Varios años en el futuro

Una adolescente huía más rápido que el humano promedio, tenía ojos verdes y pelo castaño y largo hasta el cuello, superaba por mucho al mejor atleta sin poderes, su atención estaba fijada en una sola dirección sin percatarse de aquellos que la perseguían, siente un hormigueo en la cabeza antes de ser emboscada por una docena de vampiros, luego salta a una pared que se encontraba a una altura considerable, trepa tan rápido como puede mientras los vampiros hacían lo mismo por alcanzarla, llega a una azotea y salta de techo en techo, vuelve a sentir el hormigueo y el edificio en el que aterrizaba comienza a derrumbarse por un terremoto, cae de cabeza y antes impactar contra el suelo aprieta el gatillo del brazalete izquierdo para disparar una especie de fluido grisáceo que se solidifica al contacto con el aire, y se balancea mientras muestra el dedo medio a sus perseguidores hasta volver a sentir ese hormigueo y desde las alturas cae un reptil de más de dos metros cuya musculatura era muy pronunciada e impactan en el suelo. Un inmenso terror se apodera de su pequeño cuerpo y trata de huir desesperadamente, no obstante el agarre de aquella criatura conocida como El Lagarto era demasiado incluso para ella, una metahumana con super fuerza. El terremoto continuaba y un objeto con forma de murciélago se encaja en la nuca del Lagarto, emite un pitido que se acelera hasta explotar, el Lagarto cae con medio cuello destrozado y la fémina huye tan rápido como puede tratando de no caerse mientras un hombre, cuyo traje era negro y que le cubre todo el cuerpo, vuela hacia ella y se la lleva lejos hasta llegar a una zona que parecía ser de clase baja

— ¿Estás bien? — preguntó el varón

La fémina se aleja tropezando diciéndole que se alejara de ella

— Tranquila, no soy uno de ellos — aseguró él

— ¡Eres un... un murciélago gigante que habla!

— De hecho es un disfraz — decía quitándose la máscara — Me llamo Terry. Terry Mcginnis, ¿y tú?

— N-Nicol Parker

— Bueno, Nicol, estamos a salvo por ahora. Los vampiros no suelen andar por aquí

— Gracias por salvarme pero debo volver a casa antes de que mi tía descubra que me escapé

— Si Peter Parker es tu padre y vives con tu tía, entonces ella debe ser Teresa. Tendría sentido teniendo en cuenta que tu tía abuela murió antes de que el mundo se fuera al demonio

— Me estás asustando. ¿Cómo sabes tanto de mi familia?

— En realidad lo deduje. Te sonará extraño pero alguien me dejó una carta que decía que ella podría tener las respuestas que necesito

— No lo sé, no quiero que ella se enoje conmigo, otra vez. Además ya tengo suficientes problemas, incluyendo que estoy castigada

— De verdad necesito hablar con ella. Puede que sepa como acabar con los vampiros

— No lo sé. Ni siquiera te conozco

— Ya sabes mi nombre y también soy el único que intenta hacer algo al respecto

— Si te soy sincera creí que eras más viejo

— Pero sí tenemos más o menos la misma edad — le dijo ligeramente irritado

— ¿Ah sí? ¿Cuantos años tienes?

— Diecinueve

— Yo tengo diecisiete

— ¿Me vas a llevar con tu tía o no? Es de vida o muerte

Nicol accede a regañadientes y camina junto al nuevo Batman mientras piensa en una excusa para evitar que Teresa la regañe  Un hombre fornido se encontraba oculto entre las sombras, teniendo la noche como su aliada, sus ojos rojos y sus largos colmillos le hacían parecer un animal salvaje, una criatura sacada de las leyendas, en la nuca tenía un pequeño chip que había sido incrustado quirúrgicamente por el que es considerado la mano derecha de Drácula. En el centro de la ciudad, el Lagarto sale de entre las grietas teniendo el cuello regenerado, olfatea alzando la cabeza hasta captar su aroma, para luego lamer sus labios

— Nicol, si no te importa que pregunte ¿por qué tienes colmillos? — preguntó deseando que no sea una vampira

— Mi tía dice que los heredé de mi papá y que heredé todos sus poderes, incluyendo el factor curativo

— Entonces debes ser inmune o ser capaz de eliminar las toxinas de tu cuerpo sin necesidad de un antídoto — decía pensativo con la mano en la barbilla — Si fueras mordida por un vampiro ¿cuánto durarías siendo una de ellos?

