"De repente, Juanito Costas chocó con Mariana, ambos se miraron fijamente y el equipo de fútbol de salón paso corriendo alocado por en medio de ellos... "

Y el equipo de fútbol sin ningún miramiento, siguió corriendo igual de alocado por el patio de la escuela; sin que a ningún miembro del equipo le preocupase la caída que acababa de provocar a Juanito y Mariana.

Ambos tras unos breves instantes, se levantan un poco aturtidos.

- ¡Qué brutos! - se levanta Juanito maldiciendo en su mente al equipo de fútbol. - Chica, ¿estás bien?

- Sí, lo estoy. - se incorpora Mariana, maldiciendo también en su mente al equipo. - A ver si tienen más cuidado la próxima vez.

- No van tener nunca cuidado, yo conozco a todos, van a mi curso; concretamente a mi clase. Y siempre están así de locos, pero, lo peor de todo es que por ir a fútbol, se creen los más importantes. Son unos chulos. - explica indignado Juanito.

- Qué me vas a explicar... Hay otro equipo de fútbol de salón en mi curso, y son iguales a los que has descrito tú. - dice Mariana.

- Alguien que me entiende al fin, sólo yo los veo así, todos los demás, los ven como a verdaderos héroes, y a mi me apartan, ¿por qué? ¿Solo por ser "friki"? - dice Juanito, remarcando la palabra friki con comillas invisibles con los dedos.

- Lo mismo a mí. Qué más da, peor para ellos, son unos "muggles". ¿No crees? - dice Mariana haciendo una media sonrisa a Juanito.

(N/A: "Muggle", significa gente no mágica en la saga de fantasía "Harry Potter").

- Sí, tienes razón. - dice Juanito correspondiendo la media sonrisa.

- Alguien que me entiende esa palabra, ¡al fin! Oye me caes bien, nunca te había visto, me llamo Mariana, soy de cuarto de secundaria, ¿de qué curso eres tú? - pregunta Mariana.

- De tercero de secundaria. Me llamo Juan Costas, aunque, en vez de Juan, me gusta que me llamen Juanito. No me extraña que no nos hayamos conocido aún, con tanta gente qué hay en cada curso.

- Sí, en el mío hay como 120 personas, en total hay 6 clases.

- Por eso es casi imposible que... - corta la frase a mitad Juanito, ya que se oye la campana de fin de recreo. - Me tengo que ir, un placer hablar contigo.

- Lo mismo digo. - dice Mariana viendo como se alejaba corriendo Juanito hacia su clase; esta le inmita, y se va a su respectiva clase también.

Así termina "la presentación" de Juanito y Mariana, ambos se habían caído bien;

¿Esto podría ser el comienzo de algo en el futuro?

***

El día de la semana en el que se conocieron, fue lunes, por tanto, principio de semana.

Esta, transcurrió sin ningún acontecimiento en especial: clases, deberes, algún que otro examen...

Como en cualquier instituto ordinario.

En esa semana, que era una como otra cualquiera, ni Juanito ni Mariana, dieron importancia a que se conocieran, ambos pensaron que el otro, sería una persona más en su instituto, aunque tuvieran ambos, a primera vista, aficiones comunes, sería otra persona más de ese instituto, una persona más, sin importancia en sus vidas. Eso pensaron ambos... Pero ambos se equivocaban...

¿Por qué? 

Porque pasó la semana sin novedades, y llegó el fin de semana, otro cualquiera, sí, parecía que no se volverían a ver, hasta que el martes de la semana siguiente, en el recreo...

Juanito se chocó con una persona, era un poco distraído, pero, dio la casualidad, que con quién se había chocado... era Mariana.

- Lo siento, he tropezado sin querer. - se disculpa Juanito sin darse cuenta de que era Mariana.

- No, no pasa nada. Yo... - al levantar la mirada, se miran fijamente, y ve que es Juanito. - Tú eres el chico que conocí la semana pasada, esto... Tu nombre era... ¡Juan! ... No... ¡Juanito! Esta vez no ha sido culpa del equipo de fútbol que nos cayeramos, sino tuya.

