Disclaimer: El presente capitulo contiene escenas +18 (versátiles) Esta es una obra de ficción y no es mi intención romantizar ninguno de los comportamientos de los personajes, solo pretendo retratar el comportamiento humano dónde no todo es bueno o malo, ni blanco o negro y está lleno de matices, a veces nos dejamos llevar por nuestras emociones y sentimientos y pues sale mal, así que si te sientes incomodx y no puedes separar la ficción de la realidad, te sugiero amablemente abandones la historia.    

Jungkook se estaba moviendo tan rápido que su bata blanca de doctor comenzó a ondear en el aire de izquierda para derecha y la tarjeta de identificación de empleado, que colgaba de su cuello, seguía haciendo un sonido de "crack, crack, crack" cada vez que chocaba contra su pecho. Verlo así no era algo que pasara muy a menudo, pero hoy, su temperamento se había vuelto tan excepcionalmente pesado que todos tuvieron miedo.
Los residentes que caminaban desde el lado opuesto del pasillo, lo saludaron con el respeto suficiente que merecía un superior, pero pasó junto a ellos sin siquiera mirarlos a los ojos.

Dentro de él, había una ira impresionante que le estaba consumiendo la sangre, era un incendio forestal. Después de regresar a su consultorio, revisó los registros del paciente y fue a la computadora para llenar su informe de atención, entonces cuando el mouse hizo click rápida y fuertemente sobre la madera él gritó algo como: —¡Puta madre! ¿No puedes ir más lento? —Y la golpeó, el residente, que estaba comiendo fideos a su lado, saltó abruptamente de su asiento y se cayó de nalgas. Incluso el propio Jungkook sintió que su personalidad era muy inestable ahora.

Había estado concentrado en el registro del paciente durante un buen tiempo, golpeó el teclado con fuerza cuando la cara de Kim Taehyung le volvió a la cabeza.

¡Maldito desgraciado! ¿Cómo se atrevía a...? ¿Cómo podía ser tan...? Incluso había mentido para no hacerlo sentir incómodo.¡Pero verlo aliviado por la mentira lo hizo sentir ganas de darle un puñetazo!

Bien, lo había dicho. ¡Quería golpearlo! Podía entender por qué quería fingir que no sucedió nada entre ellos. Eran amigos desde hace mucho tiempo, así que no quería alejarse de esto ni perder su relación. De acuerdo, que dulce. Pero, ¿Cómo diablos se atrevía a sugerirle que fuera con la anestesióloga?

¡Se acababan de acostar, por todos los dioses!

Al final, las palabras de Taehyung fueron la prueba de que la relación de esa noche, no había sido más que un error o un entretenimiento sin emoción alguna.

—¡Hijo de perra!

La palabrota salió de la boca de Jungkook, quien había recordado el rostro de mosquita muerta de Taehyung en la cafetería. Daba miedo porque él no era del tipo de hombre que mostrara sus emociones frente a los demás. Si alguien hubiera escuchado las malas palabras que estaban saliendo de su boca, una tras otra tras otra, se habrían puesto tan pálidos como si hubieran visto un fantasma.

Jeon Jungkook siempre estuvo al lado de Taehyung, pero él nunca lo puso en su lista de prioridades solo porque eran amigos. Nunca lo miraba ya que sus ojos estaban atentos en cualquier desconocido que pasara por allí. ¡Estaba cansado de fingir estar bien! Estaba cansado de fingir que eran amigos cercanos, fingir que le daba igual que se acostara con quién sea y cansado de aparentar ser heterosexual.

Si hubiera sabido que sus palabras se volverían en su contra, le habría dicho todos sus sentimientos por él correctamente. Debió haberle dicho —Ah, ¿No te acuerdas? ¡Pues mira la maldita cicatriz de mordedura que tienes en el muslo! ¿Qué crees que te pasó allí? ¿Crees qué fue un perro o qué carajo?

