-Debemos entrenar, no sabemos cuántos enemigos más se presenten -los chicos asintieron -pero ¿qué podemos aprender en unos cuantos días?, eso es difícil de creer -el peliplata volteó los ojos -demonios Sakura, sólo entrenaremos, no te pongas terca -el equipo salió siguiendo al sensei -¿quién de ustedes sabe escalar los árboles sin manos? -todos excepto Sakura asintieron indicando que ya lo dominaban -eso es imposible, no mientan -el sensei negó con fastidio -espera aquí Sakura -la chica asintió molesta -¿quién controla caminar sobre el agua? -los tres asintieron, Sakura se sentía inferior, su molestia crecía -bien, Sasuke comienza a trabajar con tu naturaleza de chakra, consigue piedras y usa raiton para partirlas -el azabache sonrió arrogante, asintió -Sai, comienza a trabajar en las bestias de tinta, los ratones y el ave son buenas, pero debes ir más allá -el azabache asintió sacando su equipo de fuinjutsu -¿Naruto? -el rubio negó -tengo mi propio entrenamiento -el peliplata sonrió -puedo saber ¿en qué trabajas? -el rubio mordió su mejilla -en el rasengan, ya manejo la rotación, comenzaré con la fuerza, con su permiso -Kakashi abrió sus ojos demasiado, asintió -¿ocupas ayuda? -el pequeño negó -Itachi dice que debo aprender por mí mismo, gracias -el sensei lo veía retirarse cerca de la casa, el rubio sacó de un sello una bolsa con globos, comenzó a entrenar. Sakura lo veía con coraje -¿lo dejará jugar con globos sensei? -Kakashi respiró con cansancio -está entrenando Sakura, muévete, estás demasiado atrás del resto -la chica abrió sus ojos ofendida.

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-¿Así que el puente? -el rubio se sonrojó, asintió débilmente. Itachi sonrió levemente, para el rubio eso era la gloria, apretó sus labios reprimiendo una sonrisa -pequeño Naru-chan, te has hecho fuerte en muy poco tiempo, tramposo, te atrapé el otro día, los clones son increíbles, ¿por qué no tengo tus reservas de chakra? -el Uzumaki sonrió un poco -tch sigo insistiendo, ese puente también debió llevar mi nombre -los Uchihas sonreían, Itachi apretó la mano de su pareja suavemente bajo la mesa acariciandola con su pulgar -¿tuvieron problemas? -Naruto negó contento con ese gesto -Zabuza Momochi era el problema más complejo, del resto nos encargamos con facilidad -Sasuke asintió -aunque Sakura te estuvo molestando la mitad del viaje dobe -

El rubio lo vio con molestia, el azabache levantó los hombros, Itachi apretó el ceñom Mikoto y Shisui también estaban molestos, maldita mocosa malcriada pensaban -Naruto, ¿me acompañas a hacer las compras?, hay una feria de mercaderes de paso hoy -el rubio sonrió mostrando sus dientes sonrojando a sus cuñados -vamos, no tardaremos, Shisui, Sasuke les toca recoger y limpiar la cocina, volvemos por la tarde -Itachi se puso serio, su mirada se afiló cuando salió su madre y su prometido, su hermano y primo tragaron pesado al verlo, un escalofrío recorrió sus cuerpos, sabían porqué la mirada, su líder se levantó, salió del lugar -se… se enojó -Sasuke asintió sacando el aire que retenía.

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Naruto seguía a su suegra mientras se paraba en los puestos, cargaba bolsas con fruta y verdura -¿así que aquí estás? -el rubio levantó el rostro, apretando el ceño, siguió caminando -te estoy hablando zorra resbalosa, quieres robarme a Sasuke-kun -el Uzumaki mordió su mejilla -yo ya tengo pareja, déjame en paz loca -la chica lo vio darse la vuelta, tomó su brazo y lo giró, estaba por cachetear al rubio cuando una mano sostuvo con fuerza la suya -¿quién te crees que eres para hablarle así a Naruto mocosa? -Sakura apretó el ceño, se zafó con fuerza de su mano -usted no se meta señora -Mikoto apretó el ceño con molestia -me meto porque estás hablando de mi hijo Sasuke, mocosa -la chica abrió sus ojos demasiado, negó con miedo y vergüenza -lo lo lo lamento se… señora, es que Naruto-

La señora la vio de arriba a abajo con seriedad haciéndola sentir expuesta e inferior, los civiles murmuraban sobre los gritos y violencia de la chica -es que nada, eres una mocosa vulgar, no te quiero cerca de mi hijo, tú nunca serás su pareja y de eso me encargo yo -lágrimas salieron de los ojos de la chica al sentirse avergonzada y rechazada por la madre del amor de su vida -Naru, vamos a casa, Itachi será feliz si le haces unos dulces -el rubio asintió, caminó tras su suegra, esa fastidiosa lo tenía cansado.