12

SE VIENE JEONLOUS JIJIJI
IM VERRY JAPI : D

¡Regalo de año nuevo!

JiMin

Joong se llevó a los niños.

Reclamó que era su deber como abuelo comprarles a los niños algo para molestar a sus padres antes de que se fuera. Razonó que era justo que reclamar a Jihoon y a Eunbi como sus nietos si Jungkook iba a llamar a Tae su hijo.

Era una extraña situación en la que nos habíamos involucrado, y todo empezó porque fui lo suficientemente loco como para secuestrar a los niños de alguien. ¿Quién lo iba a saber?

Yeontan y yo estábamos caminando alrededor del vecindario cuando Namjoon corrió hasta alcanzarme – JiMin, ¿puedo hablar contigo?

Asentí – Claro ¿Qué sucede?

–Se trata del delincuente que vive en tu casa – Explicó.

Sabía que esta iba a ser una conversación interesante, así que lo invité a entrar por algo de tomar – ¿Qué hizo ahora? – Pregunté, dándole un vaso con té helado.

–JiMin, te necesito para hacer que se mantenga alejado de mi – Estaba tan serio que daba miedo – No puedo soportarlo más, y si él sigue sacándome de quicio, no podré ser responsable de mis acciones – Se veía tan estresado – Eres mi vecino favorito. No quiero terminar haciendo algo que haga que me odies, pero él... – Se cortó.

–Namjoon, ¿de qué estás hablando? – Me estaba perdiendo algo.

Se quedó quieto por un momento antes de decidir arrojar todo de ahí – Me lo voy a follar un día de estos, si sigue así.

Fue en ese preciso momento que mi mandíbula golpeó la mesa – ¿Qué dijiste?

–Lo siento por ser tan contundente – Divagó – Es sólo que... cada vez que lo tengo con las esposas, quiero ponerlo sobre el capó de mi coche y...

–¡Ya entendí! – Dije, deteniéndolo frenéticamente.

Soltó un suspiro rápido – Lo siento.

– ¿Qué es exactamente lo que quieres que haga, Namjoon? – Estaba tratando de tomar esto seriamente. El pobre hombre estaba a punto de tener una recaída, pero algo de esto era tan malditamente divertido para mí.

Rascó la parte de atrás de su cuello – No lo sé. Nunca he tenido este tipo de problemas antes.

Eso era comprensible, supongo – Uhm... – Tenía que salir con algo – Mira, él es mi hermano. No importa lo mucho que trate de negarlo, hay pruebas de ADN que lo demuestran, pero tú eres uno de mis mejores amigos. Sinceramente, estoy más preocupado por ti que por Jin – Tomé su ancho hombro y le di una pequeña sacudida. – Cálmate, hombre. Si Jin descubre tu debilidad, te torturará hasta no tener fin.

– Está bien – Asintió y se puso de pie – Mejor me voy a trabajar. Te seguiré viendo – Me dio un abrazo rápido antes de irse.

El pobre chico no tenía oportunidad.

De cualquier forma, no creo que fuera algo malo. Jin tenía una tendencia a alocarse y salirse de control. Namjoon podía ser la persona perfecta para ponerlo en balance, para mantenerlo loco, pero fuera de reiniciación. Me pregunté cuanto tiempo iba a soportarlo él.

Sin tener nada más que hacer, decidí ir al gimnasio. Necesitaba mantenerme en forma para cuidar a tres niños, y no me mataría desarrollar algo de fuerza en mis brazos. Me imaginé que si cargaba niños todos los días, ¿Qué tan malo podía ser un poco de peso más?

Mátenme. Ahora. Mismo.

No había estado en el gimnasio ni una hora y mis pobres brazos se sentían como gelatina. El peso no era lo que me molestaba; eran las repeticiones. Levantar una pequeña y adorable mancuerna una vez no era problema. Levantarla repetidamente... era el problema.

Sin embargo, me encontré libre del peso extra cuando algún idiota se atrevió a tocar mi trasero mientras iba caminando.

La mancuerna se deslizó de mi agarre y se clavó en la espalda del idiota. Problema solucionado.

Esperaba que me echaran del gimnasio después de mi pequeño desplante. El irrumpió hacia la recepción, planeando claramente denunciarme, así que estaba sorprendido con lo que paso a continuación – ¡Bueno, pero si es JiMin, bésame el trasero, Park!

Sólo una persona me había llamado de esa manera – ¡Chanyeol! – Me giré rápidamente hasta encontrarlo parado ahí en toda su gloria muscular – ¿Qué diablos estás haciendo aquí? – Pregunté mientras corría para abrazarlo.

Me levantó y prácticamente me sacó toda la vida en ese abrazo. – Trabajo aquí. Soy entrenador personal – Me bajó y enrolló su enorme mano alrededor de mi brazo. – Parece como si pudieras usar mi ayuda.

