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Derechos reservados para Hajime Isayama(Shingeki no Kyojin) y Aneko Yusagi(Tate no Yuusha no Nariagari)

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Se podía ver como un pelinegro caminaba junto a un tipo bajito con un sombrero grande de color negro y un monóculo en uno de sus ojos.
-Aquí tiene los de bajo precio señor. Espero que le guste la selección que tenemos.
Dijo aquel tipo, mostrando a un montón de semihumanos en un estado lamentable y otros en estado rabioso, como si hubieran perdido el uso de la razón desde hace mucho tiempo.

El joven pelinegro miraba a los alrededores mirando con lastima a varios seres encerrados en jaulas. 
Seguía observando hasta que noto a una niña que tiene cabello largo de color castaño y un vestido de tela sumamente sucio.
El se agacho a la altura de la niña, aun observando como esta mantenía unos ojos de estar muerta por dentro. 
-La llevo...
-Eh? Pero esa semihumana esta enferma y posiblemente no-
-Yo me la llevo
Aquello ultimo fue dicho por el pelinegro, mirándolo con seriedad.

El bajito asintió asustado mientras que el pelinegro volvió a mirar a la chica con orejas y cola de mapache, la cual aun lucia apagada.

-¿Quieres ser libre?

No paso mucho como para que el tipo abriera la jaula de la niña dejándola salir de esta.
Ella parecía desorientada y a la vez asustada por el joven.
Era algo intimidante y sus ojos le daba mucho miedo.
-Bueno Héroe, es hora de sellar el trato
La menor al escuchar aquello se asusto y retrocedido. El pelinegro no comprendía aquello hasta que miro que el tipo traía como una especie de liquido purpura y un pincel además de una especie de papel en un platillo de plata.

El miro el rostro de miedo de la chica, la cual se mantenía pero no hacia nada. Esta llevada a un asiento donde fue amarrada y el tipo bajo el cuello del vestido sucio mientras que el pincel que tenia se mancho con la tinta purpura.
Pero algo ocurrió...

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Desde aquel combate contra las Olas de la calamidad, Los Héroes de la Lanza, Arco y Espada se encontraban recuperando, aunque lamentablemente algunos de sus compañeros decidieron salirse de su grupo por el miedo que sintieron contra los Titanes y no querían pasar por lo mismo que pasaron sus compañeras que murieron por culpa de estos.
Actualmente Myne estaba junto a los 3 héroes en unas de las cedes reales del reino de Melromarc.
-Tsh! Aun duele.
El primero en despertar fue Motoyasu, sintiendo un dolor en sus brazos debido al esfuerzo que utilizo contra los titanes.

Myne fue a donde estaba el Héroe de la lanza, el cual luego de exclamar su dolor, miro a los otros héroes que para su fortunio no presentaban heridas, mas solo agotamiento.
Pero algo llamo mas su atención, la falta de alguien en ese lugar.
-¿Donde... Esta Eren?

Aquella pregunta puso en silencio la habitación.
Myne miraba al suelo con algo de tristeza. Ella no quería comentar nada del joven ni mucho menos decir donde estaba, por que también para ella era un misterio su ubicación.
-Lamentablemente luego de las Olas...

-Flashback.-

Luego de la aparición de Eren detrás del cuello del titan, los 3 héroes estaban impactados por aquello y no sabían que comentar. 
La semihumana se elevo en uno de los hombros del titan para ayudar al pelinegro quien tenia unas especies de carnes en forma de nervios pegados a su cuerpo.
-Raphtalia... 
Hablo de manera baja el chico con algo de cansancio cuando miro a la castaña. Al parecer el chico estaba exhausto por alguna razón desconocida.
La castaña con las fuerzas que tenia, logro que los pedazos de carnes pegados al joven fuesen rotos, sacando al chico del cuello del titan.

