La ignorancia es felicidad. El que dijo eso claramente no era estúpido, solo se aislaba de la mayoría de situaciones que lo rodeaban. Sin contacto, ni mucho menos idea de lo que sucede, es feliz al no ver, sentir, ni oír. Los niños son felices, por que no entienden y no se complican su existir. Los adultos son infelices, porque entienden y son conscientes de su alrededor, pero, si solo ves la punta del iceberg, como pretender comprender la verdadera realidad.

Nega: ¡Eso es un mito! Algunos adultos solo ven su propia realidad y son conscientes de lo que ellos quieren. Solo se centran en las limitaciones de su alrededor y no ven más allá de su burbuja. Lemuel, tu tendrás que ver mas alla de tu zona, y aprender a entender, entender lo que te rodea. Solo asi, sabras como es el mundo

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La situación era extraña, aunque quizás el término inesperada seria lo mejor, la mujer que tenía enfrente lo miraba con una expresión de sorpresa, tanto que parecía que sus ojos se saldrían de sus cuencas. El joven solo esperaba una respuesta, pero nunca llegó. Lo único que hizo fue cerrar la puerta y dar media vuelta. Apunto de subir las escaleras, escucho como golpeaban otra vez y tocaban el timbre de manera errática. Dio un suspiro y se acercó a la puerta para darle un puñetazo logrando asustar a la dama del otro lado.

Lemy: No se que haces aqui, pero tampoco me importa. Tienes 10 segundos para irte o llamaré a la policía

???: N-no me iré. Solo quiero hablar, de acuerdo. No vengo a-...

Lemy: La puerta está cerrada, a menos que la tires abajo, no entraras. Golpea todo lo que quieras, grita si eso te hace sentir mejor... - sigh - Solo vete

???: Por favor, Lemy. Se que están solos, que no quieres verme, ni a mi, ni a ellas.... Pero no pueden-...

Lemy: ¿Que? ¿Estar por nuestra cuenta? Si mi padre pudo cuidar de 9 hijas solo, yo puedo encargarme de dos de mis hermanas. Me importa un carajo que les pase a ustedes, a las demás o siquiera a los dos boomers hipócritas. Por mi, pueden irse todos al diablo

???: No tienes trabajo, con suerte dinero. Que seas mayor de edad no te convierte en un adulto

Palabras verdaderas en una situación complicada. Cerró los puños con algo de impotencia, cuanto mas podria vivir asi, quizas fue por las llamadas o por la tranquilidad de los últimos días, pero el joven pensaba que las cosas podrían salirle bien. Lamentablemente, recordó las palabras de Nega, la vida es jodida y todo puede ir a peor en muchos casos.

Abrió la puerta y se paró frente a la mujer, sacándole una cabeza, dada la altura heredada de su padre. Cabello rubio amarrado en una trenza que caía por su hombro derecho, camisa abotonada color azul con unos jeans del mismo color, su contextura era fuerte, contando también con pequeñas cicatrices en sus manos. Se cruzó de brazos y se apoyó en el marco de la puerta sin dejar de mirar a sus ojos, intentando adivinar sus intenciones.

Lemy: Tienes un minuto para explicarte, Lana

Lana: - suspiro - Dios, como haz crecido.... Mira, Lemy, entiendo el rencor y el odio, pero solo quiero ayudar

Lemy: - sonriendo - Es coña, ¿verdad? Jejeje, que buen par de ovarios tienes para venir y decir eso luego de abandonarnos, como hicieron algunas de tus hermanas. Viajar por el mundo debe ser hermoso, seguro tienes mucho dinero. Eh visto tus documentales, al igual que las entrevistas que le hicieron a tus hermanas. Tan talentosas... - silbido -

Bajo la cabeza con obvia vergüenza, se sintió bien al decirle sus verdades. Observó el frente del garaje, una camioneta jeep color roja junto a su auto, en ningún momento la escucho llegar. La rubia mantenía el rostro agachado, logrando impacientar al castaño.

Lemy: Si eso es todo-...

Lana: - sin mirarlo - P-por favor.... Déjame verla

Lemy: - arqueando una ceja - ¿Perdón?

Lana: - snif - Déjame verla, déjame ayudarlos y mantenerlos a salvo.... - snif - Hijo, no se merecen estar solos, menos sabiendo-..