Rápidamente giró la rueda del mouse para escanear el registro del paciente, detuvo su dedo y se puso a reír tenebrosamente. En momentos como este, se sentía miserable por ser un hombre. Si hubiera sido una mujer, su relación con Taehyung habría sido completamente diferente. Los padres de ambas familias eran muy cercanos, por lo que tal vez él podría haber sido el prometido que le hubieran elegido sus padres.

—Kim Taehyung...

Desde el momento en que descubrió sus sentimientos por su amigo, su miseria solo se volvió impresionantemente dolorosa. Se sentía como estar atrapado en una habitación que Taehyung creó para él, bloqueado para siempre en el papel de un simple amigo que estaba más cerca de él que nadie más, pero que nunca podría acercarse lo suficiente.

¡Maldita friendzone!

Quitó por completo sus manos de la computadora, luego, simplemente se frotó el rostro con las palmas de las manos, una vez y otra vez y una más como si quisiera arrancarse la piel. Y aunque la expresión no se le movió, el calor que sintió en ambas mejillas hablaba de los sentimientos que tenía todavía dentro de su corazón. Primero estaba enojado por la mentira sobre su encuentro sexual, pero luego pensó que, incluso si tuviera otra oportunidad, lo volvería a engañar y a decirle que no recordaba nada, porque era lo mejor para ambas partes si sus cejas gruesas y rectas iban a fruncirse de esa manera todo el tiempo, aparentando estar tan incómodo con él, entonces lo mejor era seguirle la corriente.

Las cosas habían avanzado hasta el punto en que ya no podía soportar los deseos que había estado escondiendo durante toda su vida, y en cuanto hubo una pequeña oportunidad, los reveló completamente. Sintió el calor subiendo por todo su cuerpo así que tocó a Taehyung con la excusa de estar bastante borracho.

Acercó el cuerpo a su cuerpo y lo besó.

A pesar de que siempre se repetía que tenía que caminar a su lado como lo hacían los amigos normales, también deseaba que ese hombre cayera entre sus brazos para mirarlo únicamente a él. ¿Qué dirían sus padres si se enteraran o qué pasaría si veían al menos una vez la manera en la que su hijo tensaba la espalda cuando lo tocaba estando desnudo? Y si Taehyung se enterara completamente de la manera en la que se lo cogió, ¿Entonces que diría él?

Pero en realidad, había logrado aferrarse a su razón, tan delgada como un hilo, y aguantó durante mucho tiempo como una bandera en una colina donde soplaba un tifón.

¡Fue Taehyung quien se lo cogio primero!

Él fue el primero en desatar su cinturón y quitarse los pantalones, y fue él quien se le acercó en ropa interior y le mostró el pene. Jungkook solo era culpable de no detenerse.

Taehyung, fue quien presionó sus labios contra los de Jungkook tan tiernamente que la acción provocó una chispa en su pecho, no en su cabeza. Como engranajes chocando entre si y escupiendo fuego. Y el cabezazo y la boca cerca de la suya fueron el catalizador.

Jungkook no pudo soportarlo más y se levantó de su silla. Sus ojos, que habían estado aturdidos por la embriaguez, brillaron al contacto de sus labios y luego, sin darse cuenta de como había pasado en realidad, lo empujó contra el colchón y lo hizo suyo.

El cansancio se le había acumulado hasta el extremo, y estaba exhausto por el trabajo que había estado realizando durante varios días. Aunque tenía planes, tomó la llamada telefónica de Taehyung al primer pitido y corrió al hotel sin preguntar demasiado al respecto y se sintió patético al darse cuenta de que había arruinado una "cita con su novia" solo para escuchar al hombre, del que estaba enamorado, diciendo la forma en que una mujer le pateó la cara antes del sexo.

Le dijo que estaba en su casa, pero en realidad era una reunión sobre una propuesta de un matrimonio. Pensó que tenía que conseguir una pareja, una mujer normal, y utilizarla para borrar sus sentimientos por Taehyung. Pero, a los 5 segundos de haber comenzó la reunión, la abandonó. Ella era una buena mujer, estaban en la misma profesión, en el mismo hospital y no eran demasiado invasivos el uno con el otro. Eran el tipo de personas apasionadas por su trabajo, educados y amables... Y él prefirió a su amigo el playboy que no dejaba de follar con Raimundo y todo el mundo solo porque eso era lo que las personas estúpidas hacían.

