Jubilación

El nuevo Hokage se la vivía encerrado en su trabajo mucho más que el antíguo Hokage, pero era feliz.

— ¡Y entonces llega este nuevo Anbu y creo que en su emoción y nerviosismo se termina tropezando y hace caer a sus compañeros! ¡Y yo...! —contiene su risa tras una sonrisa dentada.

—Claro que no pudo resistirse a reír como un desquiciado. —comenta sonriente recargando su cuerpo del respaldo del sofá —El pobre chico se levantó a toda prisa disculpándose mientras ayudaba a sus compañeros a ponerse en pie, es joven... —eleva su copa hacia el peliplata —prodigio a mi parecer.

Kakashi sonríe al sentir las manos de su pareja sobre sus hombros, Iruka había regresado de la cocina y ahora podía estar a su lado nuevamente mientras Hinata acomodaba una charola con postres en la mesa de centro y se dirigía hasta su pareja sentado en el otro sofá individual para tomar asiento sobre su regazo, Sasuke le miraba con ternura y se inclinaba descansando su frente contra el brazo de ella.

—Naruto es un idiota.

Ella lo reprendió con la mirada causando la leve risa del Uchiha que la abrazaba por la cintura hundiéndose contra su cuerpo.

—Y, ese fue el espectáculo de la semana —declara radiante —el resto solo fue firma y sello, y mucha lectura.

—Sigue siendo pésimo para leer cantidades grandes —informa su pareja acariciando algunos de sus rubios cabellos —pero su ritmo ha mejorado.

—Me has ayudado para que me sea más sencillo, no te quites el mérito.

—Tus padres saben que tengo ese mérito sin que se los tengas que recordar.

—Y de verdad que te lo agradezco mucho. —comenta el castaño —Ahora prueben los postres que hice por favor.

—Si son hechos por usted claro que deben ser exquisitos —declara el Nara.

Iruka ríe levemente permitiendo que su pareja le tome la mano y lo obligué a sentarse sobre su regazo; las visitas de los chicos eran bastante frecuentes, al inicio habían sido un tanto irregulares teniendo que llegar en solitario sin sus parejas o una pareja y la otra no, pero desde que Naruto se había asentado como el nuevo Hokage la situación se había movilizado con mayor fluidez.

—Um... —expresa Hinata de pronto, observando a su pareja —Queriamos decirles algo.

Iruka sonrió enseguida tomando la mano de su marido con la fuerza suficiente para hacer fruncir un poco su ceño.

—Lo que sea mi niña, venga.

—Sí Hinata, ya te has llevado a nuestro hijo ¿Qué otra cosa podría sorprendernos?

—Bueno... —comenta el rubio —Gaara logró llevarse a Lee de la aldea así que no deberían de mostrarse tan confiados.

— ¡Oye! —suelta un golpe en el costado del rubio —No los asustes.

Iruka resopla ante el comentario de su hijo menor, pero enseguida vuelve la mirada hacia el par de enamorados que se miraban con sonrisitas cómplices, Hinata toma la palabra.

—Um... Hemos estado pensando en... Tener un hijo, es solo... —expone con cierta vergüenza —una idea, pero queríamos que ustedes lo supieran antes que cualquier otra persona incluyendo a mi padre porque... —señala sus ojos.

—Creemos que podría poseer una poder ocular del interés de muchos, ya saben, tengo el Sharingan y ella el Byakugan. Podría ser que solo heredé uno de nuestros poderes oculares...

—O una mezcla de ambos, en ese caso sería algo nuevo y poderoso, por eso queremos mantenerlo en absoluto secreto hasta que... Bueno, tengamos suerte.

—No lo había pensado —comenta el albino observando a su pareja —tienen razón, si se crea un nuevo poder ocular podría ser... Peligroso, podrían intentar robarse al niño.

—O directamente secuestrar a Hinata... El hecho de que se volvieran pareja no paso desaparecido y yo mismo he comprobado el interés que tienen muchas personas sobre su descendencia. Sería de cuidado.

—Tras los muros de mi clan me encontraré segura, se los prometo, pero eso significaría no poder venir a verlos tan seguido.

— ¿Ya lo estás esperando? —cuestiona el rubio —Te oyes tan seria.

Ella sonríe —Aun no Naruto, lo hemos pensado recién. Sasuke ya se ha acoplado por completo tras los muros de los Hyuga, y... —observa a su pareja —queremos dar el siguiente paso. Pero al hablarlo nos dimos cuenta de esa posibilidad...

—No quisiera dejar de venir a visitarlos, pero no podría dejarla sola si se encontrará embarazada.

—Lo comprendemos. —expone Kakashi en un asentimiento — ¿Se nos permitiría ir a visitarlos? Estoy seguro de que Iruka estará encantado de llevarles todo tipo de cosas.

—Ni lo duden. La verdad es que... —comenta con cierta vergüenza desviando la mirada —me emociona saber que podría tener un nieto.