Lemy: - serio - No me llames así... Nunca, en tu puta vida, me vuelvas a llamar así

Lana: - snif, snif - C-cálmate... No lo haré, pero déjame ver a mi pequeña. Son mi familia, parte de toda nuestra familia. Lemy, no sabes lo que mi padre planea, - snif - quiere separarlos

Al escuchar eso, la sangre le hirvió. Sentía que iba a estallar, tanto que empezó a rechinar sus dientes. ¿Qué diablos querían? Su padre ya no estaba, ahora todos querían saber de ellos, cuando nunca llamaban ni daban una maldita señal de vida. Lemuel se estaba hartando, tanto que estuvo apunto de gritarle en la cara a la rubia, pero el destino es misterioso y algo lo obligó a detenerse.

???: ¿Mami?

Cerró los ojos con miedo, de todas las cosas que podían pasar, justo tenía que ser esta. Lana observó por el costado a una pequeña con un pijama de dinosaurio. Se llevó las manos al pecho empezando a soltar algunas lágrimas. La niña solo dio un par de pasos hasta quedar junto a su hermano, su sonrisa se ensanchó para luego saltar a los brazos de la rubia.

Lana: Lizy... Mi bebita

Lizy: ¡Mami, edes mami! ¡¿vedad?!

Lana: - snif - Asi es, bebe. Soy mami

Mientras ellas se abrazaban, Lemy solo pudo maldecir internamente por haber abierto la puerta. Volteo hacia adentro, a mitad de las escaleras, Leia tenía las manos cubriendo su boca con una expresión de angustia y sorpresa.

Leia: - susurrando - ¿Qué demonios, Lemy? ¿Q-q-que hace ell-..

Lemy:- susurrando - Lei... Lizy aún la recuerda y, ya la vio - cubriendo sus ojos - Me cago en la puta

Leia: No, no, no, no, no. - acercándose - Ven aquí, Lizy.

Apenas la alejó de su madre, casi se larga a llorar. Leia no quería verla triste, pero no podía dejarla cerca. Lana fue testigo de esto, asi que entro a la fuerza en la casa y abrazó a su pequeña mientras tomaba la mano de Leia, aunque no de manera agresiva, sino más bien, con ternura. Ésta, la alejó con brusquedad dándole una mirada de muerte.

Lana: Shh, shh, shh. Está bien, cariño. - viendo a los adolescentes - ¿Que les parece si cenamos y, les cuento un par de cosas, niños?

Leia iba a responderle de manera agresiva, pero Lemy le tapó la boca y la miró con seriedad. Sin despegar la vista, hizo un movimiento con su cabeza dándole el visto bueno. Lizy no se despegaba de la mecánica, tanto así, que la mujer fue al salón y se sentó en el sofá para empezar a jugar con ella. Una imagen hermosa para algunos. La diva alejó la mano del castaño bruscamente y lo tomó del brazo para llevarlo al estudio/biblioteca de su padre.

Leia: ¿Tú eres estupido o tragaste agua de mar?

Lemy: ¿Que querías que hiciera? ¿Cómo le explicamos a Lizy que está aquí, eh?

Leia: - suspiró - Supongo que... tienes razón. Pero no me gusta que este aqui, aun recuerdo cuando se fue, la vi por la ventana en mitad de la noche... tsk, hija de pu-...

Lemy: Lenguaje. - sigh - Mira, Lei. Déjame esto a mi, ¿si? Por lo poco que escuche, parece que gran parte de los Louds ya se enteraron y... tengo un mal presentimiento

Leia: Si, bueno... Yo no estoy tan sorprendida ya que, ella llamó hace un-...

Lemy: ¿Como? - enojado - Llamó y no me lo dijiste

Leia: P-perdoname, pero no quería estresarte mas y tampoco quería que te angusties y.. y..y

Lemy: Shhh... Tranquila, solo... - suspiro - No importa. Yo me haré cargo de esto, por ahora, pediré la cena *Tendré que pedir una pizza extra*

Leia: Muy bien. Me asegurare de que nada le pase a Lizy. - alejándose -

Se sentó en la mesa de dibujo de su padre tomándose de la cabeza. No se imaginaba bien a qué se refería con "separarlos". Comenzó a hiperventilarse, Lincoln le había contado muchas cosas cuando llego a cierta edad, muchas cosas a saber de sus tías. Cada mujer tenía una historia, un porqué, y una razón. Pero para el joven, cada una de esas razones las llevó a dejar a su padre y abandonar a sus hijas. Entendía su situación, él era un caso muy aparte, pero, las demas solo tuvieron mala suerte.

