(Una semana después)

— ¿Por cuanto tiempo estaremos aquí? — me senté con fuerza sobre la silla

Estaba aburrido, ya había pasado el velorio y el entierro, se supone que solo habíamos venido para eso, pero al parecer no fue así. Yoongi había de nuevo ordenado que no salga de mi alcoba, se había ido y dejado a mí encerrado, ni a Miyeon podía ver.

— Esto es suficiente — me dirigí a mi puerta y la abrí

Miré a mi alrededor, no había ningún sirviente cerca, al parecer no creyeron que realmente iba a desobedecer a Yoongi, o tuvieron que irse a comer, una de las dos.

Paseé por toda la mansión, quería irme, estar solo en una casa tan grande me abrumaba, me sentía tan cansado de esto. Luego de pasear un rato fui en dirección al despacho de Yoongi, debía de estar ahí, tal vez me regañe por salir, pero no importaba, debía de decirle que quería irme, no aguanto más esto.

— ¡Ahg! —

Paré en seco al escuchar un gemido, provenía del despacho de Yoongi. Lo sabía, sabía que tenía un amante, siempre lo supe, pero sus padres siempre lo negaron, malditos viejos de mierda, espero estén en el infierno.

No me molesté en ver quién era, con solo escucharlos era suficiente. Seguro todos lo sabían, seguro era la burla de todos los sirvientes, era el estúpido omega de la mansión a quien su esposo encerraba para revolarse con su amante. Pero no importaba, su infidelidad no me afectaba, más bien me alegraba, porque así podría enfrentarlo.

— ¿Sigues despierto? — preguntó Yoongi entrando a la alcoba

— ¿Cómo podría dormir sin mi esposo? — me puse de pie

— Claro — sonrío y se acercó a mí — ¿Acaso quieres algo?, tú no sueles ser así —

— Quiero el divorcio — su sonrisa se borró de inmediato — no te amo, y sé que tú tampoco, es inútil seguir así, solo nos estamos condenando, ambos —

— ¿Divorcio? — se río — ay cariño, nosotros no nos vamos a divorciar, jamás — me agarró del cuello — entiende Jungkook, no te dejaré jamás —

— ¿Po-porqué? —

— ¿Porqué?, porque aún no me has dado un hijo. Eres tan inútil porque algo tan simple como eso no me lo puedes dar, ¿Porqué?, dime —

— Yoongi... —

— No te daré el divorcio, jamás —

— Mi familia no tiene tanto dinero, nuestro matrimonio no te beneficia en nada —

— Te equivocas, cariño — sonrío — me estoy encargado de que las ganancias incrementen, tu padre es tan bruto que no sabe exprimir el potencial que tiene ahí, pero yo lo haré — acarició mi mejilla — además no podría dejarte, eres un omega muy hermoso, puedo usarlo para hacer algunos tratos —

— Yoongi... — me alejé de él

— No pienso soportar ser la vergüenza de la sociedad por más tiempo, dame un hijo de una vez, Jungkook. Llevamos nueve años de casados, no me has dado ni un solo hijo, así que a menos que quieras que las cosas se pongan mal es mejor que me des un niño o niña, alfa —

— Me engañas, sé que lo haces — lo señalé mientras retrocedía — no me amas y yo menos, mi familia jamás será tan estúpida de darte todo el poder de sus tierras y jamás podré darte un hijo, no puedo. Dame el divorcio, búscate un nuevo omega y olvídate de mí —

— ¿Crees que es fácil?... ¿¡PORQUÉ SIEMPRE QUIERES DEJARME EN RIDÍCULO!?, ¿¡QUÉ MIERDA QUIERES!?, ¡MIRA DÓNDE ESTÁS, TIENES TODO! —

— ¡NO TENGO AMOR! — dejé todo en silencio

— ¿Amor? — se río — ¿Quién necesita eso? —

— Y-yo... —

— No, necesitas aprender a comportarte — se sacó la correa — tú eres un omega y un omega debe de estar callado, y darle la razón a su marido, y darle hijos —

— Yoongi, espera — me alteré cuando se acercó a mí con la correa en mano

— ¡ME VAS A OBEDECER MALDITA PUTA!, ¡YA ESTOY HARTO DE TÍ! —

(Dos semanas después)

— Despierta —

Abrí mis ojos, notando que el carruaje ya había parado, bajé con ayuda de Miyeon. Tuve que rogarle a Yoongi para que acceda traer a Miyeon nuevamente con nosotros.

— Con cuidado — Miyeon me ayudó a caminar

Me sentía mal, mi salud había decaído, Yoongi dijo que estaba gordo y me ha dado una dieta estricta que solo cuenta con una comida al día, tan solo un trozo de salmón y un vaso de agua.

