Si estás leyendo esto, supongo que eres un vampiro joven que quiere aprender más sobre nuestra historia, lo que encontraras aquí es una historia que ocurrió en el 2000. También puede que seas un humano que ha conseguido encontrar esta historia, mayormente la encontrarás en casas de vampiros (probablemete eres conocido o amigo de uno de ellos).

Sea como fuese, espero que esto sirva para que aprendas que, aunque todos parezcan buenas personas (o buenos vampiros), y puede que sea así en su mayoría, es decir: lo que pareciera un mundo perfecto, donde nadie piensa en hacer el mal.

Siempre habrá alguien que
piense diferente, si él o ella quiere hacer mal, puede que lo haga; y hará algo: para mal, o para bien...

Lo que ocurrió en esta historia, hizo un cambio en la sociedad de los vampiros, y al final de esta historia tan real como que odio el ajo: vosotros consideraréis, si fue un buen o mal cambio.

Antes de continuar, el protagonista, más bien la protagonista de esta historia, soy yo, Azra Stoica, Azra significa "puro" y mi co-protagonista y antagonista, Edith Balan, su nombre, Edith, significa "guerra". ¿Son nombres perfectos para la confrontación, verdad? ¡Lo que es puro y noble contra la horrible guerra! Pero la verdad, ¿A qué son nombres raros?

Bueno pensaréis que lo son si no sois de Rumanía, o tenéis orígenes de Rumanía, (como la mayoría de los vampiros de la actualidad). Debes saber que durante muchos años fue el único lugar donde los vampiros residían.

Haré una presentación más extensa; como he dicho mi nombre es Azra Stoica, nací en 1980, así que cuando ocurrió los hechos que narraré en breve tendría 20 años.

Soy hija de un vampiro rumano, uno de los primeros que salió de Rumanía, todos los que emigraron en 1960 (mi padre por aquella época tenía 30 años). Eran jóvenes vampiros y vampiras, cansados de ser temidos por el hecho de serlo, así que, quienes se fueron, (se contó alrededor de un millar de vampiros), hicieron un convenio no escrito donde decidieron ocultar sus poderes, y en parte, odiarlos. También, dejar de hacer el mal, dejar de chupar sangre, desde hacía varios siglos, sabían que había frutas con alto contenido de plasma, una sustancia muy parecida a la sangre, que alimentaba igual que la sangre y no hacía daño a nadie, pero se siguió haciendo daño a los humanos.

Mi padre emigro a Cánada, no cambió mucho de clima, en Cánada hace el mismo frío que en Rumanía, por eso mi padre eligió ese país.

Allí, ocultó a todo al mundo que era vampiro, a todos excepto a mi madre... Se casaron en 1978, tras 3 años de relación, mi madre nació en 1950 y mi padre en 1940, se llevaban 10 años mortales, gran cantidad de tiempo para los humanos, pero insignificante cantidad para los vampiros.

Los vampiros crecemos al mismo ritmo que los humanos hasta los 30 años de edad, en nuestro primer centenario de vida, tenemos la aparencia de un humano de 30 años, y cuando cumples otro centenario, obtienes 10 años más en apariencia humana. Por eso, al final de la vida de los vampiros más viejos; son muy blancos (y feos), como el famoso y más sanguinario de los vampiros de toda la historia: Drácula. Que a punto de morir con 1789 años, empezó a buscar sangre para satisfacer su aburrimiento causado por la vejez.

Volviendo a mis padres, mi padre no contó nada a mi madre sobre su condición de vampiro hasta que yo nací, y cuando lo hizo, ella lo aceptó sin ninguna sorpresa, no le importaba que fuera vampiro, había encontrado a la mejor persona del mundo, y con esa persona, ahora, había creado otra vida: yo. Pero ella, al ser humana, no podía vivir hasta 2000 años de vida como mi padre. Mi madre murió en 2010, poco antes de que esta historia saliera a la luz en las sociedades de vampiros en 2011, por lo que no pudo ver terminado lo que en breve os narrare.

Según mi padre, ella será su único amor durante sus posibles 2000 años de vida.

Así que yo soy una vampira mestiza, no pienses que es extraño, ese millar que emigró en los 60, en su mayoría con hijos en la actualidad, son mestizos.