- Sí tienes razón, esto... esto... Me acuerdo de tu nombre... Te lo juro... Era... Era... ¡Mariana! ¡Sí! ¡Lo he conseguido recordar! - se siente orgulloso de sí mismo Juanito por haber recordado el nombre de Mariana. - Pero olvidas lo esencial querido Watson, yo choqué contigo antes de que el equipo nos aplastara.

- Es verdad, y dime Sherlock, ¿qué haces?, ¿te has tropezado, por qué estabas en tu pequeño mundo al estar investigando? - dice Mariana en broma de forma sarcástica.

- Sí, mi querido Watson. Estoy investigando donde está la basura, alto secreto. - sigue el juego Juanito.

(N/A: Pequeña alusión a la relación amor-odio de Sherlock Holmes, y su inseparable compañero; el doctor Watson).

- Ahora enserio, si quieres una basura, hay ahí una. - señala Mariana a una papelera en una esquina.

- Gracias. ¿Me acompañas? Me aburro mucho, nadie, nunca quiere estar conmigo en el recreo, y es muy aburrido.

- Sí, te acompaño, a mí me pasa lo mismo. Nadie quiere estar conmigo en el recreo. - dice Mariana, y ambos inician el camino a la basura.

- Adivino, no quieren estar contigo, por ser "friki". ¿Verdad? - dice Juanito.

- Sí, adivinaste correctamente. - contesta Mariana.

- Ni que estuviera enfermo para contagiar a la gente con sólo tocarles. - dice triste Juanito, llegan a la basura, y este tira el envoltorio donde estaba su comida.

- Sí, tristemente es así, oye, yo no quiero seguir así, ¿qué te aparece si a partir de ahora, quedamos junto a esta esquina? Así no estaremos sólos los recreos, estaremos los dos juntos.

- ¡De acuerdo! - Juanito, entonces, extiende la mano, y la estrecha con Mariana. - Trato hecho. Y dime, la semana pasada dijiste, "muggle", ¿te gusta Harry Potter? A mi sí. Sin duda el mejor personaje es... ¡Voldemort!

- Pero, ¿qué dices? El mejor personaje es Neville, al final es quién salva a todos, Voldemort es el malo, el que provoca toda la guerra, el que mata a todos. Y lo mas importante; no tiene nariz. - sonríe de forma maliciosa irónicamente Mariana.

- Pobre Voldemort... ¡Sin Voldemort no habría Harry Potter, ni Neville! Además, con nariz sería mucho más feo, está mucho más guapo sin nariz.

- No, lo mejor habría sido que Harry (...) -

***

A partir de ese momento, los dos cumplieron su trato de quedar en todos los recreos en esa esquina, cuando ocurrió esto, era octubre, comienzos del nuevo curso, ese año, para ambos iba a ser diferente, todos los años, ambos eran apartados por la gente, por sus gustos hacia: cómics, libros y series de televisión de ciencia ficción, películas de "Disney",  mangas, animes...

En las primeras semanas hasta las vacaciones de invierno (que eran a finales de diciembre) , esa pequeña relación que empezó con un choque, se había convertido en una amistad, durante la media hora de recreo, hacían pequeños debates sobre sus gustos; quién era el mejor; ¿el de este cómic o el de aquel?, ¿qué serie de anime es la mejor?, ¿quién era el personaje más importante en "Star Wars"?....

Así descubrieron, que ambos tenían los mismos gustos, algo que les hacía sentir, que no eran tan raros como los demás les hacían sentir.

Para diciembre, ambos se habían convertido en buenos amigos, la amistad era reforzada a diario, "gracias" a los insultos que les decían todos los que pasaban a su lado y les oían hablar de "cosas frikis",  les decían cosas, tales como "frikis o nerds", hasta cosas horribles y sin sentido, como, "buscaos una vida de verdad".

***

Ese diciembre, se estrenaba una nueva película de "Star Wars",  ambos quedaron para verla, era la primera vez que se veían fuera de clase; fue un gran paso para ellos, demostrando que no sólo eran amigos por hacer debates en una esquina durante el recreo, sino que, fuera de él, fuera del colegio, eran amigos para contar uno con el otro en la vida real.

Terminaron las vacaciones y volvieron a las clases, y con ello, volvieron a sus pequeños encuentros en la esquina, pero en vez de hacer debates sobre cómics o series, como solían hacer en sus primer meses de amistad, empezaron a hablar de los sueños de cada uno.