Ahora, con la información que le suministraba Nega con cada llamada, tenía un punto de vista muy diferente. El egoísmo es natural en las personas, pero sus razones casi parecen caprichosas e infantiles, en algunos de los casos. Un amor no correspondido, falta de emociones en la vida, miedo a no saber qué hacer, o simplemente, no quererlos.

El joven solo tomo su celular para pedir la cena. No quería alargar más esto, pero si era necesario, mantendría a Lana en la casa para sacarle toda la información que pudiera, solo para que sus hermanas menores estuvieran bien.

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Los rostros de angustia parecen ser más comunes últimamente, eso creía Lily al ver a sus nuevos invitados en el salón de su hogar. Desde que Lynn padre quedó en silla de ruedas, ella se había encargado de cuidar a ambos patriarcas. Ahora, observaba desde una esquina a la pareja en cuestión y como parecían muy intranquilos. Una reunión familiar se avecinaba, quizás no con todos, pero era más que obvio que muchos vendrían tras la noticia.

Ambos eran castaños, un hombre y una mujer. Ella traía una camisa amarilla abotonada sin mangas junto a unos pantalones de vestir color blancos y zapatos negros, junto con una cola de caballo en su cabeza. El vestía una camiseta blanca bajo un saco negro, jeans azules y zapatos cafes. Su cabello era esponjoso y bien peinado.

Rita: Entonces... ¿no va a venir, Luan?

Luan: - sigh - No. Desde que llegamos no a dicho una palabra siquiera. ¿Cierto, Benny?

Benny: Asi es, cariño. - juntando sus manos - Verán, enterarse de esto habrá afectado a todos, seguramente de distintas maneras

Luan: Pero lo importante ahora son los niños. - suspiro - Papá, antes de que digan nada, piensa un po-...

Lynn: Luan, ya hemos tomado una decisión al respecto. Incluso pedimos la ayuda de Lisa. Todo lo que tenemos que hacer es esperar

Rita: Lynn, creí que ya habíamos hablado de esto, no puede llevarte a las niñas asi como asi. Menos abandonar a Lemy a su suerte

Lynn: Pff... Tiene 18, no es un niño, tampoco es un adulto, decídete ya, mujer

Benny: Creo... que esto será más complicado

La mujer rubia no hablaba, solo observaba a ala distancia. Ambos castaños hablaban entre ellos, Luan se veía muy angustiada y deprimida, y su esposo parecía intentar darle ánimos. Lily sabía que en el fondo Benny debería estar feliz, muy feliz en realidad. Para colmo, el que Lana se hubiera ido para aclarar sus pensamientos tampoco ayudaba en su situación.

Lily: ¿Como se encuentra Liby?

Los cuatro voltearon a verla, su expresión de tranquilidad los sorprendio mucho, más por el hecho de no haberla visto antes.

Luan: Ella... no quiere hablar con nadie. - sujetando su brazo -

Benny: Desde que llegamos no nos dirijio la palabra. Nos preguntó si podíamos compartir habitación en el hotel y, desde entonces no a salido de esta. Y eso que llegamos en la mañana

Lily: Hmm... No les parece que tendrian que hablar con ella, a pesar de ser una adulta esto quizás a le haya afectado mucho. *Su padre está muerto y nunca se despidió apropiadamente, sin contar el odio que le tenían. Cada dia esto se pone peor*

Rita: - suspiró - Lily, por favor, no empieces

Luan: No quiere ver a nadie. Me preocupa que no quiera salir, no a comido nada desde que se enteró

Benny: Hemos intentado muchas cosas ya, pero nada a funciona. Dice que esta bien, que solo necesita reflexionar algunas cosas....