Hinata toma la mano de su pareja y seguidamente se levanta de su regazo permitiendo que el joven Uchiha avancé hasta su padre y lo rodeé en un abrazo.

—Él o ella estará feliz de tener un abuelo como tú.

Naruto toca el hombro de su pareja al notar la cercanía de sus familiares.

—Um... —menciona el chico de coleta —No quisiéramos robarnos el momento, pero... Creo que nuestras formas de pensar no son tan distintas. Naruto y yo hemos hablado de... Algunos métodos para...

—Tener nuestra propia familia.

A la hora de marcharse Shikamaru se adelantó con la joven jefa del clan Hyuga charlando sobre algunos temas de trabajo, Naruto y Sasuke los miraban desde el patio de su antigua casa y antes de pensar en despedirse de sus padres los observaron de frente, ambos abrazados al otro.

—No les quiero mentir, me siento... Un poco nervioso sobre tener un hijo con Hinata, es decir, ella es maravillosa y estoy seguro de que será una madre increíble... Y yo haré lo mejor que pueda para criar a nuestro bebé... Pero cuidar de un pequeño ser... —observa los ojos de ambos — ¿Cómo lo hicieron? Es... Un gran peso, encargarse de criar a una buena persona, de protegerlo... He visto niños enfermos en su clan y debo decir que no tengo idea de cómo actuar ante una situación así...

— ¿Y como no llevar a todos esos niños a casa? Hay tantos niños en los orfanatos papá, —dirige su atención al castaño —niños... Tristes y solitarios, y niños que no se cansan de crear desastres para obtener atención... —observa a su hermano en una exhalación ruidosa —nos recordé a nosotros dos en el pasado.

Los adultos se observan con ternura y enseguida se acercan a sus hijos rodeando sus cuerpos en un abrazo familiar.

—Podrán aprender sobre la marcha como criar a sus hijos —informa el Hatake —yo no tenía ni idea de cómo tratar con ustedes y aún así siempre estuve presente, principalmente... —rodea los hombros de su pareja mirándolo —hagan caso y ayuden sin esperar la orden de su pareja.

—Hay libros que podrán ayudarlos, doctores que los guiarán con las enfermedades, y padres y amigos que les darán consejos —sonríe recostando su cabeza en el hombro de su pareja —buscaré los libros mañana mismo y marcaré las cosas que crea puedan servirles, también pueden preguntarnos cuando gusten.

—Y... —observa al rubio —sobre la adopción. Sabes que no podemos salvar a todos, trata de buscar un pequeño con el cuál ambos sientan una conexión, no te apresures Naruto,  tómalo con calma.

Asiente —Deberian pasar algunas horas junto a todos los niños, charlar con ellos, conocerlos un poco. Al... Pensar en cuidar de ti, la verdad es que la situación me obligó a aprender un poco de tu vida, tuve que ver cómo  pasabas los días para comprende que... Me necesitabas, a alguien en quien confiar y quién cuidará de ti.

—Me ví en ti —expresa seriamente acariciando el cabello azabache de su hijo —No hay más. Creí que necesitabas lo que alguna vez yo necesite, y ver a Iruka acercándose a Naruto fue mi detonante, yo podía hacer algo para que tú tuvieras lo que yo anhele en aquel entonces, y deseaba que lo tuvieras. Pero tuve que trabajar duró para que me aceptarás, siempre quisiste más a Iruka, ambos.

Los chicos ríen suavemente y se acercan a sus padres dándoles un fuerte abrazo, al apartarse Iruka se toma la libertad de acariciar las mejillas de ambos con dulzura.

—Vayan con cuidado, y siempre recuerden que aquí estaremos para ustedes.

—Gracias papás —dicen al unísono para golpearse mutuamente y enseguida salir despidiéndose con las manos.

—Ahora... —susurra tomando a su pareja por la cintura e inclinándose sobre su oído — ¿Qué tal si intentamos tener otro bebé?

Iruka ríe sin filtro alguno enfrentando la mirada de su pareja — ¿Quieres hacerlo?

—Oh, ahora me sigues la corriente.

— ¿Qué más da Hatake? Igual... —toma el cuello de la camisa ajena atrayendo a su pareja —terminaremos en la cama.

Kakashi sonríe tomando su máscara por la orilla para bajarla lentamente hasta mostrar su sonrisa mientras sus ojos varían desde los ojos hasta los labios ajenos.

—Después de hacerlo podemos hablar sobre la situación de los chicos.

—No necesitas preocuparte demasiado —besa los labios de su pareja con rapidez —tengo a algunos amigos dispuestos a vigilar a los interesado en el posible poder ocular nacido de nuestro hijo y su novia.

—Me encanta verte actuar —avanza llevando a su pareja en retroceso —siempre tan sigiloso y certero.

Con un simple movimiento carga a su pareja sobre su cintura mientras se adentran entre risillas y besos.