FLUKE

Estoy en blanco ahora mismo, oigo a todos hablar atropelladamente después de las noticias de Sammy sobre la muerte de mis padres. Mis oídos están desconectados, no quiero oír nada más, las emociones se arremolinan dentro de mí, creo que voy a salir gritando de aquí cuando siento la mano de Ohm sobre la mía. Su mirada me dice que me relaje, que estamos juntos en esto.

-Respira, esperemos a tener toda la información, ¿vale? – oigo que me dice, pero solo lo he escuchado yo, Ohm está en mi cabeza y no lo he sentido entrar.

-A VER SEÑORES, UN POCO DE CALMA- grita Ohm para hacerse oír por encima de todo el estruendo.

Los demás se callan al momento, no me acordaba lo alfa que es mi novio, el teniente Ohm es algo fuera de este mundo, literalmente.

-Sammy explícanos lo que has descubierto y no quiero interrupciones hasta que haya acabado, ¿está claro? - dice señalando sobre todo a Earth.

Earth hace un mohín, pero no abre la boca, sabe bien cuando hay que estar callado.

-Bien, he investigado mucho, he tenido que recurrir a mis contactos en el gobierno, pero al fin descubrí que el supuesto "atentado" no lo fue en absoluto.

Lo que he descubierto es de vital importancia y a la vez muy peligroso, tanto que no todavía no le he mandado nada de esto a Pete. No me fío de quién pueda verlo en el despacho del fiscal.

Los padres de Ohm y los de Fluke trabajaban juntos en un estudio sobre la genética mejorada. No sé cómo tus padres, Ohm, se enteraron de que el bebé que esperaban había sido modificado antes de su inseminación, pero cuando lo hicieron enseguida contactaron con los Natouch. El señor Natouch era compañero de carrera del señor Thitiwat y por lo visto bastante cercanos. Los padres de Fluke eran conocidos genetistas que habían orientado su carrera a intentar identificar el origen de gen mutado que hacía tan especiales a los mejorados. La organización que llevó a cabo los experimentos y que dirigía nuestro querido ministro, estaban detrás del bebé de los Thitiwat y según leí en los estudios que me trajeron le administraron al bebé un potente bloqueador. En realidad no describe que tipo de bloqueador usaron, pero puedo intuir que lo fabricaron en los laboratorios donde trabajaban los Natouch.

Ahora bien, investigando el atestado del supuesto atentado noté varias contradicciones en las declaraciones de los testigos. También hubo una cosa que me llamó mucho la atención, el jefe de bomberos que investigó el caso fue destituido antes de que se terminaran todas las pesquisas y fue sustituido por un hombre afín al ministro. Eso me hizo sospechar que el jefe de bomberos quizá averiguó algo que no era conveniente. Le pedí una cita a ese hombre y él aceptó verme, en principio no quiso decirme nada, solo me remitió al informe oficial. Pensé que había algo más pero él no quería hablar y no podía obligarle. Afortunadamente parece que le remordió la conciencia porque esta mañana me llegó por correo ordinario el informe original de sus investigaciones, uno que por supuesto no salió nunca a la luz.

-¿Y qué decía ese informe? – le pregunto.

-El informe habla de un incendio provocado, uno con muchas similitudes con otros incendios ocurridos anteriormente. El jefe de bomberos creía que los culpables del incendio era la organización que trabajaba con el ministro en los laboratorios, es decir nuestro asesino del nivel 5. El ministro no quiso que si alguna vez se investigaba todo el asunto pudieran relacionarlo con él o con sus actividades ilegales.

Pero sigo creyendo que hay algo que no acaba de cuadrar. ¿Qué ganaban ellos con eso? ¿Empezar una guerra entre humanos y mejorados?, si por casualidad salía a la luz tendrían muchos problemas, así que, ¿por qué arriesgarse a matar a los Thitiwat?

Me hice todas esas preguntas y se me ocurrió investigar un poco más a fondo el trabajo de los padres de Fluke. El informe que preparaban junto a los padres de Ohm describía muy bien la tendencia existente de que los mejorados superaran el número de humanos en pocos años, pero eso no era todo. Habían conseguido fabricar un bloqueador que hacía imposible rastrear a los mejorados desde su nacimiento, pero sin deshacerse de sus poderes. Esto significaba que los humanos, no solo serían menos numerosos, sino que tampoco podrían controlar a los mejorados que tendrían la posibilidad de bloquearse.

