22
La habitación del hotel era apacible, el atardecer dejaba verse por la ventana la cual se encontraba abierta y dejaba que el viento ingresará, moviendo ligeramente la persiana, el doncel permanecía dentro de la habitación, por ordenes de Jimin quien le había pedido que se colocará el ultimo de los obsequios que le había dado, se encontraba desnudo ante la caja negra que seguía sobre la cama, juntaba sus manos por debajo de su pecho, jugando con sus dedos, aún no sabía lo que aquella caja contenía y aunque estaba curioso por saberlo, no quería abrirla, no aún, mordió con fuerza su labio interior, debía apresurarse, Jimin se encontraba encerrado en el sanitario, y seguramente se estaría alistando al igual que él, así que tenía que darse prisa y dejar de pensar tanto, sacudió su cabeza de un lado a otro con frenesí, tratando de dispersar sus pensamientos y por fin acerco sus manos hacia la caja, se inclino levemente y la tomo en sus manos, afortunadamente el listón solamente rodeaba la tapa, el material de la caja era suave como el terciopelo y liso, la marca Victoria's Secret relucía en letras brillantes metálicas de color rosa.
Quito la tapa de aquella caja, para por fin encontrarse con lo que allí se encontraba escondido, se trataba de no sólo una, sino de varias bragas de diversos colores, los diseños eran diferentes, había unas que eran solamente de puro encaje, otras que eran completamente hechas con telas sedosas y con detalles en la parte de atrás y de enfrente con encajes de flores dispersos por doquier, Yoongi se sentó en la cama, y no pudo evitar sacar algunas de estas, no podía negar que le parecían sumamente lindas cada una de ellas, pero no podía dejar de sentir el calor en su rostro, se sentía avergonzado, Park le había comprado todo aquello, y estaba seguro de que ese hombre se había esmerado en escogerlas, tomo una que le encanto cuando la miro se trataba de una de color blanco toda hecha de encajes que dibujaban enredaderas conjuntas, además de que en el resorte de la misma sobresalía un adorno de tela que lo hacía parecer una pequeña falda que por supuesto no cubría absolutamente nada, dejo aquella prenda sobre la cama y decidió guardar el desorden que había hecho al ver las demás bragas, las guardo con cuidado y no tardo en cerrar la caja, colocándola después sobre la mesita de noche.
Tomo aquellas bragas y decidió colocárselas, en cuanto paso sus piernas y las fue deslizando hacia arriba sentía como poco a poco aquella prenda se iba pegando a su piel, rozándolo ligeramente, cuando por fin termino de colocárselas, sonrió, estaba satisfecho de como se le miraban, aquella falda falsa le hacía leves cosquillas a los costados de sus piernas, pero le gustaba. Se había mantenido tan concentrado en mirarse que ni siquiera noto cuando Jimin había salido por fin de aquel baño, revolvía sus cabellos semi húmedos mientras caminaba afuera, mantenía una toalla cubriéndole de la cintura para abajo y cuando miro a Yoongi se detuvo, no pudo evitar pasear su mirada por aquellas largas piernas esbeltas y bien formadas, sintiendo como su boca salivaba ante la blanquecina piel que aquel doncel le mostraba, sonrió ladino al ver que estaba usando una de las tantas bragas que le había comprado.
—Sabía que se verían excelentes en ti —la voz del hombre hizo a Yoongi crisparse ante la sorpresa, no esperaba escuchar su voz, o al menos no tan pronto, levanto la mirada encontrándose con aquellos ojos hambrientos que no dejaban de mirarlo con deseo—, ¿te gusto lo que compro tu señor, minino? —la voz de aquel hombre acariciaba todo su ser, y se sintió desfallecer al observar a ese hombre ir acercándose para acortar por completo la distancia entre ellos.
—S-sí —respondió Yoongi, mientras a duras penas y con las piernas temblorosas caminaba hacia atrás por cada dos pasos seguros que daba Jimin hacia él—, me gustan, señor.
—Es bueno saberlo —Jimin relamió sus labios mientras no dejaba de mirar el cuerpo ajeno—, apuesto a que tu culito esta siendo bien apretado bajo esa tela, ¿o me equivoco? —Yoongi pego su lengua en su paladar cuando sintió el borde de la cama chocar contra sus piernas, si decidía moverse, terminaría por caer al colchón y era seguro que aquel pelirrubio no dudaría en acorralarlo de inmediato.
—U-un poco... —respondió Yoongi, trago saliva para tratar de calmar un poco sus nervios, aquel hombre por fin dejo de avanzar pues había por fin rebasado el límite del espacio personal de Yoongi, el doncel bajaba la mirada encontrándose con aquel trabajado cuerpo del hombre, relamió el interior de sus labios sintiéndose pequeño ante el porte del hombre frente a él.
