Llevo varios días sintiéndome rara.
Tragándome mi dolor,
y entreteniéndome con cualquier cosa.
Quiero evitar no ahogarme,
pero nací cobarde
y trato de escapar.
Lo hago,
y luego me arrepiento,
porque tengo miedo,
de que empiece y no pueda parar.
Aunque no sé qué es peor,
estar un día sin tener ganas de nada,
o estar todos los días cansada.
Pero, la primera no pasará,
porque hay mucho que entender,
como para que en un día todo desaparezca.