-Eren-sama. Ya hicimos lo que tenias en mente. Es hora de volver.
Decía esta mientras que Eren se apoyaba en esta hasta recuperar algo las energías.
En su brazo, estaba la gema de su escudo solo que estaba de alguna manera oculta, siendo magia la razón de que no se viera.

-¡E-Eren!
Aquella voz dijo el nombre del héroe, siendo provenida de Motoyasu.
Se veía asustado y molesto.
Lo primero era que aquel joven era una especie de bestia gigante, y segundo que ese tipo de vestías era capaz de comerse a la gente.
Y sin hacer mas cálculos, concluyo en algo sumamente erróneo.
-¿Que eres realmente tu?
Finalizo apretando la lanza listo en cualquier caso de un ataque próximo.
Este solo se mantenía con una expresión seria y a la vez cansada. Mientras que Raphtalia los miraba con seriedad.

-No te importa...
Dijo el chico aun cansado mientras estaba apoyado contra la castaña.
Esta disparo unos ganchos contra otra casa y salieron del cuerpo del titan y ahora estando en uno de los techos.

El rubio quiso ir contra Eren pero el cansancio lo evitaba, poniéndose de rodillas al sentir como sus piernas estaban demasiado cansadas luego que la adrenalina se bajara.
El pelinegro miro de reojo a los héroes quienes aun estaban impactados y un Motoyasu de rodillas como si estuviera cansado. Este regreso su mirada al frente saliendo de aquel lugar junto a Raphtalia.

-Fin del flashback-

-Y luego de hay, el rey mando a algunos magos a que fueran a buscar al héroe del escudo por que se conmemorara su victoria contra las olas.
Finalizo el recuento de todo lo que paso en aquel momento donde se descubrió a Eren era una de esas bestias gigantes, algo que no comentaron al rey por que era un tema un tanto delicado en si tratarlo sin el héroe, pensando que seria mejor que este venga para saber las razones de ese extraño poder y el surgimiento de esas bestias.

El rubio se repuso y apretó los dientes furioso recordando lo que paso en aquella ola, donde una de sus compañeras fue comida por uno de esos titanes y como casi mueren por culpa de ellos. Pero el solo pensar que aquel héroe que abuso de su compañera y encima posee ese poder, lo hacia hervir en ira y quería acabar con el cuanto antes.
Mientras este pensaba en el como, Ren y Itsuki se levantaron luego de recuperar sus energías. Estando algo desconcertados hasta que empezaron a recordar lo que paso en las Olas. Algo que si era demasiado fuerte.

Ellos también preguntaron por Eren, recibiendo la misma respuesta de que el Héroe se encontraba oculto pero tenían la fe de que el no estaría tan lejos.
Ren aun mantenía en su mente la imagen de como Eren lo salvo de aquellos titanes, teniendo la postura de que Eren es un verdadero héroe y que un monstruo no los hubiera salvado.
Itsuki tenia una opinión neutral. No sabia si Eren era bueno o malo pero su respuesta lo diría el tiempo.

-Bueno. Se les invita esta noche a ustedes y sus compañeros a ir a una fiesta conmemorativa por su victoria, así que vengan a la noche al reino. Asi que al estar recuperados, vallamos.
Informo la pelirroja mientras salía del lugar.

Había un silencio en aquel lugar. Demasiado incomodo.
No sabían que decir luego del combate que tuvieron y que el nombre de "Victoria" no seria para ellos. El verdadero héroe era...

...

Se veía al tipo calvo siendo agarrado por la mano del pelinegro mientras que el pincel se había caído al piso.
-E-Espere, que hace?
Dijo asustado el tipo mientras que el joven lo miraba de manera intimidante.
-Dígame que le iba a poner...

-E-es un símbolo de esclavo. E-ese símbolo creara una descarga en ella si le llega a desobedecerle.
Aquello sorprendió al joven, comprendiendo el miedo la la niña. Ella seguramente sabia que era ese símbolo y temía mucho por ello, notando que ya tenia uno así que implicaba que ella fue torturada por aquello.
-No le ponga eso...