—¿Deseas que te ayude a quitarlas? —Yoongi retuvo un chillido al sentir las manos de aquel hombre aferrarse a sus costados, las manos de aquel hombre acariciaron su piel, rozando aquella tela de las bragas contra su piel y haciéndolo sentir su tacto en aquellas zonas que no podían ser cubiertas por las bragas de color blanco, el doncel suspiro bajo al sentir aquellas manos invadir su anatomía—. No sabes cuanto me excita verte con esto puesto, minino —murmuro por lo bajo Jimin, mientras colaba sus dedos por el resorte de aquellas bragas, jugando con el mientras poco a poco lo bajaba, el doncel se sintió temeroso al saber las intenciones de aquel hombre, pero no le detuvo, sentir aquellos dedos que jugaban a bajar sus bragas le estaba gustando—, ¿te gusta que te las quite?
—Mmmmh, sí —removió un poco sus piernas, sintiendo como aquella tela iba bajando poco a poco gracias a los movimientos de Jimin—, me gusta que usted me las quite, señor Park.
Aquellas manos dejaron sus caderas para ir acariciando poco a poco hacia atrás, el doncel suspiro al tener aquellas manos sobre sus glúteos, los dedos de aquel hombre se hundían ligeramente sobre sus glúteos.
—S-señor Park —suspiro gusto el doncel al sentir como aquel hombre bajaba la tela hasta por debajo de sus nalgas para después subir sus manos y apretar aquellos glúteos del doncel—, siga, p-por favor...
—Eres tan suave, mi doncel —murmuro Jimin por lo bajo, sonrió ladino al escuchar un suave suspiro salir de aquellos finos labios cuando dio un nuevo apretón a los glúteos del doncel—, tu cuerpo es tan exquisito —las puntas de sus dedos rozaron ligeramente la entrada del doncel—, ¿tan pronto ya estás mojado? —soltó una risa burlona—. Tu culito debe estar ansioso por una polla, ¿verdad? —dio un apretón haciendo a Yoongi soltar un gemido bajo.
—S-sí... —Yoongi relamió sus labios al sentir aquellos dedos prestar más atención a su entrada, podía sentir como su lubricante natural era esparcido alrededor por aquellos dedos que se disponían a repartirlo—, d-deseo su polla, señor Park... —suspiro gustoso.
—Sí eso es lo que quieres —el hombre dejo de tocar la entrada del doncel, llevo sus manos hacia la toalla que le cubría y se la quito, dejándola caer al suelo, se alejo un poco de Yoongi para disponerse a tomar asiento en la orilla de la cama, en cuanto lo hizo miro al doncel—, en mi regazo, siéntate y procura que mi pene entre en tu culito, minino.
El doncel dio un corto asentimiento, con cuidado y bajo la atenta mirada de Jimin se despojo por completo de aquellas bragas dejándolas tiradas junto a la toalla, el hombre pelirrubio mantenía una mano rodeando el glande de su hombría, masajeando la punta lentamente mientras miraba el cuerpo desnudo frente a él, relamió sus labios cuando el doncel se acerco a él. Yoongi no pudo evitar mirar aquel falo erecto que lo esperaba, mirando las venas que se marcaban en el mismo, sintiendo su boca salivar gustosa por aquella extensión, su lubricada entrada no podía esperar más por tener aquella polla dentro.
—Ven aquí, minino —dijo Jimin y el mencionado no tardo en caminar hacia él—, siéntate sobre mi polla, zorrita.
—Sí, señor —respondió el doncel antes de abrirse de piernas, subió una rodilla a la cama del costado derecho del hombre pelirrubio, hundiéndose un poco en el colchón, para evitar caer, llevo sus manos hacia los hombros fornidos de aquel pelirrubio, y se dispuso a elevar un poco su cuerpo para esta vez subir la otra pierna, quedando por fin sobre aquel hombre, abriendo las piernas.
—Muy bien —dijo Jimin mientras relamía sus labios, las manos de aquel hombre no tardaron en tomarlo por las caderas—, ahora baja... —Jimin jalo al doncel para invitarlo a bajar, Yoongi poco a poco fue bajando, siendo dirigido por Jimin quien lo guiaba exactamente hacia su polla erecta—, un poco más, zorrita.
—A-aaaah... —gimió bajo al sentir como aquel glande se permitía abrir paso entre sus piernas, robandole el aliento—, e-espere... —el doncel apretó los hombros del pelirrubio—, aammgh... e-es m-m-muy grande, s-s-señoooor...
—Tanto como te gusta —apretó las caderas de Yoongi—, joder, minino... estás muy caliente y húmedo —soltó un gruñido cuando logró meter gran parte de su pene dentro del doncel, la espalda de Yoongi se arqueo gustosa por aquella intromisión—, un poco más, minino, aún no entra toda...