Esto creo que es suficiente para quitarlos del medio, pero sospecho que hay algo más. Necesitaría saber qué clase de bloqueador inventaron y quién más sabia que ellos lo estaban fabricando.

-Bien, hemos avanzado bastante – dice Ohm - ¿algo más?

-Yo quiero hacer una sugerencia, he estado pensando en tomar una muestra de la sangre de Ohm y analizarla en el laboratorio. Yo no soy genetista y no tengo el equipo adecuado, pero sé que no podemos hacer esa investigación fuera de este equipo. Así que he cobrado un favor que me debían y un experto vendrá aquí con el equipo necesario de forma discreta y veremos que puede averiguar– nos dice Earth.

- ¿Un favor? ¿A quién? – pregunta Kao con un semblante serio que me dice que sospecha quien es el que le debe el favor a Earth.

-A Roger – le contesta y Kao suelta mil maldiciones.

- ¿Quién es Roger? – le pregunto a Ohm en voz baja.

-Es una larga historia, pero en resumen Roger es el ex de Earth, es un cabrón de mierda que lo hizo pedazos – me dice.

-Earth, ¿estás seguro de querer trabajar con ese tipo? ¿es de fiar? – le pregunto.

-Roger no dirá nada, tiene mucho que perder si lo hace, no te preocupes. Y no me importa trabajar con él porque para mí no es nada, ya no me afecta ni tiene poder sobre mi persona – me dice muy tranquilo.

Kao sigue maldiciendo, se levanta de repente y sale por la puerta cerrándola de un portazo. Earth sale tras él, espero que pueda calmarlo, porque de verdad necesitamos saber lo que pueda averiguar con la sangre de Ohm.

EARTH

Sabía que esto iba a pasar, y no culpo a Kao por estar enfadado, pero tiene que aprender a separar lo personal de lo profesional, por lo menos un poco. Lo sigo por el pasillo hasta su despacho que se ubica al final del pasillo lateral. Toco a la puerta y él no dice nada, así que entro sin permiso y lo encuentro sentado en el pequeño sofá de cuero con sus manos en la cabeza.

-Kao, por favor, hablemos – le digo con un tono suave intentando calmar el ambiente.

-No quiero enfadarme Earth, de verdad, pero necesito tiempo para asimilar que vas a trabajar con un puto maltratador – me dice escupiendo la última palabra.

-No me hará nada, aprendió su lección y yo ya no estoy solo y asustado, ahora te tengo a ti – le recuerdo.

Kao me mira con una calidez en sus bonitos ojos negros que me deja sin aliento. Sé que esto que sentimos es algo fuera de lo normal, es algo para lo que no estaba preparado, pero a lo que no pienso renunciar.

-Está bien, lo aceptaré con dos condiciones, la primera es que nunca te quedes con él a solas, estarás conmigo o con alguien del equipo. La segunda es que si se propasa de alguna manera me lo dirás y dejarás que yo me ocupe de él a mi manera – me dice muy seriamente.

-Está bien, no quiero quedarme a solas con él tampoco, pero, aunque me joda, lo necesitamos – le digo.

-Ven aquí – me pide.

Me acerco lentamente y me siento en su regazo. Él enseguida entierra su cara en mi cuello y suspira suavemente, siento como se relaja de inmediato y un beso suave acaricia mi oreja.

-Earth, te quiero mucho y no quiero que ese hombre despierte en ti recuerdos dolorosos, no quiero que sufras. Le arrancaré el corazón de su maldito pecho como se atreva a mirarte más de la cuenta, lo juro – me dice y yo le creo.

-Ese hombre ya no tiene poder sobre mí, no debes preocuparte, tú eres el único para mí – le digo para que no quepa duda.

-Eso ya lo sé, no estoy preocupado porque esté celoso o piense que puedas cambiarme por él. Tengo miedo de que te revuelva el pasado y te duela, eso es todo – me dice y yo me derrito por este hombre.

-Ese episodio de mi vida fue duro, pero lo he superado y no hay nada que me pueda decir o hacer que me afecte en absoluto, confía en mí – le pido.

-Confío en ti, en quién no confío es en él – me dice y sé que está en su derecho de estar ojo avizor con Roger, yo también lo estaré.