¡TODOS TRAS RANMA!
Un séquito de cincuenta hombres se extendía a lo largo del camino.
Al frente, una carroza modesta aguardaba a que Shampoo abordará para luego conduciría al que sería su nuevo hogar y su nueva tribu.
Con la mirada altiva y un semblante totalmente frío, se despidió de sus compañeras y encargo a su abuela mantenerla al tanto de todo cuanto acontesiera.
Haría lo posible por continuar como poseedora del matriarcado, aunque por un tiempo se viese alejada debido a la adaptación de su nueva vida.
- ¿Segura que no quieres que te acompañe? - le pregunto su abuela. - se trata del día de tu boda.
- No habrá nada que celebrar abuelita. Iré sólo a cumplir con la sentencia. - Y bajando la voz mientras la abrazaba continuo - no olvides que te quiero. Sé que la tribu estará en excelentes manos. En cuanto a Ranma... ya sabes que hacer.
- Me lo repetiré hasta el cansancio que ya lo he memorizado. - ambas se sonrieron con tristeza.
Apena a la joven ingreso a la carroza, está se puso en marcha seguida de los demás hombres.
Después de un tiempo, sólo la nube de polvo en el camino era capaz de visualizarse en la distancia hasta finalmente desaparecer.
La abuela Cologne no podía aguantar la angustia.
Pero sólo podía desear que las cosas marcharán bien para su nieta y no tuviera más preocupación.
***
Mientras tanto, Ranma se debatía entre dejar las cosas así con Shampoo y seguir su camino hacia su principal objetivo que era los estanques encantados o, regresar y quitarle de la mente aquella sensación de que algo malo ocurría.
En su mente, el recuerdo de la mirada de Shampoo y el no descubir la joya encantada habían logrado atormentarlo.
De algún modo, era imposible ignorar aquello, gran parte de su juventud la había pasado junto a la joven china, y él estaba consiente del afecto que de algún modo había desarrollado hacia ella, aunqie este no fuese como el que precisamente Shampoo sintiera por él.
- ¡Ni hablar! - exclamó en voz alta - se lo he prometido también a Moose; si no le doy noticias sólidas de que ella está bien, seguro querrá cobrarme sus ahorros... ¡Y no tendré como pagarle! - concluyó con desespero.
Y haciendo una mueca de resignación, tomó nuevamente sus cosas y empezó a andar hacia una aldea que habían visto a su llegada, quizá ahí le dijeran otro camino para llegar a la tribu femenina.
***
- ¡Akane! ¡Akane detente! - gritaba Shoun Tendo.
- ¡No van a convencerme! - gritó - Iré a buscarlo.
- Estoy seguro que regresará pronto apenas se libre de la maldicion. El que tu vayas sólo lo distraera. - insistía su padre.
- Ranma es mi prometido. Se supone que nos pasaremos y por eso mi deber es estar con él. - dijo con tanta firmeza que su padre titubeo; sin embargo, niña si su hermana Naviky, quien despreocupadamentr, apoyada contra el umbral de la puerta dijo:
- ¿Y si Ranma no desea que estés con él? - aquella pregunta pareció helar el ambiente. Incluso Kazumi que llegan a en ese instante palidecionun poco - Piénsalo Akane. Se marchó sin avisar y sin considerarte...¿no crees que es mayor muestra de que no eres requerida?
- ¡Pero que cosas dices Naviky! - le censuró su padre - Él no sería capaz...
- Yo sólo digo que Ranma se ha ido a China siendo una persona... pero nada garantiza que regrese siendo el mismo...¡O mejor aun!...ni siquiera tenemos la garantía de que regrese...
- ¡Basta! - grito furiosa Akane - regresará..regresará conmigo... ¡Ya lo verás! ¡Lo verán todos! - y salió de la estancia roja de irá y apuntó de llorar.
- ¿Porqué dices cosas tan crueles Naviky? - le cuestionó Kazumi una vez a solas.
- Akane no se ha dado cuenta de nada.
- ¿Darse cuenta de que?
- De que el viaje de Ranma a China marca la encrucijada en donde sus caminos se separan.
- Hablas como si fueras una profetiza... - Kazumi miro a si hermana con cierto miedo. En cambio Naviky pareció meditarlo para liego sonreír y decir con alegría y despreocupación:
- Si mi prótesis sobre Ranma y Akane se cumple, entonces creo que empezaré a cobrar mil yenes por predicción... ¡Quizá me haga rica!
- ¡Naviky! - Suspiro Kazumi y se marchó a la cocina.
***
- ¡¿Estas seguro Sasuke?!
- Tan seguro como que el cielo es azul, señorita Kodachi. Ranma Saotome ha roto su compromiso con Akane Tendo.
