treinta y tres.

—¡Areum, ayúdanos de ese lado!— Exclamó Felix mientras que con ayuda de Hyunjin sujetaban el gran armario.

—Dios, ¿cuántos hombres se necesitan para acomodar esta cosa?— Cuestionó, le dio una mirada a Jisung, quien los miraba entretenido mientras comía frituras.

—Creo que con dos y una chica es suficiente.— Contesto Jisung, llenándose las mejillas de papas fritas. Areum rodó sus ojos y no pudo evitar sonreír.

—Vamos, vamos...— Suplico Hyunjin con el rostro colorado y con el sudor cayendo por su rostro. Felix estaba igual que él, suspirando pesadamente pues parecía que ambos iban a desplomarse con el armario encima. Areum trató de ayudarlos, pero siendo sinceros, su fuerza era casi nula comparada con la de ellos.

—No, no puedo, lo siento.— Se disculpo con un suspiro.— Jisung, levántate y ayúdanos.— Lo jalo del brazo obligándolo a abandonar su lugar en el sofá.

Si, ahora que Areum se estaba mudando, ellos se habían ofrecido amablemente a ayudarla con todas sus cosas, lo que no pensaron es que sería difícil. No era un departamento grande, pero era lo justo para una persona, además, afortunadamente le quedaba cerca de la universidad, y no iba a mentir que lo consiguió fácil, pues la verdad tuvo que trabajar en varios lugares, y además de eso seguir estudiando, la había estado pasando mal. Y a pesar de que Felix le sugirió que viviera con ellos, Areum no podía aceptarlo. Si lo pensaba bien, iba a ser un poco incómodo con ambos chicos en el mismo espacio todo el tiempo.

—Demonios, me voy a casa.— Se quejó Hyunjin después de haber acomodado el armario donde debería estar. Areum lo tomó de la camisa.

—¿Qué? No llevamos ni la mitad.— La chica frunció su ceño.— Siéntate.

Hyunjin entrecerró sus ojos, pero obedeció, tanto Felix como Jisung volvieron a sentarse. Areum llegó hasta ellos con tres vasos de agua.

—De haber sabido que sería tan pesado, lo hubiera pensado dos veces antes de ayudarte.— Comentó Jisung limpiando el sudor (falso) de su frente.

—Mejor cierra la boca, que no has ayudado en nada.— Felix le pico las costillas, burlándose de él.— Oh, esperen...— Felix se levantó cuando sintió como su teléfono vibraba dentro de su bolsillo. Jisung suspiro y negó mientras lo veía.

—Dios, hace poco que regresaron y ya están teniendo problemas.

Tanto Areum como Hyunjin se interesaron en eso. Se miraron entre ellos y miraron atentamente a Jisung, quien seguía mirando con clara decepción a Felix.

—¿Pasó algo?— Se animó a preguntar la chica. Jisung vaciló un poco, y dándole un largo trago al vaso de agua, agrandó la intriga.

—Acérquense.— Les pidió casi en un susurro, ambos se acercaron a él.— Bien, no se supone que deba contestárselo a ustedes, pero que más da, igual van a enterarse. Bueno, seguro recuerdan que Felix y Haeri terminaron en la fiesta de graduación ¿cierto?— Los señaló para confirmar, Areum asintió mientras Hyunjin se encogía de hombros.— Esto no lo se yo, me lo contaron... pero dicen que Haeri solo fingió ser una chica amigable, ¿por qué? Quien sabe. Dicen que Haeri se rebeló esa noche, diciendo que en realidad era todo lo contrario, y adivinen que... ¡llevó a otro chico a la fiesta de graduación!, Sin siquiera decirle a Felix, quien se suponía era su novio en ese entonces.

—¿Qué?— Areum estaba sorprendida.

—¿Y por que ha vuelto con ella entonces?

Jisung se encogió de hombros.— Dicen que Haeri lo convenció, o más bien lo manipuló para que Felix volviera con ella. Le hizo creer que eso había sido un error y blah blah blah.

Areum se quedó boquiabierta, entonces Haeri nunca fue tan amable como pensó que era, sino que resultó ser todo lo contrario.

—Que idiota.— Se burló Hyunjin dando el último trago de agua a su vaso.

