El tiempo pasaba lento, obviamente los días no eran lo mismo para JiMin sin la presencia de JungKook.

Luego de algunos meses, los mensajes desaparecieron, también las llamadas.

El de cabellos rosas iba frecuentemente a tomar el té con la madre de JungKook, pasaba las tardes allí ayudando a la señora.

Había vuelto a hablar con Taehyung, salían más seguido y le ayudaba a conseguir sentirse seguro en lugares a los que no estaba acostumbrado a ir.

Pasando los años, el menor de ahora 23 años trabajaba con Taehyung siendo maestro de la Academia de baile a la que iban cuando eran adolescentes.

No había hablado en mucho tiempo con JungKook, pero cada día mientras miraba su collar con la gema, deseaba que JungKook estuviera muy bien y que fuera muy feliz.

Sus alumnos eran pequeños, de apenas 10 años, y siempre le pedían que contara la historia de cómo había llegado a ser profesor y a superar sus miedos.

A JiMin le gustaba hablarles de como una persona había llegado a iluminar su oscuridad.

JungKook siempre estaba presente en sus pensamientos, como lo había prometido.

JiMin y su madre ahora vivían con Taehyung y su familia.

Lo único que le faltaba a JiMin, era que JungKook estuviera con él.

Pero no sabía si eso volvería a suceder.

Minnie tikito