— Qué alegría tener a todos mis hijos aquí nuevamente — mi madre me abrazó — ¿Ya estás embarazado? — susurró

— No lo sé — de inmediato mi madre me apartó y se acercó a abrazar a Yoongi

Mi madre nos dirigió a la sala, donde pude ver a un alfa, tenía cabello castaño claro, su mirada era algo curiosa, no parecía mala persona.

— Bienvenidos, me alegra por fin conocer al hermano de mi prometido, y a su esposo, el señor Min — estrechó la mano con Yoongi — soy Jung Hoseok, hijo menor de la familia Jung —

— Un gusto conocerlo, Jung — dijo Yoongi

— Puedes llamarme Hoseok, pronto seremos familia — ese alfa de pronto se acercó a mí — eres tan hermoso como había escuchado, señorito Jungkook — besó mi mano, podía sentir la mirada de Yoongi — por favor cuida de mí —

— Claro... — aparté mi mano cuando sentí como tocó mi muñeca de manera extraña

Hablaron de cosas que realmente no tenían importancia para mí, mi madre se reía de los cumplidos, mi hermano miraba a mi esposo sin importar que su prometido estuviera ahí, y mi padre, pues él miraba a una sirvienta.

— Me retiro, necesito descansar — subí con ayuda de Miyeon a la alcoba

Me dormí sin esperar mucho, no tenía fuerzas, solo necesitaba dormir. Me alegraba estar aquí, tenía tantas ganas de ver a Taehyung, pero no podía, tenía tanto sueño.

Más tarde salí, tuve que nuevamente salir y fingir frente a todos.

— ¿Estás bien? — Yoongi me ayudó a bajar las escaleras — cariño, ¿Qué te pasa?, ¿Te sigues sintiendo mal? —

Él sabe lo que me pasa. Este maldito idiota me hizo pasar su celo junto a él, además de eso tuve que soportar sus malditos golpes e insultos.

— Si sigues así será mejor volver, no quiero que sigas mal mi vida — me abrazó

— No te preocupes, cariño — intenté soltarme

— Te ves pálido, deberías comer algo — apretó mi cintura con fuerza, quise gritar de dolor pero tuve que callar

— No tengo hambre —

— Que bueno, si engordas sería un desperdicio — me soltó para irse con mi padre

— Miyeon, ayúdame... — ella de inmediato se acercó a mí

— ¿A dónde desea que lo lleve, joven Jungkook? —

— Con Taehyung... — susurré

— Lo haré — sonrío

La puerta principal estaba abierta, no fue difícil salir por ahí, todos estaban en la sala. Miyeon me llevó hasta los establos, buscamos a Taehyung, eran ya las ocho, seguro está por terminar su trabajo.

— Miyeon, déjame en el establo de al fondo —

— Sí, joven Jungkook —

Con cuidado me llevó hasta ahí, pero en aquel lugar no había un establo, no había nada.

— No... —

— Joven Jungkook, ¿Ahora a dónde lo llevo? —

— Busquemos otro lugar —

Avanzamos, mis ojos no se despegaban de aquel lugar, tantos momentos, desde el inicio, todo empezó ahí, todo el amor.

— Aquí... — la hice parar en un establo cerca al antiguo

— ¿Quiere que lo deje aquí? —

— Sí — vi a los caballos

— Bien —

○●○●⊙●○●○

Estaba en la fila, debía de hacerlo para recibir mi comida. Estos días habíamos dormido poco por los grandes pedidos, es por eso que esta semana terminaríamos mucho más temprano nuestro trabajo. Al patrón no le conviene perder esclavos o tener esclavos heridos.

— Eh... ¡Hey! — escuché una voz atrás mío

Al voltear vi a la sirvienta de Jungkook. Sabía que habían vuelto, pero no esperaba verlo hasta en la madrugada, tampoco esperaba ver a su sirvienta.

— ¿Sucede algo? — pregunté cuando estuvo cerca

— Sí, el joven Jungkook lo espera en un establo — susurró

Sí, ya no podíamos vernos en el antiguo establo, había sido destruido hace una semana por orden del patrón. Quise retrasarlo, pero no pude, tuvo que hacerse.