Y descubrieron que más allá de sus gustos, tenían el mismo sueño.

Tanto, Juanito como Mariana, querían ser directores de cine, dirigir la magia que ocurre en la pantalla de un cine, querían hacer sentir feliz a la gente viendo las películas, tan felices como lo hacían a ellos las películas, pero también, no era sólo verlas, era, hacer algo más allá de la pantalla:

Era, hacer reír a la gente fuera del cine, recordándo las cosas más absurdas de la película, o hacerles llorar con las cosas más profundas, y que lo recuerden como una lección, o que usen las frases de película en la calle... pues, ¿quién no usa a veces frases de películas o series? ¿quién no ha dicho alguna vez "me aburro" como lo hace Homer (Homero) Simpson? Puede ser otra serie, u otro persona de una película, conocido o poco conocido, pero a veces usamos frases de cine o libros, ese era el sueño de ambos, que llegue algo más, que no sea sólo una simple película.

Después de que hablaran de lo que querían ser, sus temas de conversación ya no eran sólo discusiones de sus gustos en común.

Empezaron a hablar de su pasado, tales cómo desde recordaban ambos, les habían gustado las historias fantásticas, y de pequeños empezaron a ver series de ciencia ficción, y por eso les gustaban ahora siendo adolescentes:

Como que,los primeros libros largos que leyeron fueron toda la saga de "Harry Potter", y eso les hizo sentir muy orgullosos.

Pero también por hacer eso, incluso de pequeños se reían de ellos, porque no les gustaba jugar al fútbol, o al pilla pilla como a los demás niños, sino, a ellos les gustaba jugar a ser héroes, y por eso también, se reían de ellos.

***

Llegó marzo, se hicieron más amigos, ya no sólo conocían sus gustos, sino que también, conocían su pasado, y ahora soñaban con su futuro.

Empezaron a hacer falsas historias de que pasaría si ambos fueran co-directores de películas.
Pero un día lo que parecía broma, se convirtió en algo serio...

- ¿Sabes? Llevamos tanto tiempo diciendo que seremos los mejores directores de cine del mundo, ¡qué me están dando ganas de repetir sólo para poder hacer los mismos cursos! ¡Y llegar juntos a la universidad para ser directores! - se rie Mariana sin parar.

- ¡Jajaja! Sí, ¿te imaginas, nosotros en el mismo curso? ¡Ir a la misma clase! ¡Qué locura! - también se rie sin parar Juanito.

- ¿¡Que dices de locura!? ¡Sería genial! ¿Y si repito de verdad? - cambia a tono serio en la última frase Mariana.

- ¡Sí, claro! - no se da cuenta Juanito del cambio de tono.

- Juanito, lo digo enserio. - dice Mariana.

- ¿Enserio? La verdad, es que sí sería guay estar los dos juntos en la misma clase, y llegar juntos a la universidad, me gustaría mucho, además, así nos defenderíamos el uno al otro cuando nos insulten. Pero, ¿vas a repetir por mí? Piensa en lo que dirán tus padres, además tu sacas buenas notas. ¿Cómo vas a cambiar tan repentinamente de notas? - piensa seriamente Juanito sobre la propuesta.

- Pues, estoy pasando una fase de rebeldía adolescente, y no quiero estudiar, me llevaré alguna que otra bronca, pero merecerá la pena. ¿Trato hecho? - extiende la mano Mariana.

- ¡Trato hecho! Es muy noble por tu parte. - Juanito estrecha la mano efusivamente a Mariana.

***

Y así hizo Mariana; desde marzo hasta junio, hizo que su notas bajaran poco a poco, hasta que a final de curso, tuvo 5 asignaturas que reprobar, y claro por tal cantidad de asignaturas que reprobar, consiguió su objetivo; repetir curso.

Esto sorprendió mucho a sus padres, pues, siempre había sacado brillantes notas, pero, como dijo Mariana, pensaron que fue "una fase rebelde", sin embargo al siguiente año, sus notas aumentaron, incluso fueron mejores que en los meses que sí estudio.

Sin embargo, lo más importante, es que había repetido, por quién era ahora su mejor amigo;

Juanito Costas.

¿Qué se convertirá esta amistad en el futuro?