Aunque seamos mestizos, tenemos los mismos poderes y debilidades que los vampiros "completos", aunque con algunas mejoras gracias al ADN humano.

Los poderes son: podemos transformarnos en murciélagos, podemos correr a altas velocidadades, y según distintos puntos de vista de vampiros, puede ser poder o defecto, alimentarnos de forma principal de sangre (o plasma de fruta como yo).

Y las debilidades son: Los vampiros mueren por vejez o por asesinato, la única forma de matar a un vampiro es clavarle una estaca en el corazón. Porque el ajo sólo nos debilita, por eso... ¡Muy importante el ajo! ¡Aunque sea mestiza, odio el ajo!, pero también la luz del Sol, al ser mestiza no me pasa nada al exponerme (gracias mamá), pero los vampiros completos, o usan crema de Sol o se evaporan... Y ninguna debilidad más, pero ¡Recuerda nada de ajo! ¡Si eres un humano que está leyendo esto y tienes un amigo vampiro, no le des ajo! ¡Y si eres un vampiro joven, ni lo mires! ¡Aléjate de él en los supermercados!

¿Creéis que me he dejado algo? ¿Cómo los crucifijos o el agua bendita?

Eso es un mito falso, no nos destruye ni debilita, a no ser que seas un vampiro viejo de 1500 u 2000 años y te lo creas todavía.

Ah y si me reflejo en los espejos, tengo que peinarme para ir a trabajar, para no parecer loca. ¿No crees?

Y creo que ya sabes suficiente de mí, si eres humano habrás aprendido datos básicos de vampiros y sobre mí, o en caso de que seas vampiro joven, así recuerdas tus poderes y debilidades, y también para que puedas leer y entender lo que ocurrió en el tiempo y mentalidad que tenían los vampiros en la época que ocurrió la historia.

Aquí empezamos...

***

Por aquella época, cuando tenía 20 años, la mayoría de los vampiros, estaban integrados en la sociedad humana de incógnito, ocultando sus poderes.

De hecho, muchos vampiros de aquella época los odiaban, porque sólo servían para hacer el mal: chupar sangre, transformarse en murciélago y poder correr a alta velocidad para huir de escenas de crimen por chupar sangre a humanos inocentes.

Yo estaba entre esos vampiros que odiaban sus poderes, ideé una teoría de porque tenía la maldición de ser vampiro: pensaba que era una maldición hecha por alguien, quien predijo el futuro hace miles de años, y como víctimas de su horrible maldición eligió a la rama familiar que daría lugar a mi padre, y por ende a mí.

Eso pensaba, al igual que mi padre, aunque mi madre nos decía siempre:. "Vuestros poderes pueden ser buenos o malos, ¡Eso depende de para qué los utilicéis!". Eso decía, y mi padre y yo contestabamos: "¡No, esos poderes sólo se pueden usar para el mal!".

Es así. Nunca, nadie, en la historia de los vampiros, usó sus poderes para el bien, de hecho, Por ejemplo, ¿cómo se puede usar para el bien chupar sangre? ¿Verdad?

Definitivamente, ser vampiro era una horrible maldición.

Por aquella época, en su mayoría, el millar de vampiros que abandonaron Rumanía, fueron a Cánada, y muchos de ellos, vivían en zonas cercanas, por lo que con los años, se empezaron a montar, así como en el mundo humano: juntas de vecinos; en el mundo vampiro, juntas de vecinos vampiros.

En estas, el objetivo era informabar a los vampiros de  un determinada zona, lo que pasaba con vampiros de otras zonas del mundo; en especial, se hacían a modo de prevención, por si algún vampiro o vampira, cometía algún delito con sus poderes, y si esto ocurriera, que  un determinado número de vampiros encargados para esas situaciones especiales de distintas zonas del todo mundo, estuvieran preparados para ir a la zona de residencia de ese vampiro o vampira, y los  vampiros encargados le hicieran cambiar de opinión para que dejara de hacer el mal, y su única arma para hacerle cambiar de opinión sería la palabra, y si quisiera seguir haciendo el mal, nunca matarían a ese vampiro/a, sería juzgado como en el mundo humano, y en el caso de que fuere encerrado, sería en alguna  parte del mundo con vampiros, porque matar, ya fuese a otros vampiros o humanos,
era cosa de la arcaica sociedad de los vampiros de Rumanía, pero eso nunca pasaba, pues, muchos de los vampiros más ancianos de Rumanía ya habían muerto, muchos superando los 2100 años; y estos eran los que querían hacer el mal, y ninguno de los vampiros actuales, ni pensaba ni quería hacer el mal, pero siempre hay excepciones entre eso vampiros que si querrán hacer el mal.