Eso sorprendió al tipo y también para la castaña sucia.
-P-pero señor, e-
-¡¿Sera mía no?! ¡Así que si no quiero que le ponga aquello, no lo haga!
Exclamo fuertemente al tipo que retrocedió con miedo asintiendo muchas veces. Este quito los amarres que tenia la castaña contra la silla hasta que ya estaba desatada.
Eren miro con seriedad a la niña la cual caminaba con la cabeza abajo, mirando algo sorprendida de aquel escudo de plata con aquella gema verde en su centro.

El joven pago su precio y terminaron saliendo del lugar. La castaña estaba aun anonada por saber que no poseía ninguna restricción que le impidiera. Sentía la necesidad de huir, pero no quería irse así de rápido sin saber algo.

-¿P-por que no me puso la marca de esclavo?

El joven se detuvo por un momento al escuchar aquello, volteando su mirada a esta algo sorprendido de su pregunta.
-Quieres ser libre, ¿No? Vi tu marca que te pusieron y según el tipo me comento, eso daba descargas si el amo no le gusta algo que hacías... Pero yo mismo se que es la restricción de libertad. Lo viví y mire.
Eren se agacho por un momento para estar a la altura , posando su mano en su hombro.
Esta se asusto por un momento pero aquella caricia solo tenia una intención, calmarla.

Ella alzo por un momento la mirada, viendo como aquellos ojos serios que tenia antes a unos mas calmados pero determinados.

-Puedes irte si quieres o seguir mi camino. No debes seguir mas ordenes que te restrinjan... Se libre.
El chico se levanto y seguía su camino.
La castaña apretaba la basta de su vestido, dirigiendo su mirada al piso por un momento, hasta que solo quiso decir algo.

-¡Por favor dígame su nombre! Quiero saber el nombre de usted por favor.
Exclamo con algo de fuerza la chica, aun apretando aquel vestido que traía.
El joven se detuvo y pensándolo por unos segundos, giro la cabeza hacia al lado izquierdo mirándola con uno de sus ojos.

-Eren... Eren Jaeger.

La castaña abrió aquellos ojos apagados a unos algo luminosos, mirando a aquella persona dando una leve sonrisa.
-G-gracias... Eren Jaeger...
Finalizando aquello, con sus ojos cerrándose y viendo como esta caía al piso rendida.

-Oye, Oye! Despierta!
Se escuchaba la voz del joven tratando de despertar a la castaña, pero poco a poco esta volvio a recuperar la vista, viendo ahora que estaba en una choza junto al pelinegro con una mirada algo seria. 
Lo que paso fue como un recuerdo.

-Eren-Sama...
La castaña dijo de manera soñolienta al chico con ese seudónimo que se le había pegado. Esto incomodo un tanto en si a este debido a que en si ella parecía algo mayor que el. Además que no era su amo, si no su compañero.
-Raphtalia, Ya te dije que no me digas Sama. Se siente raro. Solo dime Eren de manera normal.

La castaña asintió con un leve sonrojo en sus mejillas mientras se cubría con una especie de bufanda verde que tenían en su cuello.
-¿Aun conservas esa bufanda? A pasado mucho y no se a dado una lavada. Si quieres te compro otra.
La chica se alarmo, poniendo sus orejas en punta y su cola se puso recta de inmediato.
-N-no. E-esta bien así mi bufanda.
En si, era raro que conservara algo que seguramente estaría sucio por mucho tiempo. Pero el no podía quejarse, ya que poseía aun su ropa con la que vino de su mundo así que no tenia el derecho a decirle eso.

La castaña noto una carta al lado de Eren, agarrándola y abriéndola. Leyendo y emocionándose un poco.
-¿Una fiesta conmemorativa?
Eren asintió, aunque su vista reflejaba una cierta incomodidad respecto a ello.