Le di un manotazo como mejor pude. – Cállate. No tengo tiempo para trabajar. Tengo niños en casa.

– ¿Niños? – Preguntó – Lo último que escuché, era que tenías al súper genial Taehyung.

–Adquirí otros dos – Me expliqué – Los secuestré un día en el supermercado de la ahora ex novia psicótica de su papá, y he estado pegado con toda la familia desde entonces. Son realmente unos increíbles chicos, así que no me importa.

– Secuestraste a los niños de un hombre, ¿y él aun así deja que estés cerca de ellos? – Se Rió.

Puse mis manos en mis caderas – Debes saber que su padre y yo tenemos una muy agradable y retorcida relación.

– Pensé que tú no estabas en relaciones – Recordó. Era algo que había dicho muchas veces en el pasado.

– Créeme. No es una normal. Mi estatus de relaciones esta como indefinido – Técnicamente, no estaba en una relación, pero tampoco me sentía soltero – ¿Y qué hay de ti? ¿Alguna dama afortunada?

– Nope – Contestó – Sabes que soy demasiado hombre para una sola mujer.

Estornudé falsamente – Oh, lo siento. Soy alérgico a las tonterías.

Me empujó del brazo – No eres divertido, Jimmy – Sonrió.

– ¿Cómo están los demás? – Pregunté. No había visto a su familia o a nuestra banda de preparatoria en años.

Chanyeol se sentó en una banca y golpeó el lugar junto a él, señalándome que me sentara a su lado – Mis padres están redescubriéndose a sí mismos en las Bahamas. Wonho sigue siendo demasiado genial como para salir con nosotros. Suho, Minhyuk y Eunhyuk abrieron un restaurante. Juro que ellos se creen como de la mafia o algo, y no sé qué ha sido de Yesung.

Continuamos charlando y poniéndome al corriente con nuestras cosas. Me hizo hacer más repeticiones, para que así al menos pretendiera que estaba trabajando. Cuando estaba por irme, hicimos planes de reunirnos para cenar más tarde. Tomé una ducha rápida y me fui a casa.

El carro de Jong estaba estacionado afuera y había algunos ruidos viniendo del interior de la casa. Caminé para encontrar a Tae golpeando algún tipo de batería en miniatura, Jihoon con una guitarra pequeñita, y Eunbi con un pequeño teclado. – ¡Papá! – Grité.

Vino desde la esquina – Hey, JiMin.

–Te voy a matar – Dije sencillamente.

Sonó el timbre – La pizza está aquí – Dijo Jong, pasándome rápidamente para atender la puerta. Afortunadamente, la mención de la pizza causó que el intento de música se detuviera.

Puse a los aspirantes a estrellas de rock en frente de la televisión, esperando distraerlos con una película mientras papá se me unía en la cocina – ¿Cuándo tienes que irte?

– Pronto – Contestó – Puedo arreglar otra visita para tu cumpleaños, si tú quieres.

– Suena perfecto – Sonreí.

Comimos rápidamente, a pesar de las risitas ocasionales que venían de la sala que rompían el silencio – Bueno, será mejor que me ponga en marcha. Tengo gente que arrestar y regaños que evitar, con respecto a la comida – Me guiñó un ojo y abrazó a todos los niños antes de que lo acompañara a la puerta – Jungkook parece ser un tipo bueno. Mantenlo cerca, ¿de acuerdo?

– Si no ha escapado todavía, no creo que lo haga en algún punto – Contesté – Adiós papá – Lo abracé por corto tiempo.

– Adiós JiMin – Camino a su auto y se fue.

Cuando regrese adentro, vi que tenía un mensaje de Chanyeol.

Chanbo :3

¿Cena a las 5? ¡Muero de hambre, Jimmy!

Sacudí mi cabeza y llamé a Jin.

– Construcciones Jeon, le atiende el Worldwide handsome. ¿Cómo puedo ayudarle?

– ¿Puedes estar aquí a las cinco para cuidar a los niños? – Pregunté.

– ¿Por qué? ¿Qué vas a hacer?

Entrometido – Tengo una cena con un viejo amigo de la preparatoria. Acuérdate de Chanyeol – Lo escuché gimotear.

– ¿El carbón que me llamaba "Monstruo con complejo de Narciso"?

– Sipi – Sonreí – Por favor, Jin. No he pasado tiempo con él en años. Amaras quedarte con los niños. Jong les compró suficientes instrumentos como para empezar una banda.

–Bien. Te veré a las cinco.

–Gracias, Jin – Colgué y me fui a cambiar.

Jungkook

–Hey, Jefe, necesito salir temprano. JiMin necesita que cuide a los niños – Dijo Jin, asomando su cabeza a mi oficina.

