—Eres muy impulsivo e idiota.

—Y tú un histérico mañoso.

Así discutían USA y URSS siempre... y Francia lo notó.

—Señor tecito... Creo que tú aliado se quiere coger a nuestro hijo.

—Ves cosas que no son.

—Casi puedo agarrar su tensión sexual.

—Dices tonterías —UK bufó.

—¡Vete a la mierda, comunista!

—Te llevaré conmigo.

—Fuck you.

—Te joderé si tanto quieres.

Francia se alteró y sacudió al inglés.

—¡Lo ves!

UK elevó una ceja.

—¡Ya dejen de pelearse! ¡Ahora!... Hacen que Francia vea cosas que no son.

Francia río. Olvidó que UK no entendía esas situaciones... Pero USA sí y a veces no podía ocultar sus emociones, como en ese momento.

—Mi niño, ¿por qué estás tan rojo? —Francia rio divertido.

—Es por coraje.

—Oh, ya veo —se acercó para susurrarle—. ¿O es porque te gustó la invitación sexual del soviético?

—¡No es eso!

—Eres tan lindo cuando lo niegas todo.