Un grupo de personas iba en búsqueda de uno de los miembros de la resistencia, llevaban días rastreandolos ya que no solían establecerse mucho tiempo en el mismo sitio pero finalmente dieron con ellos.

Tyra quien estaba de ronda vio al grupo de gente acercarse a ella, luego de un intercambio de palabras ella los guio a hablar con Valera.

Deseamos hablar con el lider del grupo... -afirmo el vocero-

Yo soy la lider, mi nombre es Valera...-afirmo presentandose-

No es a quien buscamos, supongo que nos equivocamos de persona... -suspirando- 

Se puede saber a quien buscan?... -afirmo confusa ante no ser la persona que buscaban-

Estamos buscando al succesor de Lord Zhin, creímos que seria el líder de la resistencia... -mirando el grupo con el que venia- tendremos que seguir buscando en el reino... -uno de los seguidores del vocero vio a Koga-

Zhin? Que sucede con el lider de las mil manos?... - pregunto Valera, en ese momento koga y sha lin prestaron atención-

Sólo podemos contar la situación a quien buscamos, escuchamos rumores de que estaba en la resistencia. Sabemos que es un chico joven, fue entrenado por el mismo Lord Zhin... -las miradas de algunos paladínes se centró en Koga-

No me miren así... dije que no volvería con ellos... - se había delatado el mismo-

Eres... el muchacho... -todos en el grupo observaron al ninja y bajaron sus cabezas mostrando respeto- Tu eres el que posee su fuego... debemos hablar de algo importante, por favor permítanos hablar a solas...

El ninja y las personas se alejaron un poco para hablar más personal pero estando a la vista de la resistencia en caso de que algo pasará pero, lo que sucedió nadie lo esperaba. La charla comenzó tranquila pero un poco después el comportamiento de Koga se volvió agresivo, incluso tomo a uno de ellos por el cuello de la ropa tratando de digerir la noticia que le acababan de dar.

Quedo de rodillas, con sus manos aferradas a su cabello blanco y la cabeza baja, sus ojos sumamente cristalinos y con lagrimas. Con su mano izquierda se quitó su máscara ya que no podía respirar bien y la lanzó al piso, las lágrimas recorrían el largo de sus rostro terminando en el piso.

El grupo bajo su cabeza, entendían lo duro de la situación pero ahora lo necesitaban, el gremio lo necesitaba. El vocero le entregó a koga un paquete envuelto, este ya sabia que era. El grupo se marchó y koga abrió el paquete encontrando aquello que no deseaba ver, dentro se encontraba la espada de su maestro, de su tutor, de su familia.
Las lágrimas brotaron nuevamente al tener aquella espada en sus manos, al verla Sha Lin comprendió lo que paso. La forma en la que le ninja reaccionó, la entrega del arma, algo mortal le había pasado al líder de las mil manos.

Maestro... -susurro dejando que sus lágrimas se derramaran sobre la filosa espada ahora sin dueño-