Lynn: - suspiro - Denle su espacio por ahora. Solo necesita acostumbrarse

Lily: *Emm, no. Papá, así no funciona*

Ya algo cansada de la situación, la rubia se alejó del salón y se fue escaleras arriba. Supuso que podría llamar a Loan y contarle lo que estaba sucediendo, y de paso, informar a Liena. No tenía ganas de discutir, más con sus padres los cuales ya tenían un pie en la tumba cada uno, no podía creer el odio que le tuvieron a los niños, y ahora querían ayudar. Hipócritas les quedaba corto, aunque pensándolo mejor, tal vez era una forma de "redención" en cuanto a Lincoln. Una pena siendo sinceros, el ya estaba muerto y seguramente no le importaría.

Lily: - suspiró - Al final, los hijos pagan los pecados de sus padres...

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Una cena bastante regular, con una madre y una hija que compartieron un momento juntas por primera vez desde que tienen uso de razón. Quedó demostrado que a Lana si le importaba Lizy, tanto que no quería separarse de ella en ningún momento. En cuanto a la niña, solo reía y se alegraba, su madre había vuelto, pudo conocerla en persona y poder compartir con ella. Era algo hermoso. El problema, es que sus dos hermanos no estaban del todo cómodos. Leia no le quito la vista en ningún momento a la rubia, ya fuera por miedo o por cualquier cosa. El joven solo se limito a comer y escuchar cada palabra sin decir nada.

Cuando la cena termino, Leia convenció a duras penas a su hermanita de lavarse los dientes, logrando alejarla de su madre unos minutos. Lemy aprovechó para tomarla del brazo y meterla a la fuerza a la cocina, aunque ella se dejó arrastrar, ya que tenia mas musculos que el joven.

Lemy: Habla. Ahora

Lana: Le gustan mucho los dinosaurios... - sonriendo - No pensé que, supiera quien soy

Lemy: Papa la hacía ver tus documentales, luego de cierto.... evento, pensó que debía saber quien eras. Agradéceselo a el

Lana: Supongo que... tienes razón. Me sorprende mucho cómo está la casa, tan ordenada y limpia. Antes no era así

Lemy: Antes vivíamos muchas personas aquí. Cada una hizo su vida, y de a poco esta casa se convirtió en un hogar, una bajo control. - mirándola fijamente - ¿Ah que te refieres con separarnos?

Lana: - suspiro - Mira, Lem. Papa cree que no deberías hacerte cargo de las niñas. Piensa que estarán mejor con ellos como sus tutores y, b-bueno, yo quer-...

Lemy: Querías a tu hija de nuevo a pesar de que la abandonaste. Pero, llegaste a nuestra puerta y te alejaste de ellos. ¿Voy bien?

Lana: S-si...

Lemy: ¿Por que? - prendiendo un cigarrillo -

Lana: *Ahora fuma* N-no lo se... Es decir, no quiero más problemas, Lem. Estoy muy cansada de las discusiones y el odio. Siempre que hay un problema, mis padres lo relacionaban con Lincoln

Lemy: Sabes, cada palabra solo fomenta y hace crecer mi odio hacia todos ustedes. - exhalando el humo - Osea que, mi padre cometió pecados horribles, cada una de ustedes abandonó a sus hijas por razones que sinceramente no me importan mucho, y la culpa era de él.... Admito que papá no era ningún santo, ¿pero él siempre era la razón de todo?

Lana: No, Lem. Claro que no. Lincoln fue un gran hermano, y una persona muy buena. Supongo que por eso nos enamoramos de él... Lemy, dejame ayudarlos, puedo darles din-..

Lemy: No quiero tu asqueroso dinero, Lana. No quiero nada de ustedes. Yo mismo me haré cargo de todo. Al igual que hizo papa

Lana: Él no hizo todo solo, Lemuel. Entiende eso. No tienes trabajo, no tienes mucho dinero más allá de su seguro de vida. ¿Que haras, eh? Dime

Lemy: Lo que sea necesario... *Voy a arrepentirme de mis palabras, pero no pienso aceptar nada*

Lana: Lem..

Lemy: Escúchame y escúchame bien. No te quedarás en esta casa, ya que tengo los papeles que acreditan que ahora es mía, como también los papeles de tutoría de ellas. Tú, prácticamente y legalmente, no eres la madre de Lizy. ¿Lo entiendes?

Agacho la cabeza sintiéndose mal, muy mal para ser exactos. Sus deseos egoístas hicieron que abandonan a su pequeña y, de todas sus hermanas, ella fue la más leve en cuanto al abandono de cada una de las hijas. Pero las palabras de Lemy le dieron un poco de esperanzas.

