntó la rubia sentándose en la mesa de la cocina junto a él.
— Hace algunos minutos, estaba dejando mis regalos debajo del árbol, lindas envolturas, por cierto.
— Bueno, digamos que me esforcé bastante — La rubia rió — ¿Qué compraste?
— Eso es sorpresa, Viv.
— En ese caso, creo que iré a darme un baño caliente y prepararme para esta noche, ¿Puedes ayudarme poniendo la mesa y las decoraciones?
James la tomó de las mejillas para besar sus labios, a lo que Genevieve respondió de inmediato — Sabes que sí, Viv — Dijo el azabache al separarse — Todo lo que me pidas.
— Bueno, a menos que aún tengas cosas que hacer, porque si es así y aún tienes que preparte...
— ¿Estás insinuando que huelo mal, Genevieve Rousseau?
La rubia arrugó la nariz — No me digas así.
— ¿Rousseau? — Preguntó a lo que la chica asintió — ¿Prefieres Potter entonces?
Las mejillas pálidas de Genevieve se tiñeron de rojo, haciéndola apartar la mirada avergonzada.
— Igualmente, podría tomar otro baño en caso de ser necesario — Dijo para darle un largo beso — ¿Tú qué opinas?
Genevieve negó con la cabeza, aun así, no pudo evitar sonreír — Eres imposible.
James la atrajo por la cintura para unirse en un beso que a cada segundo se volvía más y más intenso, la rubia jadeó cuando sintió los labios de su contrario dirigirse a su mandíbula y posteriormente su cuello, entrelazó sus dedos en su cabello, tirando de él ligeramente.
Después de algunos minutos, ambos estaban completamente acalorados, con el cabello y la ropa desordenados y el hecho de que los besos de James comenzaran a descender cada vez más, no ayudaba con la situación. Genevieve enredó sus piernas en la cintura del azabache, buscando algo de contacto más cercano, James la cargó y colocó en la barra de la cocina, dejando sus manos recorrerla sin vergüenza alguna, haciéndola enloquecer.
Genevieve estaba por quitarse la blusa, cuando el sonido del timbre los interrumpió, causando que ambos se separaran con fastidio.
La rubia sonrío de mal humor, arreglando el cabello de James — Yo voy — Murmuró en sus labios.
— No tienes que hacerlo, podríamos dejar que quien sea, regrese por donde llegó y simplemente vuelva otro día, ¿No crees?
— No — Dijo dejando un beso en sus labios y bajándose de la encimera.
— ¿No me habías dicho que en un futuro te gustaría un bebé o dos... o tres?
— Precisamente, en un futuro — La rubia Repuso tratando de quitar las arrugas de su ropa con las manos — Y no es como que quiera engendrarlos en la cocina, créeme.
— No puedes causar un desastre y simplemente dejarlo así, Viv.
Genevieve negó con la cabeza dirigiéndose hacia la puerta, sin embargo, antes de salir de la cocina, se volteó para mirar a James quien tenía los ojos en su trasero — ¡Te vi!
— Bueno, ahora sé porque se llama 'Noche Buena', ¿Tú no?
— ¡JAMES!
— ¿Qué? — Preguntó el azabache de manera inocente, haciéndose el desentendido.
Genny rodó los ojos y finalmente se dirigió a la entrada, claro que al abrir la puerta se arrepintió de haberse tardado tanto, ya que al ver a la persona frente a ella, no pudo evitar llevarse una mano a la boca con sorpresa y abrazarlo con fuerza — ¿¡QUÉ HACES AQUÍ!?
— Si no soy bienvenido, puedo irme...
— No seas tonto, sabes que esta es tu casa — Dijo invitándolo a pasar — Te extrañé mucho.
Magnus sonrío — Yo también te extrañé, Genny.
La última vez que los hermanos Rousseau se habían visto, había sido casi dos meses atrás y aquella no había sido una reunión especialmente divertida, más bien había sido un momento agridulce en el que Magnus había confesado haber recibido la marca tenebrosa algunos hacía ya casi un año.
El menor inspeccionó a su hermana de pies a cabeza asegurándose de que estaba bien, deteniéndose específicamente en su vientre, haciendo que la rubia lo mirara mal.
— ¡Hey!
Magnus rió — Solo me quería asegurar de que no seré tío por el momento, es... — Se detuvo cuando notó que había un rasguño en el rostro de Genevieve — ¿Quién te hizo eso? Porque si fue Potter...
— ¡NO! Por supuesto que no, fue en una misión que... oh — La voz de Genevieve se fue apagando cada vez más y su hermano no pudo evitar mirarla apenado, a pesar de quererse tanto en las cuestiones de guerra, peleaban en bandos opuestos.
— Creo que interrumpí algo, ¿Verdad? — Bromeó Magnus tratando de romper la tensión.
— ¿Eh?, ¿De qué hablas?