- ¡Lo sabía! - exclamó alegre la joven - Sólo era cuestión de tiempo para que Ranma mi amor se diera cuenta de que yo soy la más adecuada para ser su esposa.
- Pero... me temo que no es todo... - Sasuke no sabía exactamente como decirle el resto de la información que había obtenido.
- ¿Es que acaso hay más?
- Bueno, si.
- ¡Entonces habla! Mi paciencia se acaba. ¿No vez que qiiero ir rápido junto a mi amado?
- Es que... es que ... - No tenía opción, se lo diría y esperaba que Kodachi no desquitar su ira con él - Lo que pasa es que ¡¡Ranma ha huido a China!!
En ese momento, la taza de té que ella sostenía cayó al suelo.
- ¿Huido a China? ¿Pero por que?
- No lo sé. Sólo he sabido eso. Se ha marchado hace casi tres semanas.
- ¡Tres semanas! - Kodachi medio un momento - lleva un poco de ventaja pero aún podemos alcanzarlo si nos apresuramos. Bien, prepara todo Sasuke, iremos por él.
- ¡¿Se refiere que iremos a China?!
- ¡A China o al fin del mundo si es preciso! - Fue lo último que dijo antes de salir de la habitación entre risas de alegría y saltos de gimnasia.
En otro lado de la casa Kuno, justo en el jardín, Mousse miraba la expresión de Kuno ante la noticia que acababa de darle.
El relámpago azul de la escuela Furinkan se sentía extasiado.
Era su oportunidad para conquistar el corazón de Akane sin que Ranma se interpusiera.
Viajaría a China y encontraría a Ranma antes que Akane, lo derrotaria en combate y finalmente lo obligaría a jamás regresar a Japón; de esa forma no se interpondrá más.
Así mismo, con Akane en China, él podría aprovecha a cortejarla, sería como una luna de miel previa a la boda.
Si, todo sería perfecto...
Al menos dentro de la mente y los sueños románticos de él.
- ¿Y dices que se va mañana? - quiso confirmar.
- Así es. Lo sé de muy buena fuente.
- ¿Qué ganas tu diciéndome esto? - Kuno adquirió ese semblante serio y casi perspicaz.
- Me alegra que lo preguntes... porque como entenderás está noticia vale oro...
- Habla ya... ¿Qué quieres a cambio?
- Sencillo. Llevame contigo.
- ¿Y eso es todo?
- Eso es todo. - Kuno sonrió. Era capaz de dar más pero evidentemente no lo diría.
- Esta bien. ¡Hecho! Prepárate... ¡Iremos a China!
Mouse sonrió. Ranma se las pagaría por robarse sus ahorros y su única oportunidad de reunirse con Shampoo. Pero ahora, por fin viajaría y no sólo se vengaria, si no que también buscaría la cura para su maldición.
***
- ¡Ten! ¡Aquí está lo acordado! - Ukyo dejo caer los dos mil yenes sobre la mano extendida se Naviky.
- Eres muy generosa - dijo la joven Yendo.
- No permitiré por ningún motivo que me ganen. Encontraré a Ranma antes que Akane y Kodachi. - y perdiéndose en una visión romántica dijo en tono meloso y de ilusión - puedo imaginarmelo... Ranma y yo empezando una nueva vida en China, criando a nuestros hijos alejados de todos y todo... ¡Seremos tan felices!
- Como digas, pero no olvides que te lo advertí... no lo tendrás fácil... todos van tras Ranma...
***
Ryoga y Henma Saotome se miraban mutuamente mientras cavilaban sus opciones.
Ryoga la tenía mucho más fácil. Podía colarse en el equipaje de Akane sin problemas, pero Henma no corría con la misma suerte.
- Si yo me quedo... tu te quedas conmigo jovencito.
- No puede obligarme... - respondió Ryoga.
- Me necesitas. Te perderias apenas pisar China. Yo soy tu única opción para llegar a los estanques...
- ¿Y cómo planea conseguir el dinero para viajar? - pregunto pérspicaz.
- Se me acaba de ocurrir una idea - dijo con una sonrisa de triunfo.
***
Naviky contaba todo el dinero que había ganado gracias a vender la información sobre la ubicación e Ranma.
- No deberías ser tan ambiciosa. - le reprendió Kazumi.
- Descuida; prácticamente todos me agradecieron la información brindada. Cada uno tiene motivos especiales para ir tras Ranma.
- Sólo espero que las cosas no se complique haya... - suspiro Kazumi.
- Despreocupate... - Naviky sonreia de oreja a oreja - estoy segura que todos quedarán satisfechos con su viaje... ¡Ya lo verás!
Y Kazumi deseo que su hermana realmente tuviese poderes de profetisa.
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top