Lemy: Sin embargo, ella ya te vio, y creo que alejarte seria malo. ¡Para ella, no para ti! Asi que, podras verla de vez en cuando, pero si les dices a las demás, juro por dios que hare de tu vida un infierno. - inhalando el humo - Esto tampoco significa que me agrades, Lana. Así que tu te inventas alguna excusa para que Lizy entienda por qué no puedes quedarte... Y darás más información de los planes de los Louds. ¿Tenemos un trato?

Sin creerse lo que acababa de escuchar, solo pudo sentir con una sonrisa y abrazar al joven. Él, no se movió, no se lo esperó es ningún momento. Antes de siquiera hablar, sintió cómo algo se aferró a su pierna, dándose cuenta que era Lizy.

Lizy: Yo también quiedo un abazo

Lana: - levantándola - Ven aquí, bebita. Mami te leerá un cuento antes de dormir...

Lizy: ¡Viva!

Lana: - sonriendo - ¿Te importa, Lem?

Lemy: Jeje, para nada. *Ya me estoy arrepintiendo de esto*

Una vez se alejaron, le dio una última calada al cigarrillo y lo tiró por una pequeña ventana que daba al patio trasero. Suspiro resignado, pensando so había hecho lo correcto.

Leia: Vas a dejar que se quede?

Lemy: - sin mirarla - Voy a dejar que vea a Lizy, y eso es todo. No vivirá con nosotros, no recibiremos su dinero, ni mucho menos su ayuda. - volteandose - Si tienes un mejor plan, soy todo oídos hermanita

Leia: N-no... ¿Sigues enojado?

Lemy: Yo no puedo enojarme contigo, Leí. Pero si algo como esto vuelve a pasar, dímelo

Leia: De acuerdo. Aún no me gusta la idea de que la vea... pero al menos Lizy es feliz... - susurrando - la envidio

Pese a no escuchar los últimos, el castaño abrió sus brazos pensando que querría un abrazo, lo cual, si fue así. La rubia sólo se dejó llevar y se apegó a su hermano, sintiendo que era una de las pocas personas que la valoraba tal cual era. Leia siempre fue alguie directa y de carácter fuerte, algo que la llevo a ser juzgada y criticada, por lo que aprendió a devolver las amenazas de manera eficaz utilizando su ingenio, ganándose el apodo de "La diva creída"

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La noche cayó, y ya eran más de las doce. El castaño se encontraba en la habitación de su padre, recostado en su cama mirando el techo, esperando el siguiente movimiento del bastardo que lo llamaba cada día desde la muerte de su padre. Y así pasó, el teléfono sonó, pero 10 minutos antes de la hora estimada. Contestó sin levantarse de la cama, solo para escuchar sus locuras.

Nega: Como siempre, tomando decisiones imprudentes, eres único, chico. Hagamos un repaso rápido, una de ellas volvió intentando demostrar su equivocación, el amor de una madre te llegó al alma y la dejaste quedarse con la condición de que se fuera en la mañana, claro que, solo fue por Lizy y su felicidad. Tengo una pregunta si no te importa. ¿Si tu madre volviera y llora en tus pies que está arrepentida de dejarte porque eras un terrible error, tu la dejarías pasar a tu hogar, con tal de tener de nuevo su amor? Bueno, tener un amor que nunca tuviste... sería más apropiado

Lemy:....

Nega: Eso supuse. A ella la dejaste entrar, y la niña la vio, le sonrió y gritó que su madre había vuelto. Con esto tal vez aleje el pensamiento de que Lincoln no va a volver, o quizás solo te sentiste raro por ver algo que nunca experimentaste... tranquilo, te entiendo, a mi tampoco me quieran mis padres, para ellos yo era una desgracia con patas. Es igual. La idea de que ella te diga lo que pasa en la casa Loud fue muy buena, casi pareciera que tu no la pensaste, ¿cómo se te ocurrió?

Lemy: - serio - Tuve tiempo para pensar en la cena... Legalmente no pueden hacer nada

Nega: Mmmaja... pero, y si ellos tienen algo que tu no, alguien, para ser más exactos. Lisa Loud, una mujer muy inteligente y ganadora de dos premios Nobels, ella podría arrebatartelas con un simple movimiento, Lemuel. Esa mujer es un misterio, misterio que estoy investigando, alejado de la Orden claro, al igual que mis trabajos secretos, no quiero que estos locos con máscaras se enteren

Lemy: No logras ni dejas que te investiguen... y matas inocentes seguramente, es por eso, ¿no es así?

