#4: Empieza la aventura

En la sala de reuniones de la mansión McPato, se veía a los niños que estaban sentados esperando, y por las expresiones de cada uno, estaba claro que ya tenían algo de tiempo ahí.

-¿Cuanto tiempo creen que nos tendrán esperando? -pregunto Luis que ya se encontraba algo cansado por la espera.

-Quien sabe, imagino que deben de tener sus razones. -dijo Hugo con la cabeza apoyada sobre su mano en la mesa.

-Ah, por suerte no es que tengamos planes hoy, eso menos desesperante la espera. -dijo Paco con lo ultimo mientras se encogía de hombros por sus propias palabras.

Se escucha como la puerta se comenzaba a abrir y, por la misma entran dos niñas muy similares pero con estilos algo distintos; una viste totalmente de amarillo y tiene el cabello atado en una cola de caballo con un moño amarillo, y la otra viste por completo de azul con un par de pequeñas coleta que ataban su cabello.

Eran Mayo y Junio, clones hechas a base del ADN de Rosita, y por así decirlo... sus hermanas biológicas.

-Oigan, ¿que es lo que esta pasando? -pregunto Mayo mientras se acercaba al resto.

-Si, tío Rico nos llamo para que viniéramos aquí, dijo que era muy urgente que estuviéramos aquí. -dijo esta vez Mayo confundida mientras se cruzaba de brazos.

-Nosotros tampoco estamos seguros, sea lo que sea es como si tuvieran algo entre manos, pero no es como que tengamos manera de saber que puede ser. -dijo Rosita al mismo tiempo en que se acercaba hacia las recién llegadas.

-Si, creo que ya lo entendemos. -dijo Mayo al mismo tiempo en que Junio asentía con la cabeza en señal de estar de acuerdo con lo que decía.

Antes de que alguien más decía algo al respecto, se escucho como la puerta de la sala se volvía a abrir y, por la misma entraban McPato acompañado de Della, Donald y Beakley.

-Hola niños, me da gusto que hayan decidido venir tan pronto como les llame. -dijo McPato saludando a los menores.

-Bueno, tu nos llamaste de manera urgente, y pues aquí estamos. -dijo Paco al mismo tiempo en que se encogía de hombros ante sus propias palabras.

-Si, ¿que esta pasando? -pregunto Luis secundando lo que acababa de decir su hermano.

-Es cierto, ¿que es lo que hay que hacer? -pregunto Hugo siguiendo.

Antes de que el pato mayor pudiera responder, la madre de los trillizos es la que decide tomar la palaba esta vez para transmitir algo de orden.

-Calmados niños, les aseguramos que ya ahorita vamos a decirles lo que esta pasando, pero primero dejen que terminemos de organizar, ¿de acuerdo? -pregunto Della con una sonrisa al ver directamente a sus tres hijos.

Ante lo pedido por su madre, los trillizos sabían que era mejor no rechistar, por lo que solamente se limitaron a asentir con la cabeza al unisono en señal de haber entendido.

-Bueno, creo que ya es momento de comenzar. -dijo Donald quien claramente se veía incomodo y preocupado por lo que sea que fuera a pasar ahora.

-Primero que nada, les pedimos que se sienten niños, esto puede que sea algo complicado y se alargue, ¿de acuerdo? -pregunto Beakley recibiendo como respuesta un "si" de parte de todos los menores.

Y sin más, los niños se fueron hacia la mesa y cada uno ocupo un lugar para sentarse, al mismo tiempo en que los adultos se ponían al frente de la mesa listo para la reunión que se iba a hacer este momento.

-Primero que nada, les agradecemos que hayan venido a pesar de lo imprevisto de esto, siento haberlos interrumpido en el descanso pero, acaba de surgir algo que sinceramente no se puede ignorar, más ahora que nos acabamos de enterar. -dijo McPato quien tenia cierto tono de frialdad en su voz al hablar.

Al percatarse del tono de voz del hombre, los niños estaban seguros de que el tema debía de ser muy serio, y uno por el que quizás debían de estar preocupados.

-Papa, ¿que esta pasando? -pregunto Rosita al mismo tiempo en que miraba al mayor fijamente.

Con escuchar aquella pregunta que acababa de ser pronunciada por su hija biológica, el llamado "pato más rico del mundo" no pudo evitar el sentir algo de culpa por lo que iba a decir, al igual que Beakley y sus sobrinos, sabían lo difícil que iba a hacer el tratar este tema con los niños, pero al mismo tiempo entendían que no lo podían ocultar de por vida.

Pese a haber acordado en un principio no hablar aun del tema, recordó como el debate se volvió más complejo después y...

Si, no había mucho que hacer en realidad.

-Miren chicos, la verdad es que esto es algo de lo que estábamos seguros de si decirles o no, pero es claro que en cualquier momento lo van a terminar por descubrir, así que es mejor que se los digamos de una vez. -dijo Donald quien, junto con Della se veían más que preocupados ante lo que sea que fuera a pasar ahora.