— Unos minutos según mi tía. Ella me dijo una vez que eso fue lo que duró mi padre cuando lo mordieron siendo adolescente. De todos modos prefiero no arriesgarme. ¿Qué piensas hacer si de un momento a otro pelearas con Drácula?

— Es obvio ¿no? Lo voy a matar

— Pero dicen que nadie ha podido detenerlo

— El Batman original lo mató como dos o tres veces, tu padre también, Blade era mitad vampiro, y como ya no queda nadie, alguien tiene que intentarlo

— ¿Al menos sabes pelear?

— Tengo la mala costumbre de meterme en problemas, así que podría decirse que sí. Además tengo este traje, si las balas no pueden atravesarlo entonces ellos tampoco

— Si tú lo dices — dijo no muy convencida

— ¿Qué hay de ti? ¿Haz peleado alguna vez?

— Mi tía me enseñó algunas cosas en caso de que tuviera que lidiar con vampiros o con cualquier idiota. Dios, ella estará furiosa. ¿Por qué te disfrazas de murciélago?

— Se supone que estoy muerto y este traje me permite hacer cosas para hacerle frente a los vampiros. Fue hecho con tecnología de Wayne Enterprises

— Escuché de esa empresa. La dirigía Bruce Wayne. Mi tía dice que era un mujeriego manipulador y paranoico que siempre tenía planes de contingencia para todo. Yo creo que debió estar en un manicomio

— Tal vez era una fachada para dedicarse a un bien mayor. Tu tía te ha dicho muchas cosas, ¿no?

— El tío Jason me contaba historias sobre un caballero de la noche que tuvo el valor para matar a Drácula hace más de treinta años. Ya sé que hablaba del Batman original

— ¿Tu tío era Red Hood?

— ¿Lo conoces? ¿Sabes donde está?

— Me salvó la primera vez que peleé con vampiros. Me dijo que salvara a cuantos pudiera y cuando volví por él...

— Lo mordieron, ¿verdad? — habló cabizbaja temiendo la respuesta

Eso explicaría por qué no volvió en los últimos dos años. Batman asintió con la cabeza y Nicol miró al suelo con labios temblorosos y ojos llorosos. El murciélago puso la mano en su hombro sintiéndose culpable por haber fallado

— De verdad lo siento

En eso el sentido arácnido vibra con mayor intensidad, una expresión de pánico se forma en el rostro de la fémina, toma la mano de Batman y corre a su casa a una velocidad sobrehumana pero son alcanzados por el que alguna vez fue el Dr Connors. Parecía estar interesado en Nicol, la tenía contra el suelo con la mano escamosa presionando su pecho, un batarang se forma en la palma de Terry y se lo arroja a la cabeza, el Lagarto gira la cabeza entre gruñidos y con ayuda de los propulsores de sus botas embiste al gigantesco reptil, quien encaja las garras en el suelo y con la cola atrapa a su atacante mientras Nicol estaba paralizada del miedo. Batman forcejea, se retuerce tratando de liberarse inútilmente y acercado al hocico que se abre completamente, por lo que en un intento desesperado usa los propulsores, haciendo que se muerda la cola y esta caiga mutilada

— ¡¿Estás bien?! — le preguntó a Nicol sin obtener respuesta — Lo tomaré como un no

De manera rápida toma a Nicol y en el momento en que iba a volar es atrapado por el Lagarto, es azotado salvajemente contra el suelo, sujetado con ambas manos y el Lagarto lo muerde el hombro, el traje lo protegía pero poco a poco iba cediendo y los gritos de dolor se escuchaban en todo el vecindario hasta que un rayo repulsor de color azul le atraviesa la cabeza al monstruo. Una mujer que usaba un traje rojo cuyos ojos eran dorados, al igual que el símbolo de la araña que abarca el torso, desciende cerca de Nicol mientras la máscara se abre del todo y la abraza con fuerza

— ¿Estás bien, cariño? ¿No te pasó nada? — le preguntó preocupada

— Está bien, solo está asustada — le respondió el varón

— ¿Y tú quien eres?