— Cuando llegué, tenías la misma expresión de culpa que tiene Reggie cada que él y yo...
— Basta, te prometo que no quiero saberlo.
Magnus rió, seguía siendo muy fácil hacer a su hermana ponerse nerviosa — Bien, pero estás completamente roja.
Genevieve rodó los ojos — ¿Quieres pasar?
— Creí que nunca me invitarías.
Los dos hermanos se adentraron en la casa y Magnus se tomó el tiempo de inspeccionarla — Vaya, ¿Es tuya?
— Es tuya también si así lo deseas — Genevieve sonrió a su hermano.
— Parece que tienes un hogar aquí y yo tendré uno con Reggie también muy pronto.
— Sí, algo así me comento... ¿Quieres algo de tomar?
— Estoy bien, gracias, oh, ¿Qué es eso que huele tan bien?, ¿Tú cocinas?
— Es mi intento de pavo — Comentó Genevieve orgullosa — Pide a todos los magos y brujas que no se queme, ¿Te quieres quedar para cenar?
— Te lo agradezco, hermana, pero ya tengo mejores planes si sabes a lo que me refiero — Dijo Magnus subiendo y bajando las cejas rápidamente.
— Bien, entonces deséale felices fiestas a Regulus de mi parte.
— Créeme que él tendrá muy felices fiestas.
La rubia estaba por quejarse del comentario de su hermano, cuando James entró a la sala — Viv, ¿Quién era...? Oh, hola Magnus.
— Potter — Dijo el menor a forma de saludo — ¿Cómo va todo? Veo que se esfuerzan por agrandar la familia.
— Nosotros... — Para ese momento, James estaba completamente sonrojado — Mejor los dejo para que platiquen.
Magnus volvió a mirar a su hermana cuando el azabache salió — ¿Cómo es la vida de casada?
— ¿Acaso planeas casarte pronto?
— Tal vez tenga que hacerlo... — Murmuró.
— ¿Qué?, ¿Katarina y Maurice?
— No... al principio sí, pero... es más complicado que eso.
Genevieve asintió — Ya veo, Magnus, ¿Qué haces aquí realmente?
Magnus la miró con completa indignación — ¿Que no puedo simplemente ser buen hermano y visitarte? — La rubia entrecerró los ojos en su dirección a lo que Magnus dio un largo suspiro — Regulus y yo nos vamos, supongo que vine a decir adiós.
— ¿Te vas?, ¿A dónde?
— Aún no lo sé, pero,Katarina no lo sabe, papá, más o menos lo sabe — Magnus se acercó a su hermana para tomar sus manos — Escucha, tienes que saber que si hago esto es para que tú estés segura, para que todos nuestros amigos estén seguros, sobre todo para que cuando mis sobrinos sean mayores, no tengan que pasar por lo mismo que nosotros hemos pasado.
Para ese momento, ambos sentían las lágrimas deslizarse por sus mejillas.
— ¿Y cuándo regresas?
— No lo sé — Admitió Magnus— Silvana, esto es probablemente lo más peligroso que haré en mi vida y no sé qué es lo que va a pasar con nosotros, pero quiero que me prometas que te vas a cuidar, que no importa lo que pase, vas a ser feliz y que... al menos uno de tus hijos llevará mi nombre —Bromeó haciendo a su hermana sonreír a medias.
— Siento que te estás despidiendo... para siempre.
Magnus sonrió — Eres demasiaod lista para que en este momento te estés haciendo la tonta — Dijo abrazándola — Eventualmente nos volveremos a encontrar, Genny.
— Ay Magnus, ¿Por qué me haces esto?
— Solo quiero que tengas una mejor vida de la que has tenido al comienzo, Regulus quiere lo mismo para Sirius... y si salimos vivos de esto, queremos lo mismo para nosotros.
— ¿Puedo hacer algo?, ¿Ayudar o... ?
— Solo sé feliz — Dijo Magnus haciendo a su hermana resoplar — Genny, yo siempre te voy a agradecer porque te has hecho a cargo de mí en los últimos años y... realmente desde que tengo memoria, lamento mucho que hayas tenido que crecer tan rápido para cuidarme, eres la mejor hermana que la vida me pudo dar y que no te quede duda que te voy a amar toda mi vida.
— Magnus...
— Es hora de irme — Dijo Magnus para besar la cabeza de su hermana — Van a sospechar si tardo más, pero por favor, prométeme que vas a estar bien y vas a ser feliz.
— Magnus...
— Lo siento, Genny, adiós.
Después de darle un largo abrazo en donde Magnus no paraba de repetir lo mucho que lo sentía, el chico finalmente desapareció.
Genevieve se quedó estática por un momento, James quien estaba detrás de ella se acercó y tan pronto como llegó a su lado, la rubia se derrumbó en sus brazos, sintiendo que inevitablemente ese día, una parte de ella se iría tal vez para siempre.
¡!
author's note: segunda parte muy muy pronto
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top