– ¿Paso algo malo? – Pregunté, inmediatamente preocupado.

Sacudió su cabeza. – No, él tiene una cita candente, así que necesita que este ahí a las cinco.

Una cita. ¿JiMin tenía una cita? Diablos, no – Uhm... seguro – Traté de componerme – Me quedaré un poco más tarde. Déjame darte algo de dinero para que compres algo de comida para llevar o algo.

– Lo tengo – Contestó – No meterme drogas ha mejorado realmente mi estado de cuenta en el banco. Lo veré esta noche, Jefe – Me sonrió y cerró la puerta.

JiMin tenía una cita. Mi JiMin. Eso no iba a funcionar. Tomé el teléfono.

– Jeon Hyun Bin.

– ¿Papá, puedo tomar prestado tu auto? – Estaba formulando rápidamente un plan en mi mente.

– Seguro, hijo.

Amaba a ese hombre. Siempre estaba dispuesto a ayudar. – Gracias. Voy en camino – Les hice saber a Jackson y Yoongi que me iba antes de correr al hospital.

– ¿Quiero saber de qué trata esto? – Me preguntó cuándo intercambiamos llaves.

– ¿Quieres arriesgarte a la ira de JiMin? – No quería arrastrarlo conmigo.

– Hablaremos más tarde, hijo – Me contestó con una sonrisa.

Manejé hacia la ruta familiar a la de JiMin y me estacioné a una distancia segura. Entonces, esperé. Cinco minutos después, una camioneta desconocida se estacionó en la calzada. Miré mientras el tipo se bajaba y trotaba hacia la puerta de enfrente. Era alto, pero si me las había arreglado contra Jackson, no iba a tener ningún problema con ese idiota. Después de todo yo era más fuerte que él.

JiMin abrió la puerta, y tiró hacia él. Vi rojo. ¿Quién diablos se cree como para poner sus patas en mi JiMin? Apreté el volante. Ni siquiera le había abierto la puerta. Que carbón. Los seguí discretamente mientras manejaba fuera del vecindario. Probablemente iban demasiado ocupados riéndose y entretenidos como para notarme detrás de ellos.

Se detuvieron en una parrilla hibachi. Al menos iban a estar en una mesa con otras personas y no en una cena romántica para dos. Rodeé la manzana, dándoles tiempo para entrar antes de ir a la parte de atrás a estacionarme.

No había pensado esta parte. No podía simplemente entrar ahí.

¿Podía?

No.

Así que hice lo que cualquier acosador haría: los miré a través de la ventana. Si él hacia un moviento en falso, estaba preparado para dejar caer su culo en la parrilla.

Estaba siendo demasiado. Aparentemente, este tipo era gracioso, porque cada vez que sus labios se movían, JiMin se reía. Necesitaba hacer algo pronto o iba a enloquecer. Él se levantó para ir al sanitario de hombres. El sanitario estaba cerca de la salida.

Moví el auto, dejándolo cerca de la puerta. Entonces, rápidamente entré y esperé. Tan pronto como JiMin salió del baño, lo tomé. Su grito fue opacado por mi mano mientras lo cargaba fuera del restaurante. Sus pies me daban unas buenas partidas en las espinillas, pero ya me preocuparía de eso más tarde. Lo forcé a entrar al auto y arranqué.

JiMin no sonaba contento mientras se retorcía para acomodarse. – Escucha, tu, bastardo psicó... ¿Jungkook? – Gimió. Estaba asustado de verlo. – ¿Qué diablos estás haciendo?

– Para alguien que siempre está secuestrando personas, deberías haber reconocido las señales – Contesté.

–  ¿Secuestrando? – Gruño. Nunca era una buena señal cuando JiMin gruñía - ¿Por qué diablos me estas secuestrando?

– ¿Por qué diablos estabas en una cita? – Le grité de vuelta.

– ¿Qué? – Jadeó.

Extrañé que gruñera – Me escuchaste – Cállate, Jungkook – No tienes permiso para tener citas.

– ¿Permiso? – Mierda – ¿Y quién diablos me va a detener?

Y, como soy idiota, contesté – Yo. Obviamente.

– Aparca. El. Maldito. Auto – Doble mierda.

– No puedo hacer eso – Contesté.

– ¿Por qué? – Gruñó de nuevo.

La honestidad es la mejor solución – Estoy un poquito asustado de ti en este momento.

– ¡APARCA EL AUTO!

Me estacioné. JiMin abrió muy enojado la puerta y salió. ¿Qué clase de secuestrador iba a ser si lo dejaba caminar a casa? Fui tras de él – JiMin, métete al auto. Estas siendo irracional.

Otra vez, algo malo que decir.