— Soy Batman

— Batman está muerto. Te lo vuelvo a preguntar, ¿quién eres?

Batman solo se quitó la máscara

— Terry Mcginnis, señora

— Bueno, Terry, más te vale demostrar que eres merecedor de portar el manto

— Yo...

— Él me salvó, tía — la cabeza del Lagarto estaba por terminar de regenerarse, por lo que Teresa dispara una pequeña bomba en la herida

Momentos después entran a una casa que parecía abandonada por más de cincuenta años, Nicol sube las escaleras sin decir alguna palabra y desde abajo la escuchan cerrar la puerta, Batman quería ver si estaba bien pero Teresa lo detiene poniendo su mano en el pecho y le dice que se siente, él sólo obedece sin más

— Señora Parker, yo...

— Terry, ¿cierto? Me vas a decir que haces con ese traje y que quieres con mi sobrina

— No hice nada malo, solo ayudo a la gente y busco personas que quieran pelear contra los vampiros

— Drácula convirtió a todos en vampiros y a otros los mató. Estás perdiendo el tiempo, niño. ¿Qué quieres con Nicol?

— Nada, señora — aseguró sintiéndose acorralado — Ella estaba en el centro cuando el lagarto...

— ¡¿En el centro?! — exclamó alarmada — ¡¿Qué carajos estaba haciendo en el centro?!

— No lo sé, yo solo vi que la estaban persiguiendo una orda de vampiros y el lagarto apareció, así que la salvé

— El traje que estás usando es un prototipo, uno que Batman no tuvo la oportunidad de probar. ¿Cómo lo conseguiste?

— Estaba huyendo de los vampiros, llegué a la mansión Wayne creyendo que ahí estaría a salvo, luego encontré una cueva secreta y habían varios trajes y todos sus vehículos. Nunca lo usé para dañar a nadie, señora, pero la semana pasada alguien me dejó esta carta — le dijo sacando la carta para darsela — Quien sea que la haya escrito quería que la buscara pero fue hace dos años

— Dice que hay una resistencia

— El resto son solo unos y ceros

— Códigos binarios. ¿Intentaste descifrarlo?

— Todo estaba en la cueva de Batman pero solo fui una vez. No volví creyendo que me estaban siguiendo el rastro o que me estarían esperando

La máscara del traje se cierra para escanear el código, un círculo se ilumina en la palma derecha de Teresa, voltea la mano apuntando hacia el techo y en modo de holograma se muestra un video de un Batman herido grabando un mensaje

— Si ven este video solo significa una cosa: perdimos. Red Skull es el responsable de esto, revivió a Drácula y a su hijo implantandoles un chip de obediencia que salió mal. Se organizaron y localizaron a cada héroe, a cada ser con poderes para eliminarlos. Si algún velocista muere no habrá otro flashpoint pero tampoco podremos evitar el ataque, por eso construí una máquina del tiempo junto a Iron Man, Reed Richards, Spider Man y otros más

— La máquina está en Nueva York en la guarida del Hombre Topo — continuó el Batman original y se escucha el sonido de los rayos repulsores de Iron Man seguido de un fuerte estruendo — La máquina solo funciona con aquellos que tengan nuestro ADN o conozca el código de activación. Una vez activada deben viajar al 20 de agosto del 2031 y advertirnos — una explosión fue provocada por uno de los vampiros y termina el video

— Tía Tess, ¿iremos a Nueva York? — preguntó Nicol desde arriba

— Creí haberte dicho que te fueras a tu cuarto

Nicol se encogió de hombros y Terry tomó la palabra

— Yo iré a Nueva York

— ¿Al menos sabes pelear? — Terry hizo el gesto de más o menos  — Es mejor que nada. ¿Tienes hambre?

