11.
USA observaba las flores, los chocolates, el collar de plata y la carta que le fue enviada.
Aceptaba que los detalles eran lindos, cada uno a su modo, así que estuvo muy contenta cuando se dispuso a leer la carta de su admirador secreto.
Pero sólo pudo decir una cosa.
—Oh fuck... Le gusto al comunista.
Suspiró y se comió los chocolates.
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