Nega: ¿Oye, por que tan apagado? ¡Nos vamos a divertir en unos minutos, te mostraré que tan jodido puede estar el mundo y las horrendas decisiones que toman algunos! Quieres más información de ellas, te diré unas cosas rápidas. La gran mayoría se volvió a casar con hombres que amaban antes que a Lincoln, algunas de tus hermanas conocieron a sus madres y están con ellas, seguramente el odio a tu padre las unió o que se yo, y, para finalizar, algunos de sus esposos, están felices por su muerte

Lemy: ¿Por que dijiste vengarse?

Nega: ¿Eh? ¿Cómo dices?

Lemy: Durante el tiempo que busqué las armas, e incluso en la cena, me pregunté porque la Orden no venga a sus miembros

Nega: Ya sabes por qué no los vengamos. Me estás presentando aten-...

Lemy: Y ahora me dices que varios hombres están felices por su muerte. - levantándose - Nega... papá no murió en ese accidente, ¿verdad?

Nega:.....

Lemy: ¡Respóndeme!

Nega: Esto es inesperado

Lemy: ¿D-de qué hablas?

Nega: De que no tengo ni puta idea, chico. ¿No es eso inesperado? Tal vez lo mataron, o tal vez no, digo, razones no faltaban, Lincoln se consiguió un buen puñado de gente que lo odiaba, pero quererlo muerto... mhe, es una probabilidad... Mmmm, nunca lo había pensado - snif - Ahg, mierda, ya empezó esta porquería

Lemy: - sigh - Padre, esposo, hijo, hermano... - frotando sus sienes - Tantas cosas, y tantas probabilidades, solo me dejan peor que antes. No quiero pensar si Lola aparece, no quiero ver la reacción de Leia

Nega: Jejeje, ¿crees que la princesa de Los Ángeles sabe siquiera que su hermano está muerto? Niño, no seas idiota, a pesar de vivir en una época tan avanzada todos saben que puedes ignorar las llamadas y mensajes. Me doy a entender con-... ¡PERO LA GRAN PUTA, QUEDATE QUIETO HIJO DE PERRA! ¡ESTOY INTENTANDO ATARTE MIENTRAS CONVERSO CON EL MUCHACHO, ESTÁ TRISTE!

- ¡Aahhh!

Ese grito lo descolocó. Al parecer, Nega está preparando algo muy escalofriante. El sudor frío recorrió su espalda mientras su estómago comenzaba a dolerle, logrando incomodarlo y hacerlo sudar en cantidad. Se contuvo de vomitar otra vez, sentado en el escritorio, encendió la laptop y espero cualquier cosa. Antes que hacerlo enojar, lo mejor era obedecer, a pesar del temor que recorría su cuerpo y mente.

Aún sin ver nada en la pantalla, solo pensaba en los días por venir. Si no todos sus "familiares" sabían ya de la muerte de su padre, quería decir que la cantidad de problemas deberían ser menores, pero, recordar que muchos lo odiaban, le parecía una locura. Podía entenderlo de parte de ellas, pero de más personas externas era muy extraño, Lincoln era tan sereno y calmado, no podías odiarlo. Ahora, sabiendo lo que hacía y que no era ningún santo, el joven se replanteará si sabía toda la verdad.

Una ventana se abrió en la pantalla, mostrando una invitación que decía: "¿Vamos a jugar?". Lemuel tuvo pánico al leer ese título, al no tener más opción, hizo click en la misma y entro en un navegador que no conocía. Supuso que sería de la Deep web, por palabras de Nega. Observando con cuidado, solo encontró oscuridad en la imagen, hasta que unas luces se encendieron. El lugar seguía oscuro, la poca iluminación dejaba ver una mesa rectangular con tres personas encadenadas a las sillas, todas con bolsas en la cabeza intentando liberarse de manera imposible. Sus brazos pegados a los apoyabrazos, y sus movimientos eran erráticos.