— Mucha

Terry se quedó sentado en el sillón, miraba alrededor y le llamó la atención una vieja fotografía, pues era de la boda de Teresa y Jason, en ella Teresa se veía bastante alegre y tan llena de vida, en sus brazos tenía a Abby. Este mismo año habrían celebrado su décimo octavo aniversario. Nicol se quedó encerrada en su cuarto, acostada en su cama en posición fetal y abrazando con fuerza la foto de cuando tenía tres años, en ella estaba en brazos de su padre y su hermano Gerry estaba en los de su madre. En dicha foto se veía tanto a Peter como a Nicol haciendo muecas graciosas mientras que Jessica ponía cara de "No hagan esa pendejada" rodando los ojos. ¿Acaso era posible regresar en el tiempo? ¿Al fin podría recibir una vez más los fuertes abrazos de su padre. Se dirigió al armario, saca una caja y al abrirla ve uno de los viejos trajes de trajes de su madre: el rojo y amarillo

— Hola, mamá, soy yo de nuevo

El aceite salpicaba por los pedazos de chorizo que Teresa estaba friendo junto a unas salchichas. Tenía suerte sí conseguía algo de carne, pues era muy raro de conseguir en estos tiempos y las palabras de Bruce Wayne resonaban en su cabeza, y lo que más le preocupaba era perder a Nicol, pues tuvo más que suficiente al ver como su hija era mordida por los vampiros, su segundo hijo había muerto junto a Jason, no estuvo con ellos cuando sucedió pero sentía que los había perdido, Nicol era la única razón por la que no había puesto una pistola en su cabeza y jalado el gatillo por segunda vez

— ¿Tía Tess? — recordó Teresa el día en que Nicol la vio con el arma en su cabeza

Nicol le había arrebatado el arma y al borde de las lágrimas la vio, se sintió asqueada, se odiaba a sí misma, fue una cobarde, pues estuvo a casi nada de abandonar y traumatizar a la única familia que le quedaba. Teresa tenía ya cuarenta y nueve años. Cuando la cena estuvo lista le pidió a Terry que le avisara a Nicol, la sirvió en tres platos y a cada uno añadió cuatro rodajas de pan, y al cabo de unos instantes se dispusieron a comer. Terry era el que más disfrutaba, pues era la primera vez en mucho tiempo que tenía una comida decente

— Está delicioso, señora Parker

— Gracias, niño — bebió un sorbo de café y lo miró — Dime, ¿tienes familia?

— Tenía — respondió cabizbajo — Mis padres murieron cuando todo se fue al diablo y a mi hermano lo mordieron hace tres años. Razones me sobran para volver al pasado y matar a esos desgraciados. ¿Puedo preguntarle algo?

— Como quieras

— El traje que está usando es el Iron Spider, ¿no? ¿Lo usa todo el tiempo?

— Cada vez que salgo de casa — respondió dando otro bocado a la cena — ¿Y tú? ¿Nunca te quitas el traje?

— Me siento más seguro con él puesto

— Haces bien, niño. Dicen que todo pasa por algo. Que tú hayas sobrevivido y encontrado el traje debe ser una forma en la que Dios nos dice que podemos ganar

— ¿Y si no funciona?

— Funcionará. Tiene qué

Terry aún dudaba pero debían hacerlo, nunca olvidaría la noche en que huyó de los vampiros, se había saltado los portones, corrió hasta la entrada pero estaba asegurada desde adentro y no por el seguro, pues la manija giraba, la pateó con todas sus fuerzas pero no lo consiguió, se fijó en las ventanas pero todas estaban cubiertas de tablas desde adentro, buscó alguna, tenía que haber alguna hasta que la encontró; de todos modos estaba quebrada. Lo primero que hizo fue sacar la navaja del bolsillo, se dirigió a la cocina y buscó comida que no estuviera caducada, lo que más abundaba eran telarañas. Maldijo en voz baja y siguió buscando, nada, alguien ya había estado aquí, buscó en todos los cuartos, en cada rincón de la mansión Wayne algo que le pudiera servir: ropa, armas lo que sea, luego escuchó el gruñido característico de los vampiros y rápidamente bajó las escaleras, buscó desesperadamente algún lugar al que el vampiro no se le ocurriera buscar y vio que el reloj estaba estaba ligeramente movido, algo estaba oculto detrás de él y para Terry fue su salvación hasta que escuchó algo caer en el piso de arriba