Sin embargo, la mayoría de las veces, nunca pasaba nada, sólo eran reuniones, donde los vampiros hablaban entre sí como vecinos humanos normales.

Recuerdo, que cuando era pequeña (5 o 6 años, que no joven, pues si eres vampiro eres joven hasta los 500 años de edad), siempre oía la misma temática de conversación, "¿Por qué hacemos estas reuniones? Nunca pasa nada, ahora todos los vampiros nos hemos vuelto buenos, ninguno es malo".

O también frases como... "Estas reuniones sólo sirven para recordarnos la maldición que son nuestros poderes".

Pero nunca, ningún vampiro dejaba de ir a las reuniones, en el fondo todos, aún creían que los vampiros eran malos, y por eso también se veían así mismos, se consideraban malvados por  el sólo hecho de tener poderes, siendo que algunos eran en la sociedad humana considerados héroes por ser bomberos o policías, gracias a sus poderes que les daban una condición de excelente forma física.

Yo crecí oyendo esas frases cada dos semanas, por eso al final, también acabe ideando mi teoría de la maldición familiar hace miles de años.

Todo el mundo en esas reuniones coincidían en que ser vampiros era algo horrible, todo el mundo lo pensaba, excepto alguien de mi edad, que pensaba lo contrario desde muy pequeña: Edith Balan.

Ella creía que sus poderes eran algo bueno, no para hacer el bien, sino que, eran buenos para el mal, pues con ellos, podría devolver la antigua gloria de la época dorada de los vampiros: cuando el conde Drácula aterrorizaba en el siglo XVI a toda Transilvania, en Hungaría.

Pero, según ella, esta gloria fue arrebatada por los humanos cuando finalmente, un grupo de aldeanos mato a Drácula, cabe decir que ella odiaba a los humanos, además de que era vampira "completa", y eso le hacía creerse superior a la mayoría de niños que ibamos a las reuniones, pues muchos eramos mestizos, y decía que tener sangre humana mezclada con sangre vampírica era una mancha para los vampiros.

Claramente, de pequeña no tuvo esas ideas de golpe, fueron desarrollandose poco a poco, pues cada vez que decía algo contra los humanos o algo contra los niños mestizos, sus padres le gritaban, y le decían que pensara lo contrario, que ella era mala, al igual que todos los vampiros, y ella empezó a pensar lo contrario, con cada grito de sus padres por sus ideas, fue alimentando el odio natural que ya tenía hacia los humanos, pero también, cada grito hacía que pensara que los humanos tenían la culpa de que todos los vampiros se hubieran vuelto contra sí mismos, y así alimento la idea de que los vampiros eran mejores que los humanos.

Y así ella creció, alimentando cada vez más su odio hacia los humanos y el amor hacía los vampiros, mientras que los demás niños, creciamos adorando a los humanos y odiandonos a nosotros mismos por ser vampiros.

Hasta que un día, cuando teníamos 20 años, Edith ya tenía sus ideas contra los humanos totalmente completas.

Y soltó a sus padres que Drácula era el mejor vampiro de la historia, y que ojalá hubiera matado a todos los humanos, entonces su madre, levantó la mano que nunca había levantado, y pegó a Edith una bofetada, esta se fue de la sala de reuniones: esa fue la última vez que vió a sus padres.

Después de la reunión, oí que cuando los padres de Edith volvieron a casaa no estaba ninguna de sus cosas.

No se supo nada de ella durante 6 meses, durante esos meses, oía a sus padres hablar de ella con los demás vampiros adultos, sobre distintas teorías de donde habría podido ir.

No se supo nada de ella durante seis meses hasta que un día en las noticias...

