La semana pasó, era fin de semana, mando un clon a ayudar en casa, salió con sus clones al jardín, se sentó, se colocó unas nuevas mancuernas, ocho kilos cada una, comenzó a correr sin parar por los bosques detrás del jardín, llevaba buen avance, su clon que entrenaba su habilidad sensorial avanzaba con velocidad, ya podía sentir el chakra de la gente cercana a unos cuantos metros, eso era mucho para él, sus cadenas iban por buen camino, los hilos de chakra aumentaron su volumen, tenían el grosor de una cuerda, había terminado las notas de Sasuke y las regresó a su lugar en la biblioteca, había mandado dos clones a la biblioteca de la aldea, hoy aumentó a un tercero, los tres usaban henge, había cinco en control de chakra, dos en árboles y tres en el lago del clan, nadie iba al lugar, aumentó los clones de las katas, cada uno manejaba posturas distintas. Los clones de bukijutsu habían aumentado la distancia de sus lanzamientos y puntería, había dejado a diez clones más, comenzaron con control de su naturaleza de chakra usando hojas de árbol, su madre tenía viento y al parecer él también, se enfocaría en ello, sus clones de fuinjutsu ya llevaban dos niveles, aumentó uno más, dos se dedicaban a estudiar y un tercero a la velocidad de los kanjis, en el bosque subía un risco bastante empinado con el peso extra una y otra vez sin parar de correr, bajaba y subía con velocidad, cuando superaba sus límites, se ponía nuevos, su padre podía despertar y por lo menos que se dé cuenta que no estaba tan jodido su nivel, a medio día regresó, completó sus abdominales y lagartijas. Al final del día comenzó a golpear el árbol de entrenamiento usando la kata de Guy, una y otra vez lo golpeaba con sus manos y pies.

Itachi lo observaba desde su oficina, a diario podía ver sus clones entrenar y estudiar, a él mismo esforzarse bastante, le daba curiosidad el ¿por qué lo hacía?, ¿qué lo motivaba?. Naruto original se dejó caer al suelo, sacó una botella con agua, comenzó a tomarla recuperando el aliento, podía sentir que lo observaba el Uchiha, pero a su forma de ver, su cerebro le jugaba una mala pasada queriendo ilusionarlo, se giró hacia la oficina observando que efectivamente Itachi tenía su vista en los papeles, podía verlo por horas, no sé cansaba de observar sus facciones, colocó sus manos bajo su rostro acomodándose un poco, a veces fantaseaba con escucharlo decir que lo amaba o que le gustaba, esas eran estupideces, nuevamente su mente lo saboteaba, sacudió su cerebro, continuó con su entrenamiento.

Por la noche estaba por salir de su cuarto después de tomar una ducha cuando abrió la puerta, vio a Sasuke frente a él, de inmediato cerró tras él su puerta, quiso avanzar, pero el Uchiha no lo dejó -¿a dónde vas? -el rubio mordió sus labios con algo de miedo -Mi... Mikoto-san me pidió que la ayude -Sasuke sonrió por esa reacción tímida, recordaba que antes era más rebelde, le gustaba verlo sometido, tímido, se acercó invadiendo su espacio. Naruto puso sus manos para mantenerlo alejado, el Uchiha tomó su muñeca -¿te gusta tocar? -el pequeño de inmediato arrancó su mano -por favor, no te acerques tanto -Sasuke sonrió arrogante -¿acaso te pongo nervioso zorrito? -el rubio trató de ignorarlo y avanzar, pero la mano del azabache volvió a sostenerlo, esta vez el pequeño quitó rápidamente su mano con fuerza, corrió hacia la cocina -tch -Shisui con las manos cruzadas se puso a su lado -no deberías molestarlo, Itachi se enojará si te ve-

Sasuke vio con molestia a su primo -a Itachi no le importa en lo más mínimo, sólo lo hizo su prometido para no comprometer a nadie más, es un hombre y nadie más se iba a proponer, además, sigue siendo kyubi, fue por lástima y porque no tenía otra opción -Shisui lo vio mal, Naruto estaba por regresar a su habitación por algo que olvidó, los escuchó a ambos, mordió sus labios queriendo detener el puchero, le había dolido, era un idiota, ¿por qué demonios pensó que alguien como Itachi realmente se fijaría en él? pasó entre ambos sin verlos a los ojos, simplemente mantuvo su vista baja. Shisui levantó su mano, le dió un sape a su cretino primo -idiota-

Esa noche envió a un clon en su lugar, el cual actuaba como si no hubiera sucedido nada, sólo se dirigía a Mikoto y Shisui como diario, él no estaba en condiciones de ver a Itachi, ni a su suegra, estaba sobre su cama acostado viendo a la nada con su mirada vacía, mirada que en esos días había recuperado un poco de brillo y que volvió a perder ese día, tal vez debería pedir la ayuda del papá de Shikamaru, tenía que pensar bien las cosas, tal vez su padre despertara antes, tenía la ilusión de poder ser salvado por él, tal vez pueda encontrar a alguien que realmente lo ame, su mirada se hizo gris al recordar que estaba sucio, era verdad, con los días había hecho el recuerdo traumático a un lado y ahora volvía junto a las miles de inseguridades que había obtenido con los años.