Empujó con esfuerzo el reloj que, de todos modos, ya estaba parcialmente quebrado; era un ascensor cuyas puertas se abrieron de par en par. Al entrar no pudo sentir mayor alivio, sin embargo, le duró poco cuando el ascensor bajó y vio que estaba en una guarida, las luces se encendieron, se asustó cuando los murciélagos chillaron y revolotearon, recorrió cada rincón de la cueva y pudo confirmar que las historias que sus padres le contaban eran ciertas, sobre todo al ver los trajes en cápsulas de vidrio y se acercó a una en específico, uno completamente negro, con ojos blancos, un símbolo rojo de murciélago en el pecho, la capa brillaba por su ausencia y la máscara cubría la cabeza en su totalidad. Pero ¿qué pasó con Superman? Algunos creen que murió pero un vampiro jamás podría herirlo siquiera, otros creen que Lex Luthor le tendió una trampa junto a Red Skull, también se cree que tanto él como Wonder Woman fueron encarcelados en la Zona Fantasma, y ¿qué pasó con Flash? ¿Por qué Barry Allen nunca hizo un flashpoint cuando los héroes perdieron? ¿Qué pasó con Zatanna, Constantine, Detective Marciano, Capitán América, Moon Knight y los demás? Lo único probable es que les pasó lo peor

De lo que sí se sabe es que todo comenzó en el año 2031. Una conferencia de prensa se estaba llevando a cabo en Gotham City, pues Bruce Wayne los había llamado para hablar de un nuevo proyecto de Wayne Enterprises que no sólo beneficiará a la ciudad, sino a todo el país y posteriormente al mundo, luego le cedió la palabra a uno de sus hombres de mayor confianza, un hombre de tez blanca, pelo castaño y muy bien arreglado; este traga saliva, pues los nervios se estaban apoderando de él y entre la multitud veía a su esposa haciéndole señas para decirle que lo haría muy bien

— Sr Parker, ¿en que beneficiará el Proyecto Lázaro a los Estados Unidos? — preguntó una reportera pelirroja, siendo esta Vicky Vale

— Como ya dijo el Sr Wayne, el Proyecto Lázaro se ha planteado como la cura definitiva para esas enfermedades que tantas vidas ha quitado. Si bien ha sido complicado (y para no hacer esperar a los que más la necesitan), decidimos hacer un cambio de planes; nanobots capaces de detectar las células cancerígenas que una vez inyectados, rastrearán dichas células para destruirlas, luego se encargarán de reparar todo el daño causado por dicha enfermedad sin importar de que tipo sea, y lo mismo hará con el sida y la diabetes. No más sufrimiento, no más quimioterapia, no más costosos tratamientos que cientos de familias no pueden permitirse pagar. No importa si están en fase terminal, Wayne Enterprises les dará a todas y cada una de esas personas acceso a la cura definitiva contra el cáncer, el sida y todas esas enfermedades que se han llevado a tantas personas a la tumba

Los reporteros empezaron a hacer más y más preguntas a la vez, Peter era cegado por el flash de las cámaras y en las personas que miraban las noticias (las cuales eran transmitidas en vivo) lloraban de alegría y hasta los que no eran creyentes daban gracias a Dios por este milagro. Cuando ya todo terminó, Peter le cedió nuevamente la palabra a Bruce, se alejó de la multitud y su esposa le dio un fuerte abrazo

— Te dije que podías hacerlo

— Sí, aunque es la primera vez que hablo con la prensa siendo yo en vez de Spider Man

— Spider Man ya debe estar tan agobiado por la prensa que debería irse con Spider Woman

— Hablando de Spider Woman, ya llevas cinco años sin poderes. ¿Cómo te sientes?