- Ayer, en Pensilvania, Estados Unidos, un hombre de mediana edad, fue hallado muerto con dos agujeros de colmillo en el cuello, la policía desconoce de quien o que criatura ha podido originar el ataque, pero en las redes sociales, ya se ha empezado a extender el rumor de un posible Drácula moderno. - dijo el presentador, entonces mi padre apagó la tele.

- Cariño, Azra. - se dirigió mi padre, a mi madre y a mí.- Ya sabéis quien ha sido quien ha provocado esa muerte, ha sido:
Edith Balan. Avisaré a todos para que haya una reunión esta misma noche.

Y así fue, mi padre empezó a avisar a todos para la reunión de emergencia, para lo que servían de verdad las reuniones: evitar el mal con los poderes de vampiro.

Esa noche, los padres de Edith, fueron, pero con la cara desencajada, y se notaba que su madre había estado llorando toda la tarde, creó que tení un gran sentimiento de culpa.

Mi padre fue el primero en hablar.

- Bien ya habéis oído la noticia todos, por eso estamos aquí. Iré directamente al grano, necesitó a 10 encargados voluntarios para ir a Pensilvania.

Entonces yo hablé por todos los jóvenes, con una mirada estabamos de acuerdo, querímos ser encarganos, así que nos ofrecimos.

- Iremos nosotros, Edith es de nuestra edad, nosotros la convenceremos. - dije yo.

- No hija, ni tú, ni ningún menor de 30 años va a ir. - se negó mi padre

- Pero, ¡Papá! - dije replicando.

- No hija, no vas a venir. Bien, ¿se ofrece alguien más de voluntario? - zanjó mi padre el tema, y 10 voluntarios levantaron la mano.

- Bien iremos ahora mismo, acompañenme a una colina, allí nos transformaremos en murciélagos e iremos a Pensilvania. Aquí termina la reunión, el resto que vaya a su casa a descansar. - concluyó mi padre.

Tal vez, a los otros de mi edad, mi padre les intimidara, pero a mí no, así que antes de que los 10 voluntarios y mi padre se transformaran, yo lo hice antes, definitivamente volaría más rápido que ellos que tendrían que ir en formación para no perder a nadie, pues el único que sabía ir a Pensilvania era mi padre. (Anotación para humanos; podemos transformarnos en murciélagos y volar, pero no sabemos por eso toda la geografía mundial y localizarnos mágicamente si nos perdemos transformarnos: somos vampiros, no mapas).

Yo sabía ir, gracias a mi padre. Así hice, fuí a Pensilvania, Estados Unidos, desde Cánada, (la ventaja de ser vampiros y transformarnos es que no tenemos que pasar controles de frontera, pasamos por encima de ellos volando y así fue mi tercera vez en Estados Unidos, entrando sin pagar para entrar al país).

Al mediodía, llegué, mucho más rápido que el grupo de mi padre, que llegó 3 horas más tarde.

Edith, era una vampira "completa", por lo que a esas horas no podría estar fuera por la la luz del Sol, así sería más fácil encontrarla, supongo que en su obsesión con el conde Drácula, ella habrí pensado en una mansión grande y elegante. Pero claro, tenía 20 años, no podía pagar eso, estaría a las afueras de la ciudad en un piso muy pequeño.

Y fuí a un lugar con esas características, entré en 10 bloques de pisos distintos, en todos ellos entré el diciendo que era el cartero. No estaba en ninguno, perdí una hora entera yendo de bloque en bloque. ¿Tal vez no estaba en un piso vulgar, sino en una mansión de verdad?

Eso pensé, hasta que en el úndecimo bloque de pisos que entré, ponía un papel en el buzón que decía: Edith Balan, 2 derecha.

Sí era ella, ya decía yo, que el presupuesto de veinteañero no daba para mucho, y mucho menos para ser el conde Drácula.

Entonces, salí del bloque, y en un callejón me transformé en murciélago para poder entrar por alguna ventana. Y así hice, entré por una ventana que tenía abierta. Supongo que aunque no soportaba el Sol, si le gustaba el viento.

Cuando entré estaba dormida, en ese momento se me pasó un pensamiento por la mente, ¿Esperar a mi padre, pues ella no se levantará hasta por la noche, y llena de energía o despertarla ahora débil, que si sale de su casa puede morir evaporada?

