Tormentas eclipsadas.
Huracanes de polvo seco.
Oleadas de mar gélido.

Despojándome de la amargura,
viviendo mi propio cuento,
odiando sentir nostalgia.

Palabras deshechas en la hoguera.
Miradas expandiéndose
en el barro.
Caricias quemadas y grabadas,
en la sepultura de una rosa martirizada.

Un aliento rezagado.
Una sinfonía crispada.
Recuerdos enervados.

Abrazos punzantes,
como la quemazón de un rayo.

Sustrayendo de la tierra,
pruebas capaces de destrozar
el planeta.

Mitos congelados.
Cenizas de lo que fue una sonrisa...

Quisiera quedarme,
mas mi corazón desea arriesgarse
y dejarse enamorar.

Quisiera amarte,
mas solo sé quererte,
espero me entiendas
y navegues contra la marea.

Los silencios hablaron.
Las palabras bombardearon.
Y mil escudos protegieron.

El corazón desbocado,
el suspiro desquiciado.

Fuimos música celestial,
para los ojos externos,
mas todo se fue resquebrajando,
y yo te hice daño.

No soy maléfica,
por querer algo nuevo,
por escogerme antes a mí
que al resto.
Por oponerme a la gravedad
y atreverme a luchar.

•••
¿Qué es lo que cambia
la persona,
la visión que tienes de ella
o su máscara?
•••

— Janny.