Él explotó – ¿Estoy siendo irracional? Tú, hijo de pu... – Su teléfono celular sonó, salvándome de una grosería – ¿Hola? – Su voz estaba tensa – No, no me caí, imbécil. Fui secuestrado – Me echó un vistazo y siguió con la conversación – Bésame el trasero – Colgó.

– JiMin – Rogué.

Él estaba caminando hacia mí lentamente. JiMin, La Bestia, parecía ser un apodo bastante apropiado en este momento – Explicité.

Sentí un escalofrió – JiMin, lo siento – él siguió avanzando – Cuando vi que estabas con ese tipo, simplemente... no quería que salieras con él – Sus ojos se entrecerraron – No sé qué paso. Yo... - Nada parecía estar funcionando – Maldita sea, JiMin, estaba celoso. No podía quedarme con la idea de que estuvieras con otro tipo que no fuera yo. Tú eres mi JiMin...o al menos, pensé que lo eras – Terminé tristemente.

– ¿Ya terminaste? – Preguntó, sin decirme nada con su expresión. Asentí. Él tomó ambos lados de mi cara y procedió a besarme con fuerza. Me tomó alrededor de tres segundos recuperarme del asombro antes de tomarlo de las nalgas y levantarlo. JiMin enrolló esas perfectas piernas alrededor de mí, y nos gire, presionando su espalda contra el capó del auto – Sigues siendo un... tonto – Dijo entre besos. Una de mis manos hizo un recorrido por su culo, y él gimió audiblemente en mi boca. Su culo era de un tamaño perfecto; era como si sus nalgas estuvieran hechas para mis manos.

Un maldito carro tocó el claxon y nos trajo nuestros sentidos de vuelta – ¿Supongo que no necesitas ese aventón, Jimmy? – El idiota del restaurante. Iba a matar a ese tipo. Él sonrió y me dio un asentimiento como saludo – Tu debes ser Jungkook – ¿Cómo lo sabía?

JiMin se deslizó del capó y ajustó su ropa – Chanyeol, carbón. Vete a casa – Él simplemente río mientras JiMin se metía de vuelta al auto de Bin.

¿Chanyeol? – Él es un problemático. Espero que sepas en lo que te estas metiendo, socio. Estoy seguro que te veré por ahí – Se despidió con la mano y manejó lejos de ahí. ¿Qué diablos?

Me metí al auto y nos puse de vuelta en el camino, sin tener idea de qué decir.

– No estaba en una cita – Dijo JiMin – Chanyeol se acaba de mudar. Decidimos salir juntos a cenar para ponernos al corriente ya que no nos hemos visto en años. Te lo habría dicho amablemente, si te hubieras molestado en preguntar en vez de actuar como cavernícola conmigo.

Bueno, me sentía como un estúpido – Lo siento. Cuando Jin me dijo que tenías una candente cita, lo perdí.

–Jin – Gruñó. El sonido no era tan malo cuando estaba dirigido a alguien más – Él sabía que no estaba en una cita. Ese pequeño... – Sus ojos tomaron un brillo diabólico mientras empezaba a marcar un numero en su móvil – ¿Hola, Danny? – De ninguna manera – Es JiMin, odio tener que molestarte, ¿pero, podrías hacerme un enorme favor? – Mordí mi labio para evitar reírme – Jin está solo en casa con mi hijo y sus amigos, y sé que él odia quedarse por su cuenta con ellos ¿Podrías, tal vez, ir allá y esperar con él hasta que yo llegue? – Sonrío – Muchísimas gracias – Colgó y se giró hacia mí – ¿Quieres ir por algo de helado?

La noche se volvió muchísimo mejor de lo que había esperado. JiMin no había estado en una cita, y yo sobreviví a mi primer secuestro con mis bolas intactas. Cuando finalmente nos estacionamos en su casa, Jin jamás había estado más feliz y aun así irritado de vernos, Jihoon y Eunbi estaban listos para contarme su mañana con Jong 'Pa' Park.

Después de darle a JiMin el beso de las buenas noches, decidí sacar un tema importante a colación – ¿Así que, lo eres? – Él me miró, confundido. – ¿Mi JiMin?

No pude evitar sonreír como idiota cuando él me dijo – Oh, qué diablos.

Gracias por acompañarme a lo largo de este año. Tuve altas y bajas, momentos donde no actualicé como en 2 meses :v pero aún así fueron pacientes y incluso lindas al pedirme que actualizará.

La verdad 300 seguidores para mi es demasiado y 2k es algo descomunal. Para muchos puede ser poquito pero para mi es más que suficiente.

¡LES AMO MUCHO!

Espero se la pasen super bien y puedan acompañarme el próximo año ♡.

En otras noticias.

El Jeonlous me puede feo.

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top