Raphtalia mirando su expresión, comprendió su incomodidad por lo tanto dejo la carta a un lado, pero en eso.
-¿Quieres ir verdad?
Dijo Eren alzando la mirada por un momento, haciendo que la castaña se asombrara un poco, mirando a otro lado en signo de vergüenza.
-N-no es que no quiera p-pero...

El pelinegro solo le vasto ver como la cola de la chica se movía de un lado al otro, siendo un indicio de que en realidad estaba emocionada en ir.
El solo se levanto por un momento y puso su mano frente a esta.
-Tengo unos asuntos ahí en el reino, así que ir a esa fiesta no nos vendría mal.
Mintiendo ya que en si no tenia nada de hacer y solo lo hacia para que su compañera se sintiera bien. Pero este no sabia que en realidad el tendría que llegar ahí como sea...

La castaña se levanto algo emocionada en ir pero luego se calmo volviendo a su estado de neutralidad absoluta.
-S-si, vallamos.
-A veces tus cambios de emociones dan miedo, Raphtalia.

...

No tardaron mucho en llegar al reino. 
El escucho de algunos que el pueblo donde se ocasionaron las olas se estaba reconstruyendo gracias al reino.
Caminando por ahí, se toparon con alguien familiar para ellos.
-Señor Erhard
Alzo la mano, moviéndola levemente Eren al tipo calvo quien estaba guardando algunas cosas que estaban afueras de su tienda de herrería.
-Hola Héroe Jaeger. Que bien que este por aquí. No nos hemos visto por mucho tiempo.
Comento este mirando tanto al pelinegro como a la castaña, que por un momento se quedo mirando hasta que noto algunas facciones.
-Wow. al parecer tu compañera creció.

Eren asintió recordando como era su tamaño antiguo, siendo muy distinto desde distintos puntos.
-Creció y mucho... Aunque a veces se porta rara y no comprendo el por que.
Soltó un suspiro algo pesado mientras que el herrero lo miraba con una cierta cara de póker.
-Este chico es muy denso...

Luego de hablar de cosas no tan relevantes, se despidió del tipo, llegando al palacio donde se realizaría aquella fiesta.
Al llegar, miraron a algunos pueblerinos y música muy extraña para el. En si, los instrumentos que usaban eran sumamente raros para este al desconocer en su totalidad aquello.
-Bueno... Solo nos quedaremos unos minutos y luego nos vamos Raphtalia. Disfruta hasta entonces.
La castaña asintió y fue a donde había un gran bazar de comida, empezando a comer de uno en uno.
-(Es muy nostálgico... Es como Sasha)

En eso, recordó algo que debería tener en mente desde que llego, sus amigos.
Desde que llego, tuvo problemas como el tener que lidiar con algunos tipos que querían su cabeza y el tener que entrenar para sobrevivir, por lo tanto no tuvo tiempo para pensar en retrospectiva de como perjudicaría su desaparición en su mundo.
Siendo entre los principales problemas de que en si, el era la única posibilidad de salvar su pueblo natal y cerrar el hueco que estaba roto desde la llegada del titan Colosal y el Acorazado.
Además vendría ser el arma mas potencial de su mundo, y si desaparecía seria un increíble caos total entre los soldados.

No solo debería lidiar con eso, si no también con la legión de reconocimiento que no todos confiaban en el, y Levi estaba a su cargo. 
No sabia que pasaba en su mundo, su mente empezaba a divagar y sin prestar atención a su alrededor.
-(Mikasa... Armin...)

-¿Eren-sama? ¿Eren-sama?
Aquella forma peculiar de decir de su nombre lo saco de repente de aquel trance, regresando al mundo real donde su compañera Raphtalia tenia un plato en su mano de comida.
-¿Estas bien?
Pregunto algo preocupada la chica mientras que Eren solo asintió en forma de respuesta.
-S-si, estoy bien. Estaba divagando en mi mente solamente.
Respondió mientras miraba aquel llamativo plato de carne con pan además de unas frutas extrañas.
Esta con un tenedor le entrego un pedazo de carne a este, dándoselo en la boca.
-O-oye Raphtalia, yo no soy ningún bebe para que me deán la comida en al boca.
Comento despejando aquel tenedor a un lado y tomando el tenedor.