La segunda opción era mejor, y la desperté.

- ¿Quién ha entrado aquí? - preguntó recién levantada Edith.

- Yo, soy Azra, he venido aquí para hablar. - dije yo.

- ¿Hablar de qué, sucia mestiza? - preguntó ella enfadada.

- De la muerte que has provocado, de lo que crees que son los humanos y no lo son. - expliqué.

- Jajajajaja. - se empezó a reír a carcajadas Edith. - He matado ya a un sucio humano, y a otro esta noche. ¿Y enserio te han mandado a ti, sucia mestiza? ¿Para la gran charla que se debe dar para el vampiro que es malo?

- ¡Sí!

- ¿Pues sabes qué? ¡No me vas a convencer! De hecho me aburro hablando contigo, siempre lo he hecho. Es hora de que ponga fin a ese aburrimiento. - entonces Edith me atacó sacando sus colmillos.

Me defendí poniendo mis manos en sus muñecas, evitando que llegará a mi cuello, era un forcejeó que alguna de nosotras iba conseguir ganar, entonces pensé algo que hiciera que yo ganará el forcejeo: darle una patada baja a Edith en su zona íntima.

Adolorada en el suelo, le agarré de ambas manos, y le pegé un puñetazo en la cabeza que la dejó inconsciente.

No tenía opción, la palabra había fallado.

La dejé bien atada: la até con ajo entre las cuerdas. Fue fácil, los vecinos eran buenas personas, que yo fingiendo ser la amiga de Edith, dije que no teníamos ajo para cocinar y  me dieron, mientras tenía que soportar el ajo hasta que lo llevé a su casa.

Después de eso no supe que hacer, a lo mejor si había sido un error ir sola. Así que, dejé la casa con Edith inconsciente, me transformé en murciélago y esperé a mi padre y al grupo hasta que llegaron.

Volé por dos horas hasta que al fin, ví 11 murciélagos.

Expliqué todo lo que había pasado, esperaba alguna regañina de mi padre, pero no me dijo nada.

Les indiqué el bloque de pisos, y entré con ellos. Tuvimos que esperar un buen rato hasta que Edith se despertó.

Intentamos a hablar con ella, pero seguía en sus 13, no había opción: había que llevarla a una zona para que fuera recluída... para siempre. No podría cambiar nunca.

La tuvimos que desatar, ya ninguno de nosotros soportaba el ajo de entre las cuerdas, pero cuando hicimos eso, se transformó, salió por la ventana en pleno día, y se evaporó para siempre...

***

Ese fue el primer caso de rebeldía vampírica en la sociedad moderna de los vampiros, donde nos odiabamos a nosotros mismos y nadie quería hacer el mal.

Eso pasó, Edith murió, fue culpa de la sociedad vampírica, hicimos el mal con nuestros poderes, eso que tanto intentabamos evitar.

Tal vez, si no hubiera oído tanto que se odiase a sí misma. Tal vez no hubiera tenido esas ideas, tal vez estaría viva...

Pero no es así...

Pero a raíz de eso cambiamos, ser un vampiro no era malo, mi madre tenía razón, nuestros poderes no eran malos, lo podían ser según el uso...

A partir de eso, los vampiros cambiamos de mentalidad, no dejaríamos que volviera a pasar lo de Edith, enseñaríamos a los jóvenes la historia para de lo vampiros: siempre los vampiros habían sido malos, pero eso podía cambiar. Ellos serían quienes lo cambiarán, serían los primeros en aprender a usar sus poderes para el bien.

Pues ser vampiro no es una maldición: por ejemplo: la alta velocidad, ¿No puede ser usada en incendios para sacar personas de los edificios en llamas, en vez de si se usarán para el mal para salir corriendo de una escena del crimen?

Para esto sirve esta historia, para  quien lea esto aprensa cómo puede ser un cambio. Porque...

¿No pensaron durante 40 años los vampiros que sus poderes eran malos, por la historia pasado, y no por el presente? ¿Y eso era malo?

¿O cómo 3 personas perdieron la vida por esa mentalidad? ¿Pero al final fue bueno, porqué aprendimos?

¿Tú que piensas?