Taehyung regresó de su ajetreada jornada de trabajo y suspiró mientras se quitaba los zapatos para ingresar a su departamento.

Su teléfono estaba muerto, así que se dirigió a la cocina y lo conectó para que cargue, mientras se preparaba una torta de huevo.

Estaba por su cuarto bocado cuando su teléfono sonó, anunciando una llamada del omega, el tono de llamada para cuando era Jungkook, era diferente, así que sabía que era el omega incluso antes de que viera la pantalla de su celular.

—Hola lindo, ¿ya vas a dormir? —Jungkook desde que se hicieron novios, hace tres meses, le ha hablado para darle las buenas noches. —¿Jungkook? —se preocupó al no escuchar la singular respuesta del omega.

—Tae —el sollozo del omega lo preocupó aún más. —¿Qué debo hacer? —el alfa se levantó bruscamente de su asiento. —Yeonjun está muy enfermo. —comenzó a llorar el pelinegro.

—¿Cómo que muy enfermo?, ¿qué tiene? —la voz angustiada del mayor llegó hasta el omega.

—No sé, le duele mucho la barriga y no para de llorar, intenté cargarlo, pero incluso le duelen los brazos... ¿Puedes venir? —el alfa estaba ya buscando la llave de su auto para salir e ir con su omega y cachorro.

—Claro, llegaré ahí en unos minutos. —colgó y fue a ponerse nuevamente sus zapatos. —¿Hoseok? —habló después de que el beta respondiera a su llamada. —¿Sigues en el hospital? —hablaba al tiempo que salía de su departamento y cerraba para dirigirse al elevador.

—Sí, estoy todavía aquí, hoy doblo turno. ¿Por qué? —el beta miraba unos documentos.

—Yeonjun está enfermo, lo voy a buscar ahora y lo llevaré, ten listo un cuarto para él. —al fin llegó al estacionamiento y corrió hacia su auto.

—¿Está muy mal? —preguntó el beta. Taehyung presionó un botón en su llavero y quitó el seguro de la puerta.

—No sé, pero parece que sí, Jungkook me dijo que ni siquiera podía levantarlo porque le dolía todo. —el beta se preocupó al escuchar aquello.

—Está bien, cuando llegues ve directo a urgencias. —ambos se despidieron y la llamada terminó.

Taehyung se subió al auto, lo encendió y condujo hasta llegar a la casa de los Jeon.

Llegó y tocó el timbre, Jungkook inmediatamente le abrió la puerta y el aroma preocupado del omega, afectaba al lobo de Taehyung.

—¿Dónde está? —Jungkook apuntó hacia la habitación del menor y Taehyung corrió a ella. Entró y se encontró al cachorro hecho bolita y llorando, mientras sostenía su pancita. —¿Qué tienes, mi vida? —susurró al llegar cerca del cachorro.

—Intenté levantarlo, pero lloró mucho, me dijo que le dolía donde sea que lo tocase. —el alfa suspiró.

—Yeyu —el cachorro sacó su carita y miró al alfa. —... Intentaré abrazarte, si te duele me dices, ¿sí? —el menor asintió. —Aquí vamos. —Taehyung metió sus manos debajo del diminuto cuerpo y lo sostuvo.

—Lele, Lele, Lele. —se quejaba entre sollozos, Jungkook se puso a llorar cuando vio el sufrimiento de su pequeño.

—Tranquilo cachorro, papá está aquí. —el alfa liberó sus feromonas, eso hizo que el infante sintiera menos dolor. —Vamos, amor, abre la puerta, lo llevaremos al hospital. Hobi ya está esperándonos. —el omega asintió e hizo lo solicitado por el mayor.

Taehyung tenía cargado a Yeonjun con mucho cuidado y no dejaba de soltar feromonas para hacer el dolor del pequeño más soportable.

—Súbete atrás, yo conduciré. —declaró el omega y Taehyung asintió.