Este puso el pedazo de carne en su boca, sintiendo un increíble sabor de este. Este apenas acabo de comer aquello, siguió comiendo mas pedazos de carne.
-(¡Sentir esta sabor luego de tiempo es increíble!)
Termino de comer toda la carne que había en el plato mientras que la castaña rio un poco ante el comportamiento algo infantil del joven que siempre se mantenía algo serio.
-No sentía el sabor de la carne desde hace mucho tiempo. Sabe increíble.
Comento Eren devolviéndole el plato a esta, la cual lo dejo a un lado y dándole un paño para que se limpiara, haciendo eso.

-Bueno, creo que es momento de-
-¡No te muevas de Ahí Eren!

Una fuerte exclamación se escucho dirigirse a ellos, siendo la voz de Motoyasu. El pelinegro miro son su ceño fruncido mientras este se acercaba poco a poco a este.
-¿Feliz luego de que sepamos que eres un monstruo come gente?
Le reclamo mirándole de manera molesta. Eren en si no comprendida lo que decía el rubio, pero en eso supuso a que se refería.
-Al menos saluda de manera educada, Héroe de al Lanza. Además, ¿Quién te dio el derecho de decir mi nombre?
Miro el chico aun molesto cuando de repente sintió como lo agarraba de su camisa.
-¡tu eres una bestia come humanos, di la verdad! 
Exclamo haciendo que los del salón se dieran cuenta de aquello. Los 2 héroes restantes también miraron atento a aquello.
-Pero que esta haciendo este idiota.
Reclamo el Héroe de la espada acercándose junto a Itsuki lo antes posible.

Mientras tanto, el rubio todavía lo sostenía de la camisa. En eso, Raphtalia agarra la mano del rubio apretando en su antebrazo para que este dejara al chico, logrando aquel objetivo.
-Sera mejor que no haga un escandalo señor héroe. Además, ¿Qué gana peleando contra Eren-sama? Si fuera por el, lo hubieran dejado ahí a su suerte contra los titanes. Le deben la vida.
El rubio miro atento a la castaña, incapaz de comprender el por que estaba al lado del monstruo que era para el eren.
En su mente trataba de comprenderlo, pero en eso le hizo curioso una palabra.

-¿Por que le dices Sama? ¿Acaso es tu amo?
Pregunto algo incrédulo ante lo que escucho. 
-Prácticamente me compro, pero soy mas su compañera que otra cosa.
Aquello fuera de contexto era demasiado mal pensable. Pero solo idiotas reaccionarían tan mal ante aquello antes de pedir el contexto de aquellas palabras.

-Compraste a una semihumana... Enserio eres de lo peor Eren...
Miro molesto a Eren, apretando el mango de la lanza.
Esta la apunto contra el chico, en forma de atacar a Eren. 
Ren y Itsuki lograron detenerlo antes que hiciera algo, haciéndolo retroceder y atrapando sus piernas.
-Motoyasu, por favor relájate.
-No te dejes llevar por al ira.
Los 2 trataban de calmar al rubio, pero este seguía molesto.

-Eren, ¡Te reto a un duelo!

En el próximo capitulo:

-Eren y Motoyasu luchan en un duelo uno a uno para al libertad de Raphtalia que siempre tuvo a su alcance. Eren tendrá que usar su escudo con el cual fue invocado. Los golpes y choques de armas legendarias resuenan, en conjunto de unos disparos acercándose al reino. Hasta que alguien dijo: Eres demasiado agresivo, mocoso.

En el próximo capitulo; Hereo Vs Heroe Titan