Se despidió diciendo que había pasado algo urgente y salió del restaurante. La besó o algo así, tampoco podía llamarse beso en realidad, fue más bien algo como un golpe de labios.

No era como el beso que le dió Taehyung.

Eso fue la descarga de electricidad más suave del mundo entero. Un beso con olor amargo a alcohol, con un toque de crema de mantequilla, y mientras miraba fijamente su cara, la mano de Taehyung se metió dentro de su camiseta y en algún momento del encuentro, la desabotonó para poder tocarle la piel.

Cuando la punta del pezón se frotó contra su palma seca y agrietada y luego corrió hacia su ombligo, Jungkook se estremeció de un modo increíblemente delicioso. Se preguntó si esto era solo un hábito suyo de "mujeriego" y luego todo este asunto se volvió todavía peor cuando la mano de Taehyung tocó el lugar  en que tenía su pene. El hombre había intentado apretar su última pizca de razón y por supuesto que pensó que debería detenerlo en este momento. Él quería hacerle el amor pero, ya que nunca se lo había imaginado de esta forma, intuyó que no era lo que quería hacer. No era lo correcto...

Se detuvo.

Taehyung, quien puso una mano sobre el colchón, arrugó la frente y lo miró como si estuviera pidiéndole que se acercara de nuevo. De vez en cuando lo observaba fijamente y lo sujetaba por la cintura utilizando sus dos manos.

Había un pensamiento en su cabeza que decía que tenía que detenerlo, pero no hizo nada para controlar la tentación. Emociones oscuras y cobardes fluyeron de la parte que Taehyung estaba sosteniendo y cubrieron completamente su cuerpo hasta hacerlo tener la cabeza en blanco ¿Y es que qué pasaría si fingía que no podía evitarlo y se dejaba llevar? ¿Qué pasaría si solo... Daba un salto de fe?

Irónicamente, fue porque él era solo su amigo que le había permitido permanecer a su lado durante tanto tiempo. ¿Habría podido quedarse con él todo este tiempo si fuera alguien más? ¿Le habría permitido estar de esta manera ahora?

Jungkook recordó los rostros de todos esos desconocidos que habían sido heridos por Taehyung en el pasado y pensó que eventualmente terminaría teniendo la misma suerte que ellos.

Pero mientras estaba en ese conflicto interno, Taehyung, quien finalmente se quitó los pantalones, comenzó a abrirse de una manera fantástica para él. Y luego, antes de que pudiera reaccionar, comenzó a mostrarle su pene.

El miembro de Taehyung, comenzó a rozarle entre sus piernas,  casi apuñalando su muslo interno como si fuera un palo.

El hombre estaba tan borracho que no podía controlar su cuerpo correctamente, así que empujó su propio cuerpo entre las piernas de Jungkook y le presionó los hombros con las dos manos hasta lograr penetrarlo.

¡Ah, fue tan difícil soportar el dolor!

No importaba cuántas veces lo pensara, no quería convertirse en un entretenimiento de una noche para él. Además, si lo hacía ¿Sería capaz de guardar este momento en su corazón por el resto de su vida y sentirse satisfecho? Estaba claro que iba a haber un deseo mayor en el futuro y sería el final de su relación de amigos.

Sin embargo, la tentación fue demasiado grande como para empujar a Taehyung y se dejó llevar, sintiendo en su carne el placer de cada estocada del pene de Taehyung en su interior.

Desde el día en que se dio cuenta de que tenía a Taehyung en su corazón, acarició diariamente sus propios genitales y gritó el nombre de ese hombre mientras se masturbaba. Siempre fue su único deseo ser poseído por él, amaba ver el cuerpo de su amigo cambiándose de ropa en el vestuario y amaba imaginarlo a su lado en su cama. Suspiró, luego pensó que debería disfrutarlo de todos modos.