Beakley por su parte, estaba manteniéndose lo más seria que le era posible dada las circunstancias, pero en el fondo también se sentía demasiado insegura con la idea de enseñarles a los niños lo que acababan de descubrir, volteo a ver a Rico McPato quien, también se veía claramente inseguro ante lo que estaban por hacer, pero estaba claro que el tampoco veía como algo funcional ocultar algo que se terminara por saber de una manera u otra, como ya ha pasado con otras cosas antes.

Al final, ya no había más que hacer o decidir, no había vuelta atrás.

En ese momento, Rico saco las fotografías para después dejarlas caer sobre la mesa de manera, que se deslizan hasta llegar hacia donde estaban los niños, los cuales estaban algo extrañados ante lo que sea que estaba ocurriendo.

-Escuchen niños, lo que están por ver en esas imágenes no es algo a lo que estuviéramos dejando que ustedes vieran si por nosotros fuera, pero a la vez no podremos evitar que lo terminen descubriendo luego. -dijo McPato viendo a su hija y a sus sobrinos con clara preocupación en sus ojos.

El tono de voz del mayor tenia algo inquietos a los menores, pero al final la curiosidad era algo que pudo más que cualquier otra emoción y, al final tomaron las fotografías para poder verlas.

Sobra decir, que esas imágenes se iban a quedar con ellos de por vida, y con muy buena razón.

Veían muerto a Flint McNate, tirada en el piso con el cuerpo lleno de heridas, desde una vista simple estaba claro que lo atacaron con toda la intención de acabar con el, pero se veía que en una pared cercana estaba escrito con sangre: "Rico McPato, tu sangre no tardara en derramarse".

-Tío Rico, ¿que significa esto? -pregunto Hugo quien apenas y estaba comenzando a recuperarse del asombro impactante.

-Es lo mismo que estamos tratando de entender muchacho, apenas hoy recibí esta carta junto con un paquete que... -decía Rico hasta que se termina deteniendo a si mismo, como su estuviera tratando de buscar el valor para seguir, pero al final deja que un pesado suspiro salga de su boca. -La verdad es algo que prefiero no decir de momento, todo se sabrá a su momento, pero aquí lo que importa es que esto es solo una señal de que algo más se viene encima, no se a ciencia cierta que pudo causar esto, pero esta claro que ahora más que nunca debemos de cuidarnos los unos a los otros, porque puede que no sea como con MOPLM, pero no dudara en hacer lo que ellos casi logran... acabarnos. -termino de decir con tono sombrío.

Un profundo silencio, uno que casi podría considerarse como sepulcral, se había formado en el interior de la sala de reuniones, todos y cada uno de los menores estaban metidos en sus propios pensamientos, como si estuvieran buscando una cosa que se pudiera decir ante las circunstancias.

Los adultos por otro lado, estaban viendo claramente preocupados como los niños estaban intentando procesar la información, no es que a ellos les diera precisamente mucho gusto el habérselos echo saber de esta manera, pero no es como que las opciones fueran muchas, ni siquiera estaban seguros de cuanto tiempo es el que les queda antes de que algo llegase a pasar.

Al final, se ve como Rosita se levanta de la silla para poder caminar hasta donde estaban los mayores, precisamente se para enfrente de McPato y alza la mirada directamente a los ojos del mayor.

-Es un riesgo sin duda, no es como que haya mucho con lo que se pueda trabajar de momento, pero a final de cuentas, sabemos que de un modo u otro, al final es algo en lo que de un modo u otro vamos a acabar metidos en esto... así que creo que no hace falta decir que es lo decido con esto. -termino de decir Rosita con una clara sonrisa en el rostro.

Poco a poco, el resto de los niños se levantan uno a uno para ponerse junto a Rosita, cada uno se veía más que determinado por la expresión en sus respectivos rostros.

Estaba claro que ninguno se iba a echar para atrás.

Con eso, los adultos tenían más que claro la decisión, no sabían que es lo que pasaría después, pero a final de cuentas eso les dejaba ver lo emocionante, que todo en un punto tiene su enigma.

Y apenas estaban rascando el exterior de ese enigma.

-Viendo así la cosa, si que no hay más que decir... es hora de iniciar la aventura. -dijo McPato con una sonrisa decidida en su rostro.

...

Y Fin.

Bueno, hasta aquí llega el capitulo y esta parte del maratón, espero les guste.

La verdad, es que el modo de desarrollar este proyecto es algo complicado, pero a un plazo mediano, espero encontrar el modo de llevar a cabo mi objetivo, poder encontrar el equilibrio que busco para la trama.

Los invito a que dejen sus votos si les gusta el capitulo, además de que también los invito  a que escriban sus opiniones sobre el capitulo en los comentarios, las demás partes del maratón se verán estos días, estén al pendiente.

Hasta luego, bye.

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