— Iré ahora mismo... — dije entusiasmo

— No — me detuvo

— ¿Pasa algo malo? — me preocupé — ¿Acaso ese idiota de mierda le a hecho algo? —

— Por favor, no se refiera de ese modo de mi patrón —

— Pero le a hecho daño a Jungkook —

— Cosas mucho más terribles pasan a diario... me duele ver al joven Jungkook así, pero mis patrones eran los difuntos señores Min y ahora el señor Min lo es. Les debo mucho y como tal debo de pedir respeto hacia ellos —

— ¿Pasa algo con Jungkook? — no quería hablar de su patrón

— No ha probado comida, temo que enferme, más de lo que está... —

— ¿Qué?, ¿Cómo que no ha comido? —

— Espéreme aquí un momento, iré por comida a la casa, traeré comida suficiente para él —

— Bien... —

Esperé, no comí, en vez de eso guardé lo que me dieron para darle a Jungkook, no era mucho, pero esperaba que le gustara.

— Esto fue lo único que pude traer — la sirvienta me mostró una pequeña canasta — por favor no demoren, no sé por cuanto tiempo seguirán hablando. El joven Jungkook se encuentra en el establo que estaba cerca al antiguo —

— No tardaremos — me dirigí a donde indicó

Lo encontré durmiendo, era un pequeño y hermoso ángel durmiendo encima de aquellos cubos de heno que habían en el establo.

— Jungkook... — me senté a su lado

— Tae, estás aquí — sonrío

— Así es, estoy aquí — acaricié su mejilla — traje comida —

— No debiste — se sentó

— Me dijeron que no comiste, no puedo permitir eso — acerqué un trozo de pan a su boca

— Si como engordaré —

— Yo te amaré de todos modos — lo vi dudar — realmente, nunca dejaré de amarte, no importa como te veas, en todas mis vidas yo te amaré —

— Igual yo — abrió su boca

Mentiría si dijera que no me asombró, porque lo hizo, Jungkook se comió absolutamente toda la comida, incluso la mía, se comió todo, hasta quedar saciado.

— ¿Mejor? — sonreí

— Sí — me abrazó

— Te extrañé — abracé su cintura, dándome cuenta de lo delgado que estaba — ¿No comes? —

— Allá no puedo — suspiró, se escuchaba cansado

— Vamos a dormir un poco — lo alejé de mí

— Es temprano —

— Entonces aprovechemos eso. Durmamos mucho, juntos —

No quería verlo así, su mirada tan apagada, su cuerpo luciendo así de enfermo, no me gustaba, porque no era normal, ese no era el Jungkook que conocía. Haré lo que sea para tener más comida para ambos, le diré a su sirvienta que también me de algo, me encargaría de alimentar a Jungkook como es debido.

○●○●⊙●○●○

(Nueve días después)

La boda se iba a retrasar un mes y medio más. Según escuché de parte de mi madre, era porque habían retoques que aún no se perfeccionaban. Bueno, si se retrasaba era mejor para mí, tenía una excusa para quedarme aquí, junto a Taehyung.

— A-ah... —

— Shhh —

Cada noche, como era habitual en nosotros nos reuníamos en el establo, no era el mismo establo, claro, pero se sentía nuestro.

Taehyung era tan dulce, siempre, cada noche él se aseguraba de que comiera, de que mi hambre sea saciada. Estaba volviendo a recuperar mi energía, cada día dormía menos, sentía como podía movilizarme yo mismo, sin ayuda de Miyeon podía caminar.

— Taehyung... — lo abracé, besando su cuello mientras él torturaba mi interior

— Hmmm —

Luego de comer nuestros labios se unían, nos dedicábamos amor y lo hacíamos. Me gustaba tanto abrazarlo, sentir como él también me abrazaba con el mismo amor.

— Haz-hazlo — pegué nuestras mejillas mientras saltaba encima de él con más rapidez

— Te amo... ¡Uhg! —

— ¡Ahg! — me corrí al sentir el nudo — Taehyung... —

— Te amo — besó mi rostro sudoroso

— Te amo —  

— Te siento más pesado —

— ¿Me estás llamando gordo? —

— Te estoy llamando saludable. Me gusta verte así — tocó mi mejilla

— A mí me gusta estar contigo —

— Estaré siempre a tu lado —

— A-ah... — sentí como salió de mí

— ¿Te duele algo? —

— No — lo besé — se siente bien — sentí su esencia deslizarse por mis muslos — te amo, Taehyung —

Taehyung era tan delicado conmigo, nunca me tocaba de forma brusca. Sabía que se estaba conteniendo, pero lo hacía por mí, hasta no verme completamente sano no haría algo que pueda doler, incluso si es placentero a su lado.

Continuará...

No habrá reto. No estoy pasando por un buen momento. Puede que mañana les suba un nuevo cap. Veré la manera de acabar con la historia rápido ya que se me están presentando demasiadas dificultades. Tenía otras historias planeadas para lo que queda del año, y que verían en septiembre, pero no creo subirlas ni para septiembre, ni para octubre, ni noviembre, ni diciembre...

Gracias por todo su apoyo, realmente lo valoro y amo. Gracias ❤.