-Así que...- Harry observo como James Corden, conductor del famoso programa The late late show, leía la tarjeta de preguntas que sostenía en sus manos y trato de sonreír.

Ya habían pasado cuatro semanas desde aquella mañana en que despertó, luego de una memorable borrachera, abrazado a Caprice. Su primera reacción había sido levantarse en completo silencio y huir lo más rápido posible de allí.

No tenía claro cómo fue que llegó al departamento de ella, pero si sabía lo que ocurrió aquella noche. Lo había vivido como si fuera un sueño, la beso y adoro como nunca, disfrutando de la última vez que tendría la oportunidad de hacerle el amor. Después se sintió como un idiota. 

-Harry – James miró al chico. – es sabido que hace poco debutó su nuevo single, Perfect, y tanto yo como tus fans estamos ansiosos por saber en quién se inspiraron Louis y tú para escribir la canción – rápidamente agregó – si es que hubo inspiración femenina de por medio, ¿ la hubo? –

-Bueno...- Harry se aclaró la garganta un tanto nervioso, anteriormente se había preparado para esta pregunta Luego de su corta y publica relación con Price estaba claro que todos preguntarían y relacionarían la canción con ella. – está claro que la canción está inspirada en experiencias personales...–

-Sí, es para una chica – interrumpió Louis, ganándose una mirada de odio por parte de su amigo. Este alzó los hombros con inocencia.

-Oh, ya entiendo – el conductor sonrió. – Podemos inferir que aquella chica es un caprichito – meneó las cejas, dejando claro el doble sentido de sus palabras.

-Sinceramente, no me gustaría hablar sobre el tema – cortó Harry, perdiendo todo el, ya de por si poco, buen humor.

James suspiro y prosiguió con la entrevista, preguntando a sus invitados sobre su canción, futuros planes y proyectos.

-Ahora lo dejare con One Direction y su más reciente tema – poniéndose de pie, los presento. -¡Perfect! –

Los cuatro sonrieron ante los efusivos aplausos y gritos de sus adoradas fans, mientras se dirigían al pequeño escenario donde cantarían.

Suspirando, Harry intentó reprimir los recuerdos que se agolpaban en su cabeza.

Cuando la melodía comenzó, se convenció de poner todos sus sentimientos en la interpretación de su canción, aquello era el último regalo para ella.

Louis comenzó:

I might never be your knight in shining armor
I might never be the one you take home to mother
and I might never be the one who brings you flowers
But I can be the one, be the one tonight

When I first saw you from across the room
I could tell that you were curious, oh yeah
Girl, I hope you're sure
what you're looking for
because I'm not good at making promises.

But if you like causing trouble up in hotel rooms
And if you like having secret little rendezvous
If you like to do the things you know that we shouldn't do
Baby, I'm perfect
Baby, I'm perfect for you.
And if you like midnight driving with the windows down
And if you like going places we can't even pronounce
If you like to do whatever you've been dreaming about.
Baby, you're perfect
Baby, you're perfect
So let's start right now.

I might never be the hand you put your heart in
or the arms that hold you any time you want them
but that don't mean that we can't live here in the moment
because I can be the one you love from time to time.

When I first saw you from across the room
I could tell that you were curious, oh yeah
Girl, I hope you're sure
what you're looking for
because I'm not good at making promises.

But if you like causing trouble up in hotel rooms
And if you like having secret little rendezvous
If you like to do the things you know that we shouldn't do
Baby, I'm perfect
Baby, I'm perfect for you
And if you like midnight driving with the windows down
And if you like going places we can't even pronounce
If you like to do whatever you've been dreaming about
Baby, you're perfect
Baby, you're perfect
So let's start right now.

And if you like cameras flashing
Every time we go out
and if you're looking for someone
to write your breakup songs about
Baby, I'm perfect
Baby, we're perfect.

But if you like causing trouble up in hotel rooms
And if you like having secret little rendezvous
If you like to do the things you know that we shouldn't do
Baby, I'm perfect
Baby, I'm perfect for you
And if you like midnight driving with the windows down
And if you like going places we can't even pronounce
If you like to do whatever you've been dreaming about
Baby, you're perfect
Baby, you're perfect
So let's start right now.

(...)

Una solitaria lágrima se deslizó por la mejilla de Price mientras, acurrucada en un sofá, veía y escuchaba la presentación de One Direction en aquel famoso programa.

Él había escrito una canción con todos los momentos que vivieron juntos. La canción era simplemente perfecta y la amaba.

Hace algunas semanas y luego de la visita de Harry ebrio a su departamento, había decidido que no podía seguir despreciándose por lo sucedido. Aquello ya estaba hecho y no podía dar marcha atrás, por lo cual decidió que lo mejor era alejarse de Londres y dejar de comportarse como una mendiga de amor.

Amaba a Harry más que a nada, pero no iba a permitir que él destruyera lo poco que aún le quedaba.