De pronto, apareció. Vistiendo esa gabardina negra junto con la capucha, la cual escondía su identidad antes cualquiera. Hablo "mirando" directamente a la cámara abriendo los brazos.

Nega: ¡Buenas noches, damas y carroñeros! Al igual que hace unos meses atrás, tenemos unos nuevos participantes, en cada extremo hay un hombre, y aquí en el centro una... mujer. Lo que van a ver hoy, será una juego simple. Pero antes, presentemos a los participantes.

Sin despegar la mirada, a cada hombre se le fue retirado el saco sin siquiera tocarlos, cada vez más, Lemy sospechaba de la humanidad del lunático.

Nega: Mientras se acostumbran a la luz, dará su información. El hombre de la izquierda con ese hermoso cabello castaño claro y aretes en su nariz, se llama Tim. Tim es ateo, mi querida audiencia.

Tim: ¡Mhpmh mmhp!

Nega: Ah, si, me olvide de la mordaza. Da igual. A nuestra derecha, ese hombre rubio y de un lindo mostacho, se llama Ted. Ted es un católico, uno muy devoto. Ahora...- chasqueando sus dedos - fuera mordazas

Ted: - agitado - ¡¿Q-que nos vas a hacer?!

Tim: ¡Perra infeliz! ¡Sueltanos en este instante!

Nega: Bien, bien, bien. Ahora que nos conocemos, vamos a lo importante. Estamos grabando en vivo y en directo caballeros, por lo cual, mucha gente está esperando una cosa. Sangre. - sujetando los hombros de Tim - Tu, mi delgado amigo, eres un ateo hecho y derecho, crees que las religiones son estupidas por que le lavan la cabeza a la gente

Tim: ¡¿Y qué con eso?! ¡Cualquier religión te hace querer a un bastardo imaginario, el cual es todo poderoso! ¡Basura sin fin!

Nega: - alejándose - Es probable, si. Pero eso no te da derecho a matarlos solo por que no piensan como tú. En un mes, terminas matando a 2 mujeres y 3 hombres. - sujetando los hombros de Ted - Lo raro es, que todos eran católicos... seguro que eres ateo, o solo tienes resentimiento hacia cierto grupo?

Ted: ¿E-eres un asesino? ¡Desgraciado, como te atreves a tomar vidas, no tienes ese derecho!

Tim: S-si, yo los maté. ¿Cual es el puto problema, eh? Esa gente estúpida que colecta cosas para sus Iglesias, la institución más asesina, pedofilia y que más robo a lo largo de los años

Ted: ¡Eso solo es histórico, maldito débil de cerebro! ¡La religión se basa en la fe, no generalices por la mayoría de los casos, asesino infeliz! ¡Jamás entrarás en el reino de nuestro señor!

Los hombres empezaron una disputa verbal, pareciera que olvidaron que estaban encadenados y con pocas opciones. El joven no despegaba la vista, sobretodo por la situación entre ridícula y tensa, no podía creer que discutieran en un momento así, más sin conocerse.

Lemuel vio una ventana donde mucha gente con nombres extraños comentaba, como si fuera una transmisión en directo, y de hecho, lo era. Eran grotescos, muchos decían lo idiotas que eran, otros solo querían ver sangre y torturas, le parecía un extremo muy horrible de la realidad.

Unas fotografías cayeron sobre la mesa, todas de cadáveres de personas, muertos de la misma manera, sus gargantas cortadas. Ted se asqueo, Tim se sorprendió y Nega empezó a reírse mientras sostenía un reloj con forma de pato.

Nega: El juego es simple, caballeros. Les daré un arma a cada uno de ustedes, con una sola bala, el que maté al otro, sobrevive. Simple, ¿verdad? - chasqueando sus dedos -

Las cadenas de sus brazos derechos se rompieron, los hombres se miraban de maneras distintas. El ateo con odio y el Cristiano con miedo.

Tim: No te ofendas, Flandes. Pero no pienso morir por un bastardo como tú

Ted: Mataste a creyentes solo por pensar diferente a ti, tu no mereces vivir, y se que dios te dará el castigo adecuado

Nega: Tal vez tu seas su emisario, Ted. Piénsalo, de seguro te puso aquí por una razón

El joven entendió rápidamente lo que hacía, su idea era simple, pero seguramente efectiva.

Lemy: Supongo que, las mentes débiles son más manipulables... ¿que carajo acabo de decir?