Jessica desvió la mirada, la bajó, lo pensó por un momento y finalmente respondio:

— Los extraño, aún no me acostumbro al cien por ciento al hecho de tener que esperar días para sanar cuando antes me bastaba con unas horas

— Y los partos te dejaron hecha mierda

— Como no tienes idea. Da gracias a Dios que los hombres no tienen que parir

Peter juntó las manos y las extiendio a los lados diciendo 《Agradecido con el de arriba 》, Jessica, sonriendo, rodó los ojos, puso su brazo derecho alrededor de la cintura de su esposo y lo llevó en su moto a un restaurante llamado Batburger. Peter solo iba a pedir una hamburguesa con triple de todo para que Jessica no tuviera que pagar tanto, pero fue tanta la insistencia de ella en que pidiera las tres hamburguesa de siempre que al final cedió, luego se sentaron uno frente al otro al lado de un ventanal. Jessica había pedido una "normal" y unas papas fritas para ambos, pues desde que perdió los poderes ya no comía tanto como antes

— Sabes que con una puedo aguantar el hambre

— Pete, sabes que para mí no es ningún problema. Solo quiero que comas bien, ¿ok? — se queda pensativa un momento y una duda invade su mente — ¿Recuerdas cuando Nicol y Gerry tenían unos meses de edad y cada que salíamos no sabía si les dejé suficiente leche?

— Les dejabas como para un mes. Tenías los pechos tan llenos de leche que creí que explotarían en cualquier momento. ¿No viste 1000 Maneras de Morir?

— Sí pero lo que tenía era leche, no implantes

— Además, parecías Angie Varona cuando estuvo embarazada

Jessica sonrió y cambió de tema

— ¿Al final en que paró todo ese asunto de los vampiros? ¿Se encargó Constantine o solo te vio la cara de idiota?

— No lo sé, tal vez pudo solucionarlo antes de que todo se fuera al demonio — se pone un poco más serio — Jess... Reed y yo hemos... hablado sobre devolverte los poderes, pero modificados

— ¿Modificados?

— Me refiero a eliminar la radiación y de añadir a la lista mi ADN para que tengas el sentido arácnido. Así no estarías en peligro de muerte. Sé que nunca lo necesitaste pero... — no pudo terminar la frase al sentir como sus labios eran aprisionados por los de ella

Una pareja pasó a su lado, la mujer les dijo que no deberían hacer ese tipo de escenas en público pero Jessica, sin dejar de besar a Peter, hizo el gesto del dedo medio. La mujer se indignó, el marido rió entre dientes y se la llevó a otra mesa para evitar que hiciera una escena. Cuando Peter y Jessica dejaron de besarse, la expresión de ella era de tanta alegría que no pudo decirle el resto para no desanimarla

Sin embargo, la alegría que Jessica sintió se desvaneció de pronto, al recordar de golpe que el uso constante que le hizo Reed, aquel traje que imitaba sus poderes, no pudo protegerla lo suficiente cuando se rompió cerca del muslo durante su enfrentamiento contra el Hombre Radiactivo. En ese entonces llevaba cuatro meses embarazada por segunda vez, había ido con Reed para que la examinara y todo parecía ir bien, que el traje se había regenerado al instante y liberado una sustancia que la hizo sanar rápidamente, y posiblemente no afectaría al bebé; gigantesco fue el terror cuando nació Gerry al ver que no lloraba, que le estaba costando respirar y que lo más probable era que no sobreviviera. Fue gracias a Reed y Peter que el bebé sobrevivió pero debía llevarlo cada dos semanas al edificio baxter para que Reed lo examinara. Peter supo lo que ella estaba pensando y la tomó de las manos

— Jessie, te juro por lo más sagrado en mi vida que son tú y los niños, que recuperarás tus poderes y si vuelves a quedar embarazada, el bebé nacerá sano como Nicol

Jessica asintió con la cabeza

— Lo sé, pero nunca dejaré de culparme por lo de Gerry. Debí darme cuenta de que el traje no resistiría

— Gerry ya no tendrá problemas de salud si hereda mis poderes. Lo más probable es que su factor curativo lo cure

— ¿Y si no lo hace? ¿Y si nunca hereda tus poderes? Reed lo dijo la primera vez que lo llevamos con él, conforme pase el tiempo, menos posibilidades tendrá de sobrevivir. Nunca lo veremos graduarse, ni ir a la universidad, ni casarse ni...