Después de todo, allí estaba el cuerpo desnudo de Taehyung sobre el suyo, lo que siempre había estado deseando en sus delirios.

Y mientras Jungkook estaba siendo penetrado, la mano de Taehyung corrió entre sus caderas hasta hacer que su pene se levantara y goteara un poco de semen, pero no fue suficiente como para llegar al punto del orgasmo. Sin embargo, Jungkook  lo miró fijamente cuando sintió que le estaba tocando las nalgas para abrirlo aún más.

—¿Qué estás haciendo?

Taehyung frunció el ceño cuando notó que lo estaba deteniendo.

—Solo quiero terminar. Tranquilo, Kang Taemin.

Kang Taemin.

¿Kang Taemin?

Si Jungkook hubiera sido un objeto quebradizo, se habría roto en pedazos con ese sonido. No importaba, de quién fuera el nombre, de todos modos, no era el suyo. Se sintió muy mal.

Era un sentimiento que no podía expresarse con palabras y es que no era suficiente decir el nombre de otra persona mientras lo penetraba descaradamente, sino que ni siquiera sabía de quien era el cuerpo que se estaba cogiendo en ese momento.

Jungkook se echó a llorar.

Podía sentir las lágrimas en sus ojos, volviéndose calientes mientras bajaban por su rostro. Lo llenó una sensación de traición e ira porque, aunque estaba borracho, igual pensó que no era justo. Imaginó que lo estaba haciendo porque también tenía sentimientos por él o porque al menos le gustaba un poco su cara, pero no fue nada de eso.

Enojado se lo quito de encima y le hizo aferrarse a la cama cambiando de posición con él.

—Taehyung...

—¿Qué...?

—Lo siento.

Jungkook se subió rápidamente a su cuerpo, le tomó los hombros con ambas manos y lo presionó contra el colchón.

Mientras los dos hombres forcejeaban en la cama, el colchón parecía sacudirse violentamente de un lado para otro. Taehyung, no pudo moverse cuando Jungkook, lo presionó para abajo con todo su peso. Normalmente era un hombre rudo, lo habría golpeado y pateado hasta dejarlo inconsciente y lo insultaría por haber jugado con su honor como hombre activo. Pero, ahora pareció estar tan honestamente mal, que ni siquiera podía manejar su pene de manera correcta.

Jungkook agarró sus hombros con firmeza y lo mantuvo quieto antes de que le volviera a dar un cabezazo, entonces puso sus labios en sus labios chupó su boca hasta que el sabor amargo del alcohol le impregnó la saliva. Sin embargo, no era algo que le molestara en absoluto, más bien, podía decir que le gustaba tanto, que su corazón, que se había enojado con el nombre del desconocido de "Kang Taemin", comenzó a latir con mayor intensidad.
Estaba enojado con él, eso era completamente cierto. Pero, una vez que comenzó a acariciarlo se encontró con que ya no podía detenerse.

Era irresistible.

Jungkook metió la lengua en el pequeño espacio de su boca, pero Taehyung pareció no querer que lo besara. Él deseaba tomarse su tiempo para sentirlo, acariciarlo, chuparlo y consentirlo, pero sorprendido por esa reacción tan inesperada, se encontró respirando muy profundo.

La boca de Taehyung estaba muy caliente, tanto, que fue como si su saliva, que estaba brotando por sus comisuras, fuera a secarse y a evaporarse de un momento para otro. La lengua, que se le retorcía como una serpiente que estaba increíblemente hambrienta, subía y bajaba de un modo tan encantador, que incluso el aliento que llegó a tocarle la mejilla le hizo suspirar.

—Ah, ah...

Cuando Jungkook agarró sus manos y las fijó en la parte de atrás de su cabeza, sus músculos trapecios y sus hombros, que eran perfectos sin importar donde se miraran, se destacaron tan perfectamente que fue como si quedara en shock. Sus brazos estaban muy levantados y revelaban unos duros deltoides y también, unos grandes músculos pectorales que estaban bien abultados debido al ejercicio. ¿Y cuántas veces había estado pensando en este cuerpo, en su propio espacio, donde no había nadie más que ellos dos gritando sus nombres?

