—Es un regalo

URSS miró el objeto y después a USA

—Un casquillo de bala
—Sí. Es bonito, verdad?

El soviético solo sonrió. Sabía que a veces no debía encontrar coherencia en las acciones de USA, solo debía seguirle la corriente

—Sí
—Es de la primera bala que fallé al llegar aquí
—Como sabes que es esa?
—Mi primer fallo fue porque me distraje con el cordón de mi bota, olvidé que el arma estaba cargada y se disparó
—No debí preguntar
—Le di al techo de los dormitorios. Hoy tuve que reparar algo y encontré esto en la posición exacta donde fallé el tiro
—Aun así
—Es mi casquillo. Le grabé mi nombre el primer día porque estaba aburrido —señaló al metal—. U.S.A. baby

URSS solo rio nasalmente y guardó el obsequio. Era uno de esos detalles que USA solía dar.