— Jess, todo saldrá bien

Jessica le había dicho a Peter lo que sucedió minutos después del nacimiento de Gerry, que Mephisto se le había aparecido con la oferta de curar a Gerry a cambio de su matrimonio. Ella lo había rechazado porque no solo implicaría perder a Peter, sino que Nicol nunca habría nacido y Gerry sería el resultado de una noche de sexo casual. Trató de no pensar en eso y cuando salieron del restaurante, el cielo estaba teñido por el anaranjado del atardecer y adornado por las nubes, subieron a la moto, Peter se aferró a Jessica y ella aceleró, iban a una velocidad moderada para disfrutar más del viaje, él iba con la barbilla apoyada en el hombro de ella y cerró los ojos mientras el viento le revolvía el pelo y el de Jessica le golpeaba la cara y algunos mechones se le metían en la boca. Al cabo de media hora aproximadamente llegaron a Nueva York pero ya no vivían en un apartamento, vivían en una casa propia y con el dinero que ambos ganaban podían vivir sin problemas y permitirse ciertos lujos. Cuando llegaron a casa, Nicol, quien en ese entonces tenía cinco años de edad, corrió a los brazos de su padre, Peter la alzó y la abrazó

— ¿Cómo estás, Nico?

— Bien. El tío Johnny casi se queda dormido

— Es que ya está muy viejo — bromeó Peter y ambos rieron

Jessica soltó una pequeña risa y se dirigió al cuarto de Gerry, en dicho cuarto estaba el niño de tres años y con él estaba Johnny, quien estaba sentado junto a él en la cama mientras hacía figuras de animales de fuego en el aire. Gerry parecía hipnotizado, reía, él tenía el pelo negro como el de su madre pero los ojos marrones de su padre. A Jessica le destrozaba el corazón saber que fue ella quien lo condenó a ser una persona frágil por el resto de su vida y eso se lo confirmó Reed hace tres años

— Debido a su enfermedad, Gerald no puede tener heridas expuestas en la piel, de lo contrario la infección se desarrollará rápidamente — le había dicho Reed — Es como si hubiera desarrollado un nuevo tipo de cáncer. Podrían llevarlo al mejor hospital pero al final morirá. Yo me encargaré de tratarlo y de crear una cura

— ¡Mami! — exclamó Gerry con alegría

Jessica estaba apoyada en el marco de la puerta, lo saludó mientras se acercaba a ellos, luego tomó a Gerry en brazos y le dio un beso en la mejilla

— Gracias por cuidar a los niños, Johnny

— No hay de que. Apuesto a que será un buen Spider Man cuando crezca. Ya verás que se va a curar, Jess

— Eso espero, Johnny

La noche en que los vampiros acabaron con casi toda la humanidad estaba cada vez más cerca, algunos se convertirían en vampiros y otros simplemente morirían. Cuando Teresa, Nicol y Terry terminaron de cenar, Teresa le ofreció pasar la noche con ellas y que en la mañana podrán hablar de más sobre la máquina del tiempo, que con algo de suerte podrían averiguar durante el viaje el paradero de los héroes sobrevivientes para que los ayuden, si es que aun queda alguno. Cuando todos se fueron a dormir, Terry se quedó en el cuarto que perteneció a a la hija de Teresa pero le costaba conciliar el sueño, le era imposible no pensar en como terminó su familia y lo que lo motivaba era la misma razón por la que Bruce Wayne se convirtió en Batman: venganza