Era perfecto.

Tanto que Jungkook puso sus labios con cuidado en su pecho, siguiendo la ilusión que había repetido innumerables veces en las imaginaciones de su cabeza. Desde la clavícula hasta los pezones, que ya se le habían endurecido lo suficiente bajo su boca, comenzó a acariciarlo utilizando la punta de su lengua que ya estaba bastante caliente y cuando incluso usó los dientes y mordió su pezón, Taehyung exclamó un
—¡Aah!, —Dejó escapar un gemido y giró su cuerpo hacia el otro lado casi inconscientemente.  

Jungkook no pudo contenerse más después de eso.

No podía deshacerse de todas esas emociones y sensaciones que corrían por su cabeza e incluso, por un momento, fue como si la herida punzante de su pecho finalmente hubiera estallado para comenzar a supurar.

—Taehyung... —Jungkook llamó a su nombre en voz baja. Contrariamente al habitual tono frío y seco que ponía siempre en el hospital, su voz esta vez pareció estar agrietada y rebosante de calor.

Taehyung entonces se volvió hacia un lado y sacudió la espalda en el aire, haciendo que su pene bien erecto quedara más expuesto y los hoyuelos le aparecieran y le desaparecieran de esas caderas tan bonitas de las que había estado tan orgulloso antes. Jungkook lo llamó por su nombre una vez más, pero no respondió de inmediato. Solo hubo un sonido de dolor de tono bajo que hizo que su garganta se pusiera a vibrar.

El hombre miró su gesto descarado por un momento, luego agarró cuidadosamente sus genitales, y lo acarició hasta hacer que se pusiera a temblar justo como lo había hecho la primera vez que lo toco. Los pilares mojados y brillantes de su pene, aparecían y se ocultaban repetidamente mientras se pegaban a la piel humedecida de sus palmas y luego, como si estuviera tragando un gemido, pudo ver incluso la fuerza que Taehyung había puesto en las líneas de la mandíbula para intentar resistir el gemido que se asomaba de su garganta.

Jungkook agarró su pene aún más fuerte y pasó su otra mano entre sus nalgas. ¿De quién creía que era la mano que le estaba haciendo esto? ¿De Kang Taemin? Dios, no quería ser el sustituto de ese hombre esta noche, pero pareció que ya no tenía remedio. Extendió con cuidado sus largos dedos entre su cuerpo, mientras jugueteaba con sus caderas, le hizo torcer su torso una vez más hasta que incluso se preguntó si se estaba sintiendo bien.

Taehyung giró su cuerpo boca abajo, levantó las nalgas en lo alto y comenzó a tomar las sábanas entre sus manos como si este fuera el modo que había adoptado para no enloquecer. Jungkook agarró sus caderas temblorosas con ambas manos y le abrió las piernas de par en par sobre la cama. Los testículos que se balanceaban a través de sus muslos eran claramente visibles, y la entrada rosada pareció comenzar a punzarle intermitentemente. Luego,  se quedó mirando ese ano en el que nadie había entrado antes de él, y empujó suavemente su largo dedo índice hasta dentro. Naturalmente, solo se tragó la punta de la uña la primera vez, pero cuando no apretó, decidió levantarse para colocar la lengua en su lugar.

—¡¡Aaah!!

Taehyung, que había estado sacudiendo la espalda durante mucho tiempo, se detuvo por un momento y luego respiró increíblemente hondo cuando algo caliente y húmedo tocó ese lugar. El hombre agarró el dobladillo arrugado de la sábana con ambas manos y repetidamente apretó y aflojó esta parte según el placer que sentía entre sus nalgas.

La respiración de Jungkook, que estaba demasiado agitada y áspera, llegó a meterse entre la piel del trasero de Taehyung así que se agarró al colchón y tembló ante la extraña sensación que sintió cuando su lengua puntiaguda tanteó alrededor del agujero y se empujó finalmente hasta el tope. Entonces, cuando dejó de moverse, Jungkook metió su mano entre sus piernas y agarró sus genitales para intentar volverlo a masturbar. Podía sentir su verga creciendo, su carne hinchándose en la punta de sus dedos sin ningún tipo de filtración.