Nega: Caballeros, aquí están sus armas. - mostrando dos revólveres - Diviertanse

Puso ambos objetos en la mesa, ambos los tomaron y se apuntaron sin saber que hacer, solo se miraban con ira, ninguno quería disparar, ya fuer aportó miedo o por morir primero.

Nega: Ah, olvidé nuestra invitada especial. Así que, esperen unos segundos antes de volarse los sesos, caballeros - chasqueando sus dedos -

El saco dejó su cabeza, dejando ver a una joven, de unos 14 años masomenos, cabello castaño y lindos ojos, estaban rojos, seguro de las lágrimas que aún emergen de estos. La chica miró a todos lados hasta que se acostumbró a la luz, solo para gritar desesperadamente.

???: ¡AAHHHHH!

Tim: ¡Erica!

Erica: - volteando - ¡P-papá! ¡¿Papá que está pasando?!

Nega: Bueno, bueno, bueno, no es una linda reunión. Esto pasará ahora, dejaré a Donald en la mesa y tendrán un minuto para decidir quién muere, si la campana suena y siguen vivos, todos morirán. - colocando a Donald en la mesa - Que comience el juego

Erica: D-de que habla... ¿Papá, por que tienes un arma?

Tim: T-todo saldrá bien cariño

Ted: Tu padre es un asesino, niña. - tirando del martillo - Eso es lo que pasa

Tim: - tirando del martillo - Cierra la boca, marica... tranquila, cariño, saldremos de aquí

Nega: Dime Tim, matarás a este hombre frente a tu hija. Y tú Ted, matarás a un hombre y dejarás a esta niña sola

Erica: - snif - P-p-papá...

Tim: ¡Cierra los ojos, nena!

Ted: - susurrando - E-el no es un hombre

Tim: Vas a morir, viejo. No dejaré a mi niña sola, no otra vez

Ted: Ya has cometido pecados, esas imágenes son la prueba. La verdad, dudo si la chica estaría bien contigo

Tim: ¡Es mi hija!

Ted: ¡Cierra la boca!

- ¡RIIIIIIIIIIINGG!

Nega: Jejeje, ¡se acabó el tiempo!

Ted: ¡A la mierda! - ¡BANG! -

Erica: ¡Ahhh! ¡Papá, no!

La niña solo pudo llorar entre gritos, la bala le había perforado el cráneo pasando por su ojo izquierdo. Ted vomitó sobre su camisa soltando el arma en el proceso. Nega, tomó el reloj y lo guardo dentro de su gabardina para después acercarse a Ted y sujetar su cabeza haciendo que mire para arriba.

Ted: ¡¿Q-que haces?! ¡Lo maté, yo gané, yo gané!

Nega: El patito sonó antes, mi católico amigo. Este es el precio de tu pecado... jejeje, parezco un puto predicador

Puso ambas manos dentro de su boca y empezó a tirar con fuerza, el católico solo gritaba desgarrando su voz, hasta que Nega le arrancó la mandíbula con sus propias manos.

Lemuel estaba pálido, se llevó su mano temblorosa hasta su boca mientras varias lágrimas caían de su ojos, fue algo horrible y grotesco, tanto que le entraron la ganas de vomitar. Pero lo peor, fue cuando la cámara se acercó a él, posicionado detrás de la chica que no paraba de llorar, puso una de sus sangrientas manos en su cabeza. Ahí fue cuando los vio, esos ojos, esos putos ojos amarillos que ahora le causaban más terror.

Nega: Tranquila, pequeña. Todo terminará pronto. - mirando a la cámara - ¿Quieren ver el desenlace, verdad? Eso... ¿quieres?

Pudo apagar la computadora, pero no lo hizo, solo fue testigo de cómo tomó a la joven del cuello y se lo quebró con fuerza. La transmisión se cortó y la laptop se apagó, no sin antes dejar un pequeño mensaje en letras Rojas.

- Dulces sueños

El castaño terminó tragándose la bilis y caminó con pasos torpes hasta la cama, para lanzarse contra esta y empezar a llorar.

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FIN DEL CAPITULO.

- ¿Nega está loco o solo es muy sadico? 

- ¿Lana cumplira su promesa y el trato? 

- ¿El sufrimiento de Lemy seguirá?