Jungkook tomó las llaves del bolsillo de Taehyung y abrió la puerta trasera para que el alfa pudiera entrar con el cachorro entre sus brazos.

—Conduce con cuidado, llora con el mínimo movimiento. —el omega entendió y cerró la puerta para después ir hacia la del piloto.

—Vamos. —suspiró antes de encender el auto y ponerse en marcha.

No tardó demasiado para llegar al hospital, apenas llegaron, fueron recibidos por el beta pelinegro. Hoseok vio la cara de preocupación de ambos padres y solo les indicó a dónde debían llevar al cachorro.

Ahora, estaban viendo cómo el doctor Jung revisaba el corazón del pequeño, su estómago y también su glándula del olor. Al poco tiempo llegó una enfermera que le puso una inyección.

—¿Y qué tiene mi cachorro? —preguntó Jungkook una vez que Hoseok se volvió a poner su estetoscopio en el cuello. La enfermera ya se había retirado, puesto que su trabajo era simplemente inyectar al menor.

—No es nada grave, es solo que se está presentando. —Jungkook se sorprendió por eso.

—¿No la presentación es a los 9?—cuestionó, al ser esa, la edad en la que él se presentó como omega.

—No hay una edad definida, es verdad que comúnmente la presentación es a los 9, pero he tenido pacientes que se presentan antes o incluso a los 29 años. —informó el beta, Jungkook se limitó a asentir. —Es común que los alfas se presenten a los 5, de hecho, Taehyung se presentó a esa edad. —miró al alfa mencionado.

—Cierto, no lo pensé, estaba tan preocupado que únicamente quería traerlo. —la mente de Taehyung estaba inmersa en preocupación, así que no había cabida para razonar.

—Es eso, su cuerpo sufre muchos cambios, sus huesos se hacen más gruesos y fuertes, por eso todo el cuerpo le duele. Es normal, le inyectamos inhibidores especiales para calmar su dolor. —Jungkook se acercó y acarició los cabellos de su hijo, que dormía tranquilo. Sintiendo ya su corazón en calma. —Solo se presentó, su primer celo podría llegar en unos diez años más. —la edad promedio del primer celo, es a los quince años, en alfas, en omegas suele llegarles a los 19 mayormente, pero igual, no es algo seguro, ya que a muchos les llega antes o después. —Yeonjun ahora es un alfa. —el omega sonrió al escuchar eso y miró con cariño a su cachorro.

—Mi alfita... —seguía con las caricias en sus cabellos y mejillas. —Gracias por todo Hobi. —miró al hombre de bata blanca, estaba realmente agradecido con él.

—Eres ya un amigo para mí, Kookie. —ambos hablándose con sus apodos. Hace ya un par de meses que el beta le pidió a Jungkook llamarlo Hobi y no Hoseok. —Yeonjun es mi sobrino y además, es mi trabajo velar por la salud de los demás. —sonrió tan hermosamente como solo él sabía sonreír. —Los dejo, tengo que ir a escribir el informe. —ambos asintieron y el beta salió para ir a su oficina.

—¿Puedes quedarte un rato con Yeonjun? —el alfa lo miró con duda. —Se me olvidó preguntarle a Hobi sobre el alta —Taehyung asintió. —, voy y vuelvo, si pasa algo me avisas.

—Ve, yo cuido de nuestro cachorro. —el omega asintió y se fue, no sin antes besar los labios de su alfa en forma de agradecimiento. —Ah, Kim Taehyung, este omega te capturó demasiado bien. —admitió al sentir cómo todo de él se derretía por el pico que los dulces labios del omega dejaron sobre los suyos.

Jungkook llegó a la oficina del beta y tocó la puerta, Hoseok le permitió entrar al saber que se trataba de su preciado amigo.

—¿Paso algo con Yeyu? —El omega negó. —¿Es algo sobre ti? —volvió a negar. —¿Qué pasa? Te escucho. —con la mano invitó a que se sentara en la silla frente a su escritorio.