—Ah, ah, es... Es extraño...

Taehyung, que había apretado los dientes y hablado de una manera un tanto reprimida, pareció haber llegado a un punto perfecto de excitación sexual. Sin embargo, de vez en cuando, abría los labios y dejaba escapar un pequeño gemidito, extendía las manos o dejaba caer la frente contra la sábana mientras se ponía a gritar.

Jungkook, que lo miraba de una manera absolutamente fija, perdió la cabeza y metió tres dedos de una sola vez. El agujero que había estado abierto de par en par mientras se retorcía por el placer que estaba haciéndole sacudir hasta la espalda, se cerró ante la repentina intrusión, palpitó de nuevo y ocasionó que Taehyung abriera la boca de un modo que se sintió un tanto exagerado.

Se derrumbó sobre la sábana, con un sonido extraño y luego dijo que era "algo completamente nuevo para él." Y que "era vergonzoso." Pero Jungkook igual quería cuidarlo y ser lo más gentil que pudiera. Los fuertes muslos de Taehyung temblaron cuando lo abrió un poquito más con las manos y luego sus testículos, que parecieron bastante pesados a través de sus piernas abiertas, se estremecieron hasta que, en un punto, su pene soltó un montón de semen en su palma. Pero el líquido blanco y espeso era tanto, que pareció derramarse como agua entre sus dedos.

Taehyung, relajó la espalda y cayó sobre la cama mientras comenzaba a respirar con muchísima fuerza. Jungkook miró sus dedos sucios, sus palmas sucias, y luego se las llevó de inmediato a la boca y a la nariz respiró hondo y olfateó su semen.

Incapaz de resistir la sed ardiente que estaba creciendo dentro de él, puso su lengua en su mano y lo probó como si fuera un dulce. Olía igual a la piel de Taehyung, pero tenía un sabor salado y mientras hacía eso, incluso sintió que su pene se había comenzado a levantar otra vez.

Jungkook volvió a separar las nalgas de Taehyung con una mano apresurada y torpe.

El semen que tenía entre la mano actuó como lubricante cuando metió sus dedos manchados a través del agujero y luego, los sacó lentamente como para que se pudiera acostumbrar. Entonces, Taehyung, que estaba acostado en la cama, exhalando con dificultad y jadeando, hizo un intento por arrodillarse y se acomodó para que esa mano presionara justo en ese punto que pareció gustarle mucho.

Jungkook se sintió quemado hasta la médula por culpa de lo sexy que se veía Taehyung, como si fuera un río expuesto en una sequía. Sus genitales estaban dolorosamente excitados, su pecho ardía y sentía una sed increíblemente loca por él. Cuando volvió a torcer su cuerpo e intentó levantarse un poquito más, Jungkook, bastante impaciente, comenzó a meter su pene dentro de esa pequeña entrada rosada y necesitada por él. No había forma de que ese objeto pudiera caber en el ano de Taehyung, que apenas si había sido aflojado con sus torpes manos, pero lo intentó tan despacio como la mente le decía que lo hiciera.

Ambos soltaron un gemido al mismo tiempo.

—Ah...

—Umm...

Cuando Jungkook trató de empujar su pene con fuerza dentro de él, Taehyung empujó su rostro contra la almohada e hizo una voz extrañamente más fuerte. Luego, Jungkook palmeó la parte inferior de su abdomen con una mano, le agarró el pene, y comenzó a sacudirlo mientras hacía lo mismo con su cintura y allí descubrió que Taehyung, que era muy promiscuo, también era extremadamente sensible ante el placer.

Cuando la entrada, que había estado apretada como si fuera a cortarle los genitales de un solo tajo, volvió a aflojarse tanto como la primera vez, Jungkook se empujó de nuevo hasta hundirse completamente en su interior.