—¡Ah! —su cuerpo tembló al sentir como aún aquella hombría se abría paso entre sus apretadas paredes anales—, señor... s-su polla es tan mmmmmhh, m-me encanta...
—Lo sé, zorrita —sonrió ladino y suspiro por lo bajo al sentir como por fin su falo había entrado por completo dentro del doncel, las paredes calientes lograban apretar por completo su extensión, no dudo en volver a tomar las caderas del doncel con firmeza—, vamos, zorrita... salta sobre mi polla.
—S-sí, mi señor.
El doncel no tardo en acatar las ordenes del hombre pelirrubio, con cuidado y sosteniéndose de los hombros de aquel hombre, elevo su cuerpo, sintiendo su piel erizarse cuando aquel falo abandono poco su apretado agujero, suspiro gustoso por la sensación cosquilleante en su vientre, y termino por bajar de nuevo, aplastando sus nalgas sobre el regazo de Jimin, sintiendo los testículos de aquel hombre tocándolo y de paso ensuciándolos con un poco de su lubricante natural.
—Eso es... —suspiro el hombre mientras apretaba las caderas del doncel—, sigue así, zorrita —Jimin suspiro gustoso mientras sentía como de nueva cuenta Yoongi repetía sus acciones.
Yoongi apenas y podía hacer que aquella hombría saliera casi por completo de su entrada, pero le estaba encantando la sensación de como aquel húmedo falo rozaba sus paredes una y otra vez, gemía bajito sintiendo el extasis invadir su cuerpo y haciendo que se estremeciera al sentir como aquella polla arremetía en aquel punto dulce que le provocaba espasmos por todo su cuerpo, entreabría sus labios mientras soltaba suspiro tras suspiro.
—Aaaah, aaaah, aaaaaah, s-señor Park aaaah —gimió mientras daba pequeños saltos un poco más rítmicos, sintiendo aquella polla deslizarse en su interior y saliendo del mismo con un ritmo más rápido.
—Mmmmm, zorrita —Jimin llevo sus manos a los glúteos de su amante, separándolos un poco más para permitir que su polla siguiera entrando más en aquel agujero—, tu culito es tan bueno... j-joder —mascullo por lo bajo, la sensación de las nalgas de Yoongi pegando a sus testículos por cada uno de esos saltos le fascinaba—, m-mierda, que buen culo tienes, zorrita...
—¡Señor Park! —gimió alto al sentir como su orgasmo azotaba su cuerpo, ligeros espasmos se esparcirán por su cuerpo mientras dejaba de saltar sobre esa polla erecta, su entrada se apretaba contra aquel falo mientras disminuía la velocidad—. Aaaaaaahhhh... aammm...
Jimin soltó una suave risa al ver como su doncel desfallecía por el placer.
—¿Tan pronto te corriste, zorrita? —la pregunta era con burla, Yoongi cerraba levemente sus ojos, sintiendo todavía como el placer lo invadía en su cuerpo—. Aún no he terminado...
El hombre pelirrubio tomo con fuerza las caderas de Yoongi y lo elevo para sacar su pene por completo, mientras que el doncel soltaba un jadeo corto al dejar de sentir aquella polla invadiéndolo, en un movimiento rápido, Jimin recostó al doncel sobre la cama, tomo sus rodillas y abrió sus piernas para posicionarse entre ellas, acerco el cuerpo del doncel hacia su hombría, sintiendo sobre la punta de su falo la entrada palpitante y necesitada de su doncel, sonrió ladino antes de comenzar a empujar su pene dentro del doncel.
—¡Aaaah, aaaah! —gimió alto Yoongi al volver a sentir aquel pene dentro suyo, mientras que Jimin relamía sus labios y miraba al doncel, quien cerraba sus ojos y entreabría aquellos húmedos labios suyos.
—Tu culito de zorra le encanta tragarse mi polla —el doncel gimió bajo al sentir como aquel hombre sacaba su hombría y se empujaba de nuevo con dureza hacia él, su cuerpo temblaba ligeramente, pues la sensación tan placentera de aquella polla saliendo y entrando mientras su entrada palpitaba con frenesí en toda esa extensión de carne le hacía sentir en el paraíso—, ¿te gusta, zorrita?
—¡Aammm! —Yoongi ahogo un jadeo al sentir de nuevo aquella polla golpear su punto dulce con fuerza—. S-sí, mi señor... aaaaah, m-me ¡gusta! —gimió alto al volver a sentir una nueva embestida.