Ahora se encontraba en los Ángeles, visitando a su hermano menor, Benedict. Su nombre verdadero era Benedicto Carys, también italiano, pero él lo detestaba y por eso se había autonombrado como Benedict.

Él al saber lo hecho por su madre, inmediatamente la había recibido en su departamento. Y hasta ahora, Benedict era lo único que tenía.

-Vale, Capri – murmuró él. Estaba sentado junto a ella. Beso su frente y quitó las lágrimas de sus mejillas. – No llores, veras que todo mejora con el tiempo – la abrazo. Con él siempre había tenido un lazo cercano y ahora agradecía tener alguien en quien poder apoyarse. – siempre puedes pedir un traslado en la Universidad y venirte conmigo –

-No creo que huir sea la solución – a pesar de todo Price sonrió, sopesando la idea.

Pensándolo bien, aquello no era una mala opción.

-Puede que no, pero a veces es lo único con lo que puedes contar –

(...)

-¡Hey Harry, te ha llegado un paquete! – grito Niall, mientras le lanzaba el paquete. Harry alcanzó a cogerlo. Sus compañeros se sentaron junto a él en el sofá y lo observaron expectantes.

-¿Qué es? – pregunto, observando con el ceño fruncido el paquete de color azul que sostenía en sus manos.

-No lo sé, genio – Niall rodó los ojos. – Está sellado así que cuando intente no pude abrirlo -

-¡Ábrelo! – exclamó luego, al ver que su amigo seguía mirando la caja sin hacer nada.

Harry suspiro y prosiguió a abrir el envoltorio.

Era un pequeño baúl de color café y dentro de él había pequeños corazones rojos y...de papel. Al oír la exclamación y risas de sus amigos, decidió que necesitaba un poco de privacidad.

Poniéndose de pie, caminó hasta su habitación. Enseguida oyó las protestas de los tres chicos.

Ya en su habitación, se sentó sobre su cama y comenzó leer lo que decía en los corazones. Una sonrisa involuntaria se formó en su rostro al ver las pequeñas frases escritas en los pequeños trozos de papel.

Hoy conocí a un chico guapo. Se llama Harry.

Tengo un pequeño problema. Me gusta.

Lo amo.

Se arruino.

Su sonrisa decayó al leer la última palabra. Al parecer Price había estado escribiendo una frase o palabra por cada día que pasaban juntos.

Al llegar al fondo del baúl encontró un tipo de origami con forma de corazón. Luego de abrirlo, leyó.

'Querido Harry:

Bueno, no queda mucho que decir o explicar. Solo quiero que sepas que nunca quise herirte, realmente eres alguien importante para mí.

Como ya pudiste notar, guarde un corazón de papel por cada momento que pasamos juntos, por cada o, cada sonrisa.

Tú me enseñaste que el amor es algo más que caminar tomados de la mano y por sobre todo me enseñaste que hay veces en que vivir el momento no es la mejor opción, hay veces en que atesorar los recuerdo es la única forma de encontrar un poco de felicidad.

Adiós, espero seas feliz. Lo mereces más que nadie en este mundo.

Te amo.

Siempre tuya, Caprice'

Luego de leer aquello y llevando el corazón en su mano, Harry se apresuró a caminar hacia el ascensor. Debía hablar con Price. Le daría la posibilidad de explicarse correctamente y, aunque puede que solo fueran ilusiones, trataría de arreglar su embrollo.

Porque la amaba y necesitaba.

-Y este... ¿A dónde va? – Pregunto Louis mirando a los chicos con el ceño fruncido. Harry había pasado corriendo por su lado y se había metido en el ascensor.

Los tres encogieron los hombros, ya teniendo una idea de adonde se dirigía.

(...)

Harry apresuró el paso mientras se dirigía al departamento de Price. Cada vez se sentía más y más ansioso por volver a verla.

Se detuvo abruptamente al llegar a su destino y ver a un chico de cabello castaño claro salir con una caja del departamento de ella.

-Disculpa – se acercó al chico, notando que se le había conocido – Price ¿está en casa? –

-Eh, no – el chico dejó la caja en el suelo y le tendió la mano – mi hermana se fue a pasar un tiempo a Los Ángeles – explico – por cierto, soy Benedict. Y ¿tú eres? –

-Harry Styles – este aceptó su mano, presentándose. No podía creer que Price estuviera tan lejos. Maldición, justo cuando al fin estaba preparado para hablar con ella.

-Ah, así que tú eres el tipo que hizo llorar a mi Capri – Benedict sonrió con sorna. El chico frente a él se veía igual o peor que su hermana. – probablemente debería golpearte, pero nah...- hizo un gesto de descarte.

-¿Cuándo volverá? – pregunto Harry, ignorando la cháchara de Carys. Su rostro se había tornado melancólico.

-Ah, pues no creo que lo haga – el chico encogió los hombros y con ágil movimiento tomo la caja de suelo. – Entra, tengo una pequeña e interesante historia que contarte –

Luego de esto ambos ingresaron al departamento de Price.