—Pero esperen, ahí no termina la cosa. Últimamente Haeri se esta comportando muy posesiva con él, siempre tiene que estarle preguntando donde esta, con quien y porqué. Y eso no es todo, yo estoy convencido que es porque el chico que llevo a la graduación, es decir, su ex novio, va a la misma universidad que nosotros y siento que se están viendo de nuevo o algo así. Como sea, ya no me fío de Haeri. —Terminó de decir, cruzando sus brazos.

Antes de que alguien más pudiera seguir comentando algo, Felix entró en escena, guardando su teléfono. Los miro extrañados al verlos reunidos, pero no pregunto nada.

—Chicos, debo irme. Pueden terminar esto ¿cierto?

—Yah, yah, nos estás dejando todo el trabajo, Lee.— Reprendió Hyunjin.

—Lo siento, debo irme...

—Te vas con Haeri ¿cierto?— Pregunto Jisung alzando su ceja, Felix se sorprendió un poco al escucharlo.

—¿Como supiste?

Areum suspiro y se acercó a él.

—Bien, ya vete.— Lo empujó a la puerta. Felix trato de darse la vuelta, pero Areum no se lo permitía, seguía empujándolo.

—Sino terminan, mañana vendré a hacer lo demás...

—Está bien, Felix. No es necesario, gracias.

El chico asintió un poco confundido y se despidió de los demás con la mano para tomar el ascensor e irse.

—Dios, no pensé que habría alguien más tonta que Areum. Son tal para cual.— Se burló Hyunjin de ella. Areum lo miro mal y le jalo un largo mechón de cabello, haciendo que este se quejara.

—Termina de ayudarme, ¿quieres?

(...)

—Dios, hace un calor terrible.— Se quejó Jisung mientras se abanicaba el rostro con la mano.— Areum...

La chica no se encontraba cerca, en realidad lo había dejando hablando solo. Jisung refunfuñó y se levantó del césped para poder entrar a la casa de Felix. Dentro estaban los tres chicos restantes, todos metidos en la cocina mientras comían gelatina.

—Oh Jisung, ¿por que volviste?— Pregunto Felix metiendo la cuchara con gelatina a su boca. Areum y Hyunjin se giraron para mirarlo.

—Son tan malo, me dejaron afuera. Y ni siquiera me preguntaron si quería gelatina.— Los miro molesto, y le quito la cuchara a Hyunjin, este le regreso la mirada y ambos comenzaron a luchar, empujándose el uno al otro.

—Ya.— Los paro Areum dándole otra cuchara a Hyunjin.— No te lo dijimos porque parecían muy bien afuera, tomando el sol.

Jisung dejó de quejarse, pero aún parecía molesto.

—¡Felix!— Gritó alguien desde afuera. El llamado los hizo reaccionar y el susodicho fue el primero en salir. Los tres restantes se asomaron por la puerta de la cocina, viendo a Haeri en la puerta de la casa. La otra chica los miro y su rostro pareció colorarse de rojo, les sonrió y jalo a Félix con ella.

—Esto me da mala espina.— Comentó Hyunjin mirando, al igual que los otros, en la dirección en donde Felix y Haeri habían desaparecido.

—Si, creo que nos dio una sonrisa falsa.

—A Haeri no le gusta que estemos aquí.— Confesó Jisung comiendo gelatina. Areum lo miro con confusión.— Ya sabes, Felix y ella discutieron mucho cuando tú te quedaste con ellos. Y piensa que ahora que ya tienes tu propio lugar no tienes nada que hacer aquí.— Areum y Hyunjin lo miraban sorprendido, ¿como es que sabía todo eso?— Escuche por ahí.— Añadió encogiéndose de hombros.

—Si, ya sabemos que Haeri es tan malditamente manipuladora, pero no lo haría frente a nosotros, por que entonces sabe que haremos que Felix abra los ojos.— Dijo el chico de cabello largo, pensativo.

—¿Y si hacemos planes sin ella?— Pregunto Jisung divertido.— Convenzamos a Felix de no llevar a Haeri y llevémoslo a algún lado, solo para ver cómo le hierve la sangre a Haeri.

—Ohhhh, eres malvado, Han Jisung.— Con eso, Hyunjin ya demostró que estaba de acuerdo con la idea de su amigo. Areum rodó sus ojos.

—Hagámoslo.

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