—Mmmmmm —Jimin cerro sus ojos con fuerza disfrutando de cada una de las estocadas que le proporcionaba al doncel, le encantaba el sonido de 'pop' que se podía escuchar por cada estocada que le daba el lascivo chapoteo que se provocaba cuando su falo volvía a unirse por completo en aquel agujero tan húmedo de los jugos de Yoongi—, mmmm zorrita... más te vale no abrirle las piernas a nadie más...
—N-no ¡señor! —gimió, la leve capa de sudor cubría su frente, su respiración era errática, no pudo evitar que su lengua saliera ligeramente por sus labios, su boca salivaba en exceso, deleitándose por cada una de esas estocadas que lo estaban haciendo delirar de placer—, s-sólo aaaaaah... las a-abriré para u-u-usted...
—Eso espero, zorrita...
—¡Aaaaaaaaaah, mi señoooor! —sus piernas temblaron en cuanto el segundo orgasmo azoto su cuerpo, cerro sus ojos gustoso mientras sentía a su entrada apretar la hombría en su interior, y el como aquella oleada de placer lograba colarse hasta su alma.
El pelirrubio sonrió con sorna, dejo de penetrar al doncel y llevo una mano a sus cabellos rubios peinándolos hacia atrás.
—¿Qué pasa, zorrita? —los ojos del doncel lo miraron—. Estás tan excitado que no puedes aguantar tanto... —soltó una suave risa—, tu señor todavía no termina —Yoongi jadeo al sentir como aquella polla dejaba de invadir su interior—, ven aquí.
El doncel como pudo volvió a cerrar sus piernas, pegando sus muslos y sintiendo su lubricada entrada en el proceso, se removió levemente, mientras Jimin volvía a tomar asiento en la cama.
—Siéntate en mi regazo, pero esta vez dame la espalda, quiero tus manos detrás de tu espalda —las piernas de Yoongi apenas y podían colocarse perfectamente de pie.
No tardo en obedecer las ordenes dadas por aquel hombre, junto sus manos detrás de su espalda, sintiendo como Jimin las tomaba con fuerza para después disponerse a amarrarlas, Yoongi ni siquiera podía ver con que cosa las estaba amarrando, pero era suave, similar a la tela sedosa de un listón, después sintió las manos del hombre sobre sus caderas.
—Abre bien esas lindas piernas, zorrita —demando aquel hombre y Yoongi obedeció, Jimin sonrió ladino y tomo aquellas caderas con fuerza para después hacer que la entrada de Yoongi recibiera de nueva cuenta la extensión de su falo.
—¡Ah, aaah, aaaah! —los alaridos que salían por los labios del doncel eran musica para sus oídos.
—Gime más alto, zorrita —exigió Jimin mientras seguía tomando a Yoongi de las caderas para ayudarle a saltar de nuevo sobre su hombría, introduciéndola en aquel palpitante agujero que pedía seguir siendo llenado por una polla—, quiero que todos sepan lo bien que te estoy follando.
—¡S-señor Park! —gimió Yoongi sintiendo su cuerpo temblar cada vez que volvía a sentir como aquella polla se introducía de golpe en su interior—. ¡Aaaaa! S-señor... aaaaah —la sobre estimulación que le estaba proporcionando aquel hombre le estaba mareando del puro extasis.
de la comisura izquierda de sus labios salía un ligero hilo de saliva, relamía sus labios gustoso al sentir como aquella polla llenaba su interior, y se permitía seguir soltando jadeos y gemidos a más no poder, porque el placer y la estimulación que aquel pelirrubio le proporcionaba lo estaban haciendo delirar.
—Eres sólo mío... —Jimin sonrió ladino y cerro sus ojos con fuerza, la sensación de aquellas paredes apretando alrededor de su pene le encantaba—, mi zorrita, sólo mío...
—S-sólo suyoooo... aaaaaah, m-mi señor...
—Aprietas tan rico, zorrita... —relamió sus labios—, joder, sí...
—Aaaaaah, aaaaaah, J-jimiiin...
—Un poco más... —los jadeos y gemidos agudos de aquella dulce voz hacían que Jimin se sintiera en el cielo—, j-joder... tu cuerpo es un paraíso, zorrita...
—¡Jimiiin! —gimió en lo alto Yoongi al sentir como el placer lograba invadir por completo su cuerpo, un nuevo orgasmo había logrado invadir por completo su anatomía.
El pelirrubio volvió a enterrar su pene en la entrada del doncel, gruñendo por lo bajo y sintiendo por fin su preciado orgasmo invadir por completo su cuerpo, apreso las caderas del cuerpo ajeno mientras dejaba que su semen fuera liberado en lo más profundo de aquel doncel, la espalda de Yoongi se arqueo ligeramente al sentir como su interior era llenado por la esencia de aquel hombre que le había hecho delirar en placer.
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