(...)

Price corrió hacia su habitación provisoria, lugar donde su celular estaba sonando. En la pantalla brillaba el nombre de su hermano.

-Benedict – murmuró en cuanto contesto – ya me estaba preguntando cuándo volverías, ayer vivo una chica a preguntar por ti ¿es tu novia? – sonrió al recordar a la chica. Parecía tímida, pero era bastante hermosa, de cabello castaño claro y ojos verdes.

-No – desde la otra línea se oyó un suspiro –...no soy Benedict – al oír aquella conocida y ronca voz, Price contuvo el aliento.

-¿Ha-harry? – pregunto, atónita y preguntándose que hacía él con el móvil de su hermano.

-Eh, si – el chico volvió a suspirar. – me encontré con tu hermano cuando fui a buscarte a tu departamento y...- explicó. – Price, necesito hablar contigo – su voz se tornó un pelín más ronca.

Ella sintió como sus ojos se aguaban, como ocurría siempre que pensaba en él y su ruptura.

-Di-dime – su voz se tornó titubeante.

-Preferiría hacerlo en persona – murmuró Harry, sonando aún más titubeante que ella.

-De momento no estoy en Londres – Price suspiro, recobrando el tono seguro en su voz. – Lo mejor sería que me dijeras que necesitas por este medio – un encuentro con él sería nefasto. Probablemente, y como las dos veces anteriores, se lanzaría de rodillas a rogarle que la perdonara.

-Vale – él sonó derrotado – primero que nada quiero decirte que ya recibí tu regalo y que con el me di cuenta de algunas cosas –

-Espera – Price lo interrumpió - ¿Qué regalo? –

-El baúl con corazones de papel – otro suspiro - ¿no lo enviaste tú? –

-No – gruñó ella. Jamás habría querido que aquel baúl terminará en manos de Harry. Aquella era una afición estúpida, guardar pequeños corazones con frases escritas no era algo muy normal. Pero si era humillante. Y más si había leído la carta que escribió con el único objetivo de aligerar la presión en su pecho. – seguramente fue Benedict, lo golpeare cuando vuelva a casa – y lo disfrutaría.

-Bueno, lo importante es que gracias a aquello me di cuenta de algo muy importante – Harry sonrió involuntariamente al oír las amenazas dirigidas al chico que estaba sentado junto a él.

-¿Y qué es? –

-Me di cuenta que fue un error no dejar que me explicaras lo sucedido – su ánimo volvió a decaer – no debí haberte insultado –

-no creo que hubiera podido explicarme – ella se aclaró la garganta, tratando de contener las lágrimas. – Harry, no es necesario que hagas esto. Yo no volveré a acercarme y todo volverá...-

-Se lo de tu madre – él la interrumpió, evitando que siguiera con aquella absurda cháchara.- sé que fue tu madre quien filtró aquella noticia, Price –

-¿Quién? – preguntó ella, aireada – ah, claro...Benedict – lo mataría.

-Si – Harry inhalo y exhalo aire. – ella no merece tenerte como hija. Tú eres demasiado buena... –

-Harry...-

-No, déjame continuar – murmuró este con voz ronca – Eres una excelente persona, segura de sí misma y aventurera. Me encanta la forma en que sonríes cuando alguna idea loca cruza tu mente. Adoro caminar contigo por Londres, conociendo lugares que nunca en mi vida imágene conocer, que te guste las citas semi secretas y conducir con los vidrios abajo, incluso cuando hace frío – pasó saliva – tú me enseñaste que el amor es algo más que caminar tomados de la mano – repitió la frase escrita por ella – me enseñaste a disfrutar del momento y por sobre todo, contigo aprendí a amar – de repente su voz se tornó pastosa. – Te amo, Caprice Carys y me gustaría pedirte otra oportunidad –

-Harry – Price sollozo en silencio. Aquellas palabras habían sido más de lo que podía soportar sin soltar una lagrima – yo también te amo y debería ser yo quien te estuviera pidiendo esa oportunidad, fue por mi...-

-Eso ya no importa – Harry se apresuró a interrumpirle. – Mi corazón te pertenece y haría falta más que eso para...–

El sonido del timbre resonó en la estancia. Rápidamente y secándose las lágrimas, Price fue a abrir la puerta.

-Harry están tocando, espera...- murmuró al teléfono. Cuando abrió la puerta no hizo otra cosa más soltar el celular y lanzarse a los brazos del chico al que amaba.

Se besaron con ansiedad, lamentando haber pasado tanto tiempo alejado el uno del otro. El futuro aún era incierto, pero Price sabía que después de esto nada podría separarla de Harry. Ni nadie.

-Te dije que no dejaría que escaparas de mi...-

-xx-

16-06-2016

Fiiiiiiin.

Espero les haya gustado y gracias a quienes me apoyaron siempre. 

All the love para ustedes. 

pd: recuerden que los posible errores serán editados luego. 

Bye!