—Ah, ah, ah, ah...

—Tae, ah, Taehyung...

Sus paredes internas y calientes envolvieron sus genitales hasta el punto en que Jungkook gimió y gritó el nombre de Taehyung con toda su fuerza. El interior lo tenía tan caliente que no sería extraño que lo hiciera eyacular de un momento para otro, y aunque estaba un poco apretado, era infinitamente suave. Sentía que era como agua hirviendo.

Aquello era un sentimiento de éxtasis breve acompañado con arrepentimiento y resentimiento junto con el placer que le estaba haciendo cosquillas en todas direcciones de su cuerpo.

—Lo siento, ah... Lo siento...

En primer lugar, no quería tener sexo así con Taehyung. Al contrario de lo que decía su mente, su corazón pareció comenzar a desgarrarlo desde el centro del pecho y cada vez que penetraba en su agujero, Taehyung dejaba escapar un gemido lastimero y reprimido que sonaba como:

—¡Aaah! ¡Ah, ah, ah!

Sin saberlo, eyaculó dentro de Taehyung de una manera increíblemente pesada y cada vez que entraba y salía de su agujero después de eso, el semen blanco brotaba hasta mancharlo todo.

—Oh, waaaaa... Ah, ah...

—Taehyung, Taehyung... Ah, Taehyung...

—Ah, un poco más.... ¡Ah!

Jungkook sintió que su corazón estaba a punto de estallar. Exhaló con tanta violencia que sacudió sus hombros y después, agarró la cintura de Taehyung con ambas manos y lo aproximó un poquito más hacia él para poder sentirlo mejor. Entonces, cuando la pelvis de Taehyung fue sujetada con firmeza por sus antebrazos, los movimientos del hombre comenzaron a incrementar uno por uno hasta que de repente, el estrecho agujero se le llenó de semen una vez más.

Jungkook, que pareció no darse cuenta de lo desencajada que estaba su expresión facial, solo abrazó a Taehyung, como si fuera una bestia, y se movió con él como le vino en gana.

Abrazó la cintura de Taehyung con ambos brazos, como un perro en celo, perdió la razón y palmeó su trasero con muchísima fuerza cuando pareció llegar hasta su propio orgasmo y ya que eran unas nalgas bastante musculosas, un chasquido resonó en toda la habitación del hotel.

—¡Ay! Ah, ah, Dios... ¡Ah!

Tan pronto como Jungkook empujó su largo y grueso pene en el agujero de Taehyung, justo hasta el final de la raíz, se escuchó un chirrido extraño y, al mismo tiempo, sus testículos parecieron estrellarse muy duro contra su carne.

El hombre gritó el nombre de Taehyung casi como si estuviera llorando. A pesar de que no era la primera vez, el cuerpo promiscuo de su mejor amigo sentía tan constantemente el placer, que comenzó a tragarse sus genitales con muchísima más fuerza que la de la primera vez, la saliva comenzó a fluir de su boca bien abierta y el sudor comenzó a caerle por la cara y por el pecho. Taehyung agarró el antebrazo de Jungkook, que sostenía su cintura, y comenzó a hablar.

—Ay, Jungkook. Más duro Jungkookie. —El nombre de Jungkook repentinamente salió de la boca de Taehyung

Jungkook, fue despertado por la voz que lo llamaba tan suavemente, se volvió hacia él y lo tocó para mirarle la cara.

—¿Qué dijiste?

—Ah...

—¿Taehyung?

—Jungkook... Um...

Jungkook torció el rostro, cerró los ojos y acarició lentamente la mejilla de Taehyung mientras lo escuchaba pronunciar su nombre. Sin embargo, no abrió los ojos y siguió murmurando para si mismo:

—Jungkook... Más. Quiero más... Jungkook. Jungkookie.

Antes de que Taehyung pudiera terminar de hablar, volvió a penetrarlo, incluso aunque pareció que se había detenido por un tiempo y fue así como la noche de ese sábado, la cabecera de la cama de ese hotel, se estrelló contra la pared toda la noche.