—Hobi, no quiero que pienses que me aprovecho, pero —se sentó y miró al beta fijamente. —, al ser mi hijo Yeonjun... ¿Entra en el programa? —el beta no entendía de qué estaba hablando.

—¿Qué programa, Kookie? —cuestión realmente confundido.

—Sé que es exclusivo, pero ya que tú me inscribiste, supongo que puedo hablar de ello contigo. —reflexionó, el beta seguía perdido en el hilo de la conversación.

—A ver, no entiendo de qué estás hablando. Explícame, por favor, ¿qué programa?

—El día que llegue aquí, cuando me dio fiebre y Taehyung me trajo, ¿recuerdas? —el beta asintió, eso sí lo recuerda. —Bueno, Taehyung me dijo que me inscribiste a un programa para que no tenga que pagar nada, todo era gratuito y me dijo que era exclusivo, pero que como tú lo conocías me inscribiste. Yo quiero saber, si Yeonjun entra en ese programa por ser mi hijo... no es que no quiera pagarte, per-

—Espera, ¿Taehyung te dijo todo eso? —el omega asintió. —Ay, Kookie. —se rio por lo bajo al entender qué estaba pasando. —Taehyung te mintió.

—¿Qué? —El rostro del omega dejaba en claro que se había creído todo lo dicho por el alfa. —¿Cómo que me mintió?

—Ese programa no existe, si así fuera, iría a la quiebra por dar los servicios gratuitamente. —sonrió al ver el rostro confundido de su amigo. —Taehyung fue quien pagó toda tu cuenta, incluyendo los medicamentos y vitaminas. —la boca de Jungkook estaba abierta y su rostro tenía en pausa la expresión de asombro.

—¿Él pagó todo? —preguntó para confirmar que había escuchado bien.

—Sí, seguramente no quería que supieras, por eso inventó lo del programa. No te enfades con él, sabes que tiene un complejo de villano. —el omega no sabía cómo sentirse.

¿Enojado?

No, no lo estaba. Sentía muchas cosas, pero ninguna era enojo, estaba asombrado, se sentía tonto, ingenuo y aún más enamorado.

El alfa era un completo sol en su vida.

—No puedo creer que no me haya dicho ni siquiera ahora que somos novios. —confesó. —No le digas que me dijiste esto, veré hasta dónde lleva su mentira. —Hoseok asintió.

—Descuida, no le diré nada. —el beta encontró la forma de vengarse del alfa por todas las veces que lo acusó con Jackson.

—Por cierto, ¿cuándo darás el alta para Yeonjun? —el doctor miró el expediente y luego al omega.

—En dos días podrá volver, lo mantendremos bajo observación y luego de asegurar que todo está bien, podrá volver a casa.

Jungkook asintió, luego se despidió para regresar a la habitación donde se encontraba su alfa mentiroso y su cachorro enfermo.

Ya dos días desde que Yeonjun fue ingresado al hospital, eso significaba que hoy sería dado de alta. Jungkook seguía sin decirle a Taehyung que sabía sobre la gran mentira que le dijo.

—¿Crees que acepten el programa? —preguntó, tanteando terreno.

—¿Mmm? —lo miró confundido, mientras le podía un suéter rosa claro al pequeño Yeonjun, que se dejaba vestir por su papá.

—Yeonjun es mi cachorro, así que tal vez Hobi permita que entre en el programa para que todo sea gratuito. —Taehyung terminó de ponerle la prenda al cachorro y luego miró avergonzado al omega.

—¿Lo sabes? —cuestionó acompañado de una sonrisa nerviosa y apenada.

—Lo sé. —respondió serio.

—No es que no te haya querido decir, solo no le vi la importancia de hacerlo. —el omega cruzó sus brazos. —¿Estás enojado? —Jungkook movió la cabeza, respondiendo que sí, pero casi se ablanda al ver el puchero del alfa.

—No vuelvas a mentirme, no me gustan las mentiras. Si tienes algún otro secreto, es mejor que lo digas ahora o me enojaré si me entero después. —amenazó y el alfa pensó en si tenía algo más por confesar.

—No, bueno, sí tengo un secreto más —bajó a Yeonjun de la cama y luego caminó hasta quedar frente al omega. —, mi diseño más popular, ¿Sabes a quién le debo todo eso? —el menor negó. —A ti y a Yeonjun. —Jungkook frunció el ceño, no entendía cómo él pudo ser la causa del éxito para el alfa.

—¿Yeyu y yo? —Taehyung asintió. —¿Cómo si ni te conocía? —el alfa sonrió y se acercó más y más a Jungkook.

—Ese día que Yeonjun se perdió en el museo, tú me inspiraste a hacer un diseño para padre e hijo. —la sorpresa del omega era visible en sus expresiones. —Este secreto solo lo sabe Namjoon, Tú y yo. —rozó suavemente su nariz con la del peligro. Jungkook no pudo evitar cerrar los ojos por la cercanía del mayor. —Guarda ese secreto por mí. —sonrió justo cerca de su rostro y Jungkook ya no podía seguir con su enojo fingido.

—Ah, realmente eres encantador. —le golpeó el hombro. —Te perdonaré esta vez, pero ten en claro que odio las mentiras.

—No prometo ser honesto en todo —el omega lo miró incrédulo. —, algún día, voy a mentirte diciendo que iré a comprar fruta o alguna otra cosa o quizá te mentiré diciendo que te llevaré a algo relacionado con el trabajo y te mentiré todavía más, todo para ocultar una sorpresa. —Jungkook lo miró curioso, queriendo saber qué sorpresa sería de la que habla el castaño.

—¿Qué sorpresa? —preguntó no aguantándose la curiosidad.

—Una propuesta de matrimonio. —respondió con los ojos iluminados y la sonrisa reluciente. El vuelco que dio el corazón del omega era imposible que no sucediera.

—Nadie va a creerme cuando diga que aparte de complejo de villano, tienes complejo de poeta romántico. —se burló, ocultando su timidez.

—No le dirías a nadie. —aseguró el alfa.

—¿Cómo sabes eso? —la mirada coqueta del menor, hizo que el alfa se acercase y lo tomará de la cintura para pegarlo a su cuerpo.

Jungkook posó sus manos sobre el pecho del alfa. Taehyung lo apretó para acercarlo lo más posible y luego llevó sus labios hasta la oreja del menor.

—Porque amas ser el único que conoce este lado mío. —la piel de Jungkook se erizó por el roce del aliento caliente que soltó el alfa.

—Papá, papi, Yeyu ve todo. —el cachorro les recordó que estaba ahí, siendo testigo del momento romántico de sus padres.

Ambos mayores comenzaron a reírse y Taehyung se agachó para abrazar al menor.

—¿Querías estar en el abrazo también? —cuestionó el alfa mientras se abrazaba al omega, dejando a Yeonjun como el centro de ese afectuoso abrazo.

La familia, que por ahora, tenía tres integrantes, se sentía plenamente feliz, pero no todos los días son color de rosa...

Holiwilis ♡

¿Qué tal este capítulo?

Espero les haya gustado saber que nuestro Yeonjun ya es un alfa ㅠㅠ

Crecen tan rápido dhabBabdbs

Por si tienen la duda (anteriormente muchas personitas me preguntaron), en mi fic, la presentación y el celo son dos cosas diferentes.

Yeonjun se presentó como alfa, pero no tendrá etapas de calor hasta los 15 años. También puede extenderse hasta los 19 o más adelante, dependiendo de cada persona.

Si tienen alguna otra duda, pueden hacerla :3

Gracias por leer y comentar, las amo